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𝑡𝑟𝑒𝑐𝑒

Canción del capítulo: Foxes - Night Glo.

Sí, capítulo doble ♡

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En la mesa se hace un silencio entre ambos, el resto está metido en sus cosas y no saben que acabo de "confesarme" al chico que me gusta, todo del chico rubio a mi lado me gusta porque él siempre me ha gustado, desde la secundaria para ser exactos. JungKook está con sus ojos bien abiertos, sus mejillas están algo rojas por el licor, una pequeña carcajada sale de mí mientras me burlo de mí misma.

—Tu expresión dice que no sientes lo mismo—entonces la sonrisa y el buen humor desaparecen ante esa posibilidad, él parece notarlo.

—So...

—No tienes que decirlo—lo detengo—Será mejor que nos vayamos y... —así como me levanto vuelvo a sentarme por el mareo—Quizás debamos irnos cuando todo deje de moverse, ¿De acuerdo?

Es inevitable que mis lágrimas no se acumulen en mis ojos volviendo borrosa mi visión. Es inevitable no sentirme el doble de mal con el licor, no esperaba en lo absoluto ser rechazada por el chico que me gusta, ¿Debe considerarse como rechazo? JungKook coloca su mano en mi barbilla, hace que voltee despacio en su dirección.

—Quiero preguntarte algo—asiento esperando que continúe— ¿Estás segura de eso?

"No responderé"

—Muy segura.

"¡¿Por qué respondí?!"

Sus ojos se ven tan bonitos de cerca, brillan con la luz tenue del bar, puedo verme reflejada en ellos, sus mejillas rosadas por el licor están tibias cuando las toco, se siente como nuestra burbuja vuelve a aparecer. Él sigue sin responderme y me hace sentir peor pero tampoco puedo obligarlo...

JungKook se acerca a mi oreja susurrando lo siguiente.

—También te amo.

—No juegues conmigo—hago un puchero—Casi lloro porque no me respondías—abrazo su cuello apoyando mi cabeza en su hombro, él hace lo mismo acariciando mi espalda— ¿Enserio me amas?

Escucho una risita de su parte.

—¿Quieres que te lo diga sin palabras?

—Sí, antes de que lo olvide—me separo sólo un poco, sus labios tocan los míos y aquel beso tiene un leve sabor a licor que lo hace incluso más dulce. Sus manos toman mi rostro mientras una de las mías se encuentra en su muslo, no dura mucho porque cierta persona nos interrumpe.

—Lamento la interrupción, tortolitos, pero quisiera bailar contigo, JungKook.

—¿Disculpa? —miro a SuA como si estuviera loca, en mi hombro se posa una mano que es de Jimin, por su mirada sé que quiere hablar conmigo.

—Tranquila, sólo te lo robaré unos minutos—dice divertida extendiendo su mano a JungKook.

—Así hablaré con mi hermanita a solas—Jimin se sienta frente a mí insinuando aquello al chico que duda en dejarme, ambos se alejan de la mesa, es entonces cuando Jimin me mira un tanto serio— ¿Qué está pasando realmente entre ustedes?

—No deberías hablar con tu hermana cuando está ebria—me cruzo de brazos en la mesa.

—No lo suficientemente ebria—imita mi posición— ¿Sabes lo que estás haciendo, So?

—Nadie sabe lo que hace en esta vida, nunca sé lo que hago con la mía—sonrío—Lo mismo puedo preguntarte a ti, ¿Sabes lo que haces con esa víbora?

Jimin pasa su mano por su melena rubia, sabe que tampoco puede reclamarme.

—Creí que estabas dudosa sobre él—dice, pero sólo pienso en su confesión— ¿Te sientes bien con esto?

—Escucha, cada día lucho conmigo misma, pero termino en el mismo lugar de siempre y ese lugar es en mi departamento deseando cada día al hombre que baila en esa pista—señalo—Me gusta JungKook, desde que volvió mis emociones son más intensas—volteo a verlo. JungKook luce algo incómodo intentando bailar con SuA.

—Y entre esas emociones tienes miedo—miro a mi hermano—No inicies algo si no estás segura de eso, So.

—Estamos avanzando a nuestro paso—las escenas se repiten en mi cabeza desde su regreso—Estamos haciendo las cosas bien...

—Me preocupas.

—Y tú a mí, porque esa chica te tiene totalmente ciego—Jimin rueda los ojos—Ella no ha cambiado, estás tan ciego que no te das cuenta que le coquetea a mi novio.

—¿Ya es tu novio? —bufa.

—Lo es—me levanto tambaleante, recojo mi bolso y el de JungKook bajo su atenta mirada. Me abro paso entre las personas que bailan, tomo la mano de mi novio para luego sacarlo de ese bar.

—So, espera.

Ignoro lo que dice caminando por la acera, cuando estamos más o menos lejos de dicho bar me detengo girando sobre mis talones. JungKook me mira atento esperando que diga algo, esta vez haré las cosas bien.

—¿Qué somos?

—¿Qué?

—Nos besamos, nos acariciamos, disfrutamos la compañía del otro y los besos del otro—hablo rápidamente—Hace dos años también hacíamos eso, pero nunca aclaramos que éramos, esta vez no quiero ser algo más, quiero tener una palabra para describir lo que somos—trago con dificultad—Quiero hacerlo bien esta vez-avanza a mí—Así que dime, ¿Qué somos, JungKook?

—Somos una pareja que va a su propio paso.

—Una pareja—niego con la cabeza—Eso no me sirve.

Toma mis manos acariciando el dorso de ellas, respira profundo con una leve sonrisa.

—Park SoHee, ¿Quieres ser mi novia? —pregunta y añade—Supongo que quieres escucharlo así.

—Novios—esa palabra la habíamos usado muy poco—Me gustaría ser tu novia—asiento.

Una semana después

Solar me había traído a una de sus clases de Pole dance, en el salón había varios tubos para poder subirse, cada una de las chicas tenía uno, al ser realmente nueva en esto tuvimos que aprender algunos nombres primeros mientras la profesora indicaba que debíamos hacer. Yo había venido por invitación de Solar y otras más habían venido por alguien más, vestía como el resto de las chicas, tenía unos pantalones cortos totalmente negros que dejaban ver mis piernas pálidas, una camisa de tirante del mismo color, el cabello suelto y los pies descalzos. Me hacía sentir más segura el hecho de que no hubiera hombres en esta clase.

Mantener el equilibrio en ese tubo no era sencillo, aunque veíamos movimientos simples (según la profesora) mis manos no soportaban mucho tiempo, si movía mis piernas sentía que caería, pero sorprendentemente me gustó, tenía un toque relajante que no sabía explicar. Cuando la hora de las principiantes acabó, las que tenían más experiencias hicieron una demostración, Solar me dejó boquiabierta, tenía talento para esto.

Había pasado una semana desde mi confesión a JungKook, lo pude recordar con claridad unos tres días después, aunque Jimin decía preocuparse por mí seguía algo molesta con él porque sin darse cuenta estaba repitiendo la actitud de hace dos años, JungKook y yo sentíamos lo mismo, éramos novios por eso mismo, es cierto, ambos debemos ir despacio, no necesitamos apresurarnos, lo que hemos avanzado hasta ahora ha sido por decisión propia, suelo visitar a mi psicólogo una vez a la semana, él no cree que esto sea malo, mientras me sienta segura con lo que hago todo irá bien.

Pero ambos necesitamos avanzar tarde o temprano.

—¿Qué te pareció? —Solar y yo esperamos el autobús luego de aquella clase.

—Es muy entretenido—sonrío un poco—Me gustó.

—¿Enserio? —sonríe—Pensé que lo odiarías, no a todos les gusta este tipo de baile, tienen un concepto muy erróneo de lo que es.

—Últimamente he estado algo familiarizada con el baile—comento ganando su atención—En primavera participaré en una competencia con mi novio.

"Mi novio"

—No sabía que tenías novio, bueno, sé que sólo hablamos para trabajo—acomoda su cabello— ¿No terminas muy cansada? Pareciera que haces muchas cosas, a mí el tiempo no me alcanza—rueda los ojos.

Mi celular comienza a vibrar con una llamada entrante, en la pantalla aparece un nombre, me extraña recibirla, pero contesto igual con voz clara.

—Hola, mamá.

Hola, SoHee, ¿Estás ocupada?

—No. ¿Qué sucede?

¿Tienes algo que hacer esta noche?

Mi sexto sentido se activa, mi madre no me ofrecería ir a casa por nada o hacer algo juntas por nada, tiene dos años que no hace eso. De por sí todo en nuestra relación de madre e hija ha cambiado.

—Creo que tengo tiempo, ¿Por qué?

Esta será la última cena de tu hermano en esta casa, mañana se muda.

"¿Jimin le habrá dicho la verdad o prefirió ocultarlo?"

—Ah.

Y por lo que veo ya sabías que se mudaría—guardo silencio. Ella no debería enojarse ni sonar molesta— ¿Puedes venir a las ocho?

—Estaré ahí—la llamada termina y casi al mismo tiempo llamo a mi hermano. Un autobús llega, pero es el autobús de Solar, me despido de ella moviendo mi mano para esperar el próximo.

¿Hola?

—¿Le dijiste a mamá que te mudabas?

¿Te llamó? —suspira del otro lado de la línea—No estaba contenta pero últimamente nada le alegra, todo lo que hago está mal.

Aunque Jimin es un idiota muchas veces entiendo un poco lo cansado que es tener a mamá presionándolo o lanