Hyungwoo se encontraba sentado esperando a que el rodaje terminará, Kayla actuaba con naturalidad dejando en claro que ella está más que adaptada a esa vida.

Se sentía ensimismado viendo su sonrisa e incluso esos cambios de su rostro con cada escena pero eso cambio cuando la presencia de otra persona llamo su atención.

Jungkook estaba ahí delante suyo junto a un miembro del staff del drama, hablaban y reían pero sus ojos no se apartaban de ella, sentía ese malestar que poco a poco se volvía más común. No le agradaba la situación y no le agradaba ese chico.

—¡Corte! Tomen un descanso de 5 minutos.

—¡Jungkook!—Kayla se acercó a él sonriente, engancho sus brazos a la cintura de este y alzo su rostro con una sonrisa. Por primera vez podía ver la realidad, desde ese día donde él los vio entrar al edificio de Kayla algo en ellos había cambiado.

—Hyungwoo regreso después, iremos al camerino.

Ella le dijo con una sonrisa para después caminar junto a él.

—Tenias la oportunidad...

—¿Que?¿De que demonios hablas?

Su amigo se rió viendo enojarse—Ella estaba tan enamorada de ti...y tú de ella pero ahora, un guapo,sexy y candente hombre está a su lado... también me enojaría.

—Deja de decir estupideces. Ella no me gusta ni lo hará. No es mi tipo.

—Si claro. Amigo deja de ser un idiota, estás molesto por Jungkook si puede tocarla, porque probó sus labios y por qué posiblemente ellos se enamoren...pero tú tuviste esa oportunidad, ahora realmente dejo de estar de tu lado, todo el mundo ha visto lo imbécil que haz sido con ella.

—¿Que dices?

—¿No lo vez acaso? Hace una semana ella regreso para continuar con el rodaje, y en esa semana han ido en aumento las veces que la dejas aquí sin como regresar a casa excusando  te con que tienes trabajo, ella te habla dulce y tú le respondes con ese maldito tono.

—¿Eres mi amigo?

—Lo soy pero no voy a permitir que destruyas a un corazón tan dulce por qué no fuiste lo suficientemente huevudo como decirle sobre tus sentimientos.

El joven se fue dejando en silencio a su amigo.

Era cierto, después de ese día algo había cambiado, se sentía molesto y la única persona que estaba para recibir ese enojo era Kayla, empeorando la situación pues ella era la razón de todo.

Caminó con un paso indeciso hasta el camerino,tomo la manija de la puerta y abrió encontrando se con esa escena que rompió su corazón por completo.

Kayla estaba entre los brazos de Jungkook, ella tenía sus ojos cerrados disfrutando de ese momento.

Su sangre empezó a hervir y sin poder pensar los separó, dirigió su puño hacia el rostro de Jungkook logrando hacerlo retroceder.

—¡Hyungwoo!¡¿ Que demonios te pasa?!—Kayla se acercó a Jungkook tomando su rostro entre sus mano,habia una leve herida en su labio.

—Y-yo...

—Vete...¡Que te vayas!—ella volteó hacia él molesta —¡Larga te!