Siempre supe que la vida de un héroe no era facil.
La vida de un adolescente tampoco lo era.
Lo peor es tener que vivir soportando a ambas y sin tener a nadie que te ayude con problemas personales.

La última vez que interactué con Danny fué cuando derrotamos a toda la multitud de fantasmas que habían tomado la ciudad. Junto con Tucker, Jazz, Danny y yo habíamos hecho un buen equipo para derrotar a ese grupo de fantasmas. Una vez todo vuelto a la normalidad todos aclamaban a Danny, ¡Era su heroe! O al menos la mayoría pensaba eso. Tuvo un poco más de atención que antes, algo que debía alegrarme pero con el tiempo comencé a sentirme sola y olvidada.

Que se suponia que era eso, ¿algún tipo de karma? De tanto tiempo que lo odié, lo desprecié y al final tratando de ser su amiga y comprenderlo me avandonara.

No, él no se había olvidado de mí, aún hablabamos en la escuela, de vez en cuando compartíamos chistes y reiamos animadamente pero no volvimos a hablar en privado de algo más serio.

Temo decir que en verdad me ilusioné con el niño fantasma, y al final eso fué lo que se convirtió, en un recuerdo fantasma, como si no hibiera existido.

Había comenzado a adorar su compañia, me gustaba su personalidad incluso la ultima vez supo como animarme después de un mal día.

Me gustaba, es solo eso.

Pero ahora él está disfritando una breve victoria como héroe fantasma de la ciudad y yo aquí pareciendo una tonta esperandolo.

Esperandolo a que llegara como siempre lo hacía por la tarde.

—¿Me extrañaste; Sam?—Y ahí estaba de nuevo su voz, esa voz que sabía que nunca se iría de mi mente.

—Mas de lo que crees.—Respondí creyendo que se tratase de algún tipo de imaginación.

—Yo tambien te extrañé si te lo preguntas.—Volví a pensar que todo era ficticio hasta que él tomó mi mano.—Tenía miedo de venir a hablar contigo. ¿que puedo decir? No soy bueno hablando con las personas, después de todo lo que pasé, ¿quién asegura que sé como hablar frente a alguien? Pero eso no importa ahora, sabes, simplemente quería decirte gracias por nunca haberme dejado solo.

Repentinamente él me abrazó y correspondí a su abrazo. En eso mi mente recordó algo, dicen que del odio al amor pero esa idea me parecía absurda...a este punto múchas ideas me parecían absurdas.

—Tenia miedo de verte. Pensé que tal vez ya no querías ser mi amigo, te habías olvidado de mí. Me tomó tanto tiempo comprender lo cuanto que me gustas.—Musité cerca de su oido y sonrojandome al instante.

Recordé de nuevo mil cosas...

Cuando recién hablamos..

Cuando pareciamos que al fín congeniabamos.

Cuando él me besó..

Y cuando mis padres me querían llevar a la fuerza a vivir a otra ciudad por el simple hecho de no aceptar a Danny y decir que era una mala influencia.

Esperé segundos por alguna reacción  de parte de Danny pero no hizo nada, hasta que separo ese abrazo.

Me miró a los ojos y me tomó el rostro con sus suaves manos.

—Yo solo sé que no me quiero ir de tu lado.—Y con un sonrojo en sus mejillas me besó. Y tan de pronto tome esa iniciativa de rodear su cuello con mis brazos supe yo tamppco dejaría que él se alejara de mi lado.

—Te amo.

***

Todos tenemos problemas, claro, inclusive la novia del heroe de la ciudad, pero podemos mediarlos hablando (con la ayuda) de la persona correcta.

El día de escuela esa vez habia sido más de relajo, pues gracias a que un profesor había faltado habiamos tenido horas libres para hablar a tono alto y reir a carcajadas.

Tucker y Danny jugaban al típico juego de fuerza y evidentemente Danny tenía mas pros. Y yo me la había pasado garabateando en mi cuaderno, creando tan repentinamente un tipo de logo DP. "Perfecto para el heroe de la ciudad" pensé fantaseando.

Y en el momento en que Danny ganó el juego contra Tucker, alguien golpeó la mesa de ellos dos. Valerie estaba enfrente de ambos, Tucker intentó coquetearle pero ella lo ignoró y volteó a ver a Danny.

—Um, alguna vez leí que si una persona estuvo contigo cuando eras nadie, se merece estar contigo cuando lo eres todo. Danny, eso es una indirecta muy directa, entonces dime, ¿te gusto?—El tono coqueto de Valerie me molestó pero no queria pelear antes, sabía que Danny tomaría la decisión correcta.

—Valla, una frase muy sabia. Y sabes algo, si hubo una persona que estuvo conmigo en todo momento, es Sam, asi que respondiendo a tu pregunta, No.—Exclamó Danny tan firmemente, yo quería reir al igual que Tucker y si nos reimos y Valerie se sintió humillada.

—Nadie me humilla Daniel. Y ahora que lo recuerdo, temgo un secreto que podría interesarte.

—Vamos, dilo, no creo que alguien te crea.—Puso su codo sobre la mesa y su barbilla en su mano.

—Valerie, debes superarlo y aceptar la decisión de tu amigo, por que eso es lo que hacen los amigos, ¿no es así?

—Si, deberia pero Danny ya no es mi amigo.—Notablemente molesta se giró y salió del aula con ese ego tan parecido al de Paulina.

Los tres reimos una vez que ella se fué y Danny se acercó a mí rodeandome por la cintura.

—Ok eso fue divertido pero ¿les confieso algo? Me sentí como un bullying.—Dije como broma.

—Ja ja ¿es enserio, fue divertido?—Danny rió.

—Si, solo un poco.

—Lo bueno es que ahora solo estamos tú y yo.

—Por siempre, sin ser invisibles.

Fin.

Si, creo razonable que me maten por este final tan abrupto, pero mi humilde declaración es que no soy tan buena con los finales.
Sin mas que decir en mi declaración, les vengo a agradecer por leer esta humilde historia Fanfic. Mil gracias por votar y comentar.
Y aqui me despido, nos vemos luego en una proxima historia Facfiction.
Bye ♡♡♡