CAP - 4 Primera misión.
"Entrada del pueblo, Vellcog"
Luego de haber escapado de aquel problema en el bar, ambos chicos volvían a su vestimenta habitual. Emmet le devolvía las hojas a Lyman y este ultimo le devolvió su lazo rojo.
Emmet: ¿Tienes alguna idea donde podríamos empezar a buscar al ladrón?
Lyman: Creo que primero deberíamos notificar a los guardias.
El joven de anteojos señala la entrada de la muralla junto a la caseta de Guiller.
Emmet: Esta bien, pero no le muestres el antifaz.
Lyman: ¿Eh?
Emmet: Larga historia.
Ambos chicos se acercan casualmente a la caseta e inevitablemente escuchan una discusión.
Joven: Ya no estaba, salí al patio y no había rastro alguno.
Guiller: Que extraño, es la segunda vez en el día que me notifican sobre el robo de prendas...
Joven: ¡Pues haga algo!
Guiller: Esta bien, notificare la alerta...
Emmet reconoce la voz del joven que furioso abandona la entrada del pueblo con dirección a la misma propiedad donde tomo prestada las prendas que lleva puesto. Para pasar desapercibido decide esconderse, Lyman ve esto también se esconde.
Lyman: ¿Qué hacemos escondidos?
Emmet: Eh... (No puedo decirle que yo soy el ladrón de ropa). Mi sentido arácnido
Lyman: ¿Tu que?
Antes de que el joven aprendiz de mago pudiera seguir preguntando, una voz conocida los sorprende por su proximidad.
Mesero: Guardia, quisiera notificar a unos bribones que se fueron sin pagar.
Guiller: ¿Otra vez? Pero siempre sucede eso en tu bar.
Mesero: ...
Ambos jóvenes aguantaban la risa por tal verdad revelada.
Guiller: Esta bien, también lo notificare.
Mesero: Esta vez tengo sus nombres y sus apariencias.
Guiller saca una hoja y un lápiz mientras el mesero sigue hablando.
Mesero: Fulano y Mengano, Uno lleva una bufanda roja en el cuello de su capa y el otro un antifaz verde.
Lyman: (Que bueno que Emerald nos hizo parecer otras personas)
Guiller: ¿El del antifaz verde estaba desnudo?
Emmet: ...
Mesero: ¿Qué? No, estoy seguro que tenia ropa.
Guiller: Pues estas de malas, al parecer los antifaces están de moda hoy en día. Vi a un anciano usando uno también, decía algo sobre verse mas joven.
Emmet: Debe ser el anciano que me vio entrar al pueblo.
Mesero: Me da igual, espero los atrape.
Guiller: Si, no se preocupe.
El mesero se marcha enojado mientras los dos jóvenes suspiran aun estando escondidos.
Guiller: Ustedes dos. ¿Qué hacen escondidos?
Lyman y Emmet: ¡Ah!
Ambos salen avergonzados e impresionado por haber sido detectados por el guardia.
Lyman: Lo siento Guiller, supongo que no queríamos hacer mas incomodo todo el asunto de las quejas.
El guardia sonríe al ver al joven de anteojos.
Guiller: Eras tu, Lyman...
El guardia ve a Emmet con curiosidad.
Guiller: ¿Quién es tu amigo?
Lyman: Ah es cierto, el es Emerald.
Emmet: Un gusto.
El hombre abre sus ojos como platos.
Guiller: Esa voz... ¿No eres tu el loco de esta mañana?
Emmet: Ah...
Lyman: (No entiendo que sucede, pero lo mejor será ayudar a Emerald). Puede que si sea ese loco je.
Emmet: ¡Oye!
Lyman: Pero todo se debe a un golpe que se dio esta mañana, lo estuve buscando por todos lados.
Emmet: (Oh, ya entiendo).
El guardia mira juicioso a Lyman, y decide creerle.
Guiller: Cuida mejor a tu amigo, me dio muchos problemas estando desnudo.
Lyman: ¡¿QUÉ?!
Emmet: Es que fue un golpe muy fuerte, recuerda.
El guardia se ríe y relaja sus hombros.
Guiller: ¿Entonces solo viniste a presentarme a tu amigo?
Lyman: No, vengo a notificar un robo.
Guiller pone cara de cansado de la vida, lo cual hace preocupa a los jóvenes.
Lyman: Mi saco de monedas se me fue arrebatado saliendo del mercado.
Guiller: Pero que pasa, útilmente hay robos de todo tipo...
Lyman: Lamento oír eso...
El guardia toma asiento en un pequeño banco que había al lado de la caseta.
Guiller: Los demás guardias están de ociosos y yo no puedo abandonar mi puesto. Por lo que no creo encontrar al responsable de tu robo pronto... Lo siento.
Lyman: Descuida...
Emmet: Tengo una idea.
El joven de anteojos y el guardia voltean a ver al sonriente chico.
Emmet: ¿Qué le parece si nosotros lo ayudamos?
Guiller y Lyman: ¿Eh?
Emmet: Podríamos convertirnos en guardias temporales e investigar sobre los robos.
El guardia mira al nervioso Lyman y al entusiasta Emmet, pensando en la situación. Ciertamente es la mejor opción.
Guiller: Esta bien.
Lyman: ¿En serio?
Emmet: ¡Oh si! Nuestra primera misión como aventureros.
Guiller: ¿Son aventureros?
Lyman: Aun no tenemos permiso, pero por algo se empieza ¿No?
El guardia les da una palmada fuerte en la espalda de cada uno y ríe con fuerza.
Guiller: Antes de que se marchen, tomen esto.
Guiller saca de la caseta un par de pecheras de cuero con hombreras de metal.
Guiller: No es mucho, pero es lo poco que tiene la guardia del pueblo a su disposición.
Ambos jóvenes ven las pecheras y no dudan en ponérselas.
Lyman: Muchas gracias Guiller.
Guiller: No es nada.
Emmet: ¡Armadura nivel uno obtenida!
Ambos nativos de este mundo voltean a mirar extrañados ante el grito del transportado.
Emmet: Es un grito de buena suerte.
Guiller: Bien, se los encargo muchachos. Cualquier cosa estaré siempre en este lugar.
Lyman y Emmet: ¡Si!
Los dos guardias temporales del pueblo de Vellcog caminan rumbo a encontrar pistas, para encontrar ladrones.
"Pueblo Vellcog"
Ambos jóvenes caminaban por la zona comercial del pueblo.
Lyman: ¡Espera un momento!
Emmet: ¿Sucede algo?
Lyman: Los ladrones de comida somos nosotros, ¿Cómo vamos a buscarlos?
Emmet: Fácil, no lo haremos. Pasaremos de esa misión.
Lyman: Entonces nos queda el ladrón de sacos y el de ropa.
Emmet: Ah... Dejemos en paz al de la ropa.
El joven esmeralda se acomoda la pechera de cuero esperando que haga irreconocible la prenda verde.
Lyman: Es cierto, que tanto daño puede hacer un ladrón de ropa. (Llevar armadura es mas incomodo de lo que creí)
Emmet: Entonces solo queda...
Lyman y Emmet: El ladrón de sacos.
Ambos muchachos buscan con la mirada algún sospechoso.
Emmet: Si fuera un ladrón, ¿Qué harías luego de robar un saco de monedas?
Lyman: ¿Correr?
Emmet: No es esa la respuesta que buscaba...
Lyman: ¡No! Mira...
El joven mago señala a un hombre encapuchado que corre sin parar, detrás de el un anciano trataba de seguirle el paso.
Anciano: ¡Ladrón! ¡Detengan al ladrón!
El anciano cae al suelo debido a su condición física, nadie parece querer frenar al ladrón.
Lyman: ¡El ladrón!
El joven de anteojos es detenido por su compañero tomándolo del hombro.
Emmet: Ayudemos primero al anciano.
Ambos se acercan para ayudar a ponerse en pie al anciano.
Emmet: ¿Se encuentra bien?
Anciano: El ladrón... el ladrón.
El anciano trata de ponerse de pie, pero falla en el intento. Afortunadamente los dos jóvenes lo sostienen de ambos lados.
Anciano: Ay mi pie...
Emmet: ¿Puede decirnos donde esta su casa?
Anciano: ¿Pero el ladrón...?
Lyman: Esto es mas importante ahora.
El anciano señala una cabaña grande con un gran letrero arriba. Otra vez Emmet solo ve símbolos, pero en menos de un segundo forman la palabra "Aguas termales". Los dos chicos llevan al viejo adentro del edificio, luego lo colocan con cuidado sentado en el suelo.
Anciano: Gracias...
Emmet: Aun no nos de las gracias.
Lyman: ¿Ahora que hacemos?
Emmet: Déjeme ver un momento... ¿Señor...?
Joe: Joe, mi nombre es Joe.
Mientras el joven esmeralda hace conversación, procede a quitarle el calzado de cuero lentamente.
Emmet: Soy Emerald y el Lyman.
Lyman mira expectante como Emmet revisa con la vista el tobillo del anciano.
Emmet: Es un esguince, la próxima vez no corra sin hacer calentamiento.
Lyman: ¿Esto puede ayuda?
Lyman le muestra una hoja medicinal a Emmet, este se sorprende pues nunca había usado alguna.
Joe: ¿Una hoja medicinal?
Emmet: Tu tienes mas experiencia usándolas Lyman, apóyame.
Dicho y hecho, el joven mago busca una olla y la llena de agua. Comienza a hervir las hojas para desinfectarlas mientras Emmet busca algo de hielo.
Emmet: ¿Tiene usted hielo?
Joe: ¿Eso es lo que buscas? Debe estar en el patio trasero.
Emmet abre la puerta hacia el patio y ve una estructura de ladrillos en el suelo.
Emmet: Como se saca el hielo en esa cosa.
Lyman nota que su amigo no sabe sobre muchas cosas, así que termina de hervir las hojas y le da la olla a Emmet.
Lyman: Traigo el hielo, tu prosigue con tu plan.
Emmet saca las hojas y espera que se enfríen.
Joe: No es necesario todo esto.
El anciano trata de disimular su dolor, pero su cara lo delata.
Emmet: De donde vengo, esto con un poco de hielo sanaría en un mes.
Joe: ¿No eres de por aquí?
Lyman entra trayendo hielo y se une a la conversación.
Lyman: Ese tipo de daños sanan en una semana con las hojas medicinales.
Emmet: Es bueno oír eso, pero estoy pensando algo mejor.
Lyman: Si tuviera magia de curación...
Joe: No te lamentes jovencito... ¡Ah! frio...
Emerald pone el hielo en la zona afectada y luego trata de que las hojas estén en la misma temperatura que el hielo.
Emmet: No te preocupes Lyman, juntemos ambas técnicas a ver que pasa.
Una vez el hielo baja la inflamación del esquince, el joven envuelve el tobillo con la hoja medicinal.
Emmet: ¿Así se coloca?
Joe y Lyman: Si.
Debido al tratamiento anterior con el hielo, las hojas curan instantáneamente el daño.
Lyman y Emmet: ¡Funciono!
Joe: Ya no duele...
El anciano se pone de pie y da un pequeño salto,
Emmet: Wow... Tranquilo anciano.
Joe: Me siento mucho mejor que antes de lesionarme. Es casi tan efectivo como mis aguas termales.
Emmet: Siento que olvidamos algo...
Joe, Lyman y Emmet: ¡El ladrón!
El joven esmeralda ve por la ventana como el sol empieza a ocultarse.
Emmet: Debemos conseguir una linterna...
Joe: Un momento. ¿Piensas a salir a buscar al ladrón en la oscuridad?
Emmet: Es nuestro deber después de todo.
Lyman: Emmet, El señor Joe tiene razón. Además, si el ladrón intenta salir del pueblo estoy seguro que Guiller lo atrapara.
Emmet: Buen punto. (Pero la muralla ni siquiera encierra todo el pueblo).
Mientras el joven ponía su típica cara de pensar, el anciano preparaba algo en una tetera.
Joe: ¿Por qué no se quedan a tomar un poco de té? Es la única forma que tengo para agradecerles.
Lyman: Gracias, pero creo que debería ir a una posada...
Emmet: ¿Con que dinero?
Emerald le recuerda a su amigo la mala suerte que tuvo este día.
Joe: ¿No tienen donde quedarse?
Lyman: Pues yo ya no...
El joven de anteojos agacha la cabeza avergonzado por lo ocurrido, mientras el anciano le da una taza de té caliente.
Emmet: Yo pensaba acampar a las afueras del pueblo. (Por que no tengo donde caerme muerto, ja).
Joe: Bueno, si quieren pueden usar aquel cuarto.
El anciano señala una puerta que había pasado desapercibida, a su vez le da una taza de té a Emmet.
Emmet: ¿En serio? (Al fin el karma esta funcionando).
Lyman: Es usted muy amable, ¿Pero no es malo confiar en unos completos desconocidos?
Joe: Puede que sea así, pero ya me han robado todo lo que tenia...
Emmet: Es cierto, que fue lo que ese ladrón le robo.
El anciano camina hacia su habitación y abre la puerta dejando ver un pequeño altar con una foto.
Joe: El anillo de mi difunta esposa...
Lyman y Emmet: ...
El joven mago siente una gran tristeza por las palabras del anciano, pero Emmet se toma el té caliente mientras que la fría noche empieza. Luego de esto el aventurero esmeralda habla como si no hubiera presenciado una escena tan triste.
Emmet: Así que esta es una casa de aguas termales ¿Eh?
El anciano quien aun miraba la fotografía del altar vuelve a la realidad rápidamente.
Joe: Esta en lo correcto, son las mejores de todo el pueblo y posiblemente de todo el país.
Lyman: (Emerald cambio de tema, ¿Sera que no noto lo serio del asunto?)
Joe: Antes lo usaban aventureros de todos lados para refrescarse y sentirse como nuevos.
Emmet: Entonces entrare.
Ambos oyentes abrieron los ojos ante estas palabras.
Lyman: Pero Emerald, no tenemos dinero.
Joe: Oh, no se preocupen-
El joven interrumpe al anciano.
Emmet: Lo sé, es por ello que como compensación... Traeré ese anillo devuelta a su lugar, cueste lo que cueste.
Emerald se saca la armadura y la coloca sobre la mesa, le sonríe al anciano y entra a la entrada de las aguas termales.
Emmet: (¿Cómo se usan estas cosas?)
El joven de anteojos se queda hablando afuera con el anciano.
Joe: ¿No son de por aquí verdad?
Lyman: Yo vengo del este. Emerald... No se de donde vendrá...
Joe: Parece confiable.
Lyman: Lo es. (Aún que...)
Lyman observa como el anciano alista sus cosas para irse a su habitación.
Lyman: Lamento lo de su anillo, lo recuperaremos.
Joe: Tranquilo. Su entusiasmo fue tan grande, que me da seguridad.
El joven de anteojos se acerca a la entrada de las aguas termales mientras ve al anciano entrar a su habitación.
El joven esmeralda se encontraba pensando dentro de un pequeño lago hecho con piedras que parecían azulejos, el agua caliente era transportada por un sistema de tuberías tan arcaico como confuso para su lógica extranjera.
Emmet: (Mantén una sonrisa para darle seguridad a todo el mundo...)
Emerald recordaba palabras, palabras que se las dijeron cuando el respondía al nombre de Emmet.
Lyman: Hola.
Emmet: ¡Ah! Hijo de la fruta, no me asustes así.
El joven de anteojos usando una toalla estaba frente a el, era posible haberlo visto entrar e incluso escuchado. Pero Emmet estaba tan sumergido en sus recuerdos que ignoró todo lo que pasaba, incluso no noto que su amigo entro al mismo lugar que el.
Lyman: Emerald.
Emmet: ¿Si?
Lyman: Desde que te conocí he visto lo confiable que eres, pero también dices mentiras.
Emmet: No las veas como mentiras, son más como bromas. Créeme, no es como si me gustará mentirle a la gente.
El joven mago se quita los anteojos dejando ver sus ojos serios y llenos de inseguridad.
Lyman: ¿De dónde vienes...?
Emmet: ...
Lyman: Lo siento, es solo que-
Emmet: Aún no estás listo para saberlo, jajajaja.
Lyman: ¿Eh? ¿Por qué no lo estaría?
Emmet: Porque te sigue sorprendiendo cada cosa que desconozco, y mientras eso sea así.
Lyman: ¿No me lo dirás?
Emmet: Primero ayudemos al viejo, luego te responderé a todo lo que quieras.
Lyman: Me parece bien.
Ambos se quedan en silencio un momento, Lyman disfrutando del agua caliente y Emmet incómodo.
Lyman: ¿Sucede algo?
Emmet: Nunca había entrado a unas aguas termales.
Lyman: ¡Ay por favor! Ahora dirás que no había esto de dónde vienes.
Emmet: Si había, pero nunca me lo pude permitir.
Lyman: ...
El joven mago se imagina lo peor al escuchar eso, llegando a pensar que Emerald era de la calle. Lo cual es un casi acierto.
Emmet: Por eso no sabía que había toallas...
Lyman: Espera, ¡¿Estás desnudo?!
Emmet: Bajas la mirada y haré que ni con esos lentes puedas ver bien.
Lyman se pone de pie y sale sin mirar.
Emmet: Tuve que decirlo, ya quería salir pero tú seguías disfrutando del agua.
Lyman: Ya no podré disfrutar de esta agua nunca más.
Emmet: Ya, largo.
El joven se coloca sus anteojos y sale de la habitación mientras se viste.
Emmet: Será mejor dormir y continuar nuestra primera misión... (Me preguntó si nos darán experiencia o algo así).
Emmet se viste rápidamente y sale a alcanzar a Lyman quien ya estaba en la habitación de huéspedes...
Lyman: No habíamos visto donde dormiremos hasta ahora...
Emmet: Bueno, ahora sabes porque casi nos deja entrar a las aguas gratis.
En el cuarto ambos miraban expectantes dos montones de trigo dónde dormirán, así se sentía la independencia para Emmet.
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