Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 18 - "Recuerdos"

Capítulo 18 — Recuerdos.


Ángel .

—Oh. Dios. Mío.

Observo como Angie y Mikal se encuentran abrazados en su cama.

¿Habrán tenido sexo? Iugh, que asco.

¡Ángel! Concéntrate.

Termino de entrar al cuarto de Mikal y los sigo mirando. Mikal abrazaba a Angie de la cintura apoyando su barbilla en su cabeza.

Sonrío. Esa misma pose teníamos cuando me pedía dormir con él. Cuando le dolía el estómago o la cabeza. O viceversa.

Es tan cariñoso mi hermanito.

Angie estaba en su pecho durmiendo tranquila.

Dejo de sonreír cuando recuerdo lo que le hizo a Mikal. Seguro la maldita perra les hizo un mandado a Colton para que lo hiciera.

Aún no me fío de ella.

—Angie — le llamo en bajo para que solo ella me oiga. Mikal tiene la costumbre de despertarse a penas siente algo. Yo soy una roca.

Se despierta sobresaltada, seguro es por que la llamaron por su nombre.

—¡Ángel! —habla fuerte y Mikal se da vuelta quejándose.

Mierda.

—Estúpida, cierra la boca.

Se levanta agarrándome el brazo y saliendo del cuarto.

—¿Que haces aquí? ¡Tienes que estar con mi novio Colton! — susurra fuerte.

Ug, el imbécil ese.

—Son las 14:30, tengo tiempo, mandó un mensaje avisándome pasar por mi a las 20:00. —le comento y la veo suspirar. —Te veía muy a gusto abrazada de mi hermano —digo con una ceja alzada. —Le haces algo y te juro que...

—¿Como crees? Soy feliz con mi novio — Se cruza de brazos.

—¿Estas segura de que sos feliz? ¿O quizás solo sea por la amenaza que lo dices?

—¿De qué mierda hablas? —. Frunce su ceño muy desentendida.

—Dice que si no me dejo de comportar como lo hago, les mostrará a los demás unas fotos. Te digo porque si me entero que es mentira...

—Las fotos —me interrumpe pensando. Luego de unos segundo me mira pálida.

—Angie, deja de actuar. — me incomodo mirándola raro.

—No, él no es así... Es mentira seguro...— tartamudea, niega con la cabeza, negándose a aceptarlo.

Y capté al instante que es verdad. Cuanto quisiera verlo y golpearle una buena bofetada que se la tiene guardada. O quizás no solo una bofetada, no se, algo que le duela o recuerde que por vida.

—Explícame que me dejas con las dudas— le digo inquieta.

Pero ella se encontraba aún más que yo. Su mirada estaba perdida, con un poco de dolor en sus ojos y no dejaba de sonar sus dedos.

Pobre ilusa.

—Yo... no, tenemos que arreglar esto ahora mismo y que todo vuelva a la normalidad— La rudeza se hace presente en sus ojos y deja de lado el dolor.

Vaya, que bipolar.

—Por mi no hay problema, mucho mejor.

—Tuve un sueño extraño, en él aparecía tú, Mikal, Colton, sus amigos, Roxana, Lucy y yo — comenta extrañada. —En el parque de diversiones—Levanta su mirada rápido y me mira como si descubrió la la pieza que faltaba en el rompecabezas. —¡Ángel! Todo encaja ahora...

—¿Ángel? — la voz de Mikal se escucha en su cuarto y nos alarma.

—Carajo —Miro a mi alrededor y decido entrar en el pequeño mueble que hay al lado de la mesita en el mismo pasillo. Cuando era chica tenía miedo estar aquí, papá decía que si no dormía cuando me acostaba llamaría al coco que se esconde ahí. Yo no le creí, no era tan ilusa, pero cuando decidí entrar para comprobar si era verdad, arañazos y aullidos pocos normales se escuchaban y me asuste mucho, cuando intente salir no abría la pequeña puerta.

«Casi matas al pobre gatito»

Pobre los cojones que no tengo.

Cuando estoy en este extraño mueble me trae viejos recuerdos...

Recuerdos del maldito gato.

—Hey, ¿Qué haces despierto? —pregunta con nerviosismo Angie.

Me pego la frente ante su torpeza.

—Dormí demasiado— responde con una voz lejana. Ay hermanito, como te extrañaba. —¿Hablabas con alguien? —Y siempre tan curioso Mikal.

—¿Me estas tomando de loca?

—Estas demente, eso sí—confirma y tapo mi boca para no reír.

—¿Por qué no seguis durmiendo que te hace mucha falta? — le responde con mal humor la rubia.

—Calma la chancla vieja— dice riendo Mikal. Oigo como su risa ya no se escucha y pasos alejándose.

Unos golpes me hacen sobre-saltar y mirar a mi costado como si el gato estuviera aquí. No me sorprendería que aún siga vivo, hierva mala nunca muere.

—Puedes salir, o piensas esperar a que venga tu mascota —habla una Angie burlona.

Estúpida.

Estúpida yo por contarles cosas mías cuando era chica.

Salgo refunfuñando y le dedico una mala mirada.

Le digo que hablemos en mi cuarto para que Mikal no nos escuche y me sigue.

—¿Te acuerdas cuando nos encontramos en el parque de diversiones? —dice con precaución sentándose en mi cama.

Flasback.

Narra Ángel.

—Ya te he dicho, aún no la voy a presentar, no se si es la indicada, además, apenas nos conocemos
—insiste Mikal.

Cabeza hueca.

—Pero que sea pronto. Las tías dudan de tu orientación sexual —me acerco a su oído como queriéndole contar un secreto —Desean tener a un sobrino gay —le susurro y larga una carcajada.

—No le daré el provecho —Chocamos los cinco y seguimos caminando.

Estábamos buscando una distracción que nos llame la atención, ya casi subimos a todos. Y eso que hace una hora que llegamos.

—Vaya vaya vaya. Miren a quien nos encontramos aquí —la odiosa voz de Colton me hace mostrarle una mueca de desprecio a él y a sus acompañantes.

—Pues si, a nosotros además de la mitad del pueblo ¿Duh?— le digo sarcástica y Mikal tira de mi.

—Que chistosa eres, imagino que no te la aguantas cuando estas en la escuela, rodeada de personas que pasarán de ti —. Giro y veo a Angie Black.

Mi desagrado no podía aumentar aún más.

Le rebajo con la mirada, su ropa más apretada no podía ser por que su cuerpo ya lo impedía.

—Aguantaría una pelea aquí o en donde sea. Ahora, si lo quieres poner de excusa te compadezco— Me encojo de hombros.

—Eres una zorra— escupe acercándose a paso lento.

—Pues creo que compartir palabras contigo me hacen convertirme en lo que eres, así que, aléjate, shu — Le hago una seña como corriendo a un perro.

Se acerca a mi y me tira algo pegajoso junto unas palomitas a mi cabello. Todos sus amigos se rien. Abro mi boca y sonrío con maldad tocando mi pelo como si no lo pudiese creer.

—Oh maldita, te vas a repetir —Me suelto del agarre de Mikal, haciendo que cuando haga para atrás el codo choque con algo haciendo un ruido seco.

—Siempre arruinando todo... — Siento que alguien dice a mis espaldas.

Miro lo que cause y había una señora mirando al piso una olla con su líquido esparcido por el piso. Era como espuma que se deshacía y cuando se terminó se esparcirse la espuma junto al líquido desapareció.

Mikal agarra mi brazo y levanto la mirada. —¡Tú! ¡Maldita mocosa! ¿Qué has echo?— se altera señalándome con su dedo índice, su cara se volvió roja. Era una anciana rondando unos 80 años, tenia solo un ojo, su pelo era totalmente canoso y las arrugas en su cara se eran muy presente además de un par de arrugas en el puente de su nariz.

Tenía un aire de maldad y no me daba confianza en lo absoluto, cosa que me hizo dar un paso atrás y buscar la mirada de Mikal que se encontraba hipnotizado bajo la mirada de odio de aquella anciana.

Y él no era el único.

—Se arrepentirán, ustedes dos se arrepentirán —lo dijo en un susurro remarcando para palabra dirigida para Angie y para mi.

Fin de Flasback.

—Joder,joder, no. — digo dando vueltas por habitación, atemorizada.

—Solo ella pudo haber sido— murmura Angie.

Agarro un cojín grande y se lo tiro con fuerza haciendo que ella caiga de la cama y se escuche un golpe fuerte.

Mi risa era incontrolable y comenzaba a agarrarme el estómago. La agarre desprevenida y eso fue ventaja para mi.

—¡¿Por qué hiciste eso?!—Se para de inmediato queriendo agarrar uno para seguro hacer lo mismo.

—Oh no Srta. Barbie, me la debías por el incidente del parque de diversiones—le advierto con el dedo índice.

Su boca se aprieta inconforme y vuelvo a reír recordando su cara sorprendida antes de caer.

Luego de un minutos ella se suelta y también ríe despacio.

—¿Cuando vuelven a abrir el parque?— pregunto con el ceño fruncido.

—Creo el fin de semana que viene. —Hay frustración en su cara y me compadezco.

—Mierda, falta mucho— murmuro— ¡Háblame de las fotos!

—No hay nada que hablar, son cosas mías que arreglaré cuando todo esté bien —  dice seca cruzándose de brazos.

Golpe bajo.

—Como quieras.

Tendría que admitir que quería ayudarla con ese asunto. Quizás meternos a la casa de Colton y borrarlas de su ordenador. Pero si lo quería así, pues que se las arregle ella sola.

Una vez en la vida que se me abre el corazón y no lo aprovecha.

Me levanto de mi cama y abro la puerta mirando si Mikal ronda por los pasillos.

—¿Adonde vas?— pregunta Angie y le hago una seña que se calle.

Cuando me aseguro que nadie ronda por los pasillos me despido de Angie, poniendo de excusa que tengo que "Arreglarme para Colton" y con voz chillona. Se rió por más de diez minutos pero al final accedió.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro