Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

꒰ ⌗ noche de viernes ! ꒱

—¿Ah sí?—dijo inocente Taehyun—Pondré música para ambientar.

—¿Para qué?, ni siquiera la vamos a escuchar.—rió levemente.

—¿Tú no pones música cuando lo haces con alguien?—cuestionó divertido mientras colocaba su playlist.

—En realidad no, no lo he hecho con nadie.—Beomgyu desvío la mirada—Tú debes hacerlo muy a menudo ¿no es así?—aclaró su garganta.

—Lamento decepcionarte, pero no, tampoco lo he hecho con nadie.—sonrió levemente—Pero tengo mi lista de música preparada.

—Al menos dime qué canciones pondrás, no quiero escuchar cumbias a mitad del acto.—rieron.

—Descuida, todas son geniales, mira.—le mostró rápidamente la lista.

Often - The weeknd
Starboy - The weeknd
The hills - The weeknd
Lurk - The Neighbourhood

—¿Ves?, son buenas.—colocó el aleatorio y dejó su celular de lado—Ahora, a lo importante.

—¿Por fin dejará de doler mi entrepierna?—sonrió tomándolo por la cintura.

—Me encargaré de eso.—lo besó y fue correspondido con movimientos deseosos y desesperados del contrario.

Contenido más explícito a partir de aquí, si no te gusta sáltalo.

Al parecer a Beomgyu le quedó demasiado lejos la cama como para empezar ahí, así que decidió cargar al rubio, sujetándolo de los muslos y caminar hasta topar con pared.
El contrario notó la acción y enredó sus piernas en la cadera de Taehyun para tener mayor soporte y contacto.

Sin dejar de besarse, o más bien tener su propia batalla de lenguas, Beomgyu logró quitarle la camisa que Taehyun llevaba, por suerte era delgada y terminó rompiéndola con un solo movimiento.

Sus besos terminaron con un chasquido debido a la velocidad con la que se separaron. El pelinegro bajó sus besos húmedos hasta el cuello del menor, pasando a mordidas en el lóbulo de su oreja y marcas muy visibles desde su cuello hasta su clavícula.

Con cada jadeo o gemido que el rubio soltaba, Beomgyu  se iba calentando más y más, provocando que su erección comenzara a doler mucho.

Bajó un momento a Taehyun de su agarre para poder deshacerse de el resto de la ropa que les estorbaba a ambos, cosa que hicieron rápidamente.

Taehyun aprovechó el momento para arrodillarse frente a él, sonriéndole inocentemente y tomando entre sus manos la gran erección de Beomgyu, comenzando con un movimiento de arriba a abajo, lento a propósito para desesperarlo un poco más. Le gustaba el juego.

Luego de aumentar su velocidad, lo introdujo hasta donde su garganta se lo permitió, poco más de la mitad, ahora mezclando el movimiento de su boca con el de sus manos en un ritmo rápido que hacía gruñir y jadear al pelinegro.

—A-ah Tae-ah...—tiraba su cabeza hacia atrás con cada succión que le daba—Eres... Mmmm... El mejor...—comenzaba a poner hasta los ojos en blanco, parecía tener mucha práctica.

Lo tomó del cabello, haciéndolo introducir su miembro por completo en la garganta, y sacándole un gemido en el acto debido a lo repentino que fue, provocando con el sonido una corriente que lo hizo correrse.

Taehyun con esfuerzo tragó todo el líquido viscoso, dejando caer a propósito un hilo de éste por su labio y lamiéndolo en modo provocador mientras lo miraba. Eso casi hace que Beomgyu se viniera por segunda vez.

En cuanto Taehyun se puso de pie luego del oral, regresaron a la posición anterior, Beomgyu cargándolo contra la pared, sólo que ésta vez agregó algo más. Interrumpió el nuevo choque de lenguas para mostrarle dos dedos al menor.

—¿Sabes qué hacer?—preguntó con una sonrisa ladina, el contrario asintió con seguridad.

Unos segundos después, Taehyun ya estaba lamiendo los dedos de Beomgyu, con una mirada lasciva clavada en el pelinegro y soltando pequeños gemidos para provocarlo.

Cuando estuvieron suficientemente lubricados, el mayor los retiró y volvió a besarlo, bajó su mano acariciando todo el abdomen semi-marcado del rubio y terminó su recorrido justo en la entrada ya palpitante.

—¿Listo? —cuestionó antes de introducir el primer dedo dentro de Taehyun, arrancándole un gemido de dolor.

—D-duele...—suspiró pesado tratando de controlar la sensación.

—Y sólo es uno...—volvió a besarlo y al mismo tiempo metió el segundo dedo, ahogando el grito del contrario en el beso.

Los movía en círculos, a veces en tijera y en pocas ocasiones a manera de embestidas lentas, hasta que el menor le indicó con sus caderas que quería más.
Movió su mano aún más rápido agregando un tercer dedo.

Ésta vez, concentrándose en besar las zonas del pecho a las que tenía acceso en esa posición y dejando al menor soltar ruidos muy agradables para su oído.

Un par de minutos después ya no pudo contenerse más, tomó firmemente a Taehyun de su trasero para levantarlo un poco más y poder alinear su miembro ya desesperado con la estrecha entrada.

—P-por favor... Despacio...—pidió hecho un manojo de nervios y jadeos.

—Como quieras, bebé.—lo besó cortamente y empezó a entrar en él.

Lentamente fue bajándolo contra su gran miembro mientras entraba, sin ser brusco.
Taehyun se aferraba a la espalda de Beomgyu soltando unas pequeñas lágrimas, sentía que se partía por la mitad. Por fin entró completo y se quedó inmóvil unos instantes.

—Duele... Duele m-mucho...—decía entre suspiros y jadeos ahogados.

—No me moveré hasta que tú me digas.—de nuevo unió sus bocas en un beso, más meloso que los anteriores, y limpió sus lágrimas.

Unos instantes después, y aún en medio del beso, Taehyun  movió un poco sus caderas indicándole a su mayor que ya estaba acostumbrado y podía seguir.

Comenzó un ritmo lento, subiendo y bajando, tomando la pared como apoyo. Con el paso de los minutos fue aumentando el ritmo a uno más duro y profundo, causando que las piernas de Taehyun temblaran ligeramente y que éste arañara la espalda de Beomgyu en un intento de sostenerse.

En esa habitación ya ni siquiera se percibía con claridad la música de fondo, sólo los sonidos obscenos que causaban el choque de sus cuerpos y el manojo de gemidos, gruñidos y gritos soltados por ambos.

Llevaban cerca de diez minutos de esa manera cuando los dos terminaron, Beomgyu dentro de Taehyun y éste entre sus torsos.

El mayor salió con cuidado del interior de su pareja y caminó por fin a la gran cama aún perfectamente arreglada, recostándolo con precaución y subiéndose sobre él, usando sus manos como soporte para no dejar caer todo su peso.

—¿Qué dices de una segunda ronda, cariño?—le dijo con tono pervertido.

—Está bien.—sonrió lo más inocente que pudo para provocar aún más al pelinegro.

—Si sigues mirándome así, te romperé.—susurró en el oído del menor.

Inició de nuevo una lucha de lenguas entre ellos, siempre siendo liderada con mucha ventaja por Beomgyu.
El mayor subió las piernas de Taehyun sobre sus hombros para poder llegar más profundo, y tener una posición más cómoda.

Mientras hacía una nueva marca en su cuello, lo penetró de una sola estocada, haciéndolo temblar debajo suyo y soltar un grito de dolor y placer combinados. Ni él mismo llegaba a definir cual sensación era más fuerte.

Tomó desde el principio un ritmo rápido y profundo, tocando en un par de embestidas su punto exacto, ese que lo hacía ver las estrellas y no parar de gemir el nombre de su pareja.

Beomgyu se ocupaba de embestirlo con fuerza, sosteniéndolo firmemente de las muñecas con una mano por encima de su cabeza, mientras que con la otra que tenía libre y su boca estimulaba ambos botones que poseía su chico.

A éste punto parecía que ambos tenían mucha experiencia en ésto, cuando realmente no era así. Más bien, estaban dando su máximo esfuerzo por hacerlo correctamente.

En cierto momento del vaivén marcado por Beomgyu, él mismo dejó el pecho de Taehyun para concentrarse ahora en el miembro desatendido de éste, tomándolo con su mano y moviéndola de arriba a abajo, siguiendo el ritmo de las embestidas.

Por las expresiones del rubio, se podía deducir que estaba a punto de volver a correrse. No podía ni articular palabras coherentes, más que pedir que fuera más rápido y algunos apodos morbosos dirigidos al pelinegro.

Otros diez minutos pasaron y al fin terminaron ambos, Beomgyu fuera de él y Taehyun en la mano del mayor. Se recostaron un par de minutos mientras recuperaban el aliento, totalmente aperlados por el sudor.

—Bebé.—llamó—¿Resistes una tercera ronda?—sonrió a modo de súplica.

—Por ti, sí.—regresó la sonrisa y él inició el beso.

Después de unos minutos más en la posición de cuatro, se corrieron, Taehyun por tercera vez y Beomgyu por cuarta, y finalmente cayeron rendidos, abrazados, casi sin poder respirar correctamente.

Ya acostados y acurrucados, Taehyun jaló las sábanas, que estaban hechas un desastre en el borde de la cama, para taparse ambos y poder dormir.

Habían dado ya las 12:15, e incluso la borrachera ya se les había pasado un poco.

—¿Beomgyu?—dijo dulcemente aferrado al pecho de éste.

—¿Qué pasa amor?—lo miró.

—Gracias por ésta noche... Te amo mucho, ¿lo sabías?—soltó una lágrima al decirlo.

—Lo sé...—lo besó en la frente y acarició su mejilla, limpiando la lágrima en el acto—Yo también te amo.

Esa última frase dicha por el pelinegro, no fue escuchada por Taehyun, el alcohol en su organismo y el tremendo cansancio lo habían vencido, dejándolo profundamente dormido al instante.

—¿Qué haré cuándo te vayas de mi lado mañana Taehyunie?—se dijo a sí mismo, mientras acariciaba suavemente el cabello rubio de su aún pareja—No quiero que termine el tiempo...

Eran la 1:30 a.m cuando Beomgyu al fin se quedó dormido, luego de haber pasado todo el rato mirando a Taehyun descansar tranquilamente. Ahora, él deseaba que el tiempo dejara de transcurrir.

꒰𝓣𝓣𝚊𝚎 ♡︎...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro