Mientras sus ojos parpadeaban lentamente, JungKook continuaba acariciando de arriba hacia bajo la espalda del omega con extrema delicadeza, mientras las palabras del otro eran como melodías demasiado intrigantes bañando por completo sus sentidos,  y es que... saber de tus anteriores vidas, no era cosa que pasase siempre, los cambia-formas olvidaban sus vivencias una vez renacían, algunos pocos las observan mediante sueños y otros muchos simplemente perdían el rastro enteró de ello, dejándose llevar solo cuando encontraban a quien es su otra mitad, si es que eso sucedía en primer lugar.

—...Una vez mate a una pequeña familia de conejos...— Aquella voz fue tan suave —... la diosa luna no pareció agradarse con ello... por eso me quitó a mi cachorro... — Aunque el alfa no entendiese bien las circunstancias o la mayor parte de cada una de las cosas que su omega decía, tenía algo en claro.... 

la inocencia en este no parecía haberse perdido, era como si fuese un pequeño niño que creía que si se portaba mal vendría un cazador a llevárselo. La madurez estaba en ciertos ámbitos, pero la mayoría de todo su ser, era como una blanca sábana, un día soleado pero agradable, e incluso un tierno cántico que en lugar de provocarte felicidad, traía consigo un poco de malestar.

Llevo una de sus manos hasta cada uno de los hombros contrarios y entonces, después de un segundos y a la par de los continuos balbuceos del otro lobo, buscó su rostro. Le encontró con el rostro sonrosado, los ojos ámbar perdiendo el brillo que anteriormente habían tenido y  las lágrimas que comenzaban a correr por su mejilla.

y era difícil...

—¿Tu de verdad crees eso? — Se relamió los labios — ¿De verdad piensas que ese cachorro se fue porque hiciste algo así en una de tus anteriores vidas? — Tardó mas de un poco en asentir complementa convencido. Suspiro.

—¿Por que si no? — Hablo viendo hacia sus piernas dobladas. — Los pecados se pagan tarde o temprano....

JungKook no deseo gruñir, sin embargo lo hizo. 

—No, no es así — El otro lobo nisiquiera levanto el rostro, jugando con la tela de su pantalón, totalmente vulnerable. — Pequeño... ese cachorro murió, pero no porque tú hubieses hecho tal cosa antes... es algo que simplemente sucede, tu cometiste un error, y aquella otra persona también — Hizo referencia a JiMin. Aunque su pensar era más inclinado a que la culpa era de este y no la de YoonGi, la realidad era equilibrada, ambos tenían una porción de culpa. 

El cachorro había muerto por falta de cuidado, un alfa y un omega no pueden estar separados o distanciados si hay una criatura de por medio, el olor a dominante es esencial en varios ámbitos y la suma tristeza de la madre no daba siquiera un hincapié para que se sometiera a un tratamiento de feromonas alfa para poder mantenerlo estable hasta el día del alumbramiento.

Justo ahora, JungKook se estaba dando cuenta de algunas cosas que había pasado por alto, como la actitud repentinamente serena de YoonGi en casi todos los aspectos, así como también había confirmado otras tantas de las que ya sospechaba. Era más que evidente que su pareja, no estaba totalmente sana, y aunque tuviese sus momento felices, él podía literalmente sentir, como existía un bloqueo hacia las emociones más profundas del omega, dichas que en ese momento parecían estarse dejando ver con la repentina salida del lobo del otro.

Escucho el llanto tan bajo, sintió y vio el cuerpo del otro sacudirse lentamente. Su alfa estaba tan triste, y pensar que todo aquello estaba acumulado dentro de YoonGi...

— ¿Es así? — Los ojos comenzando a ponerse brillantes, el cuerpo temblequeante y los sonidos de quejas silenciosas, no hacían más que aumentar el malestar en su ya lastimado ser.

Porque nadie desea ver a la persona que ama, tan lastimada y triste... 

Y ese quizás era el mayor de sus problemas, porque no solo era ver llorar, sufrir y lamentarse a YoonGi, si no, las varias cosas que esto mismo acarrea, la inseguridad por ejemplo...

YoonGi nunca se lo había dicho directamente, pero JungKook podía sentirlo, todo en el omega se lo decía, como gritos que por mas que lastimasen su garganta, no eran efectivos. Mientras se mordía el labio inferior, el pálido cogió una de las manos contrarias, esa que aún permanecía en su hombro, y lentamente la llevó hasta rozar su cuello, el alfa escucho como la saliva pasaba por su garganta y entonces los orbes ámbar se hicieron más intensos así como la sensación que lo embargo tan pronto como el omega ladeo la cabeza y pego por completo su mano a la pálida nunca. 

YoonGi le miró con tanto deseo y ternura, que por un momento, su mente se vio perdida, totalmente a su merced. 

Oh, vaya, ¿ese era el poder de las parejas destinadas?, porque JungKook nunca se había sentido tan dominado como ahora, siendo él un alfa. Enamorarse había sido algo que experimentó un par de veces en su ya más que enterrado pasado, era un sentimiento gratificante e incluso, un poco doloroso a veces, sin embargo... esta era la primera vez que, se sentía tan unido a alguien, el término "tu dolor es mi dolor", nunca había sido tan literal...

—Es porque yo nací para ti, asi como tu para mi — Ese había sido YoonGi, quien sacándolo de su trance, parecía haber leido por completo su lluvia de pensamientos y ahora, en lugar de el estarle consolando, era el omega quien con parsimonia restregaba su mejilla por su mano y parte su brazo, una de las pálidas de este había buscado la otra mano de JungKook, aquella que no estaba haciendo nada y que por un segundo, el alfa se habia olvidado de ella, asi como la nocion del tiempo, donde estaban o el verdadero propósito de todo.

Su izquierda fue sostenida con suavidad avasallante, los dígitos contrarios hicieron leves presiones  en los nudillos de los propios, literalmente, el temblequeo, quitando la vista de sus manos, recorriendo el pequeño cuerpo, hasta estar de nuevo en conexión con los ojos contrarios, aquellos que reflejaban más que sumo cariño. 

—Deseo... — JungKook le escucho comenzar a hablar — Yo, de verdad deseo... tu marca — Las caricias de su mejilla hacia el brazo del alfa, cesaron mientras las palabras eran dichas, no sabía qué más decir, porque lentamente sentía como su omega volvía a esconderse, más calmado que nunca, así como su conciencia regresaba. 

Lo siguiente que sintió, justo antes de volver por completo en sí, fue como la mano, antes quieta de JungKook, comenzaba a dar un leve toqueteo por su nuca, la caricia fue tan repentina y suave, que se vio a sí mismo, cerrando los ojos, como si aquello fuese un anestesiante y a la vez, algo totalmente íntimo, porque ningún omega dejaba que se le tocase el cuello deliberadamente.

JungKook gruño conforme los suaves sonidos que YoonGi soltaba llegaban hasta sus hipersensibles oídos, llenándolo de una sensación tan propia, como lo era rozar sus dedos por el cuello del que es su mate. Antes de darse cuenta, YoonGi se había ido hacia adelante, directo hasta su pecho, mientras un suspiro caliente abandonaba sus labios y el cansancio reacia en su pareja, JungKook solo soltó aire, mientras sus manos no fueron lo suficientemente rápidas para comenzar a acomodar el cuerpo de su omega en el propio.

Sus brazos lo rodearon mientras hacía que el rostro del otro fuese hasta su propio cuello, dándole la facilidad de olerle y que su sueño fuese más reparador, su propio bienestar parecía menos preocupante que nunca, porque cuando YoonGi finalmente estuvo bien acomodado a su cuerpo, JungKook sintió como si todo estuviese tan bien, no sentía cansancio, aunque la realidad era que, su cuerpo deseaba tanto dormir, pero su sentido alfa era más fuerte que cualquier necesidad humana. 

Porque por alguna razon, sentia que debia estar más alerta que nunca con YoonGi. Observó alrededor, a su departamento, podría no ser la mansión en la que su pareja vivía actualmente, pero... estaba bien, debía estarlo y si no era así, él haría que estuviera lo suficiente bien acondicionada o incluso buscaría otro lugar, porque, YoonGi le necesitaba cerca más que nunca y compartir un lugar, era un buen paso para comenzar, su olor estaba plagado por todos lados... ambos necesitaban esto. 

ahora solo esperaba que YoonGi aceptase lo que le ofrecía, y si no era así, comenzaria a pensar en cómo persuadirle.

Su nariz rozó el cabello contrario y sus ojos se cerraron percatandose de la suavidad, todo en su pareja parecía tan suave para JungKook, sus brazos, cabello, nuca, labios, e incluso la pequeña y casi inexistente grasita que YoonGi tenía acumulada en la panza. 

Se relamió los labios, sintiéndose un poco, solo un poco ansioso, su larga cola, por algún motivo, salió, no le hubiese sorprendido que sus orejas también lo hicieran mientras YoonGi había estado consciente. En medio de sus pensamiento, su celular comenzó a vibrar y aunque pensó en ignorarlo, no lo hizo, tanteo el sillón a su lado, con cuidado de no moverse demasiado y perturbar el tranquilo sueño de su omega, el suelo alfombrado era más cómodo.

Encontró el aparato un par de segundos después, no era su teléfono, sino el de YoonGi.

Baek, aparecía en letras grandes y blancas, junto a una foto de su hermano. No dudo en contestar la llamada.

Hola, hola, :3 ya llegue a dejar esto por aca: 

Es un capítulo importante, así que espero le pusieran atención, porque de acá partirá el clímax final :3.....  el siguiente capítulo probablemente será muy extenso, asi que comenzare a escribirlo xd no se cuando lo termine, pero estará en estos días.

Creo que no tengo mas que decir :D

solo, si les gusta TODOSxYoonGi, pues vayan a leer mi nueva historia :3 y dejan su opinión. 

Me gusta ver los capitulos llenos de comentarios xd, asi que no sean tímidos, comenten cuanto les plazca :D----

Sin mas que decir,

Nos leemos