"Sálvame"

ADVERTENCIA: ¡ESTE CAPITULO ES UN TANTO FUERTE POR UNA ESCENA EN ESPECÍFICO, ASÍ QUE SÍ ERES SENSIBLE NO LO LEAS Y SI DECIDES SALTARLO PODRÍAS PERDER UNA ACLARACÍÓN ASÍ QUE ES TU DECISIÓN!

"No recuerdo haber matado a nadie, podría haberlo hecho sin saberlo. No estoy seguro de si lo hice"

—John Wayne Gacy

NARRADOR OMNISCIENTE

Bella mantenía su mirada fija en el espejo, pasaban miles de cosas por su cabeza, miles de recuerdos, esas pesadillas que tanto odiaba, en ese día aumentaban, no era algo que podía simplemente irse con unos tranquilizantes, pues resultaban inútiles, ya había pasado por esto muchas veces, sabía que no sería la última vez.

Todos los viernes antes del inicio de la semana santa, la comunidad se reunía para hacer un gran almuerzo, nadie sabía sí el guía se presentaba a esas cenas, pero ellos solo lo hacían para celebrar la llegada de esa fecha y claro, ante la aprobación del guía, todo era perfecto.

Cada familia tenía la tarea de preparar un plato, luego en el parque comunitario unían largas mesas para poner la comida a disposición y rezaban antes tener una larga conversación sobre diversos temas, por supuesto que el ritual de purificación era indiferente a ese día, nadie mencionaba ese tipo de cosas pues eran temas triviales, eran temas como si fuera todo normal.

El vestido rosa con su maquillaje simple quedaba perfecto, casi siempre se vestía de esa forma, su madre la obligaba a maquillarse más pues su propósito era simular clase o perfección, aunque Bella lo ignoraba y simplemente iba lo más sencilla posible, igual que su padre que durante el camino no dejaba de recordarle que tenía que comportarse respecto al ritual y básicamente lo de siempre.

El lugar lo habían decorado mejor que el año anterior, tenía grandes mesas rodeando la zona verde con manteles blancos, música relajante, y una diversidad sorprendente de diferentes platos entre saludables y chatarra, pero no dejaba de parecer una de las pocas celebraciones normales qué le gustaban, exceptuando lo que pasaba después de la comida.

—Bienvenidos familia Roberts, por favor dejen el pastel de ese lado y síganme — Murmuro Clara, la organizadora principal, ella era una muy buena persona, aunque como todos, eran ciervos ciegos al guía —me alegra que haya podido venir señor Conall, y por supuesto también la señora Lily, y la hermosa Bella, este es su lugar — Señaló una mesa que estaba casi llena, pero aunque eran personas que conocía , resulto ser incomodo pues estaba él, justo en frente de ella, su mirada le pesaba y no pudo hacer más que fingir agradecimientos a la señora Clara y poner su mejor sonrisa, no quería mas problemas con sus padres, los necesitaba confiando en ella para tener la libertad suficiente en su investigación

— ¡Conall!, tiempo sin verte, pero que bueno que nos haya tocado juntos tengo cosas de que hablarte — Habló el hombre, para que mientras su padre luego de asentir en silencio tenía una conversación con otras personas con una postura incómoda ya que Bella sabía muy bien la extraña relación que tenían, pero luego un escalofrío la recorrió cuando él la miró —me alegra verte Bella — Habló tocando la mano que ella tenía en la copa que al instante quitó.

—Pido su atención — Habló la señora Clara tocando una copa de cristal con un tenedor —quiero agradecer a todos por los maravillosos platos que han preparado, y por supuesto a Dios, y al guía, nada como ellos juntos siendo nuestra gloria, siendo nuestra luz y para celebrar el nacimiento de Jesús, disfrutaremos esta cena en su nombre — Luego se escucharon miles de aplausos para que después se dispusieran a comer.

La lasaña estaba deliciosa cuando la probo, pero no estaba concentrada en disfrutar, solo comía lo más lento posible para tomar más tiempo, para demorar ese hecho, porque el miedo estaba empezando a crecer en su interior y no podía permitirse demostrarlo.

—Bella, vamos — Habló el hombre

—No puedo, todavía no termino la lasaña

—Dije que vamos — Endureció su mirada, mientras se levantaba disimuladamente hacia la pequeña cabaña que se encontraba cerca del parque, para suerte de todos nótese el sarcasmo, era el lugar donde él vivía.

—Bella, ve — Susurro su madre mientras apretaba fuertemente su brazo —no quiero dramas

Rindiéndose se levantó de forma lenta mientras caminaba a sus espaldas, quería mantener la distancia, pero cuando llegaron a la cabaña, al abrir la puerta él tomo de su mano con un fuerte agarre evitando que pudiera soltarse.

Hasta ese momento tenía poder en sí misma, pero luego simplemente tenía que dejar que pasara, tenía que cumplir con el acuerdo, tenía que lograrlo, por su hermana, por su Scar.

Le reconfortó el hecho de que el interior de la cabaña fuera acogedor, pues la chimenea estaba encendida emanando un calor moderado, el día iluminada el estilo rústico que tanto le gustaba a Bella.

— ¿Te gusta? — Preguntó mientras subían las escaleras —la decoré para ti, que te sientas cómoda es primordial para mí.

Bella no respondió, simplemente se limitó a asentir, mientras caminaban hacia la habitación, donde había dos copas junto a una botella de vino, y un envase pequeño con un líquido transparente, ella cerro los ojos aguantado las lágrimas antes de perder el control.

—No te pongas mal mi Bella, esto es lo mejor para ti, solo disfruta — Caminó hacia ese lugar, sirvió las dos copas, y vertió el líquido en una de ellas, esa copa se la dio a Bella y esperó a que se la tomara completa, ya que provocaba que se sintiera un poco mareada y que su calor corporal subiera —eres una buena niña.

Él se acercó lentamente en su dirección para comenzar a bajar la cremallera de su vestido hasta que cayera complemente al suelo, estaba con la ropa interior que siempre guardaba para esos días, que eran unas pequeñas bragas vino tinto con un sostén del mismo diseño, entonces empezó a sentir sus manos en la cintura y quiso alejarse, pero sabía que no podía, sabía que lo estaba arriesgando todo sí se atrevía.

Luego comenzó a tocar sus senos y restregarlos mientras su respiración era más pesada, sabía que ya se estaba excitando y gracias a la copa, ella podía sentir sus pechos erectos.

La tomo de la mano para que ella se sentara a horcajadas sobre él y luego comenzó a besarla, sus besos no eran apasionantes o suaves, eran demandantes, eran simplemente besos de poder, sabía que ella estaba en su poder y que tenía que continuar, siempre se repetía lo mismo.

Mientras la besaba él susurraba su nombre, ella solo imaginaba la voz de Scarlett tranquilizándola y diciéndole que todo estaría bien, porque lo estaría, tenía que resistir y ser fuerte, tenía que pasar la prueba.

Bella puso las manos en su cuello, y fue una acción que se la recriminaba a la droga que en ese momento divagaba en su cuerpo, solo podía intentar ser objetiva mientras él le quitaba el sostén revelando sus senos, una de las cosas que más le gustaban a él porque siempre se lo recordaba, eran prominentes lo que algunas veces ella odiaba, eran un atractivo más para la persona que tenía al frente, eran una razón más por la que fue elegida.

Entonces empezó a acariciarla, provocando gemidos de Bella, gemidos que no eran suyos, eran de un cuerpo que no era de ella, eran de un cuerpo de otra persona.

—No me arrepiento de hacer lo que hice — Susurró en su oído — Ella tenía razón, valía la pena — La mención de una mujer la dejó confundida.

— ¿Quién es ella Marcus? — Preguntó Bella curiosa, y mientras ella lo besaba en distracción solo esperaba que respondiera.

—No puedo decirte linda — Dijo este agitado — Solo concéntrate en disfrutar, quiero que siempre tengas en cuenta la belleza que posees, ¿Lo sabes verdad?

—Sí — Respondió evitando las lágrimas ya que Marcus se estaba aventurando por su abdomen bajo.

— Eso es lo importante, ponte lista para mi Bella — Exclamó mientras se retiraba su traje, pero ella solo imaginaba y rezaba para que alguien interrumpiera lo que estaba a punto de ocurrir, no podía luchar, eso era claro, pero esperaba que alguien lo hiciera por ella.

Como si alguien hubiera escuchado sus súplicas, un tono de llamada irrumpió en la habitación, el cual Marcus ignoro ya que estaba a punto de adentrarse en el cuerpo de Bella, pero debido a la insistencia, este con un gruñido de molestia se movió hasta alcanzar su teléfono.

— ¿Quién habla? — Contestó mientras miraba su cuerpo fijamente, empezando por su rostro para llegar a su pecho. — Lo sé, siempre me han perseguido, eso no es novedad idiota — Había cierta rabia en su tono, y mientras él se distrajo, Bella no desaprovechó la oportunidad para vestirse rápidamente y con una expresión inocente sentarse en la cama a la espera de que tuviera que irse. — Estoy ocupado, la verdad no me interesa hablar con ellos, mis puntos estaban claros y como no aceptaron, lo mejor era traicionarlos... — Con un suspiro de frustración cortó la llamada. — Hoy te portaste muy bien princesa, muy diferente al año anterior — Cambió su tono a uno fuerte mientras paseaba sus manos por su espalda, era como si dibujara formas — Me molesta no poder continuar con lo que apenas habíamos comenzado, pero esto se repetirá, no te preocupes — Acercó sus labios para estamparlos en los de ella, tenía un sabor a tabaco y droga que solo le provocó arcadas —Eres tan deliciosa...Que no sé cómo bajaré lo que has provocado — Dijo señalando su erección.

—Hasta luego señor Marcus — Se despidió intentado ocultar la alegría que la recorría.

—Acércate Bella — Ella camino en su encuentro para que el pusiera sus manos en su cintura —despídete bien

—Gracias señor — Ella se acercó a sus labios en busca de un beso sencillo, pero él la apretó más contra sí he hizo todo lo contrario, no sin antes morder su labio provocando que un hilo de sangre saliera de su boca para luego voltearse y salir lo más rápido de ese lugar mientras se retiraba la sangre del labio y las lágrimas ya salían de sus ojos.

Caminó en dirección al bosque donde le gustaba pasearse y pensar, ese era el plan, ella no podía rendirse, tenía que aprovechar que Marcus se acercaba a ella por el acuerdo entre sus padres para conseguir información, porque sabía que él estaba al tanto de muchas cosas que ella necesitaba, según su hermana Marcus había sido un fiel, pero su historia es extraña debido a que nadie la sabia con exactitud

Scarlett había pasado por eso, y ella le había dicho a Bella que en algún momento seria su turno porque era la única manera de salvarse, ese era el propósito principal.

"Sálvame Bella"

Cerró los ojos mientras su mente recordaba la voz de Scar, siempre pasaba lo mismo, su hermana era un tema inconcluso desde su muerte, nunca había dejado de serlo para ella.

Mientras escuchaba el sonido del viento arremeter contra los árboles, unos fuertes brazos la tomaron por detrás, sosteniéndola de tal forma que no se podía mover, y ni siquiera gritar debido a la otra mano en su boca que lo impedía, aunque luego de todo lo que había pasado ¿Quién la ayudaría?

—No me hagas daño — Susurró Bella esperando que no fuera Marcus en busca de más.

—Bella, soy Nicholas, creí que ibas a hacer una locura, lo siento, y pues como no quería que gritaras asó que de la impresión te cubrí la boca, solo... dime que no pensabas ir a lago.

—Tranquilo, no pensaba suicidarme — De hecho además de ser un espeso bosque, cerca y en la misma dirección a la que se dirigía había un río, que lo llamaban "el río del pecado", pues era un lugar que elegían las personas del pueblo para quitarse la vida de la manera más cruel, o eso pensaba Bella, ya que cuando encontraban los cuerpos eran casi irreconocibles, pero no eran de las mujeres purificadas, eso lo sabía de sobra, pues la mayoría de los cuerpos eran masculinos según lo que decían los documentos forenses que Bella había robado —me gusta entrar al bosque para tener un tiempo a solas, ¿Qué haces aquí?

—Te estaba esperando en la cena para hablar contigo, pero como no volviste, entonces fui buscarte y te vi caminando por aquí así que pensé lo peor — Hablo agitado comprobando que había estado corriendo.

— ¿Hablar sobre qué?

—Sobre el hombre con el que estabas — Bella intentó ocultar su asombro pues creía que nadie se daba cuenta de su ausencia y la de Marcus ese día.

—No sé de qué hablas

—No soy estúpido Bella, yo sé cuál es el acuerdo que tienen tus padres con ese bastardo — Habló con molestia —tú misma sabes que Scar también tenía que cumplirlo y como veo luego de su muerte la sustituiste.

—Yo... — Balbuceó en busca de una respuesta rápida, pero al final no había ninguna correcta, así que se limitó a quedarse en silencio

—No hay necesidad, sé que no es tu deseo, y... — Se detuvo observando fijamente su rostro hasta que cayó en la cuenta de que en especial su boca — ¿Él te hizo eso? — Preguntó cerrando los ojos mientras apretaba sus puños

—Solo ignóralo Nicholas, no puedo hacer nada, es la mejor manera de... — Cortó la frase dándose cuenta de que aún no confiaba plenamente en él —evitar problemas con mis padres

—No los excuses, no tienen derecho para hacerte eso — Replicó molesto mientras acariciaba la mejilla de Bella como si fuera una porcelana ––acompáñame a la mansión, quiero contarte algo sobre él que podría interesarte — Dijo tomándola de su mano para adentrarse a la ciudad nuevamente.

Bella le agradó esa acción, pues durante toda su vida muy pocas personas se habían preocupado por ella y el hecho de que Nicholas sin conocerlo de mucho tiempo lo hiciera permitió que olvidara lo que había pasado horas antes, para concentrarse en el escaso cariño y amor en su vida que realmente la estaban afectando, por lo que se confirmó que Nicholas era confiable, que él quería lo mismo, encontrar la razón de la desaparición de Scar, y ella sabía que con su ayuda, estaba más cerca de logarlo.

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Entiendo si el capítulo es un poco fuerte, la verdad quería plasmar lo que era la vida de Bella, más no justificar lo que Marcus hace, porque en todos los casos está mal, aún sí no parece ser "obligado".

Por otra parte gracias por el apoyo que le han dado a la historia y bueno nos vemos en el próximo capítulo.

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