Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

⟣ Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 28 ⟢

Nᴜɴᴄᴀ ᴛᴇ ᴅɪsᴄᴜʟᴘᴇs ᴘᴏʀ ᴍᴏsᴛʀᴀʀ ᴛᴜs sᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏs. Cᴜᴀɴᴅᴏ ʟᴏ ʜᴀᴄᴇs, ᴛᴇ ᴅɪsᴄᴜʟᴘᴀs ᴘᴏʀ ᴅᴇᴄɪʀ ʟᴀ ᴠᴇʀᴅᴀᴅ.

| ✨ |

Im Yeon Sun

     —¿Y ahora crees que está todo solucionado? —Me cruce de brazos esperando algo más, las palabras bonitas no resuelven conflictos.

     —¿Así no es como les gusta a las chicas fresas como tú qué se disculpen con ellas? —Alzó una ceja y acarició su mentón con una de sus manos.

     —Y ya volvió el imbécil. No te extrañaba —Rodé los ojos y solté un bufido, ¿Él era siempre tan idiota con las mujeres? No las culpaba si no querían una cita con él, porque era irritante.

     —Sé que me extrañabas más de lo que yo te extrañaba a tí. Admítelo, chica fresa —Relamió sus labios e inclinó su cuerpo en mi dirección, intentando ¿Seducirme?

     —Jamás. Sólo sal de mi auto o tendré que armar un escándalo —Lo amenace.

     No aceptar que me ponía nerviosa era un delito muy grave y más al negarmelo a mí misma.

     —No serías capaz —Me reto y para su desgracia, sería capaz de eso y mucho más, sólo para que mis nervios no se notaran y él pudiera burlarse de ello.

     —¿No? —Solté una carcajada— Diré que quisiste robarme el auto y nadie tendrá duda de ello —Le conté con lujos y detalles lo que haría si no me hacía caso.

     —Feliz cumpleaños, Yeon Sun —Fue lo último que dijo antes de abandonar mi auto.

     ¿Por qué ahora sentía un vacío dentro de mi pecho? Esto era tan extraño cada vez.

| ✨ |

     —¡Dos horas en el maldito baño! —Se quejó mi prima viéndome desde mi cama— ¿Y esa sonrisa? —Alzó las cejas insinuando que algún chico haya logrado lo imposible durante este mes.

     —¿Cuál? No tengo ninguna en el rostro —Me puse un par de pantalon corto de chándal verde y una camiseta blanca con ¼ de manga.

     —¿Esto tiene que ver con el retrato que creíste que habías escondido, pero que claramente ya sé? —Me sorprendí ante sus palabras y hacérselo notar no estaba en mis planes, y menos que ella lo supiera.

     Yo había escondido ese cuadro antes de que todos llegaran a casa el día anterior... Si quiera ¿Cómo era posible que ella lo haya podido encontrar? Ni Cookie tenía el menor interés en encontrarlo, porque apostaba lo que fuera que ese olor a pintura no pasaría por desapercibido.

     —¿Tocaste mis cosas? —Alcé una ceja y negué con la cabeza, estaba molesta.

     —No. Te recuerdo que compartimos la misma habitación —Se defendió cruzándose de brazos, ofendida.

     —¡Pero es mía! —Exclamé como niña chiquita y reclamé lo que me pertenecía.

     —¿Acaso mi tío no te enseñó a compartir? —Acusó, pero no jugaría ese juego tan cruel, no me arrepentiría de mis palabras.

     Ella era la que jugaba al capitán en busca del tesoro perdido, no yo.

     —A veces te detesto —Admití organizando todo lo que había utilizado después de ese baño reparador.

     —Lo sé, lo sé, ¿Ahora me dirás de quién fue ese maravilloso detalle? Pudiste esconderlo un día de mí, pero el nombre de la persona que te lo regaló no podrás esconderlo tanto tiempo —Sus ansías eran increíbles, parecía una niña pequeña esperando a que le contaran algún chisme.

     —Es complicado —Me alcé de hombros y seguí con lo que estaba haciendo, mis cremas estaban en sitios donde no debían ir.

     —¿Acaso fue Namjoon? —Ni tiempo me dió a reaccionar— No importa que tan bonito sea, debes desecharlo —Me recomendó a punto de ponerse de pie para irlo a buscar y deshacerse de el.

     —Fue Jung Kook —Solté de golpe junto a millones de emociones que tenía a flor de piel.

     —¿En qué momento? —Mi prima confundida me miró esperando más respuestas, explicaciones... Ella no quería enigmas en su cabeza.

     —Me esperó dentro de mi auto —Le conté puntualmente lo que había ocurrido antes de entrar al auto y hasta darme el retrato.

     —¡Que romántico!

     —Baja la voz que nos pueden escuchar —Emití aquel sonido para callarla, estábamos aún en mi casa y mi padre siempre estaba al corriente de todo lo que pasaba en su hogar.

     Cerré la puerta del baño después de limpiar aquel desastre que había dejado y coloqué la toalla guindada en su sitio para que se ventilara mejor.

     —¡No se vayan a dormir demasiado tarde! —Mi padre gritó detrás de la puerta con cierta emoción.

     Anoche había sido una de las mejores noches para la familia, la fiesta había sido un éxito y no me extrañaba que aún estuviera de humor.

     —No lo haremos, tío —Seo gritó sentada en la cama acariciando a Cookie que estaba tan emocionado por recibir tales caricias.

     El reloj de mi mesa de noche marcaban las diez de la noche, ni siquiera era tan tarde para ser un día sábado, pero él como padre nos recordaba lo que debíamos hacer y a la hora que debíamos acostarnos para no parecer un zombie al día siguiente.

     —Te lo dije, él nos escuchó.

     —Claro que no. —Negó con su cabeza sin dejar de acariciar a mi pequeño bebé, mi precioso Cookie— Ahora cuéntame con lujos y detalles, ¿Se besaron? —Alzó ambas cejas insinuando que Jeon y yo teníamos algo más o que pronto llegaríamos a ello, pero para su desgracia, no.

     —No, Seo. Eso no volverá a pasar.

     —¿Negarás que tienes sentimientos hacia él? —Lo negaré. No tengo sentimientos por él, solo no sé cómo llamarle a lo que siento dentro de mí cada vez que lo tengo cerca.

     —Veamos una película, ¿Qué te parece Enredados? —Desvié el tema y que mejor viendo mi película favorita en el mundo.

     Me senté a su lado tomando el control del televisor y encendiendo el aparato dónde estaba mi cuenta de Netflix. Había visto esa película más de cinco veces, pero ¿Qué diferencia haría si le viera de nuevo? Haciendo como si nunca la hubiese visto antes y cantando las canciones a todo pulmón para que los vecinos no puedan dormir esta linda noche.

     —Eres tramposa.

     —No lo soy —Solté una risotada y acaricié a Cookie que había caminado encima de la cama para acostarse a mi lado.

     Era un cachorro muy mimado.

     Después de presionar el botón play en la pantalla los presentes nos pusimos cómodos dispuestos a ver la película, sintiendo como el suave colchón y las almohadas nos envolvían poco a poco.

     «Me acuerdo de esa noche
     Estaba dándotelo en tu cuarto
     Y Netflix nos estaba preguntando
     Si todavía seguimo' mirando
     Tú y yo en la cama dando candela
     Me había' dicho que estaba' soltera
     Tocando la ventana, su novio estaba afuera
     Me la jugué pa' que nadie nos viera, baby
     Esto de nosotro' es un problemón
     Y no puedes decirle a nadie
     Solo textea si es tarde
     No se supone lo de tú y yo
     Pero dime cómo paro lo de tú y yo
     No le puedes decir a nadie»

     Pause la película con el control y Seo buscó rápidamente su teléfono celular, de ahí provenía la música que estaba sonando sin parar; por su rostro emocionada e ilusionada pude saber que era Yoongi... No podía creer que ambos empezaran a salir desde hace unas semanas.

     —¿En serio? ¿Rauw Alejandro? —No odiaba al cantante, pero tampoco era mi favorito y por lo visto, el de mi prima si lo era.

     —Yo no juzgo tus gustos musicales —Sacó la lengua de forma graciosa antes de contestar la llamada.

     Sí, claro... Y yo volaba.

     —Hola, mi terrón de azúcar. —Su cara atontada al igual que su voz era algo nuevo que veía de ella, ¿Qué le había hecho ese tal Yoongi?— ¿Que me asome a la ventana? —Repitió y enseguida se levantó a paso apresurado a mi ventana, luciendo aquel pijama morado que tanto le encantaba. Me comenzaba a preocupar, mi prima temblaba— Ya bajo, no te muevas de allí —Colgó la llamada y se apresuró a buscar sus pantuflas.

     —¿Qué pasa, Seo? —Me atreví a preguntarle, aunque todo estaba claro, algo malo había pasado.

     —Esto que te diré no te gustará ni un poco, Yeonnie... Lo siento —Su voz era temblorosa y eso me asustaba, no por el hecho de verla en ese estado, si no por lo sentimental que ella pudiera ser... No quería que sufriera un colapso.

     —No entiendo.

     —El tipo que intentó violarte quiso asustar a Jung Kook, lo dejó mal herido y Yoongi lo trajo a casa —Explicó buscando una chaqueta, la noche era fría.

     —¿Y por qué no van a un hospital?

     —Pueden reconocerlo y reportarlo —Explicó mirando al rededor de la habitación sin decirme que necesitaba.

     —¿Y crees que en la universidad no lo harán? —Sabía que no ayudaba ante la situación, pero honestamente, no sabía que hacer.

     —No entiendes que uno de los hombres de esa persona que intentó matarlo puede estar esperándolo en algún hospital para culminar su trabajo... —Suspiró con pesadez acomodando la cama donde ambas dormíamos— Voy a subirlo para curarlo, Yeonnie. —Iba a negarme, pero ella acomodó su brazo quedando frente a mí para negar con su dedo índice— Ni se te ocurra echarlos. Ese ser humano es el mejor amigo de Yoongi, de mi terrón de azúcar y si le pasa algo, ya no será el mismo... Espero puedas entenderme.

     Sin más, sólo salió.

| ✨ |

¡Porque lo pidieron y aquí lo traje!

Escribí dos capítulos más 🙈 espero les guste tanto como a mí me encantó escribirlos.

Gracias por leer ❤️

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro