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CAPÍTULO 5

Después de la batalla que tubo Issei contra Kokabiel el castaño quedó inconciente debido a que forzó a su cuerpo a sobre pasar sus límites, debido a eso y a que sufrió algunos daños a permanecido inconciente por 3 días, durante ese tiempo Rubí y Luise siguieron haciendo su entrenamiento ya que se sintieran como unas inútiles por no poder ayudar al castaño en aquel combate, aunque eran supervisadas por Éleonore para que realizarán de manera correcta los ejercicios, mientras que Cattleya y Siesta cuidaban a Issei, Henrrieta aun permanecía en la academia ya que a palabras de ella se sentía más segura cerca de Issei, aunque también le aviso a su madre lo que ocurrió y que tuviera más cuidado por si apareciera alguna otra persona con malas intenciones.

Ya era medio día cuando Issei comenzó a despertar, pero noto que no se encontraba durmiendo en el sofá, si no en la cama de Luise, al ver hacia un lado pudo ver a Cattleya durmiendo en el sofá y a su alrededor también había unos cuantos animalitos, una escena muy tierna.

Cattleya: veo que despertaste.

Issei: cuando tiempo estuve inconveniente?.

Cattleya: 3 días, durante todo ese tiempo todas estuvimos preocupadas por ti, incluso la princesa quiso quedarse a cuidarte, pero podimos convencerla para que no lo hiciera.

Issei: entiendo.

Cattleya: dentro de poco Luise y Rubí vendrán para ver que estés bien.

Issei: me alegra saber eso.

En eso un pequeño cordero intenta subir a la cama, por lo que Issei lo ayudo a subirse, como agradecimiento el cordero le comenzó a lamer el rostro y eso le daba cosquillas.

Cattleya: creo que mejor salgo para que puedas cambiarte de ropa.

A lo que Issei asintió y puso al cordero en el piso para levantarse, cuando la peli-rosa salió de la habitación pudo levantarse de la cama y lo primero que hizo fue verse en el espejo, valla sorpresa que se llevó al ver su reflejo.

Ahora era peli-rojo al igual que sus ojos ya no eran de color miel, ahora eran de color café rojizo, además de que su musculatura había aumentado un poco, pero noto que tenía una cicatriz en su pecho, pero prefiero vestirse, ya una vez cambiado se sentó en el sofá.

Issei: ya puedes pasar.

La peli-rosa abrió la puerta y se fue a sentar a un lado del peli-rojo, pero no sabían como iniciar una conversación.

Cattleya: me alegra ver que estés bien.

Issei: gracias por preocuparte por mí.

Cattleya: no solo fui yo, mi hermana Luise, Rubí-san, esa maid de nombre Siesta y la princesa nos preocupamos por que no despertabas.

Issei: creo que se debe a que mi cuerpo sufrió un gran cambió físico y como fue de manera repentina tardó en adaptarse, aunque me alegra que desperté el día de hoy.

Cattleya: hoy es un día especial?.

Issei: hoy se puede hacer el ritual de invocación de familiares y estoy seguro de que podré traer a cierta persona.

Cattleya: tu primera novia, verdad?.

Issei: es correcto, quiero traerla lo más pronto posible.

En eso de su camisa saco un collar con forma de corazón, solo que de un lado era café y el otro lado era azul, pero al abrir el collar se ve la foto de una mujer peli-celeste muy hermosa.

Cattleya: vaya que si es hermosa.

Issei: si que lo es y la extraño mucho.

Cattleya: ahora que recuerdo, ese tal Kokabiel mencionó que tienes un hermano, que pasó para que te enojaras cuando lo mencionó?.

El peli-rojo volteo a ver hacia el techo mientras daba un suspiro y recuerda el cambio que tuvo su hermano cuando se unió a lo sobre-natural.

Issei: si hubo algunos problemas con nosotros, más que nada por el hecho de que descubrimos que existe el mundo sobre-natural, mi hermano entró con el propósito de conseguir un gran harem, mientras que a mi no me preguntaron, me uní forzadamente, solo para saber si tenía algo especial.

Cattleya: y qué tenías tú y tu hermano?.

Issei: mi hermano resultó ser el portador de una sacred gear muy poderosa, mientras que a mí solo descubrieron que no tenía nada, incluso mis reservas de magia eran casi nulas, lo que conllevó a que me tratarán como a un don nadie.

Cattleya: pero gracias a eso conociste a Tiamat-san, Rubí-san y de seguro a más personas, verdad?.

Issei: es verdad, una de esas personas es mi amiga de la infancia Irina, de hecho cuando éramos niños creía que era un chico, otra persona es Tsubaki-san ella siempre me defendía cuando querían golpearme por cosas que no hice, también Rossweisse-san, ella tenía un autoestima muy baja cuando nos conocimos, ya que en su anterior trabajo se burlaban de ella por no tener novio, pero le enseñe a ignorar lo que los demás dicen, también está Griselda-san, ella me enseñó todo lo que se en el manejó de la espada.

La peli-rosa estaba alegre al saber que Issei tenía más personas con las que podría contar, ya que vió que el la paso peor que su hermanita, pero luego vió como el peli-rojo bajo la mirada con una expresión decaída.

Issei: aunque creo que deben estar tristes por que creen que estoy muerto, ojalá pudiera comunicarme con alguna de ellas y decirles que estoy bien.

La peli-rosa tenía curiosidad en saber cómo el ex-castaño supuestamente murió, pero la puerta fue abierta y se escuchó como una charola con agua caía al suelo.

Rubí: Issei!.

La rubia se arrojó a los brazos del peli-rojo, mientras que Luise y Siesta se acercaban muy aliviadas al ver al peli-rojo ya despierto.

Issei: ya, ya Rubí, estoy bien, creo que solo necesitaba descansar por el cambio forzado que sufrió mi cuerpo, pero ahora me siento mucho más fuerte.

Rubí: en verdad?.

Como respuesta recibió un beso en los labios que la calmó, pero no notaron como Siesta y Luise tenían una cara sería ya que se sentían algo celosas, aunque a Cattleya tenía una hermosa sonrisa por la expresión de su hermanita, aunque ella también sentía cierta atracción por el peli-rojo, ya que se sorprendió de la determinación y ferocidad que demostró en la pelea.

Issei: por cierto de que me perdí mientras no estaba consciente.

Luise: luego de tu pelea descubrimos que la ladrona fouquet entró a la bóveda de la academia y robó el báculo de la destrucción.

Issei: ya la atraparon o necesitan de mi ayuda?.

Rubí: no te preocupes, ese mismo día se formó un grupo para atrapar a esa ladrona.

Luise: los que fuimos fueron, Kirche, Thabita, la señorita Longueville, yo y Rubí.

Issei: no tuvieron complicaciones?.

Rubí: cuando llegamos al lugar no, pero cuando ya teníamos ese dichoso báculo fouquet apareció con un Golden de tierra.

Luise: fue algo complicado enfrentarnos al Golden, pero Rubí lo destruyó usando el báculo de la destrucción.

Rubí: lo curioso es que la ladrona resultó ser la señorita Longueville.

Issei: la secretaria del director, la de cabello verde.

Rubí: esa misma.

Luise: aunque Rubí dijo malas palabras cuando la derrotó.

Issei: que fue lo que dijiste?.

Rubí: prometes no enojarte.

Issei: lo prometo.

Rubí: lo que dije fue; 'en tu cara zorra'.

El peli-rojo solo negó con la cabeza, mientras que la rubia estaba muy avergonzada.

Issei: Rubí yo no hubiera dicho eso.

Luise: ves.

Issei: yo hubiera dicho 'CHINGA TU PUTA MADRE DUENDE VERDE'.

Las chicas tenían una cara un tanto curiosa.

Pero sin saberlo la princesa Henrrieta y Agnes venían a ver el estado de Issei, pero llegaron en el momento en el que el peli-rojo dijo esa grosería.

Un poco más tarde; Issei, Luise, Rubí, Henrrieta, Agnes, Siesta, el director Osmond, Cattleya, Éleonore, Kirche, Thabita y el profesor Colbert estaban reunidos en el patio de la academia.

Tenían curiosidad sobre que tipo de familiar imvocaria el peli-rojo, aunque Rubí ya se hacía una idea.

Issei:

Tu aquel familiar,
que se encuentra dentro de mi mente y corazón,
responde a mi llamado y brindame tu ayuda con tu hermosa sonrisa.

Yo te invocó

Al terminar el cántico apareció un fuerte brillo que cegó a los presentes, cuando se terminó el brillo se podía ver la espalda de una mujer peli-celeste la cuál poco a poco comenzó a girar su rostro, pero antes de que dijera algo escuchó cierta voz que creyó no volver escuchar.

Issei: Tiamat estás bien?.

La peli-celeste no contestó, en lugar de eso miró en la dirección de dónde vino la voz, al ver de quien se trataba se llevó una gran sorpresa, era aquel joven del que se había enamorado y le habían dicho que murió en combate, pero ahora lo tenía de frente, puede que su cabello y ojos cambiarán de color, pero su rostro y aura demostraba que era el mismo.

Con pasos temblorosos la dragona se acercó al chico, cuando estaba de frente con extrema delicadeza colocó una de sus suaves manos en una de sus mejillas, era cálida como recordaba, luego sintió que el peli-rojo puso su mano sobre la de ella y comenzó a hacer círculos con su pulgar, solo una persona que ella conocía hacia eso.

Issei: soy yo Tiamat, no sabes cuánto te extrañé y me hubiera gustado darte tu regalo en persona.

La peli-celeste ya no tenía dudas, el era su Issei, su amado Issei, por lo que lo abrazo fuertemente mientras lloraba.

Issei: ya, ya, tranquila, ya estoy contigo.

Tiamat: esto no es un sueño o una ilusión?.

Issei: si fuera asi entonces no podría hacer esto.

El peli-rojo tomó con delicadeza el mentón de la peli-celeste y le dió un tierno beso.

Sin saberlo un pequeño brillo los cubrió, así sellando el pacto de invocación, aunque algunas chicas que estaban presentes tenían ciertos celos, aunque no se dieron cuenta, solo Rubí estaba normal ya que no era novedad para ella.

FIN DEL CAPITULO 5

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