Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

CAPÍTULO CINCO

<UN TUNEL GRIS Y FRÍO>


     Podría quejarme respecto a lo que ha sucedido en los últimos días, jamás imaginaría algo así, solo pensé que se trataba de un simple campamento, con chicos normales y guías haciendo actividades acá y allá, quizás tendría el tiempo de conocer a un chico guapo e intercambiar números, escribirnos y planear un reencuentro unos meses después, eso sería algo normal, pero claro, el anuncio decía aventureros y valientes, ¿Qué podría significar? La verdad no lo sé, pero les puedo asegurar que nunca, jamás iba a imaginar que me encontraría caminando por un túnel gris y frio bajo la amenaza de morir, donde sé bien que del otro lado de este largo túnel no abra más que peligros, muy dentro de mi está el deseo de que solo sea un simple juego mental y del otro lado no haya nada.

      El túnel es gris, frío y una corriente de viento viene de frente indicando que hay alguna salida, aunque ya hemos caminado más de cuatro horas, paramos a comer algunas provisiones que venían en nuestras mochilas y continuamos. Junto a mi Caroline mi prima, alta morena, de cabellos largos y vestimenta seductora, no se parece mucho a mi en cuanto a rasgos personales, ella es activa, deportiva, entrometida y entusiasta, yo también puedo serlo pero no me parece correcto hacerlo siempre.

      Trajo consigo un chico, Gus, ya lo conocía de hace un par de días, un muchacho corpulento de piel blanquecina y ojos verdes, cabello largo y ropa de hípster. Tuve la mala suerte de conocerlo durante su acto sexual con mi prima, justo al lado de la cama donde yo dormí en las cabañas.

      Y el chico trajo a su hermano, Archie, de rasgos parecidos pero, delgado, tiene un tatuaje en su mano derecha algo parecido a un dragón, su vestimenta de hípster, con lentes grandes y cuadrados y un peinado moderno, no había soltados los audífonos de sus oídos desde que entramos a la cueva, es guapo en gran manera y sus ojos son hermosos, pero, vaya lugar en el que estos cuatro jóvenes se conocieron, en un túnel gris y frio.

— ¿Les parece que Los Coyotes sea un buen nombre para nosotros? —rompió el silencio Gus desde unos metros atrás, sus palabras rebotaron en las paredes un par de veces antes de apagarse.

—Me parece que hemos elegido bien —contesto mi prima—, era eso o Los Chacales.

—Siento pena por ese otro equipo que escogió ese nombre —dije cabizbaja—, y no lo digo por el nombre, es que, verán, allí estaba ese niño "manguito", y el negro del afro me parece un tipo con el que no se puede hablar, además el otro chico... como se llamaba...

—¡Anthony!

—Si Caroline, Anthony. Hablé con él en un momento cerca de la fuente, no parece un muchacho con muchos deseos de éxito —voltee a ver a Gus y Archie—, nosotros no representamos el equipo más apto ni fuerte, pero creo que ellos tienen muchos problemas personales con los que lidiar.

—¡Somos el tercer lugar! —respondió Archie quien no había hablado durante todo el camino.

—¡Amigos! ¡Amigos! —Dijo Caroline embozando una gran sonrisa—, aún no hemos realizado la primera fase del juego y ¿y ya estamos de tercer lugar? No sean tan pesimistas. Estoy segura que daremos más pelea de la que creeríamos y conmigo de Líder nada podrá fallar.

      Ninguno respondió, solo se escuchó una pequeña risa sarcástica de Archie, fuera de eso, no se comentó nada. La realidad es la realidad, no somos tan bueno, no sé nada de alpinismo y mi prima tampoco, Archie y Gus creo que saben más acerca de The Black Keys o FUN que de alpinismo o si quiera algo que nos pueda ser útil.

      El camino fue silencioso y duró un par de horas más, no sin escuchar las quejas de Gus o las mías en el túnel de ecos exagerados, el frío apenas me permitía moverme por el pasillo y calaba hasta los huesos, los labios me templaban y de tener un espejo a la mano los hubiese visto morados tales como veía los de Caroline. Los chicos por otro lado no se inmutaban ante el frío no sé de donde son pero parece ser su habitad natural, su especie debe ser de aquellas que hacen ángeles en la nieve y salen a recoger el periódico con una toalla ante el frio insoportable del exterior de una cálida casa. Nosotras en cambio somos latinas, donde el sol viene de visita cada día, y saluda desde muy cerca a sus anfitriones, donde en las playas el sol te masajea y te ayuda a echarte protector solar que no funciona tanto como debería, doy gracias a Dios por mi piel morena, de tener la piel de Archie y Gus tendría que usar protector en todo momento. Sobre todo la zona de donde provengo.

      Las pisadas sonaban arrastradas ante el piso seco y duro y más que eso solo se escuchaba el pequeño compas proveniente de los audífonos de Archie.

—¡Esperen! —advirtió Gus, corrió hasta nosotras, no indicó que esperáramos—, Archie! ¿Vez lo que yo veo?

—Se escucha como una tormenta. —Respondió este desde atrás—, pero aun no puedo verlo ¿acaso tu puedes?

—Muy gracioso, estoy seguro de que lo es —volteo a nosotras—, mujeres, tengo una buena y una mala noticia, la buena es que estamos muy cerca de la salida, la mala es que les aseguro que hay una tormenta allí afuera y no se escucha nada amigable. Caminemos, esto está llegando a su fin.

      Minutos más tarde copos de nieve comenzaron a bailar a nuestro alrededor, el viento era aún más fuerte y frio de lo que era en un comienzo, en el suelo una alfombra blanca se hacía cada vez más gruesa mientras caminábamos. El pasillo se hizo inclinado, unos grados hacia arriba, — ¡no puedo continuar¡ — pensé pero, de que valdría volver, detrás no había más que cinco horas de túnel y al final una puerta piedra con el cerrojo del otro lado —¡la única salida está hacia delante! —, abrazada a mi prima caminamos hasta que la inclinación se convirtió en una bajada y al final de ésta una salida de la cual soplaba un amargado y frio viento. Solo se veía oscuridad.

—Me acercaré primero, debe de haber alguna forma de salir, de lo contrario tendremos que acampar acá.

—No te atrevas a ir solo a ese lugar Gus —dijo Caroline con voz amenazadora, por unos segundos dejó el frío y el temblor de lado—, si hay que ir allí iremos todos, si hay que morir moriremos todos.

—¡entiendo! Eres la que manda.

      Gus extendió su mano hacia Caroline de forma amigable, ella tomo con su otra mano la mía y antes de notarlo Archie tenía su mano a mi otra mano, caminamos semi agachados a la ranura alargada en forma de triángulo que nos esperanzaba con ser una salida.

— ¿Puedes ver algo? —le pregunto Caroline a Gus al momento de estar en la ranura, no sin alzar un poco la voz.

—Está muy oscuro, pero puedo ver unas luces, están a unos 200 metros, creo que si corremos podríamos alcanzarlas.

— ¿Archie? ¿Piensas lo mismo?

—No será fácil, y menos para ustedes —respondió quitando de sus oídos lo audífonos—, pero si podemos lograrlo.

—Bien hay que ir. —sentenció Caroline.

      Gus dio un paso al frente seguido de Caroline que me halo fuertemente, al cruzar sentí un gran retorcijón de estómago, como el que da cuando se está en una montaña rusa, no un montaña rusa pequeña no, una montaña rusa grande llena de giros, alto y bajos. Escuche a Archie decir detrás de mí — ¡eso no fue normal! —, no lo fue, no fue para nada normal y fuera la tormenta arremetía contra nosotros como las holas de una playa contra un niño de cinco años. Corrimos sin soltar nuestras manos y con el mayor esfuerzo posible, a nuestro alrededor no había más que nieve y la luz de frente.

      Sentí la mano de Caroline sujetar con fuerza la mía, su miedo fue mi miedo. Siempre soñé con viajar a algún país con navidades blancas, usar guantes gruesos y bufanda cálida, tomarme un chocolate caliente frente a una chimenea llameante. Hacer un ángel en la nieve.

      Por el contrario corría por mi vida hacía una luz que podría ser cualquier cosa, pero sin dudas una esperanza. De repente Gus tropezó con un bulto negro a sus pies y todos caímos como piezas de dominó, al levantarnos, la luz que habíamos estado siguiendo no estaba, con la linterna enfocamos detrás para buscar la cueva de donde salimos, tampoco estaba, en su lugar, solo habían árboles, pinos que no habíamos visto en ningún momento, volvimos de nuevo a ver si divisábamos la luz, y para nuestra sorpresa el lugar se había llenado de árboles. Altos y esparcidos, no abultados.

—De verdad, esto no es para nada normal amigos —dijo Archie, haciendo notar un terror en ascenso.

—MIREN —gritó Gus señalando el bulto con el que habíamos tropezado—, parece equipo de nieve.

—No tenemos tiempo para esto Gus —Grite llena de miedo.

—Hay que revisarlo —respondió Caroline—, prima, Archie, ayuden.

      Entre viento y nieve chocando contra nuestras caras, sacamos de la nieve lo que parecía ser un trineo abandonado, de madera negra y desgastada. Nada funcional. Para nuestra sorpresa tenia consigo algunos artículos que los serían de mucha utilidad. Gus saco unos bultos pequeños y nos los entrego. Nos indicó que nos los colocáramos.

—Son trajes térmicos para el frío, es una suerte que estén acá botados.

      Lo desdoblé y me lo coloque encima de la ropa que tenía, apenas introduje mi pierna izquierda sentí su cálido interior, no quería otra cosa que poder abrigarme de este asesino frio.

      Era color azul y en el yo parecía un peluche regordete. Me coloque otros guantes mas gruesos y por ultimo un gorro, un pasa montañas. Si les digo que duré colocándome esto les estaría mintiendo, no habría pasado más de cinco minutos, la desesperación puede hacer cosas maravillosas.

— ¡HEY! —Dijo Archie— son mantas térmicas, muchas, creo que eran comerciantes.

—Excelente —contestó Caroline—, Gus y Archie ¿pueden hacer alguna clase de refugio con eso? —Ellos asintieron—, bien eso haremos, prima tu y yo le apoyaremos.

      Gus se acercó a un par de árboles que tenían un espacio de por medio de dos metros, le indicó a Archie que buscara las estacas del trineo, y comenzaron a colocarlas en paralelo con los árboles, tomo una de las mantas y la coloco de un lado de los árboles sujetándolo del suelo con las estacas y amarrando el otro extremo en el par de pinos, hizo los mismo del otro lado, luego tomo una más y la lanzo por encima de los anteriores, formando una especie de carpa improvisada.

      Para los laterales tomos dos mantas más y las coloco a cada lado, rodeando el pino y haciendo caer las esquinas de las mantas hacia la carpa, la cual era azotada por el viento inclemente. Caroline y yo no hacíamos nada, solo miramos acurrucadas en un árbol abrazada una contra la otra.

      Acto seguido tomo un pedazo de madera y comenzó a arrimar la nieve hacia las bases, pisando con esta la manta para que no se filtrara viento por allí. Hizo señas de que entrásemos y eso hicimos.

—Bien, solo faltan algunos retoques por si esto se vuelve peor —dijo con la voz temblorosa—, tú y la jefecita esperen un par de minutos acá dentro.

      Un minuto después apareció su mano con otra manta — ¡cubran el piso con esto! —. Lo hicimos y nos acurrucamos, el lugar era estrecho pero entramos los cuatro apretados y calientes. El viento azotaba la tela y no pude evitar sentir que en cualquier momento el viento arrastraría la carpa dejándonos a la intemperie de nuevo.

—Hicieron un gran trabajo Chicos —dijo Caroline—, lástima que no podré recompensarte Gus.

—Ya habrá tiempo para eso prima—dije con la voz temblorosa aún.

      Hablamos durante un par de horas más, intentando no quedarnos dormidos y manteniendo el poco calor corporal que teníamos. Uno a uno nos dejamos llevar por el sueño y el cansancio, y yo no paraba de preguntarme donde estábamos, que sería para el día siguiente.

      Ese no era un lugar normal y aunque parece extraño en menos de lo que imaginaríamos ya nos habíamos acostumbrado a aquello y no habría nada que nos sorprendiera al día siguiente, aunque las expectativas no escaseaban.

     Dormí y soñé con un túnel gris, frio y una corriente de viento helado.



_________________________________________________________

     Comienza la aventurá, tarde cuatro capitulos en comenzar la verdadera historia, el verdadero juego en la isla, pero quería asegurarme de que todos los personajes o en su mayoria estuviesen bien presentados, y que no quedara dudas acerca de la personalidad de cada uno de estos.
     Sin mas que agregar por favor comenten, hagan sus críticas y no olviden darme un voto, eso me anima mucho, sin importar si son uno, dos o los que sean.

Próximo Capítulo: Jhohan: Criaturas Extrañas.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro