— Me reemplazaste... ¿por esa mierda? ¿Qué tiene de especial? ¿Qué hizo que le haga ser mejor que yo?

—  Comenzando por lo obvio; él tiene más respeto por mi persona de lo que tú jamás podrías... ¿Qué tienes? ¿Celos? ¿Por él? Créeme, prefiero a cualquiera antes que a ti... Además; ¿quién dijo que siquiera me importabas tú?

Ink abrió con pesadez sus cuencas; recordando vagamente algunos acontecimientos del pasado, aunque actualmente eso no le interesaba en lo más mínimo. Se levantó intentando recordar dónde estaba y... bueno... el blanco reluciente de ese lugar lo alteró enseguida, más una voz a sus espaldas llamó su atención.

 — Error...—musitó al ver al susodicho sentado con sus lentes puestos; se hubiera burlado o algo, pero su mente divagaba mucho en ese instante.

—  Hasta que despiertas... estuviste ocupado, ¿no?—el pintor no quiso responder eso—Red me dijo que estuviste como loco, lastimaste a tus preciadas creaciones, ¿quién lo diría?—sonrió burlón, a lo que Ink frunció el ceño y tras ponerse de pie, fue donde el glitch tomándolo de la bufanda obligándolo a levantarse.

 — ¿Dónde está Nightmare?—bramó, el contrario le apartó con un simple manotazo—¡Sé que sabes dónde está!

  — ¿Y supones eso porque...? —arqueó una "ceja" ante la acusación del artista—Yo no lo sé, te traje aquí en cuanto Dream se fue...—la mención del guardián relajó un poco la expresión molesta ajena—Y no dudes ni un segundo que quise seguirlo pero nunca he podido llevarle la contra y desobedecer sus peticiones... —se mantuvo en silencio un momento, riendo poco después—Esto de verdad te tiene frustrado, ¿no? Usualmente ya estarías bromeando sobre lo que acabo de decir... en fin; te prefiero callado.

Volvió a sentarse, tomando un muñeco en sus manos que Ink supo reconocer enseguida. No dijo nada pues habían prometido no hacerlo desde hace mucho, y se sentó de nuevo junto a Error, aunque éste se separó irritado manteniendo su distancia.

— No tienes idea de lo duro que es esto para mí... —musitó, jugando con sus viales restantes; llegó hasta un espacio vacío—Sólo quería protegerlos y ahora no puedo ser capaz ni de eso... Heh, vaya protector que resulté ser...

— Sí, eres una mierda, gracias por darte cuenta —soltó como respuesta, Ink hizo un puchero y enseguida miró el muñeco recién terminado.

— ... lo extrañas, ¿no?—Error no respondió, más su silencio dijo todo—También yo... pero al menos Fresh está haciendo un buen trabajo cuidando al pequeño... Jammy estaría orgulloso de él.

Nuevamente silencio, más no era incómodo; hace tanto tiempo que ocurrió aquello y ambos dejaron ir ese dolor desde entonces.

— Cuando todo esto termine, podríamos ir a ver a Mig...

— ¿Qué ocurre? —preguntó extrañado al notar que no terminó aquella frase.

Ink parecía ido, enseguida levantándose de golpe con una expresión aterrada. No, no podía ser cierto...

— ¡Ink!

— Alguien me ha llamado... es... pintura morada... algo... a-algo le ocurre a mi Lust...