Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Intento 02

Faltaban 5 minutos para que tocase el timbre de salida.

Chuuya se la había pasado mirando para atrás toda la clase, más específicamente a Osamu, planeando su estrategia para encararlo.

El tiempo fue rápido, y cuando quiso darse cuenta, el timbre había sonado, y Dazai salido.
Corrió rápido a la salida sin despedirse de nadie más que la maestra con un simple "¡Adiós!"
Para su suerte, Osamu no se había ido aún, pues se había quedado hablando con el profesor de literatura, era con el único que se podía decir, que Dazai tenía una relación.

Sin pensarlo mucho, corrió a buscarlo, y lo sorprendió de un pequeño agarrón de hombros, ya que estaba de espaldas.

Aunque de asustó un poco, solo fue un ruidito. Se dió vuelta para ver a quién osaba interrumpir su conversación con su profesor preferido.

¿Chuuya...? ¿Qué haces aquí? Ya te dije que lo siento...
Dijo retrocediendo un poco con el ceño fruncido.

¿De qué hablas? ¡Voy a ir al parque y necesito que vengas conmigo!
Más que pregunta, eso había sido afirmación.

¿Uh? ¿Y yo por qué? Ahora no puedo, estoy hablando con...
Antes de poder terminar, fue interrumpido.

—Ve con tu amigo, Osamu.
Por su parte, el profesor Sakunosuke se alegraba que aquel chico tuviese un amigo.

—Pero, yo no...
Muy lento para hablar, en ese tiempo Chuuya lo tomó de la mano y se dirigió a la salida, parecía que eran amigos de toda la vida.

¡Adiós profe!

—¡Adiós niños...!
Su lejanía era la suficiente para tener que gritar si quería ser oído.













—Y... ¿Por qué querías que venga al parque?
Se animó a preguntar una vez en el lugar. Ambos estaban sentados en las amacas.

Estoy seguro que algo sucedió, no pude activar mi habilidad, y practiqué mucho para entenderla, no voy a dejar que ésto se quede así.
Podías sentir la determinación recorrer tu cuerpo de solo escucharlo.

—¿Eso quiere decir que vamos a intentarlo otra vez?
Un pequeño brillo se hizo notorio en sus grandes ojos cafés.

¡Claro que sí! Rendirse es para débiles, así que-
hizo una pausa mientras se paraba.
Párate, y tratemos.



Seguido de eso, Osamu se levantó, y ambos niños se dieron las manos frente a frente, Chuuya con total determinacion, y Dazai con nerviosismo de fallar.

Bien, ¡Prepárate!
Nakahara cerró los ojos y apretó un poco las manitos de Dazai.

Nada.
Una vez más, nada de nada.

Enorme no era suficiente para describir la desilusión de ambos niños.


Quizas tu poder ya no funcione.
Sugirió Osamu.

—¡Claro que no!
Ofendido declaró.
Mientras se sentaba en una hamaca doble lo llamó para que fuese él también.
¿Ves? Mi habilidad funciona perfectamente!
El columpio iba para arriba, en ves de los costados como debería ser, ésto obviamente ocasionado por Chuuya.

El pelirrojo se quedo pensando unos segundos, y se le ocurrió una maravillosa idea.

Tengo una idea, ¡Salta!

—¿Perdón?
Dazai, quien no terminaba de entender, se acercó un poco.

Salta hasta aquí arriba, y estaremos volando!
Bueno, sí, y no, no era volar porque pues, simplemente no era volar, pero a la vez si, ustedes me entienden.


Dazai sin pensarlo mucho, le hizo caso, y de un salto, cayó en el columpio, pero él no era lo único, sino que a la hora de su impacto, ambos cayeron, pues el poder de Chuuya había dejado de surtir efecto.

No dijeron nada más que un simple "no funcionó".
Ambos se quedaron en el suelo, quietos, viendo hacia el cielo, sin decir, ni hacer nada.




De repente, la paz se ve interrumpida, ya que Nakahara escucha sonidos provenientes de su compañero, estaba llorando.

¿Dazai? ¿Por qué lloras?
Preguntó sentándose a su lado poniendo su mano en el hombro ajeno.

Es que... todo siempre me sale mal... Solo quería jugar...
Las lágrimas habían incrementando, y ya le costaba trabajo respirar, pues el seguía acostado.

Dazai... No llores... Porque si lloras a mí me dan ganas de llorar
Declaró mientras lo sujetaba de los hombros para sentarlo- toma- ofreció un pañuelo que sacó de su bolsillo
Usa ésto.

Nakahara....
Dijo llamando a su compañero, quien respondió con un "uhm"
—¿Por qué no puedo hacer nada bien?
Sus mejillas estaban rojas, junto a sus ojitos irritados.

Yo... ¡No digas eso! Eso solo un problema mío por no saber controlar mi habilidad, no te eches la culpa.

—¿Puedo preguntarte una cosa más?

—Claro

—Tu y yo... Ahora, ¿Somos amigos?

—... Por supuesto que sí.











Tan xikitos

Imagen de arriba ⬆️:

@1110yu_ku_si (Twitter)

31322684 (Pixiv)

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro