2.
Han pasado tres días de que contratamos a James, esta tarde se reúne con nosotros para ir haciendo asuntillos de banda.
Él y yo hemos estado hablando un poco por teléfono desde que le escogimos y no retiro mi palabra: Es un chico encantador.
No quiero que me malinterpreten, tengo mi sexualidad bien definida, pero esto nos ayudará un poco a superar algunas cosas que nos hacen estar en una situación tan desesperada y deprimente como la de ahora.
¿Por qué digo esto? Porque irradia felicidad, irradia calidez, necesitamos a alguien así de nuevo con nosotros. Se podría decir que estoy tomando más en cuenta su forma de ser que sus cualidades como vocalista, pero oye, no tiene por qué ser sólo la voz de la banda, también será uno más de la familia.
Aún así me he ido muy por las ramas dejando de lado el propósito inicial, fock it.
A lo que iba. Hoy por fin conseguimos tener la reunión donde aclararemos todo, él además es también guitarrista como lo era Dave así que nos ahorramos la molestia de hacer otras audiciones para guitarra rítmica.
Con lo que no he contado es con su dirección. Tres días hablando de todo por teléfono y ni sé dónde vive, bravo Lars.
Supongo que, muy incómodamente, tendré que llamarle y preguntarle dónde vive, porque, de verdad, no lo sé. Les he dicho esto a los muchachos y me han mirado raro, seguramente pensaban que ya lo sabía porque no me despegaba del teléfono.
Marco el número y espero a que conteste. De primeras no ha contestado, se estará preparando. No es hasta unos minutos después que se escucha el molesto teléfono retumbar por el salón.
-¿Sí?-Se escucha su respiración algo agitada, me ha asustado un poco pero parece que es por la prisa para coger el trasto.
-Lo siento, Lars... Me estaba preparando, ¿qué ocurre?-Le escucho, se le nota algo nervioso, no nos ha vuelto a ver desde las audiciones.
-Am... Verás... Sé que estos días hemos estado hablando de todo, hasta conozco tu equipo de baseball-se le escucha reír, de más está recalcar su adorable risa-pero... No conozco dónde te hospedas, el dato más importante y no lo sé-.
-Pero... Podías preguntarme esto en la cena-.
Un aplauso para Lars Ulrich.
Mientras escucho sus enamoradizas risas, miro hacia el techo asimilando que acabo de hacer el idiota. No sé con qué excusarme ahora, fock, estoy yo más nervioso que él.
-B-bueno... Quería saberlo de primeras, ya sabes... Por si algún día hay que ir a tu casa o algo...-menuda mierda de excusa, la verdad, para esto mejor digo que lo quiero saber y va.
-No te preocupes, lo hacemos todo en tu casa-más risitas, lo amargado de Mustaine contrasta con lo risueño de Hetfield.
-Está bien... Lamento que la pregunta viniese tan de repente, estás en tu derecho de no contestar...-mierda, Ulrich, ¿la risa del nuevo te deja atontado o qué? Más me vale acostumbrarme.
-Vivo en Los Ángeles. No te preocupes, tengo todo lo necesario para poder vivir más cerca, la mudanza estará en como una semana, os pido un poco de paciencia por entonces-ahora hablaba más calmado, pero sin dejar sus aires de alegría a un lado, la verdad es que vivía muy lejos.
-Pero puedes vivir con nosotros, hombre...-intervine, ¿para qué comprarse una casa cuando puede estar viviendo aquí? Es un poco tonto.
-Bueno... Ya hablamos después-rió una última vez y colgó, creo que le he enrollado al teléfono, ups...
Jason que pasaba por ahí me ha mirado bastante mal por mantenerle con el aparato en la oreja, sólo me he limitado a reír, es decir... La situación es graciosa, ¿no? Ok, ya, si llega tarde es culpa mía.
No es que sea fan de la comida del Newkid, de hecho, sabe a culo, no os voy a engañar, mas le he encargado que empiece a partirse el cráneo con hacer una cena digna de apreciar porque el chico se va a quedar en casa a cenar, y si es necesario, a dormir, no voy a hacer que se pague un hotel cuando nos tiene a nosotros, vaya tontería.
Es cierto que ni hemos comido, le va a llevar unas horas de coche llegar aquí, yo siempre quiero que todo esté perfecto. Y como quiero que todo esté perfecto, pues pedimos unas pizzas para comer y santas pascuas.
... ¿No me estaré preocupando mucho por el muchacho? Nah, que quiero que se sienta como uno más, y lo voy a conseguir.
***
El timbre acaba de sonar. Juro que en mi vida había saltado tanto del sofá para recibir a una persona, pero la ocasión lo merecía.
Escucho al Newkid y a Kirk de fondo entre risas pidiendo que me calmara, no me interesa.
-Ya estoy aquí-ríe sólo como él sabe nada más abro la puerta.
Su vestimenta ahora es similar a la nuestra: Camiseta de tirantes, pantalones vaqueros rotos por las rodillas y zapatillas bastante desgastadas. Me llama especialmente la atención que quiera vestir como nosotros, de hecho, la camiseta es de Misfits, de nuestras bandas favoritas.
-Bienvenido a casa, pasa, hombre-me aparté para dejarle entrar, los muchachos le recibieron desde el sofá con un saludo, luego procedieron a un apretón de manos.
-¿Muy ajetreado el viaje?-preguntó nuestro guitarra líder.
-Bastante. Vengo muy cansado, sobre todo porque he cargado las maletas desde la plaza hasta aquí yo sólo-contestó apartándose el pelo de la cara.
-Podías habernos llamado-intervine.
-No quería causar molestias-.
Esa risilla era muy típica de él, pero por algún motivo se vio como si lo dijera en serio.
Llevé las maletas a la habitación de invitados con ayuda de los otros chavales, a él le habíamos dejado que se pusiese cómodo y toda la vaina, en fin.
Lo cierto era que estas valijas pesaban un quintal. ¿Qué traía aquí? Su guitarra no era porque la ha llevado Newsted. ¿Se ha traído todo el armario? Voy a pensar en eso.
Qué marujo soy, ni que fuera una tía.
Una vez dejamos todo el cargamento en el que por la próxima semana sería su cuarto, comenzamos a charlar. Le comenté de paso que no se molestase en pagarse hotel, hostal o donde tuviera pensado pasar los siguientes siete días.
El charlar durante todas estas dos o tres horas nos ha ayudado a ver un poco cómo es: Es muy risueño como yo he podido comprobar, habla bastante calmado y con pocas palabras, se muestra un tanto nervioso e inquieto, incluso puedo ver que cada dos por tres está cruzando los brazos y cambiándose de postura. Tenemos un vocalista bastante curioso por lo que veo.
Algo que me ha llamado la atención pero no me he atrevido a decir es los anillos de su mano. Esto puede parecer algo normal, pero no si se ve que uno de los anillos, es idéntico al de la calavera de Cliff, y si no idéntico, parecido.
Inevitablemente le mencionamos aquello y se ha mostrado igual de incómodo que cuando le dijimos de llamarnos para ayudarle con su equipaje y ha respondido que no quería molestar... ¿Lo estará diciendo en serio o es puro nerviosismo?
De vez en cuando bromeábamos para que se calmara y se acostumbrase, parecía que iba cogiendo confianza de a poco, nos bastaba.
Ahora que la cena estaba preparada, el rugido que nuestros estómagos producían fueron suficientes para sentarnos en la mesa con todo el entusiasmo.
Mientras cenábamos, conversábamos de cosas triviales, incluso sobre música para ver cuáles eran sus principales influencias, lo normal.
Hasta que surgió la siguiente conversación.
-Te vemos bastante comilón, James-empezó Kirk de forma amigable, el nombrado le devolvió una cálida sonrisa.
-Ya sabéis, mido metro ochenta y cinco y tengo jamones por muslos, supongo que es lo que tiene-sonrió nuevamente, yo, que me sentaba a su lado, no podía parar de mirarle.
-La verdad, Cliff medía metro ochenta y ocho y estaba como un palito, y eso que comía lo mismo que tú-seguí, me devolvió la sonrisa a mí también, espero que lo que acabe de sentir sea la digestión.
-Será por metabolismo, ¿no crees?-y siguió comiendo.
Hubo un silencio en el que sólo se percibían los cubiertos chocando contra los platos y nuestras mandíbulas triturando los alimentos. Decidí seguir con la charla una vez miré por el rabillo del ojo cómo James se limpiaba con la servilleta.
-Veo que te gusta mi comida-se me adelantó Jason sonriéndole, los hoyuelos del rubio no se hicieron esperar.
-Ha estado buenísima. Muchas gracias por dejar que me quede-nos dedicó una sonrisilla a cada uno.
-¿Cómo no? Es tontería que tengas que pagarte una semana de hotel cuando nos tienes aquí-Kirk también acababa de terminar su cena, la sonrisa del ojiazulado se hizo algo más flojilla mientras desviaba la mirada.
-No me habría importado, he estado en un hotel muchas veces, así que no sería una ocasión rara-fruncí el ceño ante aquellas palabras, los hoteles eran caros, ¿cómo eso de permanecer en un hotel muchas veces?
-¿Y por qué has pasado en un hotel muchas veces?-pregunté, su sonrisa se borró por completo y miró hacia abajo, posteriormente volvió a sonreír comenzando a recoger todo lo que había usado para la comida.
-Viajo mucho, eso-no se veía muy seguro de lo que decía, incluso nos dedicamos entre nosotros tres una mirada dubitativa, otro silencio antes de que se levantase de la mesa-gracias nuevamente-y se alejó para empezar a recoger todo.
Volvimos a mirarnos extrañados. ¿Cómo es que viajaba mucho? No es por ofenderle, pero no se le veía de una familia con una situación económica muy buena y viajar tanto como para haber estado en un hotel muchas veces se veía... Raro.
Kirk, algo incómodo, se levantó a los pocos segundos para ayudarle y seguir conversando con él, se les escuchaba reírse y hablar de cosas nuevamente triviales, mientras yo y Jason finalizábamos nuestra cena, siendo yo el último.
Me ahogué en mis propios pensamientos volviendo a comerme el coco con aquellas palabras. ¿Por qué viajaba tanto si no se veía de altos recursos para ello?
Esas palabras tan negativas e inseguras camufladas tras una risa tan dulce no terminan de encajarme.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro