Un Investigador de Primera - Parte V
Buscó albums que lograran animarlo como en los viejos tiempos, pero parecía que todo conspirara en su contra. Spinetta, Velvet Underground, Radiohead y The Cure fueron las primeras bandas en centellear frente a sus ojos, aunque, por suerte, la quinta opción resultó ser la solución: "Brown Sugar" fue el ganador que entró en su equipo de música y resonó con potencia en la casa. No pudo evitar zamarrear las piernas un rato y tararear al mismo tiempo mientras tomaba su divina bebida bien fría. Pasado el rato, se encontraba eufórico y en negación, por lo que al terminar cambió de disco a uno de los "Faces" para seguir con el rocanrol y abrió otra fresca. Más o menos a las nueve de la noche, el timbre sonó y no era otro que el mismísimo Matías, quien parecía haber percibido el malestar de su amigo. Sorprendido y alegre, lo invitó a pasar y puso una banqueta frente a la cama, ya sabiendo cómo funcionaba esto:
— ¿Qué pasa, Adri?
— Ni yo sé bien, la verdad. Creo que me siento más insignificante que la mierda.
— ¡Qué dramático!. ¿De dónde salió todo ésto? - Matías se extrañó un poco, notaba a su amigo legítimamente consternado y eso no era normal.
— ¿Por qué garcha tuvo que morir Miguel? Él era el que sabía todo de la mierda a la que nos enfrentamos, él era el que me podía enseñar a conocer mis habilidades y él fue la primera persona en mi vida que creía que podía hacer algo grande. Sin embargo, a pesar de haberlo logrado, no sólo no vivió para ver que tenía razón sino que estoy como un pelotudo no sabiendo qué hacer con todo lo que pasa mientras sigo arriesgando a mis amigos. Tanta forrada el año pasado para nada, sigo acá sin saber qué carajo hacer y como si fuese poco, aparece esta mina que es mil veces mejor investigadora que yo cayendo directamente en la agencia que con tanto esfuerzo levantamos a presumir de lo superior que es y lo que más, más y más me rompe los huevos es que tenga razón. Ni siquiera sé si puedo protegerlos de Horacio Michelis, que ahora está ocupado pero es cuestión de tiempo que venga con todo por nosotros. No tengo idea de nada, sólo estoy improvisando - Se quebró, Adriano, mientras luchaba con todos sus esfuerzos por no llorar.
— Uff... Por dónde empezar. Creo que te entiendo mejor, ahora. Mirá, no quiero parecer el Ravi Shankar o como se llame, pero creo que tenés expectativas muy altas. ¿Vos sos consciente que todavía no pasó ni un año desde que encontraste el cuerpo en José León Suárez? La Donna fue rescatada por el viejo hace veinte.
— Lo gracioso es que ni siquiera "encontré" el auto, Miche me orientó hacia las evidencias y resaltó las cosas que tenía que saber para que entre como un salame. Yo también hace veinte años que sé de mis poderes y ¿Qué hice con ellos? Nada, absolutamente nada.
— Si lo hubieses hecho, estarías muerto como los otros y lo sabés. ¿Por qué estás tan afectado? - Realmente no terminaba de entender, el Gordo.
— No sé, me debe estar cayendo la ficha de todo ahora. Entre lo de Horacio y lo de Virginia, siento que todo está muy por arriba mío. Que entré a la guerra con una pístola disparando al aire y nos están recibiendo con lanzamisiles. ¿Qué hago? ¿Cómo los protejo a ustedes? ¿Cómo nos salvamos de esto?
— Se ve que todavía no entendés, así que voy a ser completamente directo y franco. Somos tres personas y un fantasma que literalmente no tienen nada que perder y estamos juntos porque creemos en vos. No sólo logramos derrotar al turco, sino que ya el equipo tiene dos maguitos. Sólo dale tiempo a Laura, ella también puede ser muy fuerte.
— Lo sé y no dudo de ella ni de nadie, sólo me siento un idiota.
— Bueno, recomponete cuanto antes porque deprimirse mientras te persigue una mafia, la policía y el poder judicial es más peligroso que meternos los cuatro en la boca del lobo - Sentenció, Matías, mientras dejaba a su amigo pensando -. Si tanto lamentás sentirte inferior al resto, hacé algo. Investigá, ensuciate las manos y buscá soluciones. Vos sos así, esto es sólo un malestar. Decís las palabras justas, pensás antes de hablar o hacer y te preocupás con honestidad por la gente que te quiere. Dejate de flashear boludeces y compartime una cerveza que tengo sed.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro