✧ 21 ✧
—¡Taehyung! ¡Kim Taehyung!
Mientras Jungkook seguía gritando, por otro lado, Taehyung se arrastraba a sí mismo por encima de la fría nieve.
Ya no podía mantenerse de pie, el abrigo que había tomado no era acto para esas condiciones climáticas.
Y tenía tantas ganas de llorar, porque ni siquiera pudo encontrar la pulsera que Jungkook le regaló.
Sorbió por su nariz roja debido a la nieve que no dejaba de caer sobre su cuerpo.
Llorar dolía también, abrazarse a si mismo no era suficiente.
Creía que pronto iba a morir congelado.
Se sentó sobre la nieve, todo el bosque ya oscurecido le hacia temer demasiado.
Una pizca de esperanza llegó en él, cuando sintió algo sobre su palma protegida por un par de guantes delgados.
Abrió los ojos de más al ver de que se trataba.
La pulsera roja a juego había vuelto a él y se la coloco rápidamente, llevando ambas manos a su pecho, pero su cuerpo ya no aguantaba.
Se tiró de nuevo sobre la nieve, creyendo que moriría de una manera tan estúpida y causada por si mismo.
Cerró los ojos, alejando cualquier pensamiento, al menos morir mientras dormía dolería menos.
No pasó mucho tiempo para que consiguiera el sueño profundo, donde se encontraba a si mismo en un parque lleno de árboles de cerezos con sus hojas cayendo sobre el suelo sin nieve.
Era primavera.
Se dio la vuelta para observar mejor y captó la presencia de un chico dandole la espalda con traje negro y un gran ramo de flores en sus manos.
Caminó con cautela dirigiéndose al chico que le daba la espalda.
Tocó su hombro con la intención de llamar su atención, pero, por alguna razón, no pudo ver su rostro una vez que éste se volteó, ya que los rayos de sol iluminaban toda su cara y únicamente su cabello oscuro resaltaba ante todo.
Esbozó una sonrisa, porque se sintió seguro con aquel chico alto y de cabello oscuro sin rostro.
Entonces dejó de soñar cuando, a la distancia, escuchó a una voz llamándole por su nombre.
—¡¡Taehyung!! —Jungkook cayó de rodillas apretando ambas manos en la fría nieve.
Pero algo removiendose no muy lejos de su campo de visión hizo que su corazón se agitara.
—¡Taehyung! ¿Taehyung? —Su voz se quebró al ver que, definitivamente si se trataba de su Taehyung.
Se levantó rápidamente del suelo y corrió con la esperanza de que el chico estuviera vivo, se agachó para mover su cuerpo y las cejas fruncidas del chico hizo que su alma le regresará.
—Dios, Taehyung —Jungkook sujetó con sumo cuidado la cabeza de Taehyung y este abrió los ojos al sentir que algo lo tocaba.
Jungkook tragó saliva al ver al chico en tal estado, necesitaban llegar cuánto antes a la cabaña.
Pero, eso no lo detuvo y lo abrazó con fuerza, pues pensó que lo encontraría sin vida.
—¡¿Por qué hiciste eso?! ¡Fue muy estúpido de tu parte! —Jungkook le regañó aún con Taehyung en sus brazos, pero el chico no pronunció alguna palabra, más que aferrarse torpemente a Jungkook.
—Qué va... vamos —Jungkook sujetó las piernas del rubio para cargarlo con ambos brazos.
—Puedo caminar... —Taehyung susurró con la voz entrecortada, no podía siquiera hablar por el frío.
—La cabaña está lejos, debemos ir a otra parte —Jungkook comenzó a caminar sin saber a dónde llevaría al chico, pues no recordaba la dirección de la cabaña.
Mientras caminaba, trató de mantenerse de pie lo más que podía, no iba a decepcionar a Taehyung, no podrían haber dos personas congeladas en medio de una tormenta de nieve alejados de las cabañas.
Algo a la distancia, captó la atención de ambos, había un par de faroles iluminando el frío bosque y, justo como Jungkook quería, una cabaña desconocida al lado.
—Esa no es nuestra cabaña... —Taehyung músito con dificultad, pero Jungkook no le hizo caso alguno.
Jungkook bajó a Taehyung para poder abrir la puerta, pero estaba cerrada.
—¡Carajo! —Jungkook exclamó frustrado, así que no tuvo otra alternativa, más que entrar por al puerta trasera y cerrarla con fuerza.
Por suerte no había nadie adentro, abrazó a Taehyung por los hombros para ayudarle a caminar hasta un colchón sobre el suelo.
Taehyung se acomodó con incomodidad, su ropa estaba empapada de nieve.
Jungkook lo observó atento.
—Traes el abrigo qué te regale aquella vez —Jungkook susurró para sentarse a la orilla del colchón.
Taehyung le miró, pero no había tiempo para molestarse y seguir discutiendo, era lo menos que quería hacer, así que se limitó a asentir con la cabeza.
—Ven aquí —Jungkook le tomó de los hombros y le quitó el abrigo rojo lleno de nieve.
—¿Qué haces? —Taehyung le cuestionó, al ver que Jungkook también se quitaba su propio suéter.
Jungkook pasó su mirada rápidamente por la cabaña, intentando encontrar algo para cubrir a Taehyung del frío, aún con la puerta cerrada y las luces encendidas, el frío continuaba.
El pelinegro se levantó para tomar un par de cobijas gruesas de los cajones, Taehyung le miró con curiosidad, pero optó por no decir nada.
Jungkook regresó para cubrir a Taehyung con ambas sábanas, a la vez que también se acomodaba a su lado para abrazarle.
—¿Q-qué haces? —Taehyung le miró con nervios al ver lo que hacía.
—Sí nuestros cuerpos se juntan habrá calor, así que quédate lo más cerca posible —Jungkook explicó y le abrazó lo más fuerte que pudo.
El rostro de Taehyung quedó sobre el pecho de Jungkook, lo que le hizo recordar sobre aquella vez que bailaron en esa fiesta y en la manera en la que Jungkook no le importaba las miradas de los demás, más que hacerle sentir mejor.
El aroma impregnado en la ropa de Jungkook hizo que se relajará, se dio cuenta de que, Jungkook le amaba, a su manera pero lo hacía.
Y Taehyung le correspondía de la misma forma.
Sonrió por inercia al sentir su pecho subir y bajar por su respiración. Entonces el frío que sentía fue reemplazado por la cálida presencia cercana de Jungkook.
Le gustaba, más de lo que podía admitir en voz alta.
Cerró los ojos para permitirse corresponder el abrazó que tanto había rechazado.
Ambos se quedaron profundamente dormidos en esa cabaña desconocida a la que habían entrado por la puerta trasera, pero no importaba si los dos permanecían juntos.
Las horas pasaron, la tormenta de nieve se detuvo y salió el sol de la fresca mañana, reflejandose en la ventana frente a ambos.
—¡Oh! ¿Quiénes son ellos? —Jungkook se levantó con rapidez cuando escuchó voces en idioma japonés.
Si, no esperó que las personas dueñas de esa cabaña regresarán tan rápido.
O no tan rápido, pues ya había amanecido.
—Taehyung —Jungkook tocó el hombro del chico para que se despertará.
—Lo sentimos demasiado, nosotros no... ¡No es lo que piensan! Solo nos estábamos congelando anoche y... esta cabaña fue nuestra salvación.
Taehyung frunció las cejas al escuchar a Jungkook hablar, pues no le entendía nada, ya que hablaba en japonés, entonces se dio cuenta de la presencia de dos chicos con los brazos cruzados mirándole desde la puerta con una expresión desaprobatoria.
Y bueno... Taehyung si tenía ropa a cambio de Jungkook, quien dejaba su cuerpo desnudo relucir a la luz del día, con la excepción de sus piernas, que las cubrían su pantalón de mezclilla.
«¿En que momento se quitó la ropa ese mocoso?» Taehyung pensó al ver que la situación estaba siendo mal interpretada.
—Lo sentimos, nos iremos ahora —Jungkook salió del colchón para colocarse su camisa, Taehyung miró con timidez a los dos chicos e igualmente se levantó.
Jungkook dijo un par de palabras más y los chicos asintieron con una expresión seria.
Cuando por fin salieron, Taehyung sintió que por fin pudo respirar mejor.
—Mis piernas me duelen —Taehyung se quejó una vez que estuvieron lo suficientemente lejos de la cabaña.
—Oye, oye, si piensas que pasó algo entre nosotros no es nada de lo que piensas —Jungkook no pudo ocultar sus mejillas sonrojadas, lo que a Taehyung le causó mucha ternura.
—No me refería a eso.
—De acuerdo —Jungkook apartó su mirada.
—Súbete a mi espalda —El pelinegro se detuvo repentinamente.
—¿Por qué debería hacerlo?
—Porque te salve la vida, no digas nada más y hazlo —Jungkook se agacho un poco para que Taehyung pudiera subirse.
No se quejó ni tampoco se negó, hizo lo que Jungkook le pidió y se subió a su espalda para que le cargará.
—No te entiendo —Taehyung observó la hermosa vista del bosque al que se introdujeron, nada que ver con que casi muere ahí por la noche.
—¿Por qué saliste? —Jungkook preguntó.
Taehyung suspiró, era vergonzoso tener que decirlo, pero sabía que no había escapatoria.
—Bueno... antes de que me perdiera en el bosque, salí a dar una vuelta con Soobin.
—¿Con Soobin? ¿Por qué con él? ¿Ahora salen en secreto? —Jungkook no pudo disimular.
—Ese no es el caso, oh, ¿Estás celoso?
—Sí, lo estoy, no puedes salir con otro chico, me lo hubieras pedido a mí.
—¡Pero yo no se lo pedí! Solo iba a caminar solo y se coló.
—Está bien, no tienes que mentir para convivir —Jungkook dramatizó.
—No se puede hablar contigo.
—Bueno, ¿Qué más paso? ¿Se besaron?
—¡Claro que no! A él le gusta Yeonjun —Taehyung rodó los ojos.
—Bien, continua.
—Bueno... se me cayó algo en el bosque, asi que después salí a buscarlo.
—Tiene que ser muy importante como para que salgas en medio de la tormenta, ¿no?
Taehyung se quedó callado, no quería admitirlo, pero lo que Jungkook le regalo si era importante para el.
—¿Cómo es que sabes japonés? —Taehyung intentó evadirlo.
—No, no me vas a cambiar de tema, dime que es lo que se te perdió, ¿Al menos lo encontraste?
Taehyung miró instintivamente su mano izquierda y la pulsera en ella.
—Fue... la pulsera que me regalaste —Taehyung confesó apenado, no quería demostrar que, todo lo que Jungkook le regalara (incluso el abrigo qué traía puesto) era muy importante para él.
Jungkook se detuvo, a pocos metros estaba la cabaña en donde se quedaban, pero no pudo moverse, fue como si su corazón se estremeciera ante las palabras de Taehyung.
—Eres estúpido, ¿Verdad? ¡No debiste salir con las condiciones climáticas! Podría haberte comprado otro-
Jungkook fue silenciado cuando Taehyung extendió su mano para mostrarle la pulsera sobre su muñeca, después de todo, la había recuperado.
Entonces siguió caminando sin decir alguna otra palabra, se sentía tan culpable al no saber como reaccionar, todo por culpa de la ausencia de amor en su infancia.
Taehyung tampoco dijo nada, lo malo que ambos tenían, era que el orgullo que poseían, les hacía limitarse a muchas cosas.
Jungkook abrió la puerta aún con Taehyung sobre su espalda, todos los chicos e incluso un par de policías dentro de la casa voltearon a verles.
Jungkook bajó a Taehyung, viendo como Seokjin se acercaba rápidamente hacia el chico.
—¿¿Los dos están bien?? Nos tenían muy preocupados —Seokjin sostuvo las mejillas de Taehyung, quien se mantuvo impasible ante su tacto.
—Sí... todo esta bien —Taehyung buscó la mirada de Jungkook, pero éste se había alejado y subió las escaleras sin siquiera voltear a verle una última vez.
De verdad quería comprenderlo, pero era imposible, sus actitudes seguían siendo toscas y agresivas.
Era lo que Taehyung odiaba y seguía odiando de él.
𖦹
𖦹
𖦹
𖦹
𖦹
¿Jungkook va a cambiar? ¿O seguirá siendo la misma persona bipolar? 🫠
Entiendanlo, tuvo una infancia muy dura 😓
Dato curioso: Taehyung con el abrigo rojo se ve como en la portada, solo que en vez de sostener una rosa, sostiene la pulsera que tiene una rosa en medio 🌹
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