Taehyung observó a Seokjin durante las últimas dos canciones lentas en la fiesta, el vino comenzaba a sentirse menos amargo cada vez que lo bebía.

—Taehyung —Justamente la persona en la que estaba pensando se acercó para sentarse a su lado.

—Hola, Seokjin —Saludó intentado evadir su mirada.

—¿Donde esta Jungkook? Creí que estaba contigo.

—No se, creo que fue con su padre —Taehyung comenzaba a marearse.

—Chicos —Una tercera voz interrumpió y se sentó junto a Seokjin.

Lo que le faltaba, era Yoongi.

—No sabia que también habías venido —Seokjin le dedicó una pequeña sonrisa.

—Bueno, hay comida gratis, es lo menos que puedo hacer —Yoongi le miró.

Y Taehyung tenía tantas ganas de vomitar en esos momentos, ambos comenzaron a conversar dejando de lado su existencia, se sintió muy mal, el alcohol aún no hacía mucho efecto suficiente en él, necesitaba más.

—Ahora vuelvo —Taehyung se levantó de su lugar dejando a ambos chicos con la boca abierta, no volvió a aparecer cerca de ellos, no le apetecía ver esa interacción de la que jamás imaginó qué tendría celos.

Caminó con cautela hasta llegar a una mesa y tomar un par de copas llenas de vino, sorbio con toda velocidad. Necesitaba olvidarse de todo, que irónico que su primera embriagada sea de esa forma, queriendo olvidar a Seokjin y el hecho de que estaba destinado a alguien que no era él.

Se apoyó en la pared tomando otra copa con rapidez. Desde esa distancia, podía observar a Seokjin y Yoongi hablando en el mismo sillón de donde él había estado con anterioridad.

—Joder... —Murmuró para tomar una nueva copa y beberla.

La música comenzaba a irritarle cada vez más mientras su mirada divagaba en ese par. Hoseok no tenía ni idea de que el chico que le gusta está destinado a Seokjin.

Y tampoco quería decirle, no quería que sufriera como él.

Entonces iba a guardarselo para si mismo y hundirse en su propia miseria.

Su cabeza daba vueltas indagando entre sus pensamientos.

¿Por qué tenia que ser de esa manera? ¿Por qué seguía doliendole el pecho?

Las ganas de llorar volvieron a él. Tenía que buscar a Jungkook cuánto antes.

Caminó entre la gente agarrándose de las paredes, alguien en el micrófono daba un anunció, pero el estaba tan perdido en si mismo que no le tomó mucha importancia. Intentó ser rápido para evitar chocar con la gente, hasta que salió de la sala principal e ingresó más adentro de la lujosa mansión de los Jeon.

Suspiró con pesar hasta que una voz conocida cerca de ahí inundó sus oídos.

Se acercó un poco más hasta pegarse a la pared y escuchar con atención lo que sea que estén diciendo.

—Te he dicho que no es así —Jungkook tensó su mandíbula debido a las palabras de su padre.

—¿Cómo se te ocurre tan siquiera pensar en hacer eso sabiendo que hay gente importante? Te lo vuelvo a repetir. Una cosa más y vuelvo a mandarte a Francia.

Jungkook bajó la cabeza, esa si que era una verdadera amenaza para él.

—La estaba pasando mal, la persona que le gusta estaba bailando con alguien más, es mi amigo, no supe que más hacer —Bajó un poco la voz.

—¿Crees que eso me importa? Estas advertido, Jungkook, no quiero saber que los rumores empiecen gracias a ti —Su padre le amenazó.

—¿A quién le importa de todos modos?

—La gente puede malinterpretar, no quiero saber que mi hijo es homosexual. ¿No sabes como eso arruinaría mi maldita reputación? Ahora estoy apunto de ascender más arriba, parece que eso no te importa —Su padre le fulmina con la mirada.

—Son tus malditos negocios... y él es solo es mi amigo —Jungkook se había quedado sin palabras, no quería darle la razón a su padre, pero lo que hizo fue demasiado imprudente que ya no sabía como defenderse.

—Tengo que volver ahí y decir unas palabras, solo no vuelvas a llamar la atención —El padre de Jungkook pasó de largo por el pasillo finalmente dejándolo solo.

El pelinegro apretó los puños con fuerza sintiendo sus uñas enterrandose por su piel, la furia se estaba apoderando de él.

Pero un quejido detrás de él le desvío de sus pensamientos llenos de rabia.

—¿Taehyung? ¿Qué haces ahí? ¿Estabas escuchando? —Jungkook alzó la voz.

—¿Qué...? —Taehyung fue acercándose más, sus piernas se trastabillaron.

—No debes escuchar conversaciones privadas.

—Eres un idiota, Jeon Jungkook —Taehyung ladeó la cabeza sintiendo que no iba a aguantar su propio peso muy pronto.

—¿Ahora me insultas? Hace un rato aceptaste bailar conmigo.

—S-si pero porque me obligaste, yo no bailo con idiotas —Taehyung entrecerró los ojos.

—Joder, apestas a alcohol, ¿No que nunca habías bebido? Parece que estás borracho —Jungkook arquea las cejas al notarlo el olor a alcohol en Taehyung.

—¡Es tu culpa! —Taehyung se acercó para apuntarle con un dedo.

—¿Mi culpa? ¿De que carajos estas hablando?

—Seokjin... El... —Murmuró apartando sus manos para apoyar su cabeza en el pecho de Jungkook.

—¿Qué crees que haces? Alguien podría vernos.

—¡¿Ahora si te importa?! Te odio, con todaaa mi alma —Taehyung cerró los ojos sintiendo que su cabeza explotaría en cualquier momento.

—¿Me odias? Oh, Kim Taehyung, parece que no fue hace unos días que lloraste en mis brazos.

—Eso fue porque... —Taehyung estuvo a punto de contarle sobre los hilos, pero algo lo detuvo.

—¡Joder, Taehyung! —Jungkook le gritó al ver que esté comenzaba a vomitar sobre su ropa.

Cuando terminó, cayó sobre el suelo, Jungkook miró hacia ambos lados para ver si no había alguien viéndoles, entonces se quitó el smoking negro quedándose con la camisa blanca y así poder cargar a Taehyung y llevarlo a su habitación.

—Nunca debí enseñarte el alcohol —Jungkook se lamentó.

Colocó a Taehyung sobre su cama y enseguida comenzó a revolver la ropa de su armario para buscar algo parecido a su Smoking demasiado caro.

Era lo menos que importaba, pero si su madre se entera de que alguien había vomitado sobre él estaría muerto junto con Taehyung.

Taehyung se sentó sobre la cama después de desmayarse, su cabeza dolía el doble. Intentó averiguar en dónde se encontraba, pero su mirada fue desviada hacia ese chico que se había quitado su ropa quedándose únicamente con su pantalón.

El rubio entrecerró los ojos intentando adivinar de quién era esa enorme espalda, pero al sentir sabor a vómito sobre su boca, trató de recordar lo que había pasado, pero era imposible.

—¿Qué miras? —Jungkook gruñó volteando a ver al chico curioso que no apartaba su mirada de él.

—¿Jung... kook...? —Murmuró.

—¿Te gusta lo que ves? —Jungkook dijo refiriéndose a su pecho descubierto.

—No... creo que quiero vomitar de nuevo.

—¡No se te ocurra vomitar en mi cama! —Jungkook se apresuró para tomarle de la cintura y caminar hasta su baño, en dónde Taehyung pudo seguir vomitando a su gusto.

—No debí dejarte ahí, ¿No que era muy amargo? ¿De repente te emborrachaste? Que pasa contigo, Kim Taehyung —Jungkook se masajeo la punta de su frente.

—Creo que tengo un par de prendas que pueden quedarte, vamos, levántate de ahí —Jungkook le sujetó de los brazos para ayudarle a levantarse.

—Ponte ropa, parece que quieres violarme... —Taehyung murmura.

—Sí hubiera querido ya lo hubiera hecho, quédate aquí —Jungkook le soltó hasta llegar de nuevo a su cama.

—Pensé que te gustaban las chicas —Taehyung se recostó sobre la cama viendo fijamente el techo.

—Bueno, yo como de todo, pero no vas a recordar nada de ésto mañana —Jungkook se acercó a él con una prenda de ropa en sus manos.

—Entiendo... —Taehyung se sobresaltó cuando el chico le tomó de los brazos para que se sentará.

Jungkook agarró la orilla de su camisa con la intención de querer quitárselo pero Taehyung le dio una torpe cachetada.

—No me aprovecharé de ti si es lo que piensas, solo te quitaré esa ropa con olor a vómito, déjame ayudarte —Jungkook le cuestionó, su paciencia estaba a nada de acabarse.

—Eres... estúpido —Jungkook no le hizo mucho caso y logró quitarle la ropa.

—¿Qué crees que haces? Me gusta alguien más por si no sabias —Taehyung balbuceo.

