o n c e
Baekhyun miraba con la ceja alzada a su hermano, mientras este no apartaba su expresión seria.
—Entonces— comenzó — Dices que Yoonie es tu compañero.
Jungkook asintió y Baek bufo burlón.
—¿Me crees ciego?— el alfa abrio y cerro la boca con la misma velocidad que lo primero.— Te comes a mi Yoon con la mirada, practimante vives en su casa y te la pasas con el, me sorprendería si me dijeras que eres solo su amigo.
Y es que el beta pelirrojo, lo sabia, desde hacia demasiado tiempo, pero sus escasas dudas se alejaron cuando ese día trágico en el hospital, Jungkook perdio el control de sus instintos, el aroma a furia creciente fue casi palpante, y YoonGi era su unica prioridad, exigiéndole a todos que lo llevaran con el, pero no podían, no cuando el alfa estaba dispuesto a degoyar el cuello del causante del sufrimiento de su compañero, con sus colmillos de fuera, las garras lista y cedientas de sangre, era un evidente problema que entonces y aún ahora es secretamente guardado de YoonGi.
—De hecho — Suspiro— Somos solo eso, creo.
—Es joda, ¿no?— Baek no vio indicio de mentira en la mirada de su hermano, entonces sus ojos se abrieron y luego suspiro lentamente.— El sigue bastante herido...— Susurro más para si mismo, pero Jungkook escuchó fuerte y claro.
—Es mi omega, Baek...—Se mordió El labio.
YoonGi con una pequeña sonrisa en los labios acompañaba a su madre a comprar ciertas cosas para su hermano en camino. Aunque Heechul habia evitado que su cachorro mayor se relacionara con cosas que le recordarán a su fallecido cachorro, no pudo negarse ante los ojos del omega que parecían brillar al ver la habitación casi lista del proximo Min, sus ojos parecían tener vida de nuevo viendo los modelitos de trajes de bebés.
—¿Crees que este es lindo?— Sonrio hacia su hijo, YoonGi tomo entre sus manos el "entero" azúl de canguro y sonrió viéndole.
—Es tan tierno —Heechul asintió estando en total acuerdo, entonces la mirada de YoonGi pareció cambiar ó quizás fue su simple imaginación porque su hijo volvia sonreir y mirar más modelitos.
—Bebé..— Llamó a su hijo— Yo he estado pensando...¿Te gustaria elegir el nombre de tu hermano?— YoonGi abrio los ojos en demasia, y su boca también levemente.
—¿Y-Yo?— Heechul asintió acariciando su mejilla— Pero pensé que mi papá y tu lo habían elegido ya.
—Si, pensamos en muchos, pero...— Tomo la mano de su cachorro— Yo quisiera que tu tambien participaras.
YoonGi abrio y cerro la boca para despues bajar un poco la mirada.
—Di que sí, bebé— El omega más grande abulto su labio haciendo que el menor sonriera con sorna.
—De acuerdo, me has convencido, pensare en un nombre adecuado para tí, pequeño cachorro —Dijo lo ultimo tocando con suavidad el vientre abultado de ya siete meses, sus manos hormiguearon y su corazón latió con fuerza cuando sintió al pequeño cachorro moverse dentro de su madre.
—Seguramente esta feliz de que su hermano mayor lo nombre— Le dijo Heechul, YoonGi asintió y una sensación extraña cubrió su interior, no sabia describirla, simplemente su corazón dolia un poco.
El omega embarazado tomo la mano de su pequeño y continuaron vagando alrededor de la enorme tienda para bebés, eligiendo varios conjuntos que de alguna ú otra manera hacian sonreir a YoonGi.
<<Quizás a esta altura ya tuviera a mi bebé entre mis brazos>>
Tomo un pequeño mameluco de un oso, kumamon para ser específico, viéndole con ternura divagó un poco:
<<Me pregunto que tal se veria mi bebé con algo asi>> Suspiro negando <<No, se que se veria hermoso... Aunque nunca pude conocerlo... Se que el hubiera sido precioso>>
Sus ojos comenzaron a aguarse sintiendo dolor en su ser, entonces el teléfono de Heechul comenzó a sonar haciendo al menor percatarse de su evidente decaimiento, entonces rapidamente limpio los indicios de lagrimas dejando el mameluco donde estaba, a la vez que veía a su mamá hablar por el celular con un evidente sonrojo, mientras tomaba otro modelito entre sus manos.
<<Seguramente es papá>>
YoonGi admiraba y envidiaba la hermosa relación de sus padres, las parejas predestinadas no eran un juego, y el lo sabe de sobra con el ejemplo de sus progenitores, alguna vez deseo aquello, pero ahora todo era diferente, no habría algun alfa para el...
Jungkook
YoonGi abrio los ojos en grande cuando aquel nombre apreció en su mente de imprevisto, la cara del alfa remarcada en sus pensamientos le hizo sentir las mejillas calientes y por inercia llevo sus manos a su cuello intentando escapar de la extraña sensación que aquello le causaba, no era una sensación mala ó desagradable, sin embargo por alguna razón se sentia mal por aquello.
Jungkook habia sido realmente bueno con el todo ese tiempo, y hasta había dicho que el era su compañero.. Por que eso dio a entender ¿no?
¿Era verdad? YoonGi aún se sentia avergonzando por la falta de pudor en sus acciones la ultima vez, aunque estas fueran por instinto.
El alfa era encantador y el lobo de YoonGi aún lastimado se sentia desfallecer con una simple mirada de el, sus labios le llamaban y su olor lo envolvía hasta el punto de la locura, su corazón martillaba con ganas y el solo quería ser de aquel alfa de hermoso corazón y sonrisa de conejo, algo normal en su especie
... Pero, ¿entonces por que se sentia tan avergonzado de sus pensamientos?
Con la cabeza hecha un lío se vio envuelto en vanos y malos pensamientos sobre su persona, su omega gimoteo con dolor y él, el simplemente comenzó a llorar cuando sintió el olor de Jimin llegar a sus fosas nasales, la mezcla de frutos secos y lavanda.
Cuando vio a su antiguo alfa cruzar la puerta de la tienda con un Taehyung tomando su mano, dejo caer el modelito que tenia entre sus manos, Jimin olfateo al aire y miro en su dirección, pero YoonGi ya no estaba viendo hacia el. Lo que veía era el traje de bebé que tiro hacia unos instantes viendo este lleno de sangre que parecia ser suya, Heechul corrió hasta el cuando comenzó a temblar como si estuviese en un terremoto, pero por más que su madre le llamaba y llamaba este no parecia entenderle, no y menos cuando vio a Jimin acercarse hasta el, quizo vomitar.
—¡YoonGi!— Escucho la voz del alfa, pero esta parecia lejana, sus ojos no querian ya ver, el no quería estar ahí, dio varios pasos hacia atras.
Entonces fue cuando alguien le llamo, y cuando vio de quien se trataba, su omega gimió en alivio, abrazándolo como su su vida dependiera de ello.
—Jungkook...
El alfa gruño en advertencia ante el otro a unos metros, pero había algo más importante ahora.
—¿Estas bien?... —YoonGi asintió, pero su cara era más pálida que de costumbre y la mirada de Heechul de preocupación no le daba mejores noticias.
Y es que Jungkook había corrido cuando su corazón y su lobo comenzaron a inquietarse por el, por su omega, Jungkook realmente habia ido por el a la minima incomodidad.
~Nos leemos~
¿Tienen alguna pregunta?
Dejenla por acá ==>
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