Brrp... Brrp...

Sonó en la habitación la vibración de mensajes llegando al celular sobre la cama, o en algun lugar de la cama.

—¿Ah? Un mensaje...

El desconcierto y el sonido hicieron que la lectura concentrada de la joven Luna se distrajera, saliendo del trance para empezar a mover las dos columnas de papeleo sobre la cama, y otro papeles en busqueda de su teléfono pero no había chance de encontrarlo.

—Vibra otra vez por favor...

Suplicó nerviosa, al no recordar donde lo había puesto la última vez.

Ni siquiera sabía que horas eran.

Solo podía saber que había pasado dos meses del celo del Alfa, y por consiguiente estaba a full con sus obligaciones como Luna Ginonix.

Brrp... Brrp...

Y sus pedidos fueron órdenes.

El celular vibró y supo inmediatamente dónde se encontraba, desplazando su mano bajo su almohada al costado derecho de ella.

⋘ 2 mensajes recibidos... ⋙
... [ Leah ha enviado mensaje ✉️ . ◌ೄ

8:45am.          

⋘ 4 mensajes nuevos... ⋙
... [ Leon ha enviado mensajes ✉️. ] ◌ೄ

9:00am. 

⋘ 3 llamadas perdidas de Mamá... ⋙
10:39 am.       
⋘ 3 llamadas perdidas de Yiara... ⋙
11:50am.       
⋘ 1 llamadas perdidas de Papá.. ⋙

12:00pm.      

Bella percibió escalofríos al notar cada notificación que aparecía amontonado en su celular, más aún cuando pudo notar la hora que era en ese mismo instante, temblando y tragando saliva.

13:30pm

Saltó de la cama, dando ligeros tropiezos hacia el baño. Para enjuagarse la boca y también, dar vida un poco con agua fría a su rostro.

—¡Luna Isabella!¿Se encuentra bien?—pregunta la voz despreocupada de Elay, tocando la puerta con leves golpes.

—Si, si. Me entretuve un poco entre los papeleos, ya salgo...

Elay hizo un sonido de confirmación.

—La esperamos en el comedor. Que sepas que Leona tiene semblante serio, no le gusta que la dejen olvidada.—comenta tras escucharse sus pasos alejarse, haciendo sentir alerta a Bella.

Inmediatamente se calza los tenis, y abre uno por uno los mensajes no leídos, encontrándose con noticias.

Leah:
Estás oficialmente invitada a mi presentación como Luna en la Manada Saint, en España, Madrid. En verdad, necesito que estés una semana antes, me estoy volviendo loca, ¡muchas esquisofrenicas han aparecido desde que llegué! Y lo peor de todo, es que no fueron ni siquiera novias, fueron lobas que querían hacerse con el poder de mi Alfa, ¿Podes creerlo? En fin, será el día 14 de febrero, y si, soy muy romántica para haber elegido justo ese día.

Leah te ha enviado la ubicación...

︿︿︿︿︿︿︿︿︿

Leon:
Buenos días mi pequeña Luna, espero estes teniendo un muy bonito día. No pude amanecer hoy, por unas reuniones de emergencia, nada grave...
Ya te extraño y te amo infinitamente.

Enviado a las 8:30am

Cuidado con sobrepasarte con el trabajo, tómate esto con calma, solo necesito de tu juicio con respeto a estos asuntos. No elijas estresarte, o deberé ir a comerte para liberar el estrés, pequeña Luna.

Enviado a las 8:40am

Retiro lo dicho, no podré ir, maldito Fénix. Estoy abarrotado de trabajo, te veré en el almuerzo. En serio, Bella, deja de trabajar y hazme caso mujer... TwT

Enviado a las 8:56am

Isabella Marie Swan, que sepas que estoy dolido. Pero eso me demuestra que tu determinación y responsabilidad te harán una gran Luna en nuestra Manada, esperaré mi consuelo a la hora del almuerzo. Te amo.

Enviado a las 9:00am

︿︿︿︿︿︿︿︿︿

Bella enseguida guardó el celular en su bolsillo trasero del jean, abrió la puerta y bajó rápidamente las escaleras, saltando dos escalones para llegar más rápido a la planta baja. Se había retrasado una hora, estaba frita.

«¡Que vergüenza!»pensó nerviosa.

Sin embargo, Elay la miró divertido, estando recostado en el marco de la pared de la cocina, donde las cocineras recién estaban sirviendo la comida.

—Tu cara es un claro ejemplo de que no has modificado el cambio de hora. —comenta soltando una ligera risa.

—¿Cambio de hora?—pregunta confundida, con el ceño fruncido.

Elay saca de su bolsillo su celular, y le muestra la hora, marcando la hora justa de las doce en punto.

—Llegaste a tiempo. Debes estar más atenta y movilizarte más entre nuestro pueblo para estar al tanto del cambio de horario, menos mal que mi Leona me mandó a intervenir, o sino... El Alfa Maxam pudo haber venido como un energúmeno por no recibir tu respuesta en ningún momento. —comenta Elay mientras guarda su celular en su bolsillo.

—Vaya, que susto de vergüenza ajena me he llevado. —murmura con las mejillas sonrojadas Bella— Gracias por tu consideración Elay.

—No hay de qué, siento que harías lo mismo por mi. Tu conoces mejor el carácter de Jacob, y sé que no dejarías que el cachorro me coma vivo—bromea un poco el rubio teñido.

Bella asintió, aunque no entendió muy bien la broma. Siendo así, como le encargaron a la Luna abrir la puerta justo cuando el Alfa iba llegando con el estómago vacío y la necesidad de besarla, fueron confirmados en cuanto la tomó en vuelo, besandola con tanta añoranza. Tras ello, Elay y Jacob acompañaron al Alfa y Luna ese día para almorzar.

[...]

Esa misma tarde, Bella le contó sobre la invitación de Leah a España, confirmando que pronto irían que solo harían unos cuantos ajustes y si el tiempo se apiadaba de ellos, el viernes de esa semana subían al vuelo correcto para llegar antes de la fecha.

Charlie había dicho que aprovecharía su ausencia para ir de pesca con sus amigos, que no se preocupara porque vaya a estar solo.

—Sigo sin entender porque Elay y Jake vienen con nosotros —cuestiona Bella.

Ambos ya se encontraban acostados en la cama tecleando algunas cosas en la notebook, cada uno con los últimos papeleos de la manada para no dejar nada sin resolver.

—Lo que ocurre es que el omega necesita presentar oficialmente a su mate al Alfa Rock Saint, y para ello, solo aprovechará el jet privado para llegar con menos retraso. Tampoco me agrada que venga con nosotros si te soy sincero —dice Maxam cerrando la tapa del notebook para dejarlo sobre la mesita de noche, al fin había terminado.

Por lo que recostando su espalda en la cama, pudo notar que también Bella terminó de escribir mensajes en el celular, imaginaba que era para la Luna de España, por lo que no tenía motivos para tener celos.

—Supongo que no hará ningun mal tenerlos unas horas...—murmura con sueño Bella, acurrucándose hacia la albina intersexual, mientras disfruta del aroma dulce y mentol de su Alfa.—Hoy ha sido un día muy agotador.

—Espero hayas cambiado ya la hora.

—Si, ya lo he hecho. ¿Te contó Elay?

—Aja, dijo que casi te desmayas de la impresión. Que sería correcto enviar mensajes en general para avisar el cambio de horario veraniego para evitar estos sustos.—contesta Maxam— Parece que está intentando ganarse puntos de buena conducta.

—Eso mismo iba a preguntar.

—Pero es difícil que se lo de. Aunque mi querida Yin volverá justo en la semana del viaje a España, eso quiere decir que el omega estará pegado a nosotros...—murmura inconforme.

—¿Y qué pasará de ti?—pregunta con un morrito triste Bella.

—Estaré nuevamente en el subconsciente de ella. Podré escucharte y charlar telepáticamente contigo, pero no será lo mismo como lo fue en estos cinco meses que han pasado. —resopla aceptando su destino a regañadientes.

—¿Y cuando volverán a intercambiar lugares?—pregunta dudosa. No era que Bella no extrañase a Leona, sino que ya se había acostumbrado a tener un hombre cuidandola.

—No lo sé, pero lo sabrás cuando ocurra. Ahora descansemos que esta semana de enero pasará pronto...—aconseja Maxam mientras la abraza y se acurruca en el cuenco del cuello-hombro de su luna, cerca de su marca—te amo como no te lo imaginas, Isabella...

Bella lo escuchó sintiendo una gran opresión en su corazón, sin lugar a dudas empezaba a sentir tanto amor que ni siquiera las palabras tenían tanta fuerza para explicar lo que sentía. Amada y mimada, esa noche durmió junto a su alfa.

Con la meta en su cabeza.

Amarlos y tenerlos siempre con ella.

Ah, y visitar a Leah, ayudarla a calmarse por todo lío que pudiera haber, porqué no se imaginaba tener que lidiar con chicos o chicas que quisieran estar entre los brazos de su Alfa. Sin duda era privilegiada al no contar con esa situación.