NOTA DE LA AUTORA;

BUENASSSSS, finalmente llegó su salvador luca valutto a alegrarles la semana, sí señor. este capítulo es un paralelo, mientras albus iba a la reunión familiar de los weasley que vimos en el capítulo anterior, luca estaba pasando por esto. lean las traducciones y la nota del final que es muy importante porque explico detalles que no son notables a simple vista. ¡espero que sea de su agrado! es un capítulo muy familiar y cálido, y el siguiente es de mis capítulos favoritos en TODA la historia así que capten la emoción. ¡nos vemos al final del capítulo! les dejo con las traducciones:
¹ "È incredibile, mamma!", ¡es increíble, mamá! en italiano.
² "Principino", príncipito en italiano.
³ "Apegado/Clingy", traducción al inglés de clingy, palabra usada para describir a alguien que presenta una alta afinidad a las muestras de afecto físico. Como, por ejemplo, alguien que abraza todo el tiempo o tiene el impulso de brindar mimos y dar este tipo de muestras con alguien con el que se sienta lo suficientemente cómodo.
⁴ "Bambino", niño en italiano.
⁵ "Topolino", su traducción literal sería pequeño ratón/ratoncito, sin embargo, es un apodo italiano cariñoso usualmente empleado de padres a hijos.
⁶ "Piccolino", pequeño/pequeñito en italiano.

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SIXTEEN: ALESSAAAAAAAA!
interstellar — vol. ii

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                   EL ESCENARIO PLANTEÁNDOSE FRENTE A SUS OJOS POSEE UN CARÁCTER TAN EMBELESADOR y más allá de lo que la palabra hermosura podría limitar, que el pequeño italiano Luca Valutto simplemente no tiene las capacidades de poder despegar por unos momentos la mirada de tal paisaje.

El cielo estelífero reluce como nunca, solo que esta vez es más especial de lo común; si Luca siempre ha pensado del espacio como un cementerio de estrellas, un albergue de preguntas sin respuestas (aunque no realmente, ¿huh?. Esto resulta para él en una completa ironía; el espacio se alza ante los humanos dejándolos con miles de preguntas que son imposibles de responder para ellos en aquel momento, sin embargo, no significa que las respuestas no se encuentren allí. Esa es la magia del universo: te hace replantearte tu propia existencia sin tener forma de cómo responderte los mil y un interrogantes que puedas formular, no obstante, al mismo tiempo te entrega las respuestas bien escondidas con la esperanza de que en algún punto seas capaz de entenderlas. Luca no sabría cómo definirlo con exactitud, pero lo relaciona a un árbol con ramas altas y una persona hambrienta tratando de tomar un fruto inalcanzable de estas..., hasta que llega un punto en el que la rama baja y el hombre es capaz de tomarla. No es posible demandar información si aún no te encuentras listo para digerirla, así de sencillo. Un juego con el universo), o un mar terciopelo de luces y misterios; aquellas descripciones se escuchan casi denigrantes teniendo en cuenta el panorama.

Luca Valutto es, generalmente, una persona de lógica; él no romantiza la vida más lo necesario. Umh, vale, puede comprender que su ingenuidad quizás altere hasta cierto punto la percepción que tiene del mundo, y que entre él y Albus, Luca resultaría un enamorado del mundo; sin embargo, él podría definirse a sí mismo como una persona de lógica. En ocasiones incluso tiene mucho trabajo tratando de comprender la naturaleza detrás del actuar de las personas — o sentimientos complejos como el amor, sí. Es la hora y Luca razona que jamás podrá comprender certeramente el amar a alguien, si es honesto consigo mismo.

Pero, si definitivamente hay algo que transforma al italiano en un aficionado de la vida, un asombrado espectador, un alma esperanzadora... (o lo más parecido que pueda ser a aquel extraño Gryffindor en el tren antes de salir de vacaciones que le ha dado la impresión de ser un poeta sumamente enamorado del mundo), es el espacio.

Y lo que se alza frente a él lo deja sin respiración durante unos minutos; siente su corazón latir desbocado, sin embargo, también una paz ahogándolo, aquel sentimiento de plenitud el cual no puedes definir con exactitud. No obstante, sabe que lo que contempla es irreal; no sólo por el escenario demasiado hermoso como para ser la realidad que conoce, sino además por la presencia de él a su lado.

—Podría morir ahora y no me quejaría — ante escuchar aquellas palabras llenar el (no tan silencioso) ambiente, Luca suelta una risita y dirige su mirada a su lado, encontrándose con unos orbes esmeralda escondidos levemente bajo unos cuantos mechones azabache.

El italiano puede sentir sus labios surcarse cortamente y en sus manos se instala una sensación de comezón incómoda al aguantarse el querer pasarlas por las ondas desordenadas del cuerpo contrario acostado en el césped a unos metros de él. Sus ojos cristalinos se abren ligeramente y remoja sus delgados belfos en una ansia extraña que no ha experimentado antes; Albus Potter le observa de una manera extraña aportándole de extra aquella característica sonrisa ladeada, Luca siente un vacío posarse en su estómago y una urgencia terrible por apartar la mirada, lo que termina haciendo.

Potter y él se encuentran acostados en una especie de campo, eso es lo único que sabe; no conoce el cómo han llegado allí o la razón de esto, solo sabe que de un momento a otro se ha encontrado a sí mismo en el césped acostado junto con la presencia de Albus a unos metros. Claro, además de la belleza del firmamento estelífero acaparando toda su atención.

Es de lo más hermoso que Luca jamás ha visto y agradece muchísimo a su cerebro por haber producido aquella imagen metal; es el cielo como nunca se ha visto, tan cerca que Luca tiene la corazonada de que si se incorpora en las puntas de sus pies y alza el brazo lo más que pueda, lo estará tocando.

Las estrellas se alzan inimaginables: enormes, hechizantes y terriblemente fulgurantes. Hay de diferentes tamaños y tonalidades, unas tan enormes que Luca opina en algún momento colapsarán en sus amadas supernovas; sin embargo, no son para nada calientes, lo cual se escucha tan estúpido que es otro factor exponiéndole al pequeño italiano la ilusión que es todo esto.

Además, está Saturno un poco más a lo lejos pero aún colosal y majestuoso. El planeta gaseoso de anillos gigantes y colores pálidos, no es de los favoritos de Luca (si hablas en general te dirá inmediatamente que éste es Venus porque «È incredibile, mamma!¹ Mira, gira en contra del reloj, llueve ácido sulfúrico y su temperatura promedio es 400º grados centígrados. Y aún así está la posibilidad de fosfina en la atmósfera, ¿cómo no podría ser mi favorito?». Y visualmente la Tierra, por supuesto, el planeta bicolor —principalmente— es toda una belleza poco apreciada), pero aquello no le quita el hecho de ser increíble).

—No digas eso, trae malos augurios —exclama finalmente, escuchando la risa jocosa de Albus ante sus palabras.

—No sabía que eras del tipo supersticioso, Valutto.

Luca no puede evitar la sonrisa en su rostro aún evadiendo conectar su mirada con la del Slytherin debido a una extraña vergüenza albergándolo.

—Oh, shhh —la risa de Albus incrementa y con ello la sonrisa del italiano—. ¿Sabes de mi amiga Indie, cierto?

—Cómo no, la que se trae algo raro con James y me habla todo el tiempo sobre cebollas en los bolsillos.

El pelinegro niega con la cabeza mientras ríe cortamente— Indie —afirma—, desde que somos pequeños siempre ha dicho cosas extrañas que no entiendo. Habla sobre dioses e hilos rojos, criaturas raras y usar amuletos de protección y cebollas. Es la superstición hecha persona, con los gatos negros y espejos y todo, huh —espeta en confianza, últimamente hablar con Albus sobre sus cercanos y lo que comprende a él, le fluye con facilidad. ¿Quizás debería preocuparse ante esto? Le aterra levemente el hecho de abrirse con tanta simpleza ante una persona. No..., uh..., umh, debería ser de esta forma.

Igual no es como si alguna vez has podido evitarlo, le recuerda su subconsciente. Desde el segundo día de conocerse le contaste sobre tu inexistente vida social en Italia y tus inseguridades, Valutto. Eso, sin contar la vez en la que lloraste como un bebé frente a él en la Torre de Astronomía; deberías sentirte apenado, seguro te ve como un llorón.

Luca siente sus mejillas colorearse por el bochorno, cazzo, no quisiera que Albus piense que lo ve como algún terapeuta o algo por el estilo, dulce bebé Jesús.

—¿Lou? —el mencionado muerde su labio y sus ojos se engrandecen en impresión cuando siente una mano enorme entrelazarse con la suya. Inmediatamente se voltea y pega sus orbes cristalinos con las cuencas esmeraldas de Albus, quien frunce el ceño en preocupación y provoca una sensación de vacío en el estómago de Luca cuando acaricia con suavidad el dorso de su mano empleando su pulgar—. ¿Todo bien, cariño?

No seas tonto, refuta la otra parte de su mente ante lo primero que ha pensado. Obsérvalo por un momento, ¿Albus no te ha dejado claro incontables veces que debes dejar de cerrarte ante los sentimientos? No te avergüences, muchas veces te lo ha demostrado, ahora no vayas a cerrarte de la nada, Valutto. Él no lo merece y tú tampoco, tienes la validez de sentir. Tan solo mira lo preocupado que se ve ahora.

La boca de Luca se abre y éste boquea como un pez sin saber qué expresar, tratando de no prestarle atención a las dos partes de su mente peleándose. ¿Por qué todos los Albus's de sus sueños se comportan tan cariñosamente? Es decir, claro que se han tomado de manos antes (amistosamente, por supuesto) y aunque lo ignore cada vez que sucede, no es inconsciente de los deslices que Albus tiene algunas veces cuando deja escapar el apodo de «Cariño» en sus frases. Sin embargo esto es-... umh, es muy extraño. Le hace tener la sensación de una calidez tan enorme como si se encontrase cerca de Betelgeuse (dato curioso que Luca siempre ama mencionar cada vez que se presenta la oportunidad: Betelgeuse es la supernova más próxima destinada a suceder en la Vía Láctea, una hermosura), o un vacío en su estómago como si se encontrase a punto de cruzar el horizonte de sucesos de algún agujero negro, dulce bebé Jesús.

—Umh, sí —trata de espetar una vez se repone de su pequeño colapso mental, soltando una risita nerviosa—. Claro, todo perfecto.

Albus frunce aún más el ceño y se acerca a él, apoyando su cabeza sobre la cabeza de Luca. Oh, vaya, ¿cómo se llama esta picazón tan rara que Luca siente por todo su cuerpo? ¿Nervios? Pero, uh, nunca se ha sentido así de nervioso antes (¿¡y por qué rayos tendría razones para encontrarse nervioso?! ¡Solo está con Albus!), ni siquiera cuando ha tenido presentaciones de física por internet — okay, quizás esto sea una mentira. Cada vez que debe hablar en público siente que se va a morir ahí mismo gracias al pánico.

—¿Seguro que todo bien?

Luca se aclara la garganta con precaución— ¡Todo perfecto, sí! —desvía su mirada hacia el terciopelo nocturno repleto de estrellas—. Mira qué bello es Saturno, ¿ya te había hablado sobre él? Es el planeta con más lunas descubiertas en la Vía Láctea, cuenta con cerca de 81 y una de ellas se llama Titán, lo cual es gracioso cuando haces la comparación de que así se llama el planeta de donde viene Thanos, el villano violetita y grande de los, umh, huh, Avengers (¿debes estar familiarizado con ellos, me has hablado sobre que te encantan las películas?). Y, eh, es tan ligero que podrías ponerlo sobre un océano tan enorme como para albergarlo y flotaría, una locura. El problema de estos planetas es- ninguno de ellos realmente cuenta con una superficie, ¿sabes? Igual que Jupiter y Urano y Neptuno, todos son literalmente puros gases, nada en lo que sostenerse. Entonces si alguien alguna vez alguien cae allí sería como "¡Woah!" en una cantidad de nubes (tóxicas algunas) apiladas y moriría, lo cual, bueno, es triste pero-

La carcajada de Albus detiene su gran verborrea, y Luca siente sus mejillas encenderse aún más ante el agarre de manos apretándose y las risas del Potter retumbando en sus oídos. La risa de Albus siempre ha sido muy graciosa a su parecer, le hace sonreír cada vez que la escucha.

—Calma ahí, ojitos —musita una vez se ha calmado y Luca enarca una ceja en curiosidad ante el mote—. Dijiste tantas cosas al mismo tiempo que me sorprende no te hayas quedado sin aire.

—¿Ojitos?

—¿Huh?

—Me llamaste «Ojitos».

—Oh —aunque el italiano no puede divisarlo, está cien por ciento seguro de que el Slytherin se encuentra remojando sus labios y frunciendo su ceño brevemente como siempre hace cuando se percata de algo (o está concentrado, los causales pueden variar. A veces la hace inconscientemente cuando analiza un papel de Pociones avanzado y le agrega a ello el morder su labio. O también cuando Scorpius exclama algo tan ocurrente que el Potter debe sentarse y comprender qué rayos ha querido decir con ello, lo cual siempre termina en las risas de Luca y la mueca ofendida del Malfoy).

—Bueno —continúa el Slytherin después de un momento en silencio—, te he dicho varias veces lo bonitos que son tus ojos.

Luca hace una mueca en curiosidad y cruza los dedos de su mano libre nerviosamente mientras posa su mirada en cualquier otro punto que no sea Albus— ¿Por qué?

—¿Lou?

Remoja sus labios—: A lo que me refiero es- umh, ¿por qué te gustan? A mí me parecen enormes y tan claros que dan miedo. Son muy celestes, no parecen naturales.

Albus cambia inmediatamente de posición, soltando su agarre de manos en el proceso. Luca no puede evitar reñirse internamente al pensar que seguramente le ha ofendido o hecho sentir incómodo de alguna forma. Dulce bebé Jesús, ¿por qué siempre debe arruinar todo?

Cállate, Luca. Le riñe nuevamente su subconsciente. Deja de victimizarte en tus inseguridades. Obsérvalo bien, solo está confundido ante lo que dijiste. Detente en la autocrítica, Valutto.

—¿En serio piensas eso?

—¿Uh?

El Potter le observa con el ceño fruncido y una mirada que el italiano no sabría cómo descifrar, luce un tanto aterrador, se asemeja más a, uh, ¿su parte Slytherin?

—¿En serio opinas eso de tus ojos?

El pelinegro asiente en vergüenza y muerde su mejilla interior.

—Lou, son muy hermosos —Albus posa una de sus manos en su mejilla y Luca siente que está flotando como una de las estrellas ahí. Sus cuencas esmeralda se conectan con las suyas, y el Slytherin cambia de posición en su mano hasta llevarla al cabello del italiano y apartar los mechones carbón de sus ojos—. De verdad —musita quedamente y Luca otra vez siente ese vacío (ya no tan extraño)—, son una preciosidad.

El Ravenclaw se aclara la garganta con bochorno y desvía la mirada, sin saber qué decir.

—¿Sabes a qué se parecen? —Potter sigue y Luca permanece en silencio—, lucen como una supergigante azul.

Vale, no hay ninguna duda de que esto es un sueño porque Albus jamás diría eso, eh. Las supergigantes azules son estrellas inmensas y tremendamente calientes, lo que les da aquella tonalidad azul o blanca azulada. Un ejemplo es Rigel en la constelación de Orion, una de las favoritas de Luca.

Es el mejor cumplido que le han dicho sobre sus ojos, sin embargo, incluso cuando sabe que no hay forma de que Albus siquiera sepa qué es una supergigante azul (aunque no le sorprendería mucho si éste de verdad lo hiciera, huh. La última vez Albus le ha sorprendido cuando reconoció las leyes de termodinámica incluso después de habérselas explicado muchas semanas atrás. Luca vuelve a repetir en su cabeza que creería que Albus es perfecto si no fuera por su malhumor, personalidad manipuladora y egocéntrica de a ratos, su frialdad y desinterés a cualquier otra persona que no sea de su círculo cercano o le convenga de alguna forma, y el pesimismo que lo azota en algunas ocasiones).

—Esto-..., eh, yo- —el italiano trata de encontrar las palabras más adecuadas para agradecerle ante ello, pero sus pensamientos se nublan cada vez más.

El entorno en el que se encuentran se nubla poco a poco y Luca sabe que ya está despertando, especialmente porque trata de enfocar su mirada en Albus sólo para verlo boquear un—: Lord Almighty, I feel my temperature rising.

Y... ¿disculpa? ¿Elvis Presley?

—¿Uh?

El Albus enfrente suyo frunce el ceño y boquea nuevamente con más fiereza— Higher higher, it's burning through to my soul.

Dulce bebé Jesús, no puede ser que su sueño ahora se convertirá en un musical de los 70s porque tiene cero paciencia para aquellos. (Oh por Dios, son tan irreales que le estresa el nivel de absurdismo manejado. ¿Y por qué glorifican eventos que nunca tendrían la oportunidad de suceder en la vida real? No no, aparte la línea temporal es muy abrupta, nope, no son lo suyo en absoluto).

El italiano frunce el ceño al ver cómo Albus ya no yace a su lado y solo se ve rodeado de figuras amorfas borrosas. Entonces despierta.

Luca pestañea rápidamente aún con los ojos cerrados mientras plasma una pequeña mueca en su rostro ante la luz natural pegándole directamente. Diablos, ha olvidado bajar la persiana antes de acostarse. Debe admitir, no obstante, que estaba muy cansado mentalmente después de tratar de entender algunos conceptos de física cuántica (la cual, definitivamente, es uno de sus dolores en el trasero más grandes. Jura que nada tiene ningún sentido allí, oh por Dios).

Luca sabe que está haciendo una cara graciosa mientras pestañea con rapidez tratando de acostumbrar su visión ante la repentina luz y consciencia. El italiano suelta un suspiro agotado cuando posa sus orbes cristalinos en la ventana de la pared contraria a la puerta y a un lado de su cama; el día luce tan blanco, y... desagradable.

Jura por su amor a Venus que odia el invierno con todo su ser. La buena noticia es, los hoodies de Albus son su solución más efectiva para mantenerse caliente, por supuesto.

Aquel pensamiento, y reconocer además que se encuentra vistiendo uno de ellos en estos momentos, provoca un sonrojo ligero en el italiano; quien recuerda involuntariamente el sueño del que ha despertado hace unos cuantos minutos y lo cariñoso que ha sido Albus en él. ¿Cómo...? ¿Cómo se sentirá tomar la mano de Albus? ¿Sería así de cálido como en el sueño?

No lo malinterpreten, él ha tomado la mano de Albus varias veces antes, pero aquello... Aquello se ha sentido diferente.

Un sentimiento que no sabría cómo definir, no obstante, le ocasiona por ambas partes emoción y terror enorme. Umh, está confundido.

Su cadena de pensamientos confusos se ve interrumpida por un fuerte grito afuera de su habitación exclamando con pasión—: Your kisses lift me higher, like the sweet song of a choir. You light my morning sky with burning love!

Oh, conque esa era la razón detrás de Albus cantando antes de despertarse.

Burning Love de Elvis Presley resuena por toda la casa, y Luca suelta una risita cerrando los ojos momentáneamente al saber que la razón detrás de ello es su padre con sus tan afamados "días de invierno feliz".

A diferencia de Luca, su padre adora el invierno. Si Luca es un hardcore fan del verano, los cánticos de las aves y el sonido de las olas rompiendo en contra de la orilla; su padre es un hardcore fan del invierno, los ángeles de nieve y el olor a chocolate caliente y galletas caseras.

Y vale, que no es tan cerrado como para no admitir que los hoodies y las galletas caseras son un aspecto medianamente positivo del invierno; pero nada puede superar la fruta fresca o la sensación del helado chorreando en tu mano mientras debes entrecerrar los ojos ante el sol. El verano es simplemente fantástico.

De cualquier forma, sin desviarse del tema, desde que nació, Luca ha sido incluido en la tradición de "los días de invierno feliz de Stefan Valutto, marca registrada".

Su madre le ha dicho que es algo que su padre hace desde que se conocen, escoger unas semanas previas antes de navidad y bautizar algunos días como "sus días feliz". Los cuáles consisten en los días de productividad de Stefan Valutto, en donde realiza alguna actividad diferente para salir de la rutina arrastrando a su esposa e hijo único en ello.

La parte positiva es, hay música a todo volumen todo el día y buena comida; la parte negativa... Luca literalmente tiene prohibido estudiar durante sus días felices porque: «¡Socializa un rato con nosotros, principino!² Lo único que haces es estudiar todo el tiempo, ¿no te cansas? Cuando yo tenía tu edad me obligaban para que estudiara ¡no para no estudiar! Umh, lo cual no es que digo que sea un buen ejemplo, por supuesto (Aless, ya deja de mirarme así). Pero deja un rato de lado todo eso, juro que pasas más tiempo leyendo sobre tipos muertos que con nosotros, ¡y nosotros estamos vivos!».

Ah, como sea, igual no tenía planeado tampoco estudiar o leer ese día, ha tenido suficiente con freírse el cerebro ayer tratando de comprender la radiación de un cuerpo negro.

El italiano remueve la cabeza y suelta un bostezo tratando de desesperezarse, su mirada cristalina recayendo en el despertador a su lado. 9:30 AM, ilustra la pequeña pantalla digital, y Luca frunce el ceño; se ha levantado más tarde de lo esperado.

Valutto suelta un suspiro y sus ojos pasean por el espacio a su alrededor, escaneando cada parte de su habitación.

Tiene un tamaño perfecto, no es grande pero tampoco lo que podría decirse pequeña, es regular. Como la posición de la Tierra en el Sistema Solar, lo que se llamaría una posición Ricitos de Oro; ni tan fría, ni tan caliente, perfecto.

Su cama está apoyada sin cabecera en una de las paredes blancas de la habitación, a su lado, en la pared izquierda, hay una ventana ofreciendo el panorama de un día blanco y frío. En el lado contrario está la puerta de madera caoba, y al frente de la cama de Luca, en el extremo sur de la habitación, hay un escritorio lleno de papeles regados y plumones gastados; en una esquina de éste se encuentra además un pequeño tocadiscos de color negro, y arriba, posados en pequeñas estanterías, hay algunos de los libros recientes que está leyendo y discos de vinilo listos para escuchar.

La decoración del cuarto de Luca es muy modesta, unos cuantos posters con constelaciones y planetas aquí y por allá. Un telescopio reposando a un lado de su escritorio en el extremo sur, unas decoraciones doradas en forma de estrella colgando de su techo asemejándose a un móvil de cuna... Síp, es muy él; sencillo pero refleja su esencia.

Su closet, a un lado del escritorio, solo contiene hoodies, jeans, algunos shorts, camisas básicas y una caja repleta de coronas de flores únicamente.

Luca muerde su labio y decide levantarse de la cama, finalmente. Frunce el ceño al estirarse y acomodar el hoodie enorme de Albus que está vistiendo, llegándole cerca de las rodillas y cubriendo parte del pantalón de pijama que ésta vistiendo; una sonrisa disuelve su ceño cuando escucha otro grito de su padre tratando de cantar ahora If it wasn't for the nights de ABBA, y su madre riñéndole por ello.

El italiano niega con su cabeza y sale de la habitación, pasando por un pequeño pasillo antes de bajar las escaleras hacia el primer piso, en donde es recibido por una botella vacía casi golpeándole en la cabeza.

—¡Lou! —escucha el grito animado de su padre dándole los buenos días y el ojiazul sonríe.

Stefan Valutto se encuentra a unos metros de él, sosteniendo una escoba con la mano derecha y un plumero en la mano izquierda; su padre es alto (bueno, teniendo en cuenta su altura, todas las personas a su alrededor lucen altas), midiendo cerca del metro ochenta y algo. Tiene cabello castaño, piel blanca tirando a un tanto trigueña, labios delgados y rosa opacos, ojos azules océano y sonrisa contagiosa acompañada de una barba bien cuidada.

Al igual que a su compañero de habitación en Hogwarts, Cristian Rodríguez, su padre Stefan le recuerda a un cometa; aunque, pensándolo detenidamente, una mejor comparación podría ser un meteoro. La variación entre los dos no es muy notable a primera vista, pero sí significativa; los cometas están compuestos por polvo y hielo, que cuando pasan cerca de una estrella se evaporan hasta convertirse en la cola del cometa. Mientras que los meteoros son meteoroides (es decir, pequeños pedazos de asteroides o cometas) que al entrar a la Tierra se evaporan en la atmósfera produciendo un haz de luz.

En pocas palabras, su padre es una estrella fugaz, el nombre que comúnmente se le da a los meteoros aunque no tengan nada que ver con una estrella (esto siempre le ha dado gracia. Se le llama estrella fugaz a un pedazo de roca o polvo y hielo, quemándose al entrar a la Tierra. Qué nombre tan hermoso para una realidad más catastrófica).

Ah, lo que quiere decir con esto es- su padre es tan enérgico, ocurrente y abrasador como le resultan las dichosamente falsas estrellas. A Luca a veces incluso le resulta abrumador lidiar con él, teniendo en cuenta su carácter tranquilo y hasta un poco lento; lo único que le ha heredado su padre es el entusiasmo por un tema que le apasione. De resto, es más parecido a su madre y abuela, definitivamente.

Luca acorta la distancia entre su padre y él cuando el último mencionado suelta las cosas que tiene en sus manos y le abre los brazos ofreciéndole un abrazo. ¿Quién es Luca para negarse a los abrazos de su padre? Aunque a primera vista quizás no pueda parecerlo, a Luca realmente le gustan las muestras de afecto físico si son brindadas por personas cercanas; él podría describirse a sí mismo como apegado³.

—Hey, ¿dormiste bien, bambino?⁴ —escucha a su padre murmurar quedamente en su cabello y Luca asiente apoyado en su pecho. Stefan rompe el abrazo y le despeina el cabello con una sonrisa—. Tu café está en la nevera, tu madre recordó que te gusta frío así que lo pusimos a enfriar un rato. Hay fruta picada en la nevera también, pero no creo que eso y café sepa bien —Luca ríe levemente ante la vista de su padre rascándose la nuca con indecisión.

—Lo haré funcionar, no te preocupes.

La sonrisa de su padre se expande en su rostro mientras éste pone las manos en sus caderas— ¡Por eso eres mi favorito, campeón!

Luca suelta otra risa mientras rueda los ojos y le da la espalda caminando hacia la pequeña isla en la cocina, en donde se encuentra su madre leyendo pacíficamente un libro— Soy tu único hijo, papá.

—¡Y eres el mejor en eso!

El italiano sonríe enormemente mientras blanquea nuevamente los ojos, realmente necesitaba estas vacaciones.

Luca honestamente es una persona muy familiar. Le encanta estar en familia, le encantan los niños pequeños, le encantan las fiestas y reuniones — ¡él ama ese ambiente! Incluso aunque tenga que lidiar con primos que pueden llegar a ser insoportables de tanto en tanto (como su primo Sergio que le llama nerd todo el tiempo, pero sabe que es con cariño). Por lo que ir a Hogwarts le ha costado más de lo que ha imaginado.

Quizás al inicio no ha podido verlo tratando de lidiar con ponerse al día en clases y sobrellevar el abrupto cambio cultural (y en todo sentido) de un país a otro; pero al regresar a casa, se ha sentido más positivo y feliz, como ligero y en paz. Se ha sentido como el Luca de Italia, el verdadero Luca, el Luca menos atormentado y más pacífico y risueño.

No se ha dado cuenta de lo malo que ha afectado la escuela a su salud mental hasta que salió de vacaciones y volvió a sentirse verdaderamente feliz y tranquilo después de tantos meses. Lo ha necesitado, de verdad.

Como le ha prometido a Albus, ha tomado este tiempo para tomarse las cosas con calma y volver a enamorarse de los pasatiempos que le hacían feliz. Se ha vuelto a enamorar de la magia del espacio y toda su complejidad; se siente más entusiasta y positivo a pesar de mantenerse lógico. Ha podido leer muchos libros y ver diversas películas de Disney a lo largo de la semana. Espera que a Albus le agrade conocer la verdadera versión de sí mismo, la que no se encuentra tan atormentada por la presión social en sus calificaciones y la sensación de competencia e inferioridad constante.

Se encuentra feliz.

—Buenos días, Lou —escucha a su madre expresar sentada en uno de los banquillos de la isla, unos lentes de pasta reposan en el puente de su nariz y un libro de carátula blanda se encuentra encajado en su mano derecha con cuidado.

Alessa D'Maro, su madre; tiene cabello negro y ojos cristalinos, mejillas rosáceas y sonrisa dulce. Luca ama a esa mujer demasiado. Si su padre es una "estrella fugaz", su madre es una enana blanca.

Y es que... vale, quizás Luca se ha emocionado tanto con las supernovas que ha olvidado mencionar que éstas realmente no son tan comunes, y una estrella puede morir de otras formas.

El ciclo de la vida de una estrella depende de varios factores. Partiendo por el tamaño de su masa, una estrella de masa común (como el Sol) puede nacer de una nebulosa, tomando la primera etapa de Proto-estrella; una estrella empezándose a formar solo de polvo y gas, una bola de hidrógeno y helio que no ha empezado su fusión nuclear.

Después crece hasta convertirse en una estrella estable de la secuencia principal (Luca resume que la secuencia principal es una parte del escenario que compone el diagrama de Hertzprung-Russell empleado para categorizar estrellas respecto a su masa, color y luminosidad).

Poco a poco se va expandiendo hasta convertirse en una gigante roja, la cual al llegar a su máximo tamaño, suelta toda su energía hasta que se agota su "combustible", marcando el final de la fase.

Finalmente, las capas superficiales de la estrella se expanden en una nebulosa planetaria, y el remanente del núcleo se convierte en una caliente, densa y pequeña enana blanca.

Ya sabe que es extraño, ¿por qué compararía a su madre con el residuo patético de una estrella normal? La cosa es- a Luca estos remanentes le parecen pequeños pero poderosos. El recordatorio de que detrás de cada enana blanca hubo alguna vez una estrella tan hermosa y grande como el Sol; y ahora en su lugar se encuentra una pequeña, blanca y pacífica esperando a enfriarse con el tiempo para finalmente morir en su totalidad.

No lo sabe, pero aquellas estrellas le brindan calma, le da una sensación de acogimiento; de cómo todo lo que alguna vez fue grande puede apagarse también y mantenerse tranquilo esperando su final total. Suena trágico, sin embargo, le brindan paz.

Y siempre que está alrededor de su madre se siente de la misma forma, como si nada malo pudiera sucederle porque ella le brinda tranquilidad y fortaleza. Es extraño.

Alessa le ofrece una sonrisa maternal mientras saca el café y las frutas de la nevera, bebiendo un sorbo del líquido beige.

—¿Qué lees? —inquiere el menor tomando asiento en el banquillo contrario de la isla, pinchando con un tenedor una frambuesa.

Su madre acomoda sus lentes y se inclina en el mesón hasta despeinar su cabello (¿qué diablos tienen sus padres con despeinar su cabello, dulce bebé Jesús?).

—Sobre el cómo lidiar con esposos infantiles e hijos adictos al café —Luca suelta una carcajada al observar a su padre acercarse hacia ellos con la escoba en la mano, sacándole la lengua a Alessa.

—No eres para nada divertida, Aless —exclama el Valutto mayor—. Ya, ya, ¡pídeme el divorcio! ¡Sé que eso es lo que quieres! Dejarme aquí, solo, abandonado, depresivo... Pero tendrás eso en tu conciencia hasta el final de los tiempos —Luca observa con diversión la expresión dramática plasmada en el rostro de su padre mientras éste señala acusando con un dedo a su madre, y ella le devuelve la mirada aburrida.

—Stefan, si quisiera divorciarme de ti lo habría hecho hace años y me hubiera llevado a Luca conmigo, oh por-

Stefan posa una mano en su pecho y suelta una exclamación ahogada— ¡Cómo te atreves...! Con el principino no juegues, Alessaaaaa —y ahí está, la forma tan extraña en la que su padre pronuncia el nombre de su madre como si fuera un niño pequeño lloriqueando mientras alarga la última vocal—. De igual forma sabemos que me escogería a mí porque yo cocino mejor, huh —se cruza de brazos y cierra los ojos en victoria como si ha ganado algún concurso de "¿Quién es el padre favorito de Luca Valutto? ¡Descúbrelo aquí!".

Luca le debe dar un punto a ello. Su padre cocina como los dioses, y su madre puede ser tan brillante y calmada todo lo que quiera pero es un desastre en la cocina y lo que refiere al hogar. ¿Quién diría que una persona tan organizada como ella es un desastre en el aseo? Su madre puede ser brillante para recetar cualquier medicamento con nombre extraño en su día a día como doctora, pero no sabe ni qué se debe usar para limpiar los pisos. Un ejemplo a seguir.

—Stefan, no podrías durar ni dos semanas con Luca. Él te estaría cuidando a ti —Alessa suelta un suspiro mientras roba un arándano del pequeño bowl de fruta de Luca.

Stefan le brinda un puchero como si no fuera un adulto de casi cuarenta años y su madre le observa con cero sorpresa en su rostro— Alessaaaaaaa.

La mencionada cierra los ojos y niega con la cabeza, acostumbrada a este comportamiento— Estoy jugando, Stef, serías un gran padre soltero.

Su padre sonríe victorioso y cualquier rastro de puchero anterior queda erradicado mientras éste pone las manos en sus caderas, triunfante— ¡Por supuesto que lo sería!

Su madre dirige su mirada hacia Luca y apunta con el hombro más cercano a su padre, como diciéndole «¿Puedes creer a este sujeto?». Luca suelta una risa que su madre reciproca.

—¿Se están riéndome de mí, cierto? ¡Yo también quiero saber el chiste privado!

—Aunque no lo creas, Stef —repone su madre mientras sus labios se curvan en una sonrisa entretenida—, no todo gira en torno a ti, huh. ¿No es así, Lou?

Luca sonríe divertidamente— Ujum. Hace casi 500 años, Nicolás Copérnico demostró que la Tierra gira alrededor del Sol, no de ti, papá.

Stefan nuevamente pone una mano en su pecho cerrando los ojos y exclamando un grito ahogado como si Luca acabara de cometer la peor ofensa del mundo— ¿También tú en mi contra, topolino?⁵ Renuncio, no puedo vivir con un complot ¡en mi propia casa!

Luca se da la libertad de soltar una carcajada, sintiendo su rostro calentarse y su cabeza caer hacia adelante. Cuando ha terminado, levanta la mirada para encontrarse con las cuencas océano de su padre observándolo cariñosamente.

Stefan se desplaza hasta su lado, su cabello siendo despeinado por tercera vez— Nuestro piccolino ⁶ es todo un ángel, ¿no es así, Aless? —musita en dirección a su madre quien a su vez permanece con una expresión de dulzura en su rostro—. Debe de tener a todo Hogwarts detrás de él.

Uy sí, claro.

Luca suelta una risita incómoda mientras rasca su nuca— Umh, no lo creo. No creo que alguien me vea como atractivo, papá —Luca piensa en chicos como Albus, Scorpius, los familiares de Albus... Niega con su cabeza como afirmando su argumento—. Nope, definitivamente no, tienes que ver a las personas de allá y te darás cuenta que hay una gran brecha entre ellos y yo.

Su madre le contempla con el ceño fruncido— Tú eres muy lindo, Lou. ¿Lo sabes, cierto?

Luca muerde su mejilla izquierda e inclina un poco su cabeza en una expresión poco convencida— Bueno... Ustedes solo lo dicen porque son mis padres.

—¡Claro que no, bambino! —espeta su padre en un casi grito—. ¡Tú eres precioso y el que piense lo contrario está mal de la cabeza y necesita unos buenos-...!

—Stefan.

—Lo siento, Aless. Lo que quiero decir es-... Estoy seguro que no somos los únicos que lo opinan, ¿qué me dices de tu amiguito Albus, eh? —su padre le brinda una sonrisa sugestiva, alzando y bajando las cejas.

El italiano menor se aclara la garganta en bochorno— Papá, ya te he dicho que dejes de hablar de Albus de esa manera. Deja de insinuar cosas que no son.

—¡Que no son, dice...! Luca, principino, según lo que me dicen las cartas esas tuyas que mandabas —su padre se aleja de su lado, caminando hacia el otro extremo de la isla, poniéndose atrás de su madre apoyando su mentón en la cabeza de ésta familiarmente—, este Albus está comiendo de la palma de tu mano.

Luca siente el calor subir por sus mejillas y se dedica a mirar a su madre con urgencia.

Alessa levanta las manos— Eh, no puedo ayudarte, esta vez estoy de su lado —dice—. Eso de las cartas se escucha sospechoso, ¿y lo de darte toda una bolsa de sus hoodies? No lo sé, Lou. Aquí hay algo que no me suena.

—Ujum, ¿no nos estarás ocultando algo, Luca?

El mencionado siente sus mejillas sonrojarse aún más y una obstrucción en su garganta de la vergüenza que está sintiendo ante la insinuación. ¿Albus y él? Umh, no cree que el Potter se vea interesado de esa forma, honestamente.

Luca alza sus manos negándolo todo— ¡No no! No sé qué ideas estén haciendo en su cabeza pero Albus y yo solo somos amigos, de verdad.

—¿Entonces cuándo lo vas a invitar, uh?

—¿Disculpa?

Stefan frunce el ceño— ¡Nunca has invitado un amigo a casa, Lou! Y según lo que nos dices, este Albus y tú son cercanos. ¿Cuándo lo vas a invitar? Quiero conocerlo.

Luca muerde su labio— ... No hemos hablado, no lo sé.

—¿Cómo que no han hablado?

El de ojos cristalinos suelta un suspiro— No me ha enviado una carta desde que salimos de vacaciones, quizás está muy ocupado.

—O quizás está esperando a que tú le envíes la carta —añade su madre.

Luca frunce el ceño— ¿Yo? No lo creo porque-... —y como si fuera un flashback de película, las palabras de «No te olvides de escribirme en vacaciones, estaré esperando tu carta», hacen eco en su mente—. Oh. ¡Tenía que escribirle yo!

—Sacó lo despistado de ti, yo gano —musita Alessa en dirección a su padre, ganándose una sacada de lengua de éste.

—¿Entonces qué estás esperando, bambino? —Stefan le sonríe animadamente—. ¡Invítalo este miércoles! ¡Prepararé mis pastas especiales para dejar una buena impresión! Este niño es rico, quién sabe a cuántos restaurantes ha ido —se voltea y camina hacia la nevera, hurgando—. ¡Alessaaaaa! ¡Debemos comprar pesto, y tomate, y-...! Diablos, aquí no hay casi nada, ¿olvidaste tu turno de hacer las compras? Ah no, me tocaba a mí, oops.

Su madre suelta una risita y niega con su cabeza, aportándole después una sonrisa maternal y una última despeinada de cabello— Yo me encargo de él, tú ve y escríbele una carta a tu amigo que debe estar esperándote.

Luca sonríe, está emocionado. Ya quiere ver a Albus.

Y dirigiéndose hacia su habitación para escribir la carta, trata de no prestarle atención al extraño vacío en su estómago igual al que ha sentido en el sueño.

Después lidiaré con eso, se dice, después.

✞

BUENAS SWEET CREATURESSS

vea pues, hoy dije que llovía porque iba a actualizar y de verdad está lloviendo en mi ciudad en estos momentos KSJFJJAJAJAJAJA

vale, hay varias cosas que tocar. pero primero denle gracias al amor de mi vida miya atsumu que cumple años hoy y me dio ganas de escribir, amén

GRACIAS

entonces, primero. character development en luca valutto.

SÍ SEÑORRR, NUEVO ACTO NUEVO LUCA DIJERON.

no es muy claro, i know. sé que se estarán diciendo, cuál nuevo luca? es mi mismo bebé.

el mismo bebé gente, pero con pequeños cambios en su personalidad que al fin de cuentas son significativos. miren, ¿se dan cuenta que ahora está siendo más seguro de sí mismo y siente que tiene la validez de sentir y equivocarse? antes se resguardaba mucho en sus inseguridades, ahora se regaña a sí mismo cuando piensa negativamente. esto es un cambio pequeño pero importante en el carácter de nuestro sol y estoy muy feliz

hablando de felicidad, ESTÁ FELIZ NUESTRO LUCA LPM. eso es la otra cosa: estamos leyendo no solo a un luca más seguro, sino a un luca más feliz, más tranquilo.

estas vacaciones de verdad le sirvieron para poner todo en orden y dedicarse a sí mismo como dijo que lo haría en el capítulo 13. ahora vemos a un luca más relajado, más risueño y más seguro.

opiniones al respecto?

DIOS ESTOY TAN SOFT. SEGURO QUE ALBUS CONOCE A ESTE LUCA Y SE ENAMORA MÁS LPM.

albus creyendo que no se iba a poder enamorar más de luca: seguro de sí mismo
*llega el luca 2.0 siendo más seguro de sí mismo, más risueño y ligero, abierto a los cambios*
albus: ABORTEN LA MISIÓN, ALGO SALIÓ MAL

KAJFJSJJAJAJAJA alguien haga un meme como ese, por favor. por cierto, voy a estar actualizando más tarde el apartado de gráficos de la historia porque han hecho muchos gráficos preciosos que me he olvidado de colocar, muchísimas gracias! repito nuevamente que si tienen algún dibujo, meme, edit, etc. escríbanme por dm y lo pongo enseguida!

siguiendo con los otros puntos: LOS PADRES DE LUCA LPM. los que me siguen acá, sabrán que yo amo un anime llamado haikyuu con toda mi alma y hay dos personajes que me encantan en los que me basé para crear a estos dos y su dinámica. bokuto y akaashi, sí señor, los padres de luca están inspirados en bokuaka.

x, ¿qué opinan de ellos? yo amo su dinámica, su relacion, el padre de luca es mi rey. no man, stefan supremacy y'all Y ALESSA AAAAAAA KJFKSKAKA BASTA premio por soportar al hombre y sus berrinches durante años.

definitivamente estarán viendo más de ellos en el próximo capítulo. EL PRÓXIMO CAPÍTULO ES ARTE SWEET CREATURE I PROMISE, ES PURO LUCABUS. EL CAPÍTULO ES LUCABUS LUCABUS LUCABUS LUCABUS LUCABUS

es de mis capítulos favoritos en todo el libro, así que imagínense mis parces. ES SIMPLEMENTE LO MÁS, DIOS ME ENCANTA ESE CAPÍTULO

ni lo he escrito pero si supieran todo lo que tengo planeado. albus conoce a stefan así que imagínense KSJFJJSJAJAJAJAJA

eso me lleva al otro punto: los detalles, mis niñes, los detalles son importantes. luca está enamorándose de albus; eso puede verse en sus pensamientos, sus sueños !!!!!!, y sus sensaciones.

esos vacíos? esos sonrojos más presentes que nunca? esa vergüenza que antes no sentía alrededor de albus? esas preguntas disque "espera que a albus le agrade esta versión de el" y "como se sentirá tomar su mano"?

MIJO USTED ESTÁ ES ENAMORÁNDOSE FUERTE VAMAAAAA QUE BUEN DÍA PARA SER LUCABUS SHIPPER LPM

HAY UN DETALLE MUY IMPORTANTE que está bien ocultando pero hace la diferencia. ¿recuerdan cómo en el capítulo 10 scorpius insinúa que albus y luca tienen una cosa rara y luca lo niega enseguida y parece como si scorpius le hubiera contado la ridiculez más grande del mundo que incluso hasta se molesta un poco?

bueno, el señor en este capítulo empezó a sonrojarse de la vergüenza y decir que simplemente era probable que albus no creyera eso cuando SU PROPIO PADRE lo insinuó.

vea pues, miren al descarado este eh. KAJJSJFJJSJAJAJAJA

realmente este acto me emociona mucho porque lucabus se vuelve canon y vemos a un luca más abierto y seguro y feliz !!

discúlpenme, me voy a ir a llorar, mi hijo merece el mundo y ver que ahora dice que está feliz que me pone TAN SOFT

bueno ya, me despido porque siempre me alargo demasiado con estas cosas. pero me encanta mucho hablar con ustedes lloro. gracias por los casi 30K, sweet creatures, SON EL MEJOR FANDOM DEL MUNDO LES AMO

los amo de aquí a andromeda y de vuelta (a que extrañaban leer eso, niéguenmelo),

sofs.