Pov Harumin

Jeongyeon: Se hace tarde Harumin levántate...- Anunció con su voz más grave para poder levantarme.

Harumin: Cinco minutos más mamá... por favor- Me cubrí con las mantas de nuevo.

Jeongyeon: Mi amor, esta nevando- Me levante casi de inmediato.

Harumin: Vamos...- Ella me miro con una sonrisa.

Jeongyeon: Tienes que acomodar tus cosas y arreglar tu uniforme- Hice un puchero- No estoy diciendo que no lo haremos, solo que tienes que ir a la escuela- Asenti. No me quedaba de otra que resignarme.

Harumin: Mamá podemos desayunar...- Ella me miro sabia lo que quería

Jeongyeon: Eso estaba haciendo princesa. Compre maple y creeme que si no dura hasta el siguiente mes, lo comprare de tu mesada- Le sonreí

Harumin: Tu culpa por mandarme al campamento en Canadá "Ve, sera divertido" que si lo fue pero no contemplaste que me gustara tanto- Le saque la lengua.

Jeongyeon: ¿Que fue eso?- Me lanzo la almohada de mi cama.

Harumin: ¡Perdón! Me voy a bañar- Ella me miro desafiante.

Jeongyeon: Tienes que estar lista en 10 minutos- No me me negaría.

Entre al baño, me encargue de mis necesidades y me duche lo más rápido posible.

Salí a mi habitación y me vestí con aquel uniforme del instituto. Prepare algunas cosas de mi club y busque dentro de mi vestidor la mejor chaqueta para cubrirme, guantes y un gorro. Salí con mis cosas listas para ir a la escuela.

Harumin: Diez minutos exactos- Deje mi mochila y mi maleta de mano a un lado.

Jeongyeon: Muy bien. Tu desayuno esta listo- Sonreí al ver los pancakes- ¡Ahhh! Te tengo un regalo. Se que alguien iniciara con sus campeonatos próximamente y hable con algunas personas sobre sus uniformes para el campeonato- La mire mientras ella caminaba con dirección al armario de la entrada.

Harumin: ¿Qué es?- Dije con emoción.

Jeongyeon: Se que te esforzarte para que tu escuela abriera el equipo de americano femenil y se que hiciste tu investigación exhaustiva sobre los campeonatos en donde podrían entrar. Hoy te darán una buena noticia y quiero que abras esto cuando estes en tu entrenamiento... Lo digo en serio Yoo si lo abres antes lo sabre- Me dio una caja.

Harumin: ¿Que noticia? ¿Como lo sabes?- Pregunte sosteniendo la caja con emoción.

Jeongyeon: Yo financió el equipo tonta. Iré a darles la noticia hoy- Beso mi frente- Quiero que consigas tus metas y te apoyare hasta el final mi niña- Acaricio mis mejillas.

Harumin: Te amo...- Deje la caja sobre la encimera y me abrace a ella.

Jeongyeon: Y yo te amo más- Dijo con alegría- Por cierto ¿iras a la practica de baile hoy?- Pregunto

Harumin: No, nos quedaremos a entrenar jugadas que me parecieron interesantes y creo que el equipo puede hacer- Dije con una sonrisa- ¿Pasas por mi?- Ella me asintió.

Ella me acompaño en la mesa, desayunamos juntas. Le hable sobre mis jugadas, a ella también le parecían interesantes pero como la buena madre que es, me pidió cuidarme y cuidar a mi equipo.

Después de esa platica, deje los platos sobre el lavabo. Tome mis cosas y comencé a saltar de la emoción.

Jeongyeon: Ya voy...- Dijo con una sonrisa mientras se colocaba su gabardina- Ya tienes las cosas de Mr.Snowman- Negué.

Harumin: Abre ese armario tu. A mi me odia- Le dije mirando el armario de la entrada.

Jeongyeon: Mi amor, eso paso hace años. Nadie vive en el armario y menos un duende que lanza objetos- Cruce los brazos- Bien...- Antes de ponerse sus guantes.

Saco del armario las cosas que necesitábamos para armar aquel hombre de nieve. Ella las puso sobre mis manos y abrí la puerta del apartamento.

Harumin: Vamos mamá, ya vamos- Dije con emoción saltando en la puerta.

Jeongyeon: Tienes 17 años y sigues siendo una niña pequeña- Rei

Harumin: Pero siempre seré tu niña pequeña- Dije tomando su mano.

Jeongyeon: Dame tu maleta- Se la di. Subimos al elevador. Movía nuestras manos de atrás hacia adelante, estaba muy feliz- Amor porque no vas al patio y comienzas, bajaré al estacionamiento y subiré tus cosas al auto- Le di aquella caja y mi mochila.

Harumin: No tardes Yoo- Ella me asintió y me baje en el vestíbulo del edificio. Salude a la recepcionista con una sonrisa y el movimiento de mi mano. Salí al patio del recinto.

Vi la nieve y corrí por todo el lugar. Me encantaba esta sensación. Todos los años desde que tenía dos años mi mamá y yo hacíamos un par de muñecos de nieve. En esencia eramos nosotras, madre e hija. Esperabamos a que la nieve de la primera nevada se endurezca y hacíamos los muñecos, los manteníamos cuidados hasta el fin de la temporada de invierno. Era emocionante.