—Quédate quieto —Jungkook le tomó de los hombros para evitar que este se siga moviendo como lombriz.
Intentó no divagar mucho sobre el abdomen marcado del chico, a pesar de verse tan debilucho y frágil, pudo darse cuenta de que si se ejercitaba.

—¿Te gusta lo que ves?—Taehyung intentó imitarle, pero a Jungkook le dio mucha gracia.

Finalmente pudo colocarle la ropa (luego de luchar con él para que se quedara quieto) y a la vez también se cambió la ropa, poniéndose un suéter negro a si podía disimular la perdida de su Smoking negro.

—Vamos, debo llevarte a tu casa —Jungkook le tomó del brazo para qué se levantara, pero olvidó otro importante detalle: no sabía la dirección del chico.

Se maldijo a si mismo, no era como si Taehyung pudiera decírselo en esas condiciones.

Una brillante idea le llegó a la mente, voltea a ver rápidamente al chico, pero no traía alguna bolsa o algo, intentó pensar lo más que pudo.

—¿Dónde traes tu teléfono?

—Dónde... no lo sé... creo que lo perdí...

—Carajo, Taehyung. No importa, vayamos afuera mientras se me ocurre algo —Jungkook entrelazó su brazo con el de Taehyung abriendo la puerta de su habitación y cerrando detrás de si.

—Saldremos por atrás —Jungkook anunció tratando de caminar lo más rápido posible, pero técnicamente era imposible con las torpes piernas de Taehyung.

—Ven aquí —Jungkook se hartó y sujeto sus piernas para poder cargarle y así poder avanzar mejor.

—Suéltame... —Taehyung volteó a verle.

—Cállate por un momento y déjame pensar —Jungkook le regañó, rezando que nadie les haya visto, aunque era muy poco probable que alguien se paseara por la casa.

Cuando llegaron a la puerta trasera, Jungkook soltó un largo suspiro luego de bajar a Taehyung.

—Ven acá —Le jaló del brazo al ver que Taehyung se estaba yendo.

Jungkook abrió uno de los muchos coches de su padre y subió a Taehyung primero para hacerlo después.

—¿Dónde vives?

—En el corazón de Seokjin... —La sola mención de ese nombre hizo que rodara los ojos.

—Te estoy hablando en serio, ¿Cómo pudiste perder tu teléfono? Y el idiota soy yo —Jungkook bufó con molestia.

—Bueno... por un parque

—Vaya, al parecer no sabes que hay cientos de parques en esta ciudad ¿no?

Taehyung cerró los ojos sin siquiera escuchar lo que Jungkook le decía.

—Al parecer la noche será larga —Jungkook se maldice mentalmente por haberle dado una copa de vino a Taehyung aunque en el fondo sabía que él chico se emborrachó porque quería olvidar a su amor de colegio.

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El dolor de su cabeza era el doble de ayer. Se levantó de la cama y se puso sus pantuflas de algodón. Observó detenidamente la habitación, pues era suya.

—¿Qué mierda paso...? —Susurró para si mismo y se encaminó fuera de su habitación.

Su madre, padre, abuelo e incluso su hermano menor le observaron como si hubiera hecho algo muy malo, Taehyung temia por su vida.

—¿Qué pasó ayer? —Taehyung se rascó la cabeza un poco muy desorientado.

—¿Ese era tu novio? ¿Ya no te gusta Seokjin? —Kim sun, su hermano de apenas 10 años comentó en forma de burla.

—Hijo... más respeto, tu hermano va a explicarnos todo ahora, ¿Verdad? —Su padre dijo.

—¿Qué? Si no me acuerdo de nada.

—Taehyung, ayer llegaste muy borracho y un chico te trajo —El abuelo explicó guiñandole un ojo al final de sus palabras.

—¡Es muy guapo! ¿Si es tu novio verdad? —Seo Yea-ji, su madre insinuó con una sonrisa en sus labios.

—¿Quién era? ¿Era Jungkook? —Taehyung preguntó un poco preocupado, ¿En que momento Jungkook le había traído a su casa? ¿Qué había sucedido entre ellos?

El abuelo Kim observaba a Taehyung tratando de convencerles de que Jungkook y el no eran nada. Una sonrisa se dibujo en sus labios, puesto a que él había visto el hilo del chico llamado Jungkook unido junto con el de su nieto, el cuál aún no se daba cuenta.

El amor de juventud era el más bonito y puro que podía existir.

𖦹

𖦹

𖦹

𖦹

𖦹

el abuelo es taekook shipper (yo ese)