Shara llamaba a gritos a Elsa.

-Que pasa?.-Pregunto Elsa, ya cansada de tantos gritos.

-El joven Hans y su hermana Anna.-Otra sirvienta respondió por ella.

Elsa se tenso inmediatamente y comenzó a buscar a Anna con la mirada, hasta que hallo una figura muy familiar, forcejeando.

Olvido todo y salió corriendo hacia allá.

Anna forcejeaba, tratando de apartarse de el, pero era estúpido, el era mas fuerte.

-Suéltala.-Elsa ordeno.

Todos prestaron atención a la escena.

Hans se giro hacia ella.

-Mira quien esta aquí. La reina.-Dijo con desprecio.

Unos guardias se acercaron a Anna y la llevaron lejos de el.

-Vete.-Dijo la peliblanca sin inmutarse.

-Y si no?.-Sonrió desafiante.-Me atacaras con tus poderes?

Elsa se tenso. Guardo silencio.

-No debí decirlo?.-Hans coloco una mano en su pecho, fingiendo preocupación.-Lo siento tanto.

Y seguido, arrebato uno de sus guantes.

Elsa se sintió nerviosa, no podía controlar el creciente miedo que salía de su pecho.

-Devuélveme eso.-Elsa se dirigió con firmeza a Hans.

-La reina tiene miedo?.-Hans sonrió maliciosamente.-Porque no les muestras la verdad?

Elsa suspiro cansada, dio unos pasos lejos de el.

-Por que huyes?.-Hans siguió provocándola.

La temperatura comenzó a bajar, pero solo era consciente de eso Jack.

-Hans, no eres bienvenido aquí y lo sabes.-Elsa no se detuvo, tenia que salir de ahí, antes de que el destruyera todo lo que ella había logrado.

-Nunca serás una buena reina, si eres un monstruo.-Elsa frunció el ceño y apretó los labios, estaba al borde de explotar.

Jack lo sabia, así que trato de llegar hasta Hans, pero unos guardias cercanos a el, lo detuvieron.

La reina ya estaba a punto de tomar el picaporte y librarse.

-Eres un peligro, para tu reino y para tu hermana.

Esa fue la gota que colmo el vaso.

-Suficiente!.-Elsa grito. Su mano inconscientemente se movió, formando hielos amenazantes alrededor de ella.

Todos estaban aterrorizados, Elsa llevo la mano a su pecho y miro la escena aterrada.

Con la mano que aun tenia el guante, tomo el picaporte y salió corriendo de ahí.

Corrió y corrió hasta llegar a la puerta principal, donde la esperaban todos los aldeanos.

Elsa gimió.

Atravesó lo mas rápido que pudo a todos los aldeanos, pero cada vez eran mas y mas los que se le acercaban.

-Su majestad, le pasa algo?.

Ella trago en seco y negó con la cabeza.

Se sentía cohibida, retrocedió hasta llegar a una fuente, que sin querer, congeló.

Todos los miraron horrorizados, y ella huyo de ahí.

Llego hasta el mar, dándose por vencida.

A lo lejos vio a Anna y Jack corriendo hacia ella.

Había terror en sus ojos, que si en estos momentos, la vieras, jamas olvidarías esa mirada.

Escarcha apareció por debajo de los pies, congelando una parte diminuta del mar.

Elsa agacho la mirada, sorprendida.

Coloco un pie sobre el mar con firmeza, y se congelo por completo.

Corrió con todas las fuerzas que le quedaban.

A pesar de que Anna intento con todas sus fuerzas, seguirla por el hielo, no poseía la habilidad de su hermana y resbalo en el hielo.

-Anna! Mira!.-Jack comento preocupado.-Arendelle esta completamente congelado.

-Esto es un verdadero problema. Tenemos que ir por ella.

-Quien cuidara de Arendelle?

-No confió en nadie.-Jack confeso.

-Rapunzel y Eugene podrían ayudarnos por un corto tiempo.

-Esta bien.

Volvieron hacia el castillo, todos estaban completamente congelados.

-Esta nevando!

-Pero apenas es verano!

-La reina provoco esto.

-Ella es un monstruo!.-Exclamo uno de los duques que había venido.

-Ella no es un monstruo!.-Exclamo Anna, ofendida.-No hablen así de mi hermana, todo fue culpa de Hans.-Respondió con amargura.

-Casi nos mata.-Contraataco.

-Ella tenia miedo.-Dijo en un murmullo.-Iremos a buscarla.

Rapunzel venia corriendo hacia su dirección.

-Cuidaremos Arendelle, no se preocupen.

Ellos le sonrieron agradecidos.

-Jack, ve con Elsa primero, yo iré a caballo, buscare alguna solución para descongelar Arendelle en el camino.

El asintió y se fue a lo mas apartado de todos, volvió a sus ropas normales, siendo invisible de nuevo, salió volando lo mas rápido que pudo.

Elsa caminaba por una montaña, sentía todo su trabajo perdido.

Comenzó a cantar una melodía triste.

La nieve pinta la montaña hoy

no hay huellas que seguir.

En la soledad un reino y la reina viva en mi

El viento ruge y hay tormenta en mi interior

una tempestad que de mi salió

Lo que hay en ti no dejes ver

buena chica tu siempre debes ser.

No has de abrir tu corazón

Pues ya se abrió.-Quito su otro guante y uso su poder.

Libertad, por fin!

Libre soy, libre soy

no puedo ocultarlo más

Libre soy, libre soy

libertad sin vuelta atrás.

¿Qué más da? No me importa ya

Gran tormenta habrá

El frío es parte también de mí.

Su capa se alzo, y Elsa gustosamente, se la quito, volando por los aires.

Mirando a la distancia, pequeño todo es

y los miedos que me ataban, muy lejos los dejé.

Voy a probar que puedo hacer sin limitar mi proceder

Ni mal, ni bien, ni obedecer jamás.

Creo una escalera preciosa de nieve, coloco su pie y se congelo, Sonrió de oreja a oreja y comenzó a caminar por ella.

Libre soy, libre soy

el viento me abrazará

Libre soy, libre soy

no me verán llorar.

Firme así, me quedo aquí

gran tormenta habrá.

Un castillo de hielo se alzo, congelandose poco a poco por completo, Elsa felizmente, se dedico a terminar los mínimos detalles.

Por viento y tierra mi poder florecerá

Mi alma congelada en fragmentos romperá

Ideas nuevas pronto cristalizaré

No volveré jamás, no queda nada atrás.

Tomo su reciente corona y la lanzo, el ultimo recuerdo de su antiguo reino. Desarreglo su perfecto moño y lo convirtió en una preciosa trenza francesa.

Su precioso vestido, fue cambiado por los poderes de Elsa, para convertirse uno hecho de hielo, pero aun así, era el vestido mas precioso.

Tenia una capa que empezaba por las axilas. Tenia mangas largas en puntas, dejando sus hombros en descubierto.

Libre soy, libre soy

surgiré como el despertar

Libre soy, libre soy

se fue la chica ideal.

Firme así, a la luz del sol

Gran tormenta habrá

El frío es parte también de mi.

Elsa nunca se sintió mas satisfecha.

Felicidad, Libertad, Alegría.

Todo eso, sentía la Reina.

Se encontró con la mirada de Jack, quien la miraba alucinando.

-Jack!.-Ella lo miro con amor.

-Elsa! Pensé que no te podrías ver mas hermosa y me sorprendes con esto.

Elsa lo tomo de la mano y le di un beso.

-Eres la mejor.

-Te quiero.-Le dijo entre besos.

-Y yo a ti.

Jack olvido por completo advertir a la su pareja lo sucedido.

Y la pobre Anna pagaría los platos rotos.