Comencé haciendo la base del más grande, me tarde un poco tratando de que estuviera en forma aquella bola de nieve. Mi mama llego minutos después. Nos pasamos la siguiente hora haciendo los muñecos. Cuando terminamos mi madre y yo nos tomamos aquella fotografía como cada año.

Harumin: Se las puedo mandar a los abuelos- Asintio- Ahora si a la escuela- Ella me sonrió.

Fuimos al estacionamiento tomadas de la mano. Está etapa de mi vida era la más feliz gracias a mi mamá, ella hacia todo por mi, me ha dado hasta el momento la mejor vida y eso me hacía sentirme feliz, sentía amor y cariño de su parte. Ella me parecía la mujer más asombrosa del mundo.

Mi madre amablemente me llevo hasta la escuela. Si quería seguir en el equipo debía tener notas de excelencia, esa era la única condición que mi madre me ponía, apoyaba todo lo que yo quería hacer.

Advirtió que estaría aquí después de mi entrenamiento. Después de dejarle un beso en su mejilla baje del auto. Una parte de mi equipo me esperaba en la entrada del instituto.

Kaori: Hey estás aquí, estudié lo que me mandaste ¿Por qué quieres implementar jugadas cerradas para pases al aire?- Preguntó.

Harumin: Porque no sabemos que tipo de defensiva nos pueda tocar, si son buenos defendiendo por tierra abrirnos paso por aire es lo indicado- Menciono

Clementine: Creo que alguien se pasó viendo jugadas de Patrick Mahomes- Rei y asenti.

Harumin: Estuve practicando- Les mencioné- ¿Cuando será la cena de nuestras madres?- Les pregunté.

Clementine: Mañana mi mamá Sana está vuelta loca con la cena, mi mamá Dahyun le ha pedido que trate de calmarse, solo es una cena- Rei

Kaori: Mis madres parecen ocupadas, Mi mamá Mina a estado atendiendo ciertas sesiones de fotos lejos de la ciudad y mi mamá Chae... Bueno está ocupada con un caso. Mencionaron que harían lo posible por ir a la cena- La mire

Harumin: Tienes que convencer a mis tías. Tienes que estar ahí, es importante- Ella me miró asintiendo.

Kaori: Tu mamá también te dió esa caja... Yo la dejé en mi casillero, mi mamá Chae advirtió que no debía abrirla- Asenti y mire a Clementine

Clementine: Mismo caso ¿Que creen que será?- Rei y las mire.

Harumin: Se que son nuestros uniformes para el campeonato de invierno, solo que no recuerdo los diseños que elegímos- Mencioné.

Kaori: No elegimos- Abrí los ojos de sorpresa.

Harumin: Tengo que verlo- Me di la vuelta y mis amigas me detuvieron.

Clementine: Todas o ninguna, te quedas aqui- Alguien llegó enfrente de mi

??: Hola- Me sonrió- Soy Hirai Ryusei... ¿Puedes ayudarme con mi salón?- Le sonreí.

Harumin: Hola Ryusei, soy Harumin. Te ayudaré sin problema- El me extendió su hoja de ingreso- Bien veamos... Eres menor que yo, genial tu salón está en el piso que sigue, vamos- Le sonreí- Ryusei ellas son Clementine y Kaori, mis amigas- Ellas lo saludaron- ¿De dónde vienes? Noto un ligero acento en cuanto hablas- Le pregunté.

Ryusei: Vengo de Japón. Mi madre y yo acabamos de llegar ¿Hay equipo de americano aquí?- Preguntó

Harumin: Si ambas divisiones, masculino y femenil- El me miró sonriente.

Ryusei: Mi abuelo estará feliz al saber que puedo continuar con el deporte ¿Me ayudan a inscribirme?- Preguntó

Clementine: Por supuesto, supongo que la capitana deberá hablar con Han- Negué.

Harumin: Eso implica coqueteo incómodo de su parte y no quiero eso. Y segundo, no soy la capitana- Le recordé.

Ryusei: Si es tan mesquino cómo lo dices solo dime quién es, no me gustaría hacerte sentir incomoda- Le mire.

Harumin: Iré contigo por cortesía, lo demás dependerá de ti- El asíntio.

Juntos subimos las escaleras. Le acompañamos hasta su salón y le pedimos que se acercará a nosotras en el tiempo de comida. No sé nego asíntio feliz.

Nosotras subimos a nuestra aula. Aún hablábamos de las jugadas que había estado preparando. Todo acabo en cuanto llegó la profesora. Dedicamos las siguientes horas al estudio de nuestras materias.

Llegando la hora, salimos a comer algo. Moriamos de hambre. Aquel chico se nos acercó como lo acordado. Nos contó que sus padres se habían divorciado y que su madre estaba aquí por un nuevo empleo. Le parecía bueno empezar de nuevo y que le gustaría dedicar tiempo a los entrenamientos del Fútbol americano. Este chico me agradaba.