Ya han pasado dos semanas desde el misterioso asesinato de aquella chica, la verdad no es el primer asesinato que veo - una vez con 7 años unos vecinos que teníamos, "Los Labianca", mataron a su sirvienta por delatarlos a la policía - pero este tiene algo un poco extraño, y es que la verdad una pieza de ajedrez no encaja ahí - Pearl Watson - se llamaba la chica: una adolescente sin pasado, sin familia, una solitaria... la verdad. Quizás la confundieron con alguien más y le dispararon, ¿pero qué hacía en la puerta de la casa de Meryl? ni siquiera fue invitada a la fiesta - son tantas preguntas.
La verdad me siento un poco estresado, han sido dos largas semanas de interrogatorios y preguntas por parte de la Policía. En estos días he estado pensando en lo mierda que es la vida, o sea, estar vivo es un peligro - literalmente - un día estas aquí y al otro, al otro día pues quien sabe si vas a estar.
La mayoría de las personas vivimos con miedo, con miedo a no oír lo que queremos escuchar en voz de alguien, a que nos decepcionen, miedo a que no se nos den los planes que tenemos, en fin tenemos miedo a vivir y eso es lo que me preocupa del ser humano - ¿acaso hay más vidas? - si solo hay una porque pasamos por ella de puntillas?, la vida es para vivirla, hay que correr, bailar, cantar como si no hubiera un mañana, gritar, llorar, follar, reír, besar.
Hasta me he planteado visitar más seguido a mi madre... decirle que la quiero, después de todo es lo mejor que me ha pasado en la vida. Hace un tiempo pensé en tatuarme - creo que ha llegado el momento.
Después de la fiesta no he podido hablar con Meryl, ni mencionar lo que estábamos a punto de hacer antes de escuchar el disparo que puso fin al momento en que la mayor de mis fantasías se haría realidad - aún no me creo que estaba a punto de montármelo con ella - maldito asesinato - tengo un mal presentimiento con todo esto y las palabras de mi madre retumban más que nunca en mi cabeza - "Nada es lo que parece" - cuanta razón terminará teniendo?

Siento que mi vida está a punto de cambiar y creo que antes de lo que me espero el puñetero destino me lo va confirmar...