Peter estaba en su habitación sentado en el suelo mirando algunas fotos en su teléfono. Todas de Rose y él. Sus ojos estaban rojos pero para este punto ya no tenía más lágrimas que derramar. No ayudaría a nadie si se quedaba llorando pero nadie parecía necesitar de su ayuda en ese momento. Sólo le quedaba sentarse y esperar alguna noticia. Todo el mundo le había dicho que no necesitaba sentirse culpable por lo que pasó, pero el pobre chico no podía evitarlo.

—¡Peter! —reconoció la voz de Pietro al otro lado de la puerta al mismo tiempo que comenzaba a golpear con la palma de su mano.

Suspiró profundamente antes de ponerse de pie y dirigirse a abrir la puerta sin muchas ganas. Iba a pedirle a Pietro que lo dejara en paz pero en cuanto vio su expresión, supo que algo había pasado. Algo bueno.

—¿Qué sucede?

—Rose —dijo con una gran sonrisa— logró hacer una llamada a Stark hace unos minutos. Tony me pidió que te lo dijera. Además, parece que tienen una idea para abrir el portal. Ya mandaron a llamar a Strange y a Scott Lang para que ayuden.

—¿El que se hace hormiga?

—Sí. Quieren armar una máquina del tiempo interdimencional.

—¿Eso es posible? Ni siquiera han sido capaces de armar una máquina del tiempo y ahora quieren una que además sea interdimencional —reflexionó un poco sobre las posibilidades que tenían— Yo puedo ayudar con eso.

—Stark dijo lo mismo.

Peter sonrió y sin dudarlo ni por un segundo salió corriendo rumbo al laboratorio con Pietro siguiéndole el paso. Cuando ambos entraron, notaron que había mucho movimiento en aquella habitación, sin embargo, también notaron que todos los aparatos los estaban colocando en cajas.

—Señor Stark... —

Tony se detuvo en seco para mirar a Peter.

—Muévete, niño. Pon todo en cajas, nos mudamos al hangar cuatro. Este laboratorio es muy pequeño para lo que haremos.

—Enseguida, señor.

—Tu también, Sonic.

Pietro puso los ojos en blanco ante el ridículo apodo pero comenzó a llevar algunas cajas que ya estaban llenas rumbo al hangar. Su velocidad y fuerza agilizaba la mudanza.

Cuando el laboratorio quedó completamente vacío, Tony se detuvo en la entrada y miró a Peter que miraba con cierta tristeza la habitación.

—La llamada está grabada —habló desde su lugar— le puedes pedir a VIERNES que la repita. Si quieres.

Peter sonrió bastante agradecido.

—Gracias, señor Stark —su voz se escuchó muy bajita pero Tony lo escuchó claramente. Asintió con la cabeza antes de irse para preparar todo el equipo y comenzar con el trabajo.

—No tardes mucho. Necesitaré algunas manos extras.

Cuando Peter quedó completamente solo en el laboratorio, respiró profundamente un par de veces. Tenía miedo de volver a escuchar la voz de Roselyn y soltarse a llorar como si no hubiera un mañana. Aún así, le pido a la IA que repitiera la llamada. Parker cerró los ojos, una gran sonrisa se extendió por su rostro al escuchar la voz de su novia. Era como si una nueva esperanza renaciera y se extendiera por cada célula de su cuerpo.

Rose estaba bien y eso era lo único que le importaba ahora mismo. Haría lo que fuera necesario para ayudar a traerla de vuelta. Escuchó aquella llamada un par de veces más antes de decidirse a salir del laboratorio y dirigirse al hangar.

Allí estaban ya todos reunidos, al menos todos los que estaban dispuestos a ayudar con este nuevo proyecto, dispuestos y con los conocimientos necesarios para crear una máquina como la que tenían planeada. Peter fue el último en unirse.

—¿Alguien aquí sabe algo de física cuántica? —Scott Lang dio un par de pasos al frente para hablar dentro del pequeño círculo que se había formado.

Tony, Bruce y Peter fueron los únicos que levantaron la mano. Scott miró a los demás buscando una manera fácil de explicarles lo que pensaba.

—De acuerdo —habló de nuevo— esto será más complicado que una simple máquina del tiempo. Debemos estabilizar la máquina para crear un portal que no sólo nos lleve al pasado, sino que también nos lleve a otra dimensión. Lo importante de este asunto, es que debe ser siempre a la misma dimensión ya que es probable que cada que se abra el portal, la dimensión cambie.

—Strange nos ayudará con esa parte —dijo Tony.

—Hubiera sido más sencillo crear una máquina del tiempo pero creo que podemos encontrar la manera de unir ambos —Scott se acercó a la máquina por donde Roselyn había desaparecido— ¿donde encontraste esta máquina?

—Una base de Hydra. Me pareció algo curioso y quise investigar qué rayos trataban de hacer. Siempre destruyen todo cuando llegamos y de milagro esta máquina se salvó.

—Probablemente ellos también buscaban la manera de hacer lo que nosotros queremos. Y si ellos lo lograron, nosotros también. La última vez pasó Rose y no lograron volver a prenderla, y eso es importante. Como ya lo dije, debemos buscar un estabilizador para mantener el portal abierto el tiempo suficiente para entrar, buscar y regresar.

—¿Tienes alguna idea, hormiga?

—Aún no, pero ya pensaremos en algo. Lo más eficiente será dividirnos y comenzar a trabajar —miró a Tony fijamente— Tony, ¿estás realmente seguro de que tu hija está en otra dimensión? Quiero decir, ¿y si sólo viajó al pasado?

—En realidad no tengo ni idea. Supongo que ni Rose estaba segura de ello pero si estuviera únicamente en el pasado, viernes ya habría encontrado alguna clase de registro donde apareciera ella en algún momento de la historia. Supongo que podemos intentar primero con la creación de una máquina del tiempo, abrir un portal, buscar y si no está por ninguna parte, combinarla con el estabilizador interdimencional.

Lang asintió.

—Me agrada la idea. Rose estará aquí muy pronto.

Tony fue el siguiente en dar un paso al frente para organizar a los presentes y darles sus secciones de trabajo.

—Niño, tú vienes conmigo y Banner para comenzar con los planos. Scott, busca la manera de estabilizar la máquina, será mejor que trabajes con Strange y si es posible, dile al doctor Pym que te ayude de alguna manera. Strange abrirá el portal dimensional.

Scott miró a Stephen para dirigirle una gran sonrisa pero el hombre parecía muy enojado y Scott dejó de mirarlo de inmediato.

Todos comenzaron a trabajar en lo que se les indicó. No iba a ser un proyecto sencillo y lo sabían, pero harían todo lo posible para lograrlo.

•••

Roselyn se sentía más cómoda estando en el cobertizo de los Weasley que en cualquier otro lugar de la casa. Todos lo entendían o al menos intentaban entender a la chica. Extrañaba su hogar y ahora que había logrado contactar con su padre seguramente tenía muchos sentimientos encontrados.

Habían pasado algunos días desde que llegó, de los cuales, había estado intentando volver a hacer una llamada a su padre pero el teléfono ya no prendía. Lo había intentando todo, pero sin la tecnología adecuada, era imposible.

Fuera de eso, conoció a Remus Lupin y Nymphadora Tonks. Ambos precian ser personas muy agradables, aunque Roselyn apenas habló con ellos pues no podía pensar en otra cosa que en buscar la manera de ayudar a su padre desde donde estaba.

Esa noche, Rose miraba fijamente las piezas esparcidas en el escritorio. Había algo que aún no había visto pero no tenía ni idea de qué era, sin embargo, de pronto vio una luz naranja a través de las ventanas. Al asomarse, se dio cuenta de que era fuego.

Salió del cobertizo, afuera ya estaba toda la familia de pelirrojos mirando como se incendiaba su hogar. Rose no entendía lo que sucedía pero era una vista verdaderamente horrible.

Harry regresó minutos más tarde junto a Ginny, el señor Weasley, Remus y Tonks. Sin duda iba a ser una noche muy larga para tratar de pagar el fuego y ver qué tanto se había arruinado o qué tanto se podía salvar.

Nadie durmió esa noche. Hermione fue la que le explicó todo a Rose, absolutamente todo.