—¿Iremos a la playa? —Taehyung sonrió al asomarse en la venta y encontrarse con el mar.

—Bueno, técnicamente ya estamos en la playa —Jungkook giró a verle.

El cielo había oscurecido, Taehyung pudo percibir el fresco olor de la brisa del mar.

—¿Qué hacemos aquí? —Taehyung preguntó una vez que el auto se detuvo en el estacionamiento qué quedaba frente al mar.

Puesto a que ya era de noche, no habían personas cerca porque no era zona turística.

—¿No te gusta la playa? —Jungkook se bajó y Taehyung copió sus acciones, totalmente confundido, nunca había ido a la playa de noche.

—No es eso... es raro estar aquí de noche.

—Vamos, Kim Taehyung, solo seremos tu, yo y el mar —Sin preguntarle, tomó su mano para comenzar a caminar un poco las cerca de las olas del mar.

Jungkook le soltó y se sentó sobre la arena, mirando expectante al chico rubio con el ceño fruncido, no tardó mucho en acompañarle para sentarse a su lado.

—¿Volverás al equipo de basquetbol? —Jungkook preguntó.

—Sería sospechoso, en primer lugar, entré al equipo por Seokjin, creo que lo sabes.

—Oh, pero así podemos pasar más tiempo juntos.

—No creo que volver ahora sería lo correcto...

—¡Te extraño! Los entrenamientos son tan aburridos, en parte, no puedo verte con short corto —Jungkook alzó las cejas, causando que Taehyung se sonrojara.

—¿Por qué me trajiste aquí? —Taehyung evadió el tema.

—Ah, ¿Sigues con eso? ¿No puedes solo disfrutar el momento y ya? —Jungkook le regañó.

Taehyung se quedó sin palabras, tenía razón, él era una persona que siempre se preguntaba sobre todo y olvidaba lo más importante; simplemente disfrutar.

—Lo siento —El rubio músito con la mirada clavada en el brillo de la luna que les abrazaba junto al suave ruido de las olas.

—Qué raro, siempre soy yo el que se disculpa, ¿Por qué lo haces?

—Tú sabes porque... me comporté como un gran idiota sin corazón y te dejé solo así —Todo lo que decía era verdad.

Por un momento, quiso lanzarse a sus brazos porque ya sabía la respuesta que Jungkook le daría.

—No debes disculparte-

—¡Claro que debo!

—Olvidemos eso, haremos como si esa parte de nuestras vidas nunca hubiese existido.

—Vaya, ojalá sea así de sencillo.

Ambos se vieron y fue como si solamente ellos existieran, era mágico, dos almas unidas para estar juntas por el resto de sus vidas estaban mirándose luego de una disculpa sincera.

No iba a decirlo, pero a Taehyung le gustaba cuando ninguno de los dos decía alguna palabra y simplemente se miraran de aquella forma mientras sus latidos se aceleraban a cada segundo.

Si eso era el amor del que tanto hablaban, quería sentirlo por siempre.

—Tengo frío, hay que irnos —Taehyung fue el primero en romper el contacto visual por lo nervioso que se encontraba.

—No, espera aquí —Jungkook se levantó de la arena y corrió hacia el auto.

A pasos lentos y cortos, Taehyung se sobresaltó al sentir una chaqueta sobre sus hombros.

—¿Qué? ¿Piensas que estamos en una película? —se burló.

—¿No que tenías frio? —Jungkook volvió a colocarse a su lado.

—Sí... gracias, supongo.

—Oh, pero si fuera Seokjin, estarías feliz de tener su chaqueta, ¿no? —Jungkook dijo con tosquedad.

—¿Qué? Seokjin ya no me gusta...

—Te vi, todos te vimos con él, abrazándose a minutos de que las clases comenzarán, debieron ser un poco más discretos, ¿no te parece?

—No es lo que piensas, ese día Seokjin me dijo que tú eras un buen chico y que merecías otra oportunidad. Quizás le conté sobre el porqué terminamos, pero él no quiere nada conmigo, solo quería que volviéramos.

Jungkook se quedó estupefacto al escuchar la confesión del porque Seokjin había estado tan pegado a Taehyung. Sin duda, no lo sospecho porque estaba cegado por sus celos y su rabia.

—Oh...

—Definitivamente no va a creer lo que hiciste hoy, fuiste muy estúpido —Taehyung le golpeó el brazo.

—Sí, quizás pases el 99% del tiempo diciendo y pensando que soy estúpido pero, se que en el fondo, hay un 1% del que se que aprecias aún con todos mis defectos —Jungkook sonrió suavemente mientras acariciaba el cabello del muchacho.

—Yo...

—Dilo.

—¿Qué quieres que te diga?

—¿Por qué se te hace tan difícil admitir que me amas?

Taehyung le miró, lo que decía era verdad, por alguna razón, se le dificultaba demasiado expresarse, Jungkook era así y no había dejado de serlo hasta hace poco.

—No lo sé... —Taehyung bajó la mirada apenado.

—Mírame, no hay nadie más aquí, espera ¿Acaso te estás sonrojando? —Jungkook acarició su mejilla.

—¡Claro que no! —Taehyung apartó las manos de Jungkook.—Y sigue siendo vergonzoso aunque no haya nadie más.

—¿Por qué te pones así? Todavía recuerdo lo que pasó en el campamento, yo y tu, pidiendo a gritos de que te toque y-

—¡Olvídate de eso!

—Jamás lo haré, cariño —Jungkook sonrió complacido, amaba molestar a su Taehyung.

—Eres tan molesto y estúpido.

—Eso ya lo se, pero, ¿No dirás que me amas? —Jungkook se acercó un poco más para jugar con los mechones de su cabello qué caían sobre su rostro.

—¿Tengo que hacerlo para demostrar que lo hago?

—Sí, las palabras lo son todo.

—Creí que las acciones lo eran todo —Taehyung miró absorto los labios del contrario, quería hacerlo, aunque sea un impulso, pero algo lo detenía, sin embargo, sabía que iba a suceder pronto.

—También, pero para mí, las palabras también son importantes.

Taehyung divagó sobre la mano izquierda de Jungkook cerca de su rostro, era increíble que, todo este tiempo, siempre se había tratado de él.

Entonces, dejó sus miedos a un lado y se atrevió a tomar el rostro de Jungkook para atraerlo hacía a él para besarle lentamente. Jungkook correspondió enseguida, sostuvo su cintura para acercarle más a su cuerpo, se permitió degustar el sabor a menta de su boca, sus labios lo eran todo para él.

Cuando Taehyung se apartó, rápidamente volteó a ver al mar evitando la mirada fija del chico.

—Sabes que eso no responde a mi pregunta —Jungkook tomó su mano y entrelazó sus dedos, amaba hacer aquello.

Era como una pequeña muestra de amor.

—Te amo.

🌹🌹🌹

Taehyung trató de actuar como comúnmente lo hacía, pero tenía una pizca de esperanza.

Luego de clases, haría un ritual del que su abuelo había esperado por más de 15 años, esperando a que Taehyung sea mayor de edad para llevarlo a cabo.

Podían haberlo hecho antes, pero con la poca energía que el abuelo irradiaba por su edad y porque era el único aparte de Taehyung en la familia que poseía actualmente la visión de los hilos, no podía hacerlo él solo.

Salvo que, no solo eran ellos dos sin contar a su tío desaparecido, Kim Namjoon también poseía el don.

Es por eso que, Taehyung le contó a Namjoon sobre el ritual que harían para comunicarse con sus antepasados (su tío desaparecido) y así saber en donde se encuentra.

Las clases finalizaron, Taehyung ya estaba saliendo junto a Namjoon, ¿qué si había estado evitando a Jungkook todo el día? Tal vez, no quería hacerlo, pero probablemente él iba a cuestionar del porque estaba con su primo mientras a él lo ignoraba.

—¿Es seguro? —Namjoon preguntó, luego de escuchar la explicación de Taehyung sobre como se haría el supuesto ritual.

—Sí, espero no morir ahogado, ocuparemos la bañera, no se como mierda la van a sacar del baño, pero seguro que al abuelo se le ocurrirá algo.

—Vaya, ¿Por qué no me habías contado sobre esos rituales? —Namjoon preguntó muy interesado en la información que Taehyung soltaba como si no fuera importante.

—Créeme, me enteré hace poco, el abuelo dijo que sería mejor hacerlo en luna llena, quise decirle que no eramos lobos pero seguro iba a regañarme —Taehyung río.

—Es... increíble, finalmente... voy a conocer a mi padre —Namjoon esbozó una pequeña sonrisa.

—Bueno... no pienses en eso aun, solamente voy a conectarme espiritualmente con él y me dirá en dónde está, o eso creo.

Luego de charlas sin importancia, llegaron al autobús, poco después, se bajaron a un par de calles de la casa de Taehyung.

—Ni tu abuelo ni tus padres saben de mí, ¿Verdad? —Namjoon preguntó intrigado.

—No... pero no te preocupes por eso, se los contaré.

—¿Y si no me aceptan? ¿Y si dicen que no soy hijo de...?

—No pienses esas cosas, se que mi abuelo va a reconocerte como su nieto —Taehyung le tranquilizó.

Pero, lo que no sabía era que eso le causó aun más angustia de lo que ya tenía.

—Ya estoy en casa —Taehyung anunció una vez que entraron a la casa.

Había silencio absoluto, su hermano Sun estaría encerrado en su habitación porque aún era muy joven para aquellas cosas.

—Hijo, ¿Quién es él? —El abuelo Kim salió de la cocina.

—Se que esto de parecerá raro pero, él, él es... hijo de mi tío, Kim Do-Hyun —Taehyung confesó.

Pero la expresión del abuelo no fue como el quiso que fuera.

—¿Qué?

—Señor... yo también puedo ver los hilos y quisiera ayudar con el ritual para encontrar a mi padre.

El abuelo jaló a Taehyung del brazo y lo alejó un poco para susurrarle:

—¿Qué crees que haces? ¿Quién es el y porque dice que es hijo de Do-hyun?

—Lo es... aunque no lo creas, el también puede ver los hilos, tiene mi misma edad y su madre es la tía de Jungkook, como sabes, mi tío también se involucró con esa familia.

—Y como sabes, nada salió bien —El abuelo le dio una mirada severa y se mantuvo con un rostro serio.

—Porfavor, podemos encontrarlo, seremos tres personas con la misma energía, el y yo somos jóvenes y... creo que entiendes.

Kim Deok-hwa le miró con un poco de comprensión, el chico tenía razón, entre más energía, mejor.

En parte, tenían que comenzar cuánto antes con el ritual, así que se limitó a suspirar y asentir con la cabeza.

—Kim Namjoon dijiste que te llamas, ¿Verdad? —El abuelo le dijo desde la distancia, Namjoon asintió con una pizca de esperanza.

—Sí puedes ver los hilos... no veo el porqué no puedas participar en esto —El abuelo le sonrió.

Pero, había algo en el chico que no le convencía, no obstante, tenían que comenzar cuanto antes.

Los padres de Taehyung salieron y saludaron a Namjoon, se sorprendieron al saber que era hijo de Do-hyun, prepararon todo sobre la mesa a un lado de la bañera que ocupaba casi toda la sala.

Luego de cambiarse por una ropa más cómoda, era el momento.

—¿Estás listo? —El abuelo le preguntó a Taehyung.

—Lo estoy, supongo —No perdió el tiempo, subió las cortas escaleras para acomodarse en la bañera llena de agua helada, no sabía muy bien como funcionaban más cosas extrañas que sucedía en su familia y de las que no sabía, pero, debía hacerlo.

¿Qué si estaba asustado? Si y mucho, tenia miedo de morir ahogado o de que algo no salga bien.

Se hundió casi por completo en la bañera dejando el rostro afuera para respirar, sintiendo que sus músculos se tensaban por el agua fría.

Sus familiares y Namjoon se tomaron de las manos mientras decían algo extraño que Taehyung no lograba entender con claridad.

Negó con la cabeza recordando que debía concentrarse. Así que cerró los ojos.

No supo cuánto tiempo pasó pero, hubo un estruendo que hizo que su cuerpo temblara por completo y abrió los ojos.

Estaba a oscuras completamente, era el único en el extraño lugar, por más que quería, no podía moverse y tampoco podía sentir su cuerpo, ¿En que carajos se había metido y porque no quería confiar en su abuelo?

Unos ruidos extraños captaron su atención, era como una sonata llena de penumbras y murmullos apenas audibles.

Ni él mismo lo entendía.

—Kim Taehyung, ¿Verdad? —Una persona a unos metros de él apareció de repente.

—¿Quién eres?

—Funciona... —El abuelo susurró desde la realidad, todos podían escuchar lo que Taehyung decía.

—Soy yo, tu tío, la persona a la que querías ver, supongo que... quieres saber en dónde estoy —En un abrir y cerrar de ojos, el tío estaba un poco más cerca sentado en una silla de madera mientras acariciaba a una gato negro.

—Sí, quiero saber en dónde estás.

—Nada de esto te interesa, puedo verlo en tus ojos.

—¿Por qué dices eso? —Taehyung frunció el ceño.

—Porque ni siquiera te acuerdas de mi así como Namjoon, mi supuesto "hijo" -Hizo comillas con los dedos.

—Pero lo es...

—ignoremos todo esto y dejaré verte lo que realmente te importa -El tio apuntó con la cabeza hacia su lado izquierdo.

—¿Qué carajos...?

Era Jungkook, con una chica, pero lo que más le impactaba era el hilo rojo sobresaliente entre ambos.

—No, no puede ser.

—¿Qué tiene? —Namjoon murmuró al ver que Taehyung fruncía el ceño constantemente.

—Ves, te lo dije, no estás aquí por mi, estas aquí porque no quieres ver la realidad, tu y él, NO ESTÁN DESTINADOS Y NUNCA LO ESTARÁN —El tío gritó desde la distancia, pero Taehyung estaba absorto en la escena de Jungkook y la chica besándose como si no hubiese un mañana.

—E-es mentira, yo vi el hilo con mis propios ojos...

—No, no lo viste, porque él hilo no está ahí y solamente tu mente está jugando contigo, tienes más poder del que tu abuelo y Namjoon pueden poseer —El tío volvió a acercarse.

Por otro lado, alguien tocó la puerta de los Kim.

—Hola, ¿hay alguien en casa? —La voz de Jungkook se hizo presente, intento a abrir la puerta, pero esta estaba cerrada al igual que las ventanas qué estaban ocultas por las cortinas oscuras.

—Mierda... —El padre de Taehyung susurró, no era tiempo para eso

—La voz de Jungkook hará que Taehyung se desconcentre, joder, sus miedos lo están cegando del verdadero objetivo —Namjoon dijo y el abuelo giró a verle incrédulo, si bien, lo que había dicho no era mentira, pero, ¿Cómo lo sabía?

—¿Taehyung?

—No, no, no, no puedo seguir con esto —Taehyung intentó correr pero no había a donde ir.

—¿Dijiste algo? ¿Estás bien? —Jungkook volvió a tocar la puerta.

—¡Sáquenme de aquí! ¡No puedo más con esto! —Taehyung sollozó, pero ni siquiera habían pasado 10 minutos desde que ingresó en el agua que ahora estaba templada por sus emociones.

—¡¿Taehyung?! —Jungkook gritó su nombre desesperado, necesitaba entrar a la casa.

Mientras tanto, Taehyung quería salir de dónde sea que estuviera.

—No vas a poder escapar, hay personas a tu alrededor que no son lo que aparentan ser, tu familia te utiliza porque tienes más energía que ellos, estoy muerto, huí de esa casa y dejé al amor de mi vida, pero aun hay tiempo para que salgas de ahí, te ayudare...

—¡No! ¡No quiero seguir escuchándote!

—¡No le importas a nadie, ni siquiera a Jungkook! ¡Escucha lo que te digo! —El tío se levantó de su extraña silla de madera qué ahora se había transformado en metal y el gato que sostenía se esfumó.

Todo para Taehyung era una total pesadilla, hasta que escuchó la voz de Jungkook, él era el único al que quería aferrarse en esos momentos.

Necesitaba salir.

Pero, mierda, no sabía como huir de aquel lugar, sintió una especie de vacío en su pecho, fue entonces cuando su cuerpo se hundió por completo en la bañera.

—¡Taehyung! —La madre de Taehyung exclamó asustada.

Si que estaba jodido.

𖦹

𖦹

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Se están revelando cosas importantes 👀

¿En quién hay que confiar y en quién no? 🫡