Capítulo 4: Tratando de calmar la tempestad.
Al igual que Lars, yo también tenía mis ataques de pánico, él se enojaba y yo lloraba, éramos opuestos en ese sentido. Eramos, además, opuestos para "desquitar" esos ataques, él huía y yo trataba de calmar la situación.
Mientras Lars no estaba, yo era quién tenía la estúpida "misión" de soportar los berrinches de James, ya sea borracho o sobrio, el punto es que él no dejaba de discutir por toda cosa y tópico que existiera. Su favorito, claro está, era Jason. Aún no podía soportar que él se haya ido, bueno, nadie en Metallica lo soportaba, sólo que al menos yo lo había superado y quería salir adelante. Mientras que éstos dos... uf, no cesaban sus peleas idiotas.
No entraré en enormes detalles, no merece la pena.
Sólo me limitaré a decir algo muy idiota: llegué a dejar de lado a mi esposa para querer resolver esos problemas, pero, en ves de solucionarlos, acabé huyendo como un marica.
Tuve miles de actos que sólo representaron cobardía, quise mostrarme fuerte en el documental y no pude.
Ups.
Lo he olvidado, no tomar el tema del documental, vale, disculpen, es que allí también se muestra bastante de nuestro dolor, sólo que los fans no lo comprenden y sólo ven a James como "el alcohólico que va a depresión", mientras que a Lars y a mi nos tachan de "llorones", no, esos idiotas no comprenden nada.
No saben que... Oh, vale, ojalá Lars lea ésto pronto porque ya se me ocurrió un título para estos escritos: "Invisible Kids", ¿por qué? Porque así estuvimos toda esa época, todos preocupados por James y nosotros en el olvido.
No es que yo quiera despreciar al dolor de mi amigo Hetfield, para nada. Lo que ocurre, es que no queremos tocar el tema de su rehabilitación muy a fondo porque nosotros NO vivimos esa experiencia y ya todos saben de aquel tema, entonces, sería repetir una y otra vez la misma mierda. Sólo se hablará de su rehabilitación de manera objetiva, va, pero eso lo diremos más adelante.
Bueno, lamento si estos escritos son muy vagos, ando sin inspiración y sólo quería manifestar mi descontento en aquel tema.
Resumir que yo en esos años fui un marica de primera y que sólo lloraba, huía o trataba de calmar las peleas de James y Lars, nada más, no obstante... No significa que nunca haya sufrido algo aparte a eso, tuve mis demonios internos también.
Espero que no se aburran con estos párrafos tan vagos de contenido, seguro Lars mañana viene para contar algo mucho más interesante.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro