Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

16. Issei x Kiyome

Bienvenidos a un nuevo capítulo de esta serie. Hoy le ha llegado el turno a una hermosa domadora de bestias...Kiyome Abe!

(N/A: Aunque aquí se vea rubia, en verdad Kiyome es castaña, por lo que me referiré a veces de esta forma hacia ella. Si no os gusta...pues imaginadla como queráis :v)

Sin ninguna interrupción más...EMPECEMOS!

Era mitad de semana en la ciudad de Kuoh, el momento en el que muchos estudiantes deseaban que el fin de semana llegara

Justo en este instante, podemos ver a tres hermosas chicas compartiendo una mesa, aunque dos de ellas miraban se forma analizadora e inquisitiva a la tercera

Estas chicas eran Rias Gremory, Akeno Himejima y Kiyome Abe. Ellas el año pasado eran tres de las cinco chicas más hermosas del tercer año de preparatoria

-¿Puedes repetir la pregunta Kiyome-san?-preguntaba la pelirroja Gremory queriendo saber si lo que escuchó había sido real

Kiyome tragó nerviosamente para volver a repetir la pregunta que le había hecho a dos de las novias/esposas de Issei

-Yo...yo quiero estar en el harem de Hyodo-kun-decía en voz baja la domadora, estaban en la cafetería y no quería que nadie la escuchara aún si estuvieran en una de las mesas más alejadas

Por supuesto, tanto Rias como Akeno la habían escuchado con sus sentidos mejorados

Hubo un pequeño silencio incómodo entre las tres hermosas chicas, hasta que este fue roto por Akeno

-¿Por qué tanto interés en Anata tan de repente?-preguntaba Akeno mientras dirigía una mirada seria a la castaña

No pensaba dejar que ninguna mujer se aprovechase de la fama que había ganado Issei desde que entró al mundo sobrenatural

-Mi interés hacia Hyodo-kun no es repentino. El me gusta...desde que me salvó de ese contrato matrimonial-respondía Kiyome a la pregunta de Akeno, queriendo dejar en claro que no era ninguna oportunista

-Entiendo pero...¿Por qué esperaste hasta este momento para decirlo?-preguntaba ahora Rias

-Bueno, en aquella época...no me atreví debido a lo posesivas que erais con él-explicaba la chica

Tras dicha respuesta, tanto Rias como Akeno tuvieron la decencia de sonrojarse levemente. No podían negar que en ese tiempo eran muy posesivas hacia su Issei

-En verdad...lo siento-se disculpó Rias junto a Akeno

Por su parte, la domadora dibujó una sonrisa triste y negó con su cabeza

-No hace falta que os disculpeis. En verdad también es culpa mía, mi cobardía e inseguridad me hicieron incapaz de confesarle mis sentimientos a Hyodo-kun. No puedo negar que cada vez que os veía a alguna de vosotras o al resto de chicas junto a él...sentía dolor, celos y envidia...yo también quería estar de esa forma junto a él pero nunca encontré la valentía ni la oportunidad necesaria-hablaba Kiyome limpiándose una lágrima traicionera que caía por su rostro

La pelirroja y la pelinegra no pudieron evitar ponerse en la piel de la domadora. Ellas ni siquiera sabrían si fueran capaces de soportar esa situación

Soltando un gran suspiro, Rias se dispuso a hablar

-Entonces está bien. Bienvenida Kiyome-san

-Muchas gracias Rias-san, Akeno-san. Vosotras...¿Creéis que soy del gusto de Hyodo-kun?-hablaba feliz Kiyome aunque cuando hizo su pregunta sonaba algo insegura

Rias y Akeno se sorprendieron por la pregunta realizada por la domadora de cabellos castaños. Se miraron entre sí, para luego soltar unas leves risas

-Por supuesto Kiyome-san-decía la heredera Gremory

-Si lo que sientes por Anata es sincero el te aceptará. Aparte de que le encantan las chicas guapas y de grandes pechos, esas dos opciones las cumples Kiyome-san-eran las palabras de Akeno sonrojando a la castaña de larga melena en forma de taladro

-Y-ya veo...entiendo...-hablaba en un tono bajo y avergonzado la joven

Tras esa pequeña charla y conseguir el permiso de la matriarca del harem Issei, tan solo quedaba crear una situación para hablar con él e invitarlo a su apartamento

Mientras pensaba alguna forma, la domadora acabó chocando con alguien

-Perdón! Iba distraída-se disculpaba la chica

-No te preocupes Abe-sempai-respondía una voz muy conocida para la chica

Kiyome dirigió su mirada hacia donde provenía la voz para ver a cierto castaño

-Hyodo-kun!-exclamaba sorprendida la castaña al encontrarse justo con quién debía hablar

-Mucho tiempo que no nos veíamos Abe-sempai. Ten, creo que esto es tuyo-hablaba Issei entregándole algunos apuntes a Kiyome, ya que estos habían caído al suelo

-Si...muchas g-gracias Hyodo-kun-agradecía la domadora de cabellos castaños

-No es nada sempai-respondía con una pequeña sonrisa ocasionando un leve sonrojo en Kiyome

El castaño tras ayudar a la domadora a recoger los apuntes que se habían caído se disponía a marcharse, hasta que fue detenido de nuevo por la chica

-Espera Hyodo-kun!-exclamaba la domadora de pelo castaño deteniendo el avance de Issei

-¿Ocurre algo sempai?-preguntaba el castaño curioso de que la castaña lo llamara

-Bueno...etto...estoy reorganizando el apartamento donde vivo. Solo quería saber si me podrías ayudar a mover algunos mueble y cajas esta tarde...si nobes mucha molestia claro-pedía Kiyome, aunque en verdad todo esto era un plan para pasar un tiempo con Issei y si se daba la oportunidad declararle de una vez todo lo que sentía

Un plan que tenía la aprobación de Rias y Akeno

Unos segundos que parecieron horas para Kiyome fue lo que tardó Issei en dar su respuesta

-Por supuesto sempai, aunque tengo que avisar antes a las chicas para que no se preocupen-respondía Issei consiguiendo un asentimiento y una sonrisa de parte de la domadora

-Muchas gracias Hyodo-kun. Aquí tienes mi número de móvil para poder darte la dirección de mi apartamento-decía la joven para escribir en un folio su número y entregárselo a Issei

Por supuesto que ella podía haberle dado directamente su dirección, pero usó esta excusa para poder darle su número de teléfono ya que perdió su oportunidad de hacerlo luego de que el chico la ayudara con el problema de su contrato matrimonial

-Entonces no vemos esta tarde sempai-se despedía Issei de Kiyome para ahora marcharse a su siguiente clase

-Hasta luego Hyodo-kun!-exclamaba con un tono más feliz la chica, quién también se marchaba a su siguiente clase con una sonrisa en su cara

Unas horas después, podía verse a un castaño con ropa de calle llegando al bloque de apartamentos de cierta domadora de bestias luego de pedir unas pocas indicaciones por teléfono, aparte de que ella le había dicho que le esperaría afuera del edificio

-Hyodo-kun por aquí!-exclamaba la Abe tras ver al chico y moviendo sus brazos para llamar su atención

Una vez el castaño ya localizó a Kiyome, Issei no pudo evitar ojear todo lo discreto que podía ser el cuerpo de su sempai

Después de todo, la castaña domadora de bestias estaba vistiendo una camiseta de deporte blanca, la cuál marcaba bastante su figura atlética y sus grandes pechos y unos shorts negros dejando a la vista sus esbeltas piernas

Kiyome dibujó una pequeña sonrisa seguida de un leve sonrojo al darse cuenta del muy rápido vistazo que Issei le dióa su cuerpo. Al menos la chica estaba segura de su cuerpo y que este atraía a su interés amoroso

-Siento la tardanza Abe-sempai-se disculpaba Issei tras haberse retrasado unos minutos al no poder encontrar la dirección del bloque de apartamentos

-No te preocupes Hyodo-kun no pasa nada, aún por encima que me estás ayudando no se me ocurriría recriminarte esto-hablaba Kiyome moviendo su mano restándole importancia al asunto

Tras la pequeña conversación, la domadora de cabellera castaña y en forma de taladro se encargó de guiar a Issei hasta su apartamento, el cuál tenía todavía varias cajas sin ordenar y que debían estar en sus respectivos armarios

-Siento un poco el desorden de la casa-se disculpaba un poco avergonzada Kiyome, quién a pesar de que intentó limpiar todo lo que pudo el apartamento le fue imposible mover algunas cajas ya que eran bastante pesadas

-No te preocupes sempai. Empezamos cuando tu quieras-hablaba Issei mientras observaba el apartamento, el cuál lucía como un lugar perfecto para un estudiante de universidad

El apartamento era perfectamente habitable para una o incluso dos personas. Estaba equipado con una cocina, un pequeño baño, una habitación y una sala, bastante simple pero confortable

-Pues entonces empecemos por deshacer esta caja y ordenar en ese armario-decía la chica para que seguida por el castaño comenzara a sacar cosas de dicha caja y ordenarlas poco a poco

Asi fue por un par de horas, todo iba bien hasta que de una de las cajas que había repartidas por la sala el chico sacó lo que recordaba que era la falda que pertenecía al uniforme del club de tenis de la academia Kuoh

Al ver dicha prenda el chico no pudo evitar que viejos recuerdos llegasen a su cabeza

Recuerdos en dónde el observaba desde lo lejos, junto a sus amigos Matsuda y Motohama, el entrenamiento de las chicas del club de tenis

En ese mismo club al que perteneció Kiyome, una de las chicas más guapas y atractivas de Kuoh después de Rias, Akeno, Sona y Tsubaki

Siendo sincero consigo mismo, el castaño debía de admitir que de todas las chicas de dicho club era la que mas llamaba su atención. No solo porque fuera una de las chicas más hermosas de la academia sino, que en ese momento ella era la chica con más pecho del club de tenis, los cuáles rebotaban cada vez que golpeaba la pelota con su raqueta

Aunque tampoco podía evitar observar y admirar como su falda subía y dejaba, por un muy corto segundo, a la vista sus panties

Mientras Issei seguía en su pequeño mundo imaginando dicha escena. La domadora estaba ordenando algunos libros en su estantería hasta que se giró y vio como Issei sostenía en alto la falda que usaba cuando jugaba al tenis

Su reacción más rápida fue sonrojarse levemente de la vergüenza, pero eso cambió cuando dio paso a una sonrisa de lado en su boca. Sin duda Kiyome aprovecharía para avergonzar un poco al chico

-Hyodo-kun...¿Podrías dejar de observar mi falda tan intensamente?-preguntaba Kiyome sacando de su ensoñación al castaño y haciendo que este se altere un poco

-L-lo siento Abe-sempai!-exclamaba el joven guardando de nuevo la prenda e intentando buscar cualquier otra cosa

-No es nada Hyodo-kun-restaba importancia la chica pero disfrutando en silencio ver la vergüenza plasmada en la cara de Issei

Luego de ese pequeño momento, la Abe cogió un puñado de libros y se dispuso a situarlos en la estantería, aunque ahora necesitaba una pequeña escalera para ordenarlos

Fue en ese momento, donde la chica tuvo que estirarse de más para colocar bien un libro y acabó resbalándose y cayendo de la pequeña escalera

Issei quién estaba al lado pudo escuchar el grito que dejó salir Kiyome, no tardó en evitar que esta se hiciera daño

-Sempai!-exclamaba Issei en un intento de poner su cuerpo entre ella y el suelo para sostenerla

Unos pocos segundos tras la caída, podía oírse leves quejidos de dolor que venían de Issei y Kiyome

-¿Estás bien Abe-sempai?-preguntaba Issei, quién inconscientemente apretaba cierta parte muy suave y blanda de la domadora

-Kya! H-hyodo-kun!-exclamaba la chica al sentir el leve apretón que ejercía la mano derecha de Issei sobre su pecho izquierdo

-Abe-sempai! Y-yo lo siento, le juró que fue un accidente!-exclamaba el castaño y preparándose para una posible bofetada

Aunque le extrañó bastante que la chica tardara en castigarlo, por lo que abrió uno de sus ojos para ver que Kiyome tan solo tenía una mirada avergonzada

-N-no ocurre nada Hyodo-kun...a cualquiera le puede ocurrir esto...aunque no me molesta si eres tu-decía Kiyome para tranquilizar al castaño, aunque susurró la última parte

Por supuesto con lo sucedido en ese instante, la domadora se olvidó de que los sentidos de Issei estarían mucho más desarrollados que los de un humano común. Lo que significaba que este le había escuchado perfectamente

Y eso lo confirmó tras ver la cara de estupefacción que tenía el joven portador de Ddraig

-Sempai...eso que acabas de decir...

-P-puedo explicarlo Hyodo-kun!-se apuró a hablar la chica

-Adelante...-dejaba hablar el chico a su sempai de cabellera en forma de taladro, aunque tenía una leve sospecha de lo que podía ser

Antes de comenzar con la confesión que estaba dispuesta a realizar hoy, la Abe tragó el nudo que se había formado en su garganta por los nervios de la situación. Tras soltar un largo suspiro se dispuso a hablar

-Bueno...verás Hyodo-kun. Yo te pedí que vinieras hasta aquí por otros motivos-explicaba la chica captando la atención de Issei-y esos motivos eran para...para decirte...que desde hace un tiempo estoy enamorada de ti!-exclamaba en voz alta Kiyome, la cuál cerró los ojos esperando una respuesta del castaño

-Ya veo...en verdad, m los sospechaba-hablaba Issei sorprendiendo a la domadora

-¿Tu ya lo sabías?

-Como dije, tenía una sospecha

-O-oh...-era lo único que se le ocurría decir a la Abe

Un pequeño silencio incómodo se presentó en la habitación, ninguno de los dos jóvenes sabía que decir. Siguió uno segundos más así hasta que el chico decidió romperlo

-Ya que fuiste sincera sempai, creo que lo justo es que yo lo sea también

-¿Huh?

-Tu también me gustas Abe-sempai-confesaba Issei con una pequeña sonrisa

...

...

...

-¿Eh? ¡¿EEEEEHHHHH?!-exclamaba a todo pulmón la domadora de cabellos castaños muy sonrojada

Al ver la reacción de su sempai, Issei no pudo evitar que una leve carcajada escapase de su boca

Kiyome fue devuelta a la realidad al escuchar como el chico se reía

-¡¿L-lo estás diciendo en serio Hyodo-kun?!-gritaba conteniendo su felicidad la joven

Después de todo, el chico del cuál se enamoró hace varios meses correspondía a sus sentimientos luego de que ella se confesara, aparte de decirle que el sentía lo mismo por ella

-Si...incluso desde antes de convertirme en un demonio me había fijado en ti...pero luego pasó todo lo que ya sabes. En verdad, me alegré cuando pediste mi ayuda para romper ese contrato matrimonial, aunque nunca tuve la suficiente valentía para decírtelo porque no quería estropearlo todo-explicaba Issei a la domadora, la cuál lo escuchaba atentamente e incluso se alegró de que Issei se fijara en ella desde antes de ser un demonio, aunque fuera de una forma más pervertida que en la actualidad

-Yo tampoco me atreví a confesarte mis sentimientos porque no quería romper ese lazo de amistad luego de que me ayudaras...aunque también ne sentía un poco cohibida por Rias y Akeno-confesaba Kiyome recordando que ellas dos eran bastante posesivas con Issei

-Entiendo. Entonces...¿Tu estarías dispuesta a...

-Por supuesto!...quiero decir...si, estoy dispuesta a compartirte y estar en tu harem Hyodo-kun-hablaba Kiyome con una linda sonrisa acompañada de un leve sonrojo

Al aceptar lo que iba a decir el castaño, las caras de Issei y Kiyome quedaron muy cerca la una de la otra. Por puro instinto y luego de que los dos se confesaran, sus labios se juntaron en un casto beso, el cuál se tornó algo apasionado con el paso de los segundos hasta que los dos necesitaban respirar

-Ese fue mi primer beso Hyodo-kun-decía Kiyome, quien por dentro estaba muy feliz

-Me alegro de que me hayas confiado tu primer beso y ya que seremos pareja sempai...pues creo que es mejor que me llames Issei

-Entonces es más que justo que tu te también me llames Kiyome...Issei-kun-decía la domadora

-Por supuesto...Kiyome-decía el castaño para luego darse cuenta de un detalle-aunque deberíamos decirle a Rias que...-estaba hablando Issei hasta que fue interrumpido por la castaña de pelo en forma de taladro

-Sobre eso...yo ya he hablado con Rias y Akeno. Incluso me dieron el permiso...de llegar hasta el final-hablaba la Abe, llegando a decir lo último con una pequeña sonrisa seductora gracias a sentirse con más confianza tras la confesión de los sentimientos de ambos

-¿L-llegar hasta el final?-preguntaba un poco trastabillado Issei siendo derrumbado lentamente al piso, siendo retenido por una Kiyome todavía sonriente

-No te hagas el inocente Issei-kun. Akeno y Rias me contaron varias de las cosas que hicisteis...aunque Akeno fue mucho más explícita que Rias-decía la castaña tumbándose sobre Issei, presionando sus grandes pechos contra él y comenzando a besar el cuello de este

-O-oh...y-ya veo. No crees que primero...deberíamos tener...algunas citas...-hablaba como podía y soportando los gruñidos que querían escapar de su boca

-El orden de los factores no altera el producto Issei-kun...o es que acaso no te gustan mis pechos...-hablaba Kiyome siendo más audaz y valiente en su acercamiento y deshaciéndose de la camiseta que llevaba, dejando al aire sus pechos, los cuáles estaban bastante apretados por el sostén de color gris que vestía

Lemon inicia

Luego de quitarse dicha prenda, Kiyome reanudó de nuevo la atención que le mostraba al cuello de Issei

Este poco a poco fue dejándose llevar. Sus manos se posaron en el trasero de la chica y comenzó a apretarlo, haciendo gemir levemente a la domadora quien ponía mas esfuerzo en sus besos

A continuación, esta se deshizo de la ropa que llevaba el chico, dejando el torso de este expuesto para su disfrute

Kiyome se mordía los labios al ver los músculos que consiguió Issei con su entrenamiento. Una sensación de envidia llegó a ella al recordar que tanto Rias, Akeno como el resto de las chicas de Issei ya habían disfrutado de él

Pues hoy sería su turno...y lo iba a aprovechar muy bien

-Dime Issei-kun ¿Por qué no disfrutamos los dos a la vez?-preguntaba Kiyome dejando sus pechos al aire con una pequeña sonrisa coqueta mientras se daba la vuelta

Esto hizo que los dos quedaran en la posición del 69

Issei entendiendo el mensaje de su nueva novia comenzó a quitarle el short deportivo junto a sus panties, dejando ver sus labios vaginales, los cuáles comenzaban a humedecerse

Kiyome no se quedó atrás tampoco y se deshizo de los pantalones y boxers del chico, quedando así su erección libre

-Grrr...K-kiyome...-gemia Issei al sentir como la domadora comenzaba a lamer su miembro

Por lo que este inmediatamente correspondió a su novia y también empezó a atender la vagina de esta

-Hmmmm...aaah...Issei-kun...-era Kiyome quien gemia ahora al sentir la lengua del castaño en su interior

Así estuvieron en esta posición por varios minutos, en los cuáles, ninguno de los dos se dejaba dominar tan fácil

Por parte de Issei, este cada vez intentaba hundir más su lengua entre los pliegues de la castaña sin ninguna pausa. Siguió así hasta que decidió atacar el clítoris de Kiyome con sus dedos mientras continuaba usando su lengua, disfrutando de los gemidos de su nueva novia

Kiyome tampoco se quedaba atrás, la chica comenzó con lentas lamidas por todo el largo del miembro de su ahora novio. Con cada gruñido que el hacía, ella se veía más confiada y valiente, por lo que comenzó chupar y tragar con más ímpetu el pene del chico

Eso hasta que sintió como Issei usaba una de sus manos, la cuál había dejado de apretar su trasero, y la llevó hasta su clítoris. Esto provocó que ella soltara un gemido que fue inaudible ya que en ese momento tenía la erección del joven castaño

Por lo que ella decidió subir también un nivel de intensidad, así que conociendo los gustos de su novio la domadora puso el pene entre sus dos grandes pechos y comenzó a darle una paizuri

-Guuuuh! Kiyome...eso se siente...estupendo-gemia Issei dejando de atender por unos segundos la vagina de su novia castaña

-Me alegro de que...aaah...te guste...hmmm...Issei-kun-hablaba Kiyome entre gemidos cuandi sintió como Issei movía su lengua y sus dedos con más ferocidad

La chica sentía que su clímax estaba por llegar. Ella no quería terminar sola por lo que comenzó a chupar la cabeza del pene de Issei cuando este asomaba de entre sus pechos

-Issei-kun...n-no aguanto más...-decía la domadora de cabellos castaños sintiendo su inevitable clímax

-Yo t-también...Kiyome...-advertía también Issei

Con un último grito, ambos se corrieron en la boca del otro. Issei llenó la boca de Kiyome con su semilla y ella también vació sus jugos en la boca de él

Tras llegar al clímax, la pareja se recompuso por unos segundos hasta que Issei vio como Kiyome se movía un poco y quedaba en cuatro, con su bien formado trasero apuntando hacia él

-Vamos...ven Issei-kun-hablaba Kiyome mirando por sobre su hombro con una mirada tierna y de enamorada a Issei

El castaño no pudiendo resistirse al pedido de su novia se posicionó detrás de esta, alineando su miembro con la entrada de ella

-¿Estás segura Kiyome?-preguntaba Issei quien quería comenzar a hacer el amor con su novia domadora, pero quería saber si ella estaba segura de esto

-Claro que lo estoy Issei-kun. Te amo y quiero estar contigo por siempre-hablaba Kiyome levantándose para poder besar en los labios a su novio, acabando en una batalla de lenguas

Una vez que ambos se separaron del beso. La domadora de cabellera castaña volvió a la posición de antes para luego dirigirle una mirada seductora por encima de su hombro a Issei

-Ahora ven. Te necesito aquí mi dragoncito~-decía Kiyome a la vez que movía de forma leve su retaguardia

En ese momento, Issei ya no tardó más y alineó de nuevo su pene con la vagina de su novia y comenzó a introducirlo mientras sus manos se aferraban a la atlética figura de Kiyome

-Mmm...aaah...-eran los gemidos de la joven domadora al sentir como sus paredes eran separadas por el pene de su novio

-Estás t-tan apretada Kiyome-gruñia el castaño que continuaba introduciendo hasta que llegó a una barrera

-Adelante Issei-kun, hazlo-hablaba la chica con un leve tono de nerviosismo en su voz

-Está bien-respondía Issei quién se hizo para atrás y a continuación dio una fuerte estocada para romper el himen de Kiyome

-Aaagh...d-duele...-se quejaba de dolor la Abe

-Lo siento Kiyome. Avísame cuando quier continuar-hablaba con voz suave Issei

En ese pequeño espacio de tiempo. Issei se inclinó hacia delante mientras besaba la nuca y cuello de su novia, a su vez sus manos iban hacia los grandes senos de la tenista. Todo en un intento de aliviarla y distraerla de su dolor

Kiyome al sentir tanto los besos como las caricias y apretones que las manos de Issei ejercían en sus pechos y pezones, no podía dejar de soltar leves gemidos acompañados por el nombre de su novio

-Issei-kun, ya puedes-avisaba Kiyome quién ya se encontraba mejor

Siguiendo las palabras de su novia, Issei aseguró su agarre en la cintura de la tenista y comenzó a darle leves penetraciones

Con el pasar de los minutos, Issei comenzó a tomar más velocidad en sus estocadas, lo cuál, producía un sonido húmedo cuando su cadera chocaba contra Kiyome

-I-issei-kun...más...por favor...-pedía Kiyome a su novio

El chico al oír el pedido de su hermoda novia aceleró más el ritmo de sus penetraciones

-Issei-kun!-gemia Kiyome al sentir como Issei comenzaba a llegar más adentro suyo

-Grr...Kiyome...tu interior se siente tan bien...-hablaba Issei entre gemidos y gruñidos mientras se inclinaba hacia delante y capturaba con sus manos los grandes pechos de la tenista

La chica no pudo evitar que más gemidos salieran de ella al sentir los fuertes apretones de Issei en sus pechos, o el como este jugaba con sus pezones

-Kiyome...yo estoy...a punto de correrme-hablaba Issei quien estaba por sacar su miembro del interior de la domadora

-No! Issei-kun...lo quiero dentro...por favor

-Kiyome...

-Issei-kun hazlo, no te preocupes-hablaba Kiyome sintiendo como su clímax estaba por llegar y como el miembro se hinchaba, listo para vaciar su segunda carga

-Gaah! Tomalo todo Kiyome!-exclamaba Issei vaciando por completo su semen en Kiyome y marcándola como suya

-Kyaaaa!-gritaba la tenista y domadora al sentir la calidez de la semilla de su novio pintando sus paredes de blanco, la vez que ella llegaba a su orgasmo

Luego de unos segundos en la misma posición, el castaño iba a sacar su miembro pero se vio interrumpido por Kiyome

-¿Pensabas que esto se acabaría tan fácil Issei-kun?~preguntaba con voz seductora y cantarina la chica, quién todavía tenía el pene de su novio en su interior y apoyaba sus manos en el definido torso de su novio

-¿Kiyome?

-Esto no ha acabado Issei-kun. Mi orgullo como domadora me lo impide y hoy estoy dispuesto a domar a un travieso dragón~-decía con voz seductora la joven

El castaño, al ver las intenciones de su novia dejó que una sonrisa con un leve toque salvaje se dibujase en sus labios

-Muy bien Kiyome, tu lo has querido. Veamos quién doma a quién-aceptaba el reto Issei, quién ahora estaba sentado en la cama con Kiyome en su regazo

Ambos comenzaron a mover sus caderas en perfecta sincronización para resolver quién sería el domador y quién el domado

Lemon finaliza

Así fue como durante unas horas lo único que se escuchaba salir del apartamento de Kiyome son los gemidos y gruñidos de la joven pareja de novios

Incluso algunos de los vecinos se sonrojaron levemente al oírlos, pero dejaron pasarlo por pensar en que sería un apasionado reencuentro de una joven pareja

Hasta aquí el capítulo de Kiyome, espero que os haya gustado

La siguiente chica que tendrá su capítulo con Issei es...Sona Sitri!

Hasta la próxima!

Pd: Muchas gracias por los 800 seguidores!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro