Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

『♡⃕』XI PT. I 🐍

Luego de escuchar y recibir con resignación el regaño de largos y eternos minutos que les fue dado por parte de los mayores, tras el mutuo arrebato aventurero de los dos más jóvenes al optar por irse de "caza" sin ningún tipo de aviso previo; todos recuperaron de nuevo la calma, y aprovecharon el par de horas que aún tenían disponibles antes del anochecer, para ensayar tal y como estaba previsto desde un principio.

Y Jungkook por su parte, no pudo haber brillado más durante esa tarde, pues realizó por primera vez una actuación increible, como siempre desbordante de su nato talento pero acompañada está vez de una inusual seguridad, alegría y confianza misma, que los mayores le aplaudieron orgullosos de inmediato al también notar su gran evolución en los últimos días; ahora siendo alguien menos tímido a la hora de tocar, e incluso atreviéndose a opinar y dar sugerencias para los arreglos de las nuevas canciones que llevaban preparando juntos durante las últimas dos semanas.

No era para menos, pues luego de confirmar que aún poseía esos poderes que hace años daba por perdidos, y con los cuáles ahora sabía con certeza
que podía contar para defenderse por su propia cuenta ──Tras aprender a domarlos por completo, claro estaba──, se sintió realmente animado, valiente y orgulloso de si mismo como hace muchos años no ocurría.

¿Y quién lo diría?

Una vez más, debía dejar del lado su orgullo y aceptar con sinceridad y resignación que todo se lo debía únicamente a quién justo ahora caminaba con calma y serenidad a su lado, tarareando en susurros una melodía desconocida pero hermosa, mientras avanzaban juntos a través del tinieblico e inmenso bosque que el menor tanto aborrecía.

Rojito.

Lo miró de reojo con nerviosismo, recordando con mucha vergüenza y molestia, cómo Hoseok había sido el responsable de ponerlos en tal situación tan incómoda y extrañamente tensa.

Ese fantasma tonto y entrometido...

Flashback.

Luego de acomodar los instrumentos y dejar todo limpio como de constumbre, Hoseok se había acercado a él con la excusa de tener algo sumamente importante para hacer esa tarde, y con mucha pena y preocupación el albino le había informado que esta vez no lo iba a poder acompañar hasta su casa como diariamente lo hacía. Claro qué al menor lo incomodó y estresó bastante tal noticia, pues recorrer en absoluta soledad el bosque siendo ya casi las ocho de la noche, no era algo que le entusiasmaba demasiado por obvias razones; sin embargo, cómo el orgulloso y obstinado que era, Jungkook estaba dispuesto a tener un poco de valor, y asumir el riesgo de hacer el recorrido por su cuenta, como el adulto independiente y autosuficiente que era.

El problema surgió cuando su increíble primo, ──Notese el sarcasmo── se negó de inmediato a permitirle ir sólo, y con una de sus maravillosas ideas, sin ni si quiera consultarle antes; le preguntó a los chicos sin ningún tipo de vergüenza, quién podía acompañar al menor hasta su casa en su lugar.

Claramente Jungkook, con su habitual orgullo y terquedad se negó rotundo a tener que ser escoltado como si fuera un niñito asustado, cobarde y llorón. A pesar de saber que muy en el fondo tal vez si lo era, pero jamás lo aceptaría frente a nadie.

Pero cómo siempre, sus deseos no fueron escuchados...

Pues como punto en su contra, ahora que los mayores sabían a ciencia cierta por todo lo que había tenido que pasar, y la situación tan horrorosa que tuvo que soportar en ese bosque, le habían dado toda la razón a Hoseok al no querer dejarlo ir sólo cuando aún existía el latente riesgo de que algo similar pudiera volverse a repetir en cualquier momento, y qué nadie estuviese allí para ayudarlo esta vez.

Jungkook se sintió tan avergonzado y frustrado, que totalmente molesto salió de la cabaña sin querer quedarse a precenciar cómo los mayores decidían por él, como si no tuviese voz ni decisión propia.

¿Por qué tenían que tratarlo como un inútil y poco suficiente?

Odiaba tanto sentirse de ese modo, peor aún, que los demás lo tuviesen en esa frustrante percepción solo por no saber usar unos malditos poderes y por ser un indefenso humano.

Tras unos minutos de furioso recorrido hasta la carretera entre tormentosos y muy autocriticos pensamientos, Taehyung y Seokjin lo alcanzaron a medio camino, ofreciéndose a llevarlo en su auto; pues según palabras del mayor del grupo, Namjoon tenía esa noche un compromiso de la banda con el productor en el bar de Bangchan, Yoongi se quedaría terminando la producción de las canciones, y Jimin se sentía repentinamente mal por lo qué muy en su contra iba a tener que pasar la noche en la cabaña y en cuidado del pelimenta.

Todo el camino en el lujoso y ostentoso auto del pelirojo fue tan incómodo y tenso, que de no ser por las constantes y alegres felicitaciones y comentarios animados de Seokjin por su avance, muy probablemente Jungkook se hubiese lanzado del auto a media carretera.

Al llegar al pueblo y debido a que la mansión Kim quedaba hasta el otro extremo del mismo, Jin tuvo que terminar llevandose el auto para que así el pelirojo pudiera acompañar al menor hasta su casa sin ninguna preocupación extra. Y Luego de una breve despedida con el mayor, ambos menores se adentraron en el bosque en total silencio.

Fin Del Flashback.

En realidad, sí éramos del todo sinceros, más que con Hoseok o con cualquiera de los mayores, Jungkook en verdad estaba enojado y frustrado consigo mismo por permitirse perder su independencia de tal forma, y sentirse tan vulnerable sin su autosuficiencia desde que había llegado a ese pueblo.

Y Taehyung en el fondo lo entendía bien, por eso había preferido mantenerse en silencio y darle su espacio para no agobiarlo el doble.

Aunque luego de casi cinco minutos de recorrido, aquel silencio se estaba convirtiendo en algo torturante y muy incómodo e insoportable para ambos.

Hartó de solo escuchar sus propias pisadas, de inventarse melodías y de escuchar solamente los sonidos inciertos y tétricos del bosque a su alrededor, el mayor tomó la iniciativa y decidió acabar por fín con el tenso momento.

── Estoy algo celoso si te soy sincero... ──Inició en un tono bajo y algo burlón, con la vista fija en el camino, encargandose de iluminar el sendero para el menor, con la vieja linterna que había encontrado extraviada en su auto. ── Se nota lo importante que eres para Hoseok Hyung, y lo mucho que te quiere mechitas.

Saliendo de su propia burbuja de pensamientos, Jungkook lo miró de soslayo con una mínima sonrisa de labios cerrados.

── Nadie puede competir con él en ese aspecto ──Aseguró. ── Crecimos juntos y somos como hermanos ──Dijo con una sonrisa de cariño y melancolía, mirando el camino algo lodoso a causa de la reciente lluvia expandirse bajo sus botas.

── Se nota ──Afirmó el mayor del mismo modo. ── Entiendo bien el sentimiento porque me pasa lo mismo con los Hyungs. A parte de mis hermanos, para mí los chicos son como mi propia familia.

Jungkook asintió pensativo.

── Desde el inicio lo noté, ustedes son muy unidos... ──Mumuró algo celoso.

── Si, lo somos y ahora ustedes son parte de esta familia también ──Aseguró el vampiro de inmediato. ── Es por eso que nos preocupamos por ti ──Lo miró brevemente, notando la mueca inconforme del otro, antes de continuar. ── No te subestimamos mechitas, créeme que desde el inicio todos notamos lo fuerte y autosuficiente que eres. Tú carácter lo expresa bien, pero sin embargo también entendemos bien la preocupación de Hobi Hyung al no querer exponerte de nuevo a que pases por algo como lo de la otra vez ──Frunció el ceño indignado de tan solo recordarlo.

» Tal y como te lo dije esta tarde, en este pueblo hay mucha gente mala, muy desquciada y con infulas de un ridículo poder basado únicamente en una estúpida jerarquía de castas; y no es que seas inútil o que te estemos subestimando por ser un humano como seguramente crees que lo estamos haciendo ──Afirmó mirándolo a pesar de que el castaño no lo estuviese haciendo de vuelta, más centrado en mirar sus pasos sobre el pasto humedo. ── la realidad por más injusta y horrible que suene, es que aquí sí no tienes poderes eres una presa fácil para todos ellos.

El castaño suspiró con fuerza viendo con molestia cómo aún faltaba casi medio camino, con el sendero oscuro y tenebroso expandiéndose frente a ellos y el sonido tétrico del mecer de los árboles que los rodeaban, siendo su única compañía en aquella oscura y fría noche.

Apretó sus manos en los bolsillos de su chaqueta, tan pronto los horribles recuerdos llegaron a su mente.

── Lo sé ──Susurró resignado. ── Se que tanto Hobi cómo ustedes solo se preocupan por mi, y lo agradezco y aprecio de verdad... pero aún así no puedo evitar que me incomode tener que vivir de repente con este sentimiento horrible de dependencia hacía cualquier otra persona, cuando toda mi vida no fue necesario nadie más que yo mismo.

Taehyung sonrió un poco, mientras regulaba la linterna en su mano para que esta pudiera iluminar en su máxima potencia, viendo contento como el menor se relajaba un poco con ese simple acto de su parte.

── Lo entiendo, más de lo que crees... ──Le dió la razón con un asentimiento distraído. ── Pero la buena noticia es que muy pronto podrás volver a ser igual de independiente, ahora que sabes que aún conservas tus poderes, seguramente muy pronto podrás volver a manejarlos y entonces no necesitarás de nadie, ni siquiera de mí, tu superheroe personal ──Dijo con un puchero de falsa tristeza.

── Bueno, acepto que será un sueño cumplido poder librarme de ti ──Bromeó de igual forma el menor, desviando su mirada en medio de una sonrisa de tranquilidad.

Al menos con las tonterías del pelirojo, no tenía tiempo para preocuparse demasiado por su alrededor, y en parte se lo agradecía.

── En el fondo sé que me vas a extrañar ──Se defendió confiado el aludido, encogiendose de hombros con su habitual seguridad.

── Jamás, pero supongo que si será al revés ──Lo miró con una sonrisa ladeada y una ceja en lo alto.

Un dramático y exagerado suspiro salió de los labios del vampiro.

── Eso no lo puedo negar ──Fingió pesar, haciendo crecer más la sonrisa del menor.

── Lo sabía.

── Que bien que lo sepas, porque es cierto. Eres imposible de olvidar, mechitas ──Le guiñó un ojo.

El menor sólo pudo responder con algo parecido a una risa nasal, desviando su mirada algo cohibido.

── Solo eres un tonto hablador...

Taehyung tan solo rió viéndolo de reojo mientras se relamía sus labios absteniéndose de contestarle con otra de sus provocaciones, por su propio bien. Con un ambiente un poco más ameno y tranquilo, ambos siguieron su camino en un silencio ahora un tanto más acogedor.

Aunque desafortunadamente, luego de lo qué parecieron ser casi cinco minutos de caminata, Jungkook comenzó a volver a estar tenso y algo nervioso, tras sentirse de repente observado por alguien ajeno al alfa a su lado.

Giró un par de veces su cabeza con disimulo para no alertar a Taehyung, buscando algún responsable de esa sensación incómoda instalada sobre su espalda, pero no encontró más que oscuridad. Tragó saliva algo ansioso, y apuró el paso adelantándose un poco al pelirojo quién tuvo que alcanzarlo de inmediato con confusión.

── ¿Pasa algo, mechitas? ──Inquirió, extrañado con su repentina actitud.

Jungkook negó con falsa tranquilidad.

── Nada, solo estoy cansado y quiero llegar pronto a casa ──Respondió cortante.

El pelirojo lo miró de nuevo con extrañeza, pero asintió a su vana explicación, imitando su ritmo para cumplir con su pedido y acelerar el paso.

Sin embargo, cuando tan solo un par de minutos después, se escucharon pisadas y ramas quebrandose a sus espaldas provocando que Jungkook saltará en su sitio asustado, el mayor entendió perfectamente ese nuevo cambio de humor por su parte.

El suyo propio también cambiando drasticamente a uno serio y a la defensiva.

Su olfato de alfa se alertó al instante reconociendo un aroma extraño y desconocido a su alrededor, junto a su excelente instinto que le avisó de una nueva precencia desconocida escondida en algún lugar tras ellos.

Se giró un momento para iluminar a sus espaldas, agudizando su vista para intentar notar algo en medio de la oscuridad, lograndolo en segundos al divisar perfectamente como una silueta a lo lejos corría de vuelta hacía la plaza al verse descubierto.

El ceño del pelirojo se frunció entre el desconcierto y la molestia, con sus pupilas ahora brillantes de ira en un tono rojo sangre y sus colmillos picando de repente.

La primera persona que vino a su mente fue el imbécil de Baekhyun, sin embargo sabía que si se tratará de ese psicópata, de inmediato hubiera reconocido su asqueroso aroma a cafeína. En cambio, lo que había logrado percibir está vez era un aroma cítrico muy sutil que jamás había percibido en nadie de ese pueblo.

Jungkook sabía lo que ocurría. A diferencia del alfa, él no pudo ni ver, ni oler a nadie, pero los pasos apurados y la intensa mirada que lo persiguió durante un rato si que los había notado, y no lo negaba, estaba asustado de nuevo, temblando sin cesar y con los horribles recuerdos atacandolo nuevamente.

Esta vez no estaba solo, y en parte eso lo aliviaba un poco, pero el terror y la ansiedad no se iban tan fácilmente a pesar de saber que Taehyung estaba ahí para ayudarlo, cómo siempre.

Se sintió totalmente estúpido por la escena de hace un par de horas, dónde se creyó tan valiente y juró poder sólo, pero a la hora de la verdad, la realidad era que siempre estaría tan aterrorizado en ese espantoso lugar como la primera vez hace años.

A unos cuantos pasos de distancia, con el corazón acelerado, las manos sudorosas y la respiración agitada, Jungkook veía como el mayor mantenía una expresión fría y molesta muy impropia de él; con la mandíbula apretada, el ceño fruncido y los ojos de un rojo muy brillante. Cuándo lo vió con intensiones de ir tras lo que fuera que los estaba siguiendo, olvidó por completo su orgullo y le importó nada su imagen frente al mayor; de inmediato lo tomó por la muñeca deteniendolo en un pedido silencioso para que no lo dejara solo en ese momento.

La expresión de Taehyung cambió con sólo ese gesto a una más suavizada, comprensiva, y ciertamente sorprendida, viendo el tembloroso y fuerte agarre del menor sobre su muñeca con abrumo.

── Q-Quiero ir a casa, rojito, porfavor ──Murmuró este por lo bajo, viéndolo con súplica.

El pelirojo exhaló con fuerza, viendo un instante de nuevo hacia dónde aquel extraño individuo se había ido, pero priorizando el bienestar del menor y dejando de lado sus instintos de cazador, asintió a su pedido y se acercó hasta él para rodearlo con protección por los hombros, animandolo a continuar e iluminando de nuevo el poco camino que les quedaba de frente.

── Bien, vamos entonces ──Murmuró acercándolo más a su cuerpo con protección. ── ¿Estás bien? ──Lo miró realmente preocupado.

El contrario asintió sin atreverse a encararlo, tan solo sintiendo las sutiles y suaves caricias que este le regalaba a su hombro para intentar que dejará de temblar.

── Ey, mírame ──Le exigió, logrando que el castaño de inmediato obedeciera ante su tono suave pero demandante. ── Estoy contigo y no dejaré que nada te pase ¿Lo sabes, verdad?

Jungkook, por primera vez le dejó ver las lágrimas de miedo acumuladas en sus ojos, que le dolieron profundamente al vampiro.

── Lo sé ──Susurró con una débil sonrisa. ── Y si lo haces, serías un pésimo superheroe, cero estrellas para ti...──Intentó bromear con un puchero, provocandole una risa baja y algo grave al mayor que lo estremeció al recibir esa bonita melodía desde tan cerca.

» Y creo que por ahora tendrás que seguir siéndolo ──Desvío la mirada, frustrado y muy avergonzado.

── Pues felizmente cumpliré bien mi trabajo para ganarme esas cinco estrellas, no te preocupes ──Susurró cerca a su oído con seguridad y coquetería.

Jungkook sonrió un poco, de nuevo ya un tanto más calmado gracias al vampiro, dándole un leve e indefenso codazo de broma, pero sin permitirle alejarse del todo, acercándose inconscientemente un paso más cerca a él, con disimulo.

── ¿Ya te dije lo bien que lo hiciste hoy? ──Comentó de repente y con un tono más relajado el pelirojo, intentando desviar el tema y distraerlo un poco en lo que quedaba de camino.

── No.

Mentira. Taehyung había sido el primero en felicitarlo esa tarde luego de su gran ensayo, pero cómo siempre, prefería mil veces llevarle la contraria antes que aceptar el gusto que ese simple detalle le provocaba.

── Ash, eres un pequeño mentiroso, mechitas ──Regañó con una leve palmada en su hombro. ── Pero no me importa volver a repetirlo, así que lo diré una vez más: lo hiciste increíble. En verdad, la forma en que tocabas y cómo...

Y Jungkook sin ni siquiera planearlo simplemente dejó de prestar atención a lo que el mayor decía, más centrado en observar con detenimiento su perfil, en recibir en silencio las caricias sutiles y despreocupadas que este dejaba en su brazo entre tanto, y en esas sonrisas y guiños que le regalaba tras cada frase u halago que sus acorazonados labios soltaban.

Se regañó internamente ante el solo hecho de mirarle los labios con tanta atención.

Pero sobre todo, muy en el fondo disfrutó verdaderamente el poder experimentar esa sensación de protección, seguridad y extraño confort que la sola cercanía del vampiro le transmitía últimamente.

Porqué por más asustado que aún estuviese a causa del anterior suceso horrible, y a pesar de tener mil ideas y pensamientos terroríficos en mente, era cierto también que el simple hecho de estar junto a Taehyung, había disminuido algo su temor y calmado su ansiedad de una inexplicable forma.

Estoy en serios problemas...

Jungkook, ahora estás jodido de verdad.

Luego de casi media hora, por fin llegaron a casa del menor entre bromas mutuas y risas, a pesar de qué cada uno internamente mantenían aún la preocupación e inquietud por el reciente suceso vivido.

── Bueno, a pesar de todo llegó sano y salvo en su casa, caballero, así que cumplí bien mi misión ──Expresó con una sonrisa y un tono de galantería dramática, haciendo una reverencia, al ya encontrarse frente a la pequeña pero bonita residencia del menor.

── Muy amable ──Respondió simplemente este con un tono irónico y una risa débil. ── Ya mejor vete que es tarde... Adiós, nos vemos mañana en el ensayo ──Se despidió con un leve gesto de mano, comenzando a subir los escalones de entrada a su casa, dónde no se esperó ser sorprendido de inmediato por la figura de su angustiada y molesta madre quién no dudó en salir al percibir el aroma tan distintivo de su hijo.

── ¡Jeon Jungkook, por la Santa Luna, casi me matas de la preocupación!, ¿Dónde estabas y por qué diablos no contestabas mis llamadas, jovensito? ──Regañó la de cabellos verdes con una mirada severa y una mano en el pecho, antes de abrazarlo con fuerza, entre la molestia y el alivio.

Con una sonrisa cariñosa el menor le devolvió el apretado abrazo y dejó un leve beso en su frente para calmarla, antes de separarse.

── No te preocupes mamá, estoy bien, solo tenía apagado el celular en el ensayo y olvidé encenderlo al terminar, lo lamento, no vuelve a ocurrir ──Se disculpó algo culpable al pensar en lo recién vivido. ── Además no seas exagerada, no te puedes morir ──La molestó con malicia para intentar disipar su propia angustia de igual modo.

── Pues por poco logras que ocurra un milagro y muera, mocoso ──Regañó con el ceño fruncido y una exprés de angustia, dándole un leve golpe en el hombro y ganándose una risita inocente de su hijo.

Al notar tras este la precencia de un tercero viendo tal escena con ternura desde la calle, la adorable mujer literalmente hizo a un lado al castaño de un empujoncito para acercarse con una sonrisa encantadora hasta dónde el pelirojo se encontraba.

── ¿Y dónde quedaron tus modales, medusita? ──Se quejó de nuevo en dirección al menor, mirándolo brevemente con severidad. ── ¿Por qué no invitas a pasar a tu amigo? Yo no te eduqué así ──Señaló con sus ojos al vampiro.

Cuando Jungkook también notó que el mayor aún no se había marchado, y quizó refutar indignado ante el reproche de su madre, el pelirojo se adelantó a sus planes:

── Si, medusita...─Pronunció el apodo con burla ganándose una mirada ofendida del menor──, que descortés eres ──Repitió, fingiendo decepción con una sonrisa burlona, viéndolo desde su lugar; antes de dirigirse a la dulce mujer de cabellera verde ondulada y ojos tan brillantes y hermosos como los de su hijo. ── Un gusto, señora Jeon, soy Kim Taehyung, compañero de banda y amigo de Jungkook ──Se presentó con su indudable educación junto a una breve reverencia y una de sus adorables sonrisas rectangulares que exponían sus colmillos de una linda forma.

La mujer sonrió enternecida devolviendole el gesto.

── El gusto es mio, cariño, y puedes decirme Eunha sin problema, el señora no va mucho conmigo ──Explicó con una mueca inconforme, mientras lo detallaba con cierta curiosidad que extrañó un poco al pelirojo y a su propio hijo, quién curioso y también algo avergonzado observaba la escena desde el porche.

── Está bien, como deseé Eunha ──Respondió cortés el de hebras rojas.

── Discúlpame... Taehyung, no quiero incomodar ni mucho menos, pero, ¿De casualidad eres hijo de Kim Sooha? ──Inquirió ella curiosa.

Los menores compartieron una mirada confusa a lo lejos, antes de que el alfa asintiera algo dubitativo a la pregunta de la mujer.

── S-Si, ella es mi madre, ¿Poe qué lo pregunta?, ¿Usted la conoce?

La señora Jeon sonrió y asintió algo sorprendida pero alegre.

── Lo supuse, eres idéntico a ella ──Comentó, escaneandolo con una sonrisa de admiración. ── El mundo verdaderamente es pequeño ──Dio un largo suspiro antes de continuar: ── Tu madre y yo fuimos compañeras de curso hace unos años, durante nuestra vida de solteras, y no quiero decir que éramos las mejores amigas del planeta, pero sí unas buenas conocidas... Recuerdo que la última vez que nos vimos, tú tenías cuatro años y mi Kook había acabado de cumplir dos ──Sonrió con cariño ante el recuerdo.

Ambos menores se miraron geniunamente sorprendidos, ante aquel curioso y extraño dato.

¿Sus madres se conocían?

Eso sí que era una gran y curiosa novedad...

── Wow, pues si que tiene razón, el mundo es realmente pequeño ──Murmuró algo consternado el vampiro viendo al de mechas de soslayo con una risa nerviosa.

── Lo es... ──Afirmó divertida. ── ¡Oh, ¿Por qué no te quedas a cenar con nosotros?! ──Propuso con entusiasmo. ── Quisiera saber un poco más de ti y de la vida de Sooha después de tanto tiempo, si no te importa, claro...

Jungkook exhaló con fuerza desde lo lejos, entre la vergüenza y la incomodidad.

── Mamá, déjalo, Taehyung debe volver a su casa y es al otro extremo del pueblo, no lo retrases que es bastante tarde ──Intervino algo nervioso y consternado con la reciente información.

El vampiro muy a su pesar le dio la razón al de mechas, más aún al revisar rápidamente la hora en su celular y ver que ya marcaba más de las ocho de la noche. Seguramente su padre estaría iracundo por su gran retraso para la hora de la diaria y amena cena familiar.

── De verdad me encantaría quedarme a hablar con usted Eunha y contarle sobre mamá, pero Jungkook tiene razón, ya es tarde y debo volver a casa pronto o terminaré en un ataúd dándole el uso para el que fue creado principalmente y ya no para dormir ──Le dedicó una sonrisa que más pareció una mueca de disculpa, a la cuál la mujer asintió de inmediato, comprensiva, con una risita divertida.

── Lo entiendo y tienen razón, que inconsciente de mi parte. ──Tocó su frente apenada. ── Disculpa, sí, ya es tarde y es peligroso, pero la invitación sigue en pie para cuando desees Taehyungnie ──Le dió una palmadita cariñosa en su brazo acompañada de una sonrisa dulce. ── Oh, y perdonada de nuevo mi atrevimiento, ¿Te puedo llamar así, verdad?

El nombrado asintió de inmediato sin ningún tipo de reproche, mientras Jungkook por su parte veía todo con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

── Estaré encantado de aceptarla en cuanto me sea posible, no lo dude.

¿Ahora también había hipnotizado a su madre?

Eran increíbles los poderes que tenía rojito para engatusar a todos.

Ese chupasangre...

── Oh, diablos, Medusita ──Llamó de repente su madre, sacándolo de sus pensamientos molestos. ── ¿Puedes hacerme un favor e ir a apagar la olla del agua para el Ramyeon? Salí tan apurada al escucharte que olvidé hacerlo y no queremos causar accidentes... Corre, por favor, hijo.

A Jungkook le pareció muy sospechoso ese repentino pedido, sobre todo cuando su madre normalmente era la más cuidadosa y precavida con ese tipo de cosas, por lo qué no se movió ni un centímetro y por el contrario le dedicó una mirada de ojos entrecerrados a la mujer.

Cuando los orbes grisáceos y profundos, tan idénticos a los suyos mismos, le devolvieron la mirada con severidad y una de sus finas cejas en lo alto, su valentía se vino abajo.

── Jeon Jungkook, creo haberte pedido un favor ¿O me equivoco? ──Dijo esta vez en un tono autoritario, con las manos sobre su cadera y una mirada de advertencia.

Resignado, el menor suspiró y asintió, sin poder deshacerse de esa curiosidad que la inusual actitud sospechosa de su madre le causaba.

── Adiós, Kim ──Pronunció simplemente con tono amargo antes de ingresar a regañadientes a su casa.

── Adiós, mechitas ─Le respondió con diversión este, viéndolo perderse en el interior de la pequeña casa.

La de cabellera verde, se sorprendió gratamente por el apodo que el vampiro tenía para su hijo y le enterneció el mismo, mas no comentó nada al respecto y por el contrario reparó con curiosidad la sonrisa dulce y calmada con la que este lo vió irse después.

── ¿No es lo más adorable? ──Preguntó divertida viendo hacia la entrada de su casa con cariño. ── Finge ser un gruñón pero en realidad es de lo más dulce que hay...

── Realmente lo es... ──Concordó el vampiro sin dudas en un murmuro, mirando en la misma dirección sin borrar ni por un instante su sonrisa.

A la señora Jeon, aquéllo le gustó.

── Sé que soy una pésima actriz pero era la mejor excusa que se me ocurrió para distraerlo ──Confesó sin vergüenza la fémina, mirándolo ahora con una risita culpable. ── Afortunadamente si olvidé apagar la hornilla... pero es que en realidad, ya qué estás aquí y tuve la fortuna de conocer por fin al famoso Taehyung del que tanto hablan, me gustaría poder pedirte un pequeño favor si no te incomoda, a pesar de verme un poco aprovechada tal vez...

Con las manos ocultas en los bolsillos de su pantalón, Taehyung le sonrió para tranquilizarla mientras negaba ante su vergüenza y la escuchaba atento.

── Me halaga ──Sonrió algo apenado, con un leve sonrojo. ── Y, el placer es mío, así que no dude en decirme lo que necesite. Si está a mi alcance, felizmente lo haré ──Aseguró repentinamente curioso ante el pedido de la mujer.

La contraria sonrió en grande, aliviada y contenta.

Era el indicado...

── Mis instintos maternales no fallaron contigo, Taehyungnie, eres una verdadera dulzura ──Murmuró sincera, viendo con ternura como el menor se sonrojó levemente y sonrió algo avergonzado. ── Bien, verás, cariño, el cumpleaños de mi medusita es en menos de una semana, y si bien, él no es muy fanático de celebrar esa fecha en verdad, a Hoseok y a mí si nos gustaría poder sorprenderlo ahora que ha conseguido nuevos y geniales amigos como ustedes, y que en el fondo, por más obstinado y desinteresado que quiera aparentar ser, yo sé bien que está muy feliz haciendo lo que le gusta; y por eso quisiera pedirte qué...

Taehyung se sorprendió ante la noticia mientras seguía escuchándola atento pero con mil pensamientos abordando su cabeza.

¿El cumpleaños de mechitas?

¿Acaso ella estaba insinuando hacerlo parte de una fiesta sorpresa para él?

La miró algo consternado.

No había mucho que pensar acerca de su respuesta realmente...

Luego de un par de minutos, Jungkook vio a su madre ingresar de nuevo a la casa con una expresión de pura alegría, poco común en ella.

── Ya sé de quién heredé el terrible desempeño actoral ──Acusó de inmediato luego de tragar su gran bocado de Ramen y ver con desconfianza a su progenitora. ── ¿Que te traes entre manos ahora, Jeon Eunha? ──Reclamó.

Con las manos en jarra, la fémina le devolvió la mirada.

── ¿Cómo me estás hablando, jovensito?

── No me cambies el tema, ¿Qué tanto hablabas con Taehyung, mamá? ──Indagó con una mueca ansiosa y un leve puchero descontento.

La contraria suspiró volviendo a su posición relajada y alegre.

── Nada de lo que debas preocuparte, tranquilo. Solo le pedí el número de su madre porque me gustaría quedar algún día con ella y hablar de los viejos tiempos ──Explicó tranquila, encogiendose de hombros y guardando su celular con semblante melancolíco. ── Que gran casualidad, ¿No crees?

Jungkook frunció el ceño no sabiendo muy bien que responder a eso.

── Bizarro y extraño, diría yo...

Su madre lo miró ofendida.

── Tu madre también puede tener algunos viejod amigos de élite, medusita... Aunque te sorprenda.

── No lo digo por eso, mamá ──Se corrigió, removiendo lo que quedaba de fideos con un semblante pensativo. ── Me refiero a que es extraño que ningúno de los dos lo recuerde... o que por lo menos supiésemos del otro por boca de ustedes, porque desde mi parecer, Taehyung estaba tan sorprendido como yo ──Hizo un puchero consternado.

Su madre soltó una risita de burla.

── Fue hace mucho tiempo Kook, y como dije, solo eramos buenas conocidas o amigas casuales si se le puede llamar así. Y es imposible que ustedes recordasen conocerse ──al menos de vista──, eran un par de bebés bonitos solamente hijo ──Sonrió con cariño, para después ingresar de nuevo a la cocina.

» Ay, ¡¿Por qué no me esperaste para comer, niño?, ¿Tan hambriento estabas?! ──Se quejó econ un chasquido decepcionado.

Su hijo guardó silencio con una risa baja culpable.

Aún pensativo y totalmente sorprendido con la historia de su madre y la señora Kim, Jungkook simplemente terminó su plato de ramen en literalmente dos sorbos respondiendo con eso a la pregunta ironica de la mayor, porque efectivamente, moría de hambre.

Tras unos minutos con la vista en ningún lugar en específico y sus pensamientos en otro planeta teniendo una disputa, tomó algo dubitativo su celular y abrió un chat que permanecía igual de intacto desde la primera y última conversación, viendo la pantalla con algo de indecisión y duda mientras mordía sus labios.

── Oye, Taehyung es verdaderamente muy guapo, ¿No crees, medusita? Me dejó gratamente sorprendida...──Comentó con interés la fémina mientras terminaba de servirse su comida entre tarareos. ── Sin dudas heredó los genes de su madre, que envidia...

Jungkook desde el sofá, frunció el ceño mirando la espalda de la mayor éntre la molestia y la confusión , ya conociendo a la perfección ese tonito sugerente de ella.

── Mamá, sé para dónde vas... ──Murmuró cómo advertencia para detener de raíz cualquier pensamiento errado que se le estuviese ocurriendo a su madre.

La de cabellos verdes se giró a verlo con una sonrisa maliciosa y una mano en su cintura.

── ¿Qué? ──Se defendió algo divertida ella. ── Tan solo estoy halagando al muchacho por lo obvio, cariño, no te estoy pidiendo que te cases con él, tranquilo ──Rodó sus ojos burlona.

Su hijo simplemente resopló incrédulo ante sus palabras, volviendo a lanzar lejos su celular en medio del sofá con irritación, antes de levantarse para ayudarle a lavar los platos con algo de desgana.

Cuando Taehyung llegó a su casa después de una hora de caminata de regreso y una larga meditación interna sobre lo ocurrido en el bosque y la persona misteriosa, a través del solitario y penumbroso pueblo a esas horas; una notificación llamó su atención deteniendo sus pasos antes de que pudiera ingresar a la increíble mansión de estilo vintage.

De inmediato sacó el aparato del bolsillo de su chaqueta y lo revisó curioso, llevándose una enorme pero grata sorpresa que le dibujó de inmediato una sonrisa en el rostro.

Lindo Mechitas 💚🐍

Creo que ya somos dos mentirosos, estamos a mano 👅...
9:35 P. M.

Relamiéndo sus labios no dudó ni un segundo en responder de inmediato complacido.

Vaya, creí que ya habías eliminado a tu acosador personal de tus contactos, pero que grata sorpresa ;0
¿Por qué lo dices exactamente?
9:38 P. M.

Del mismo modo, la respuesta del menor no tardó mucho en llegar.

¿Así que muchos "siglos" no, viejete? 🤨😒
Increíble que mi madre haya sido quien te desmintió de esa forma
9:40 P. M.

No mentí, técnicamente 25 años son lo mismo que 25 siglos para mí, mechitas, puedo ser un vampiro joven pero lleno de experiencia ;3
9:42 P. M.

Patrañas 😒
Repito: eres un fraude de criatura vampirica 🫵🏻😠
9:44 P. M.

Taehyung soltó una carcajada baja antes de responderle.

¿Hubieses preferido entonces que sí fuera un viejito de miles de años en este cuerpo joven y caliente? -_- :*
No tenía idea que tus gustos fueran tan... peculiares, mechitas.
9:46 P. M.

Seguramente así hubieses sido menos idiota 😒🥊
9:47 P. M.

Al imaginar el puchero de molestia que seguramente el otro estaba haciendo, sonrió como un tonto.

Oye, me quitas mi esencia -+-
9:49 P. M.

Esperó ansioso una nueva respuesta durante unos segundos más revisando constantemente que aún el menor estuviese conectado, pero a pesar de que este seguía en línea, no obtuvo nada más de su parte. Ahora siendo él quién tenia un puchero decepcionado, hizo el amague de guardar de nuevo su celular, pero antes de poder hacerlo, el aparato vibró en su mano indicándole la llegada de un nuevo mensaje que leyó en un parpadeo.

Gracias... por todo lo de hoy, rojito, de verdad aprecio tu ayuda.
Te debo varias, me temo 😒
9:55 P. M.

Y con esa última frase, el menor se desconectó dejando al vampiro con la misma sonrisa atontada y estúpida de siempre.

Tu superhéroe siempre estará disponible para ti, cada que lo necesites ;)
Tendré en cuenta para hacer mis respectivos cobros ;D
Descansa mechitas, sueña conmigo ;3
10:00 P. M.

Tras enviar ese mensaje, guardó su celular tal y cómo tenía planeado hace instantes, con un suspiro pesado y lleno de sentimientos encontrados luchando en su interior, antes de disponerse a entrar por fin a su casa cómo debía hacer hace bastante, con un sentimiento cálido en la misma medida que incómodo instalado en su pecho.

Tan pronto puso un pie en el lugar, los gritos fúricos de su padre hacía su hermano mayor lo recibieron desde el comedor, logrando cambiar drásticamente su humor.

Suspiró cansada dejando caer su cabeza en la puerta y cerrando sus ojos, intentando así recargarse de energías para la batalla campal que se avecinaba al aparecerse allí.

Unos ojos grises y una sonrisa de conejo aparecieron en su mente en ese mismo instante.

Tragó saliva con fuerza.

Cuanto desearía que entre sus poderes y habilidades estuviese también el de detener el tiempo con una sola persona.

Sin duda sabría bien a quien elegiría...

🐍 [ Ťo Bə Continuə... ] 🦇

Hola, hola chiquis... 👀

Ya sé que muchos seguramente no se lo esperaban pero afortunadamente los astros se alinearon y pudimos tener actualización también esta semana, y si todo sigue así, puede que incluso sea triple 🫣😈😳

Porqué como ven, este capítulo estaba quedando tan extenso con la idea original que no tuve de otra que dividirlo en dos partes para no abrumados u aburrirlos con una extensión de casi 10k palabras. Así que opté por dejarlo hasta aquí y mañana o el miércoles a más tardar les estaría subiendo la segunda parte ✨️🫠

También se viene el cumpleaños de Kook tanto aquí como en la vida real jsjs, así que mi plan es tratar de que de nuevo los astros se pongan de mi parte, y cómo especial poderles subir el capitulo 12 ese mismo día que va a ser SUPER IMPORTANTE y más de uno vamos a gritar bien fuerte, no digo más 😏🤐👀

Y bueno, ya hablando un poco más de este cap, cuéntenme ¿Que les pareció?, ¿Qué piensan de la mamá de Kook? Yo la adoro a esa mujer, miren no más lo hermosa qué es 🥺😭

REINA 🫦😻

y, omg... ¿Quién será la persona del bosque? 🧐😨

#MIEDO #TERROR #OZUNA

Como ven, ya empezamos también con las dedicatorias, así que ya saben que si quieren ganarse una solo deben dejarme un comentario aquí pidiéndolo de forma bien creativa y se lo podrán ganar 😉💚

Espero todos sus comentarios, reacciones y teorías como siempre. Gracias por todo el apoyo que día a día le dan a este proyecto, estamos cerca del 1k de votos y los 5k ojitos, LLORO y no me lo creo, mil gracias infinitas 😭🫂❤️‍🩹🥺✨️

Ahora si me despido, solo por ahora, porque vuelvo más que pronto por aquí así que no sé preocupen, lo adoro y se me cuidan 💋💚💜

VanTTGirl ▪︎

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro