🌼 17: El Alfa de JiMin
Las mejillas de JiMin tomaron un fuerte color rojizo cuando esa mañana, dos tipos llegaron para regalarle unas flores, muy bonitas por cierto. El menor sólo pudo agradecerles y rechazar su amable invitación de salir con ellos.
Hoseok era testigo de lo mucho que su mejor amigo cautivaba a todo mundo, no era una sorpresa, a él también lo había cautivado la primera vez que lo conoció en la escuela.
Sin embargo, ahora que estaba en su segundo año de preparatoria, había crecido el interés de muchos alfas por cortejarlo y tratar de tener una oportunidad con él.
No era nada del otro mundo, sólo que la mayoría de ellos esperaban realmente tener una oportunidad, incluso más de una vez pensaron que Hoseok era su pareja y que por esa razón estaban juntos todo el tiempo.
JiMin era la clase de omega que podía envolver a muchas personas con sólo sonreír, ser amable y divertido. El simple hecho de ser él, lograba dejar a más de uno anonado, incluso a los betas y otros omegas.
Sin embargo, siempre que alguien nuevo llegaba para pedir su permiso de cortejarlo, de salir con él o tener una pequeña oportunidad de algo, JiMin siempre les decía que ya tenía un alfa.
Algunos eran comprensivos y lo dejaban de molestar rápidamente, sin ser malas personas seguían hablándole como si nada, y lo agradecía, pero en cambio, había algunos que se sentían rechazados cruelmente y nunca volvían a hablarle.
En su mayoría eran alfas mujeres las que se sentían más rechazadas hacia él. Pero no era su culpa, él ya tenía un alfa y aunque no sean pareja formalmente con un lazo, le pertenecía sólo a él.
—A veces me siento mal por todos ellos — JiMin deja salir un fuerte suspiro, aunque no está triste de verdad, se siente un poco mal —, es que... de verdad todos son lindos conmigo, siempre tan amables y comprensivos, me da tanta pena verlos llegar con sus flores o cartas, dulces o bebidas para regalarme y que al final yo los termine rechazando.
—Ellos lo hacen porque quieren — Hoseok dijo —, tu no los estás obligando a darte eso. Además, hay algunos que todavía te regalan cosas de vez en cuando aunque ya los hayas rechazado, ese es el encanto que tienes en ellos.
JiMin arrugó la nariz y tomó del brazo a Hoseok para moverlo rápidamente.
—Este fin de semana iremos a ver tu torneo de basquet, YoonGi dijo que te avisara. — le sonrió en grande, Hoseok -el ahora rubio- le devolvió la sonrisa a su amigo, le agradaba tener personas tan cercanas a él, a pesar de que no eran familia, se sentía muy bien tener el apoyo de JiMin y los demás.
—Siento que vamos a perder, últimamente lo hemos hecho peor — Hoseok frunció el ceño —, a veces siento que fracasamos mucho.
—Tu confía Hobi, lo harán muy bien.
El rubio asintió y abrazó por los hombros a su amigo, esperaron en el salón hasta que su maestro llegó, pronto el lugar comenzó a llenarse con tantos compañeros. Tenían sólo dos horas de clase más y por fin se acabaría, JiMin amaba estudiar, no se quejaba, pero últimamente se le estaba haciendo irritante.
Cuando las clases terminaron, ambos chicos se tomaron su tiempo para salir de ahí con calma. Los dos querían ir a comer algo antes de ir a casa, pero Hobi tenía entrenamiento por la tarde y JiMin aún tenía tareas de otras materias que acabar.
Así que ambos se despidieron en cuanto estuvieron en la puerta de entrada.
JiMin se dejó caer sobre una de las bancas cercanas al estacionamiento, tenía que esperar por YoonGi, pues él había prometido venir por él a la salida. Ahora que había pasado casi un año y medio desde su presentación como omega, YoonGi se había vuelto aún más protector con él.
Nada del otro mundo, ni tan hostigador pero tampoco tan desinteresado. Al alfa le gustaba cuidar de él, verificar que siempre estuviera bien, y al lobo de JiMin le gustaba, le gustaba tener la atención del mayor sobre él.
Claro que ahora el término de gustar se refería a otra forma de como había sido antes.
YoonGi era aún más cariñoso, fácil de convencer y era muy probable que siempre estuviera de buen humor. JiMin por lo regular siempre se llevaba lo mejor del alfa, abrazos, beso en la frente, tomar de su mano y dormir juntos.
Ambos tenían sus habitaciones separadas como siempre, en cada celo del omega, el mayor se quedaba con él, le compraba los supresores necesarios y se tumbaban a dormir en la cama, rodeados de las feromonas de ambos. Pero cuando el celo del Alfa llegaba, YoonGi tenía que salir de casa y refugiarse en algún otro lugar.
Esa era una de las pocas cosas que a JiMin no le gustaba, el hecho de tener lejos al mayor por tanto tiempo, a pesar de que comprendía porque se apartaba, le gustaría poder pasar algún celo del Alfa con él, no obstante, sabía que no era correcto.
Al menos no por ahora.
Sabía que YoonGi al ser un sangre pura, durante su ciclo de calor, perdía por completo el control, era consciente de las cosas que hacía pero había ocasiones en las que no tenía uso de la razón. Lo bueno de eso, es que se refugiaba solo en un cuarto de hotel.
Estaba por cumplir los 17 años, poco a poco comenzaba crecer cada vez más, ahora le llegaba hasta la curva del cuello a YoonGi. Había obtenido más masa muscular y ahora su cuerpo estaba mejor trabajado, le gustaba hacer ejercicio pero no tanto al grado de estar horas y horas, simplemente correr y hacer unas cuantas sentadillas habían sido suficientes para él.
Su lobo soltó un extraño quejido de emoción y su corazón se alegró al escuchar el claxón del auto que ya conocía. JiMin se levantó de aquélla banca y tomando sus cosas, se dirigió rápidamente hasta ella.
Abrió la puerta y rápidamente su sonrisa se extendió aún más al ver al alfa. Éste se veía más tranquilo y feliz de verlo, JiMin se acercó, hundiendo su nariz entre el pecho del mayor y sintiendo suaves caricias en su nuca por parte del Alfa.
—Que bueno que llegaste, creí que tendría que irme solo. — hizo un ligero puchero, YoonGi picoteo con la punta de sus dedos sus labios.
—¿Hoseok no se quedó contigo?— preguntó, JiMin negó mientras tiraba su mochila a la parte trasera del auto.
—Tiene entrenamiento con su equipo, ya le dije que iríamos este fin de semana a verlo. Sus padres no podrán ir, pero al menos nosotros sí.
JiMin estaba feliz, pues comenzó a soltar feromonas, YoonGi aspiró el aroma que tanto le gustaba y se acercó a JiMin para dejar un beso sobre su coronilla.
—Bien, pues entonces vamos a casa. Aún tengo cosas que hacer en la oficina, así que tendrás que comer tu solo, lo siento — YoonGi dijo, mientras ponía en marcha el auto —, trataré de llegar temprano hoy, mamá se tomó un descanso porque le dolía mucho la cabeza desde ayer, así que le dije que tomaría su lugar por hoy.
—¿Está bien?— JiMin preguntó, a ser verdad, a todos les preocupaba la condición de la madre de YoonGi, era una mujer sumamente trabajadora y digna de admirar, querida por muchas personas por la buena persona que era, sobre todo para JiMin, quien la vio como una figura materna al tenerla siempre cerca.
—Sí, sólo es un dolor de cabeza.
JiMin asintió, guardó silencio el resto del camino, pasaron a comprar algunas cosas para la comida y la cena, ya que YoonGi comería fuera de casa, debían comprar lo suficiente para JiMin.
—YoonGi — JiMin murmuró, tomando con fuerza su brazo y pegándose a su lado —, ¿Puedo preguntarte algo?
—Ya ni siquiera deberías preguntarlo. — el mayor le sonrió, siguieron caminando por el pequeño supermercado para poder salir de ahí.
—Uh... bueno — sonrió tímidamente, era muy probable que YoonGi se tomara sus palabras con otras intenciones, pero necesitaba quitarse la duda de encima —, ¿para qué sirve una marca temporal? siempre he escuchado que la mencionan, pero sinceramente no conozco cual es su objetivo, si sólo es temporal.
YoonGi se puso rígido, pudo sentirlo al tenerlo tan cerca y estar agarrado de su brazo.
—Pues... ya sabes, es como una marca pero temporal... — trató de explicarse, fallando en el intento, pues JiMin había soltado una carcajada al escuchar su explicación —, oh, no te rías de tu mayor, niño.
—Es que...— JiMin se secó las lágrimas falsas para dramatizar un poco —, eso ya lo sé Yoonie, pero, no lo entiendo bien.
—Bien, veras... — JiMin puso atención a la explicación de su mayor —, es como las demás marcas, igual la puedes hacer durante un ciclo de calor con tu pareja o en cualquier situación, siempre y cuando ambos estén de acuerdo. Por lo regular, duele mucho más cuando ocurre fuera del celo o cuando no se practica ningún acto sexual, ya que no hay otra clase de sensación o placer físico que te distraiga del dolor de una marca, cualquiera de las dos marcas duele, pero está sólo es temporal, y por lo regular lo hacen parejas que aún no están preparados para estar juntos como una pareja formal, es decir, que aún quieren esperar un momento en específico pero igual quieren mantenerse unidos y con una marca que les haga saber a los demás que hay alguien.
JiMin guardó silencio, pensando cuidadosamente en las palabras del Alfa. Le parecía muy extraño el hacer una marca temporal, pero ahora que lo escuchaba mejor, tal vez era una buena idea, el hecho de tener una marca que aún no fuera permanente les hacía saber a los demás alfas que ya había alguien en tu vida esperando por ti.
Apretó un poco el agarre en el brazo del mayor y dijo: —¿Podemos tener una marca temporal?
YoonGi se tropezó con sus propios pies y casi cae al suelo. JiMin tuvo que reprimir una risita para no parecer un loco, bueno, ahora sabía que eso había tomado desprevenido al alfa.
—Bueno pues... — YoonGi no sabía que responder —, creo que mejor esperamos el momento indicado para una marca permanente.
JiMin rodó los ojos y sacó un puchero. —Pero alfa, nadie en la escuela me cree que tengo pareja, y me siento algo mal al rechazarlos a todos, siento que han de pensar que les estoy mintiendo y sólo los rechazo porque no me gustan, lo cual en parte es cierto, no me gustan de esa manera, pero me agradan la mayoría, y a veces no puedo evitar sentirme triste por ellos. Supongo que tengo un corazón de pollo.
YoonGi torció una sonrisa y abrazó por los hombros al omega.
—Escucha, no tienes porque sentirte mal, está bien rechazarlos cuidadosamente, eres un chico gentil y amigable con todos ellos, no es de sorprender que quieran intentar cortejarte. No necesitas una marca para probarles algo.
JiMin mordió su labio con fuerza.
—Pero es que... a mí también me haría mucha ilusión tener una marca temporal con usted.
YoonGi se quedó en blanco. Bien, eso no se lo esperaba, creyó haber captado la indirecta la primera vez, pero escucharlo de JiMin directamente le puso nervioso.
—¿Qué tal si mejor intentamos otra cosa?— preguntó el mayor, teniendo una idea de lo que podría funcionar, después de todo, conocía bien a JiMin, sabía que tampoco se negaría a su idea —, puedes comenzar a usar mi ropa cada vez que vayas a la escuela, ya sea una playera o sudadera, si quieres también puedo bañarte de mi aroma cada vez que te vayas o en cualquier rato, así al menos los alfas podrán percibir el aroma de otro alfa en ti.
JiMin quiso objetar, realmente quiero hacerlo. Pero, ¡le gustaba mucho esa idea! utilizar la ropa de tu pareja siempre le había parecido algo tan íntimo, y no podía negarse a recibí el aroma del Alfa en su cuerpo, amaba su aroma, tranquilo y fuerte, pero no tanto como para abrumarlo.
—¡Bien! Pero... promete que en un futuro sucederá.— el menor estiró su meñique para cerrar su promesa, YoonGi no tuvo que preguntar a que se refería, pues lo sabía.
Unió su meñique con el del menor y jaló de su mano para dejar un beso en aquélla zona que los unía.
—Lo prometo, en un futuro obtendrás una marca. Y no será temporal.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro