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Sé que estabas mal. No me quisiste decir el porqué. Vamos cariño, no me gusta que te hagas el dificil, porque los dos sabemos que no eres así.

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Me lo dijiste, ¿Para qué me lo cuentas si no aceptaras mi "ayuda"?. ¿Solo para desahogarte? Ah, que tierno que no te guste preocupar a los demás. Tranquilo, no me preocupo, porque ahora mismo estoy siendo egoísta con lo que pienso.

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Estoy inundada en dinero cariño. Tranquilo, no presumo solo digo que podría ayudarte a arreglar tu falta de dinero.

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¿Por qué quiero hacerlo? Porque si solamente prestas atención a aquello. ¿Dónde quedó yo? ¿Dónde queda mi juego? Quiero que el centro de tu atención sea solo yo, que disfrutes de mi juego tanto como yo, que caigas en el.

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¿Piensas en mí como alguien débil y buena persona? No lamentaría decirte que te equivocas, solo me ves como alguien que tú creaste en mí. Me hago pasar como alguien que no rompe ni un plato e insisto en "ayudarte" aunque verdaderamente este pensando en mi felicidad.

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Esperaré a que llegues a mí, no te preocupes.

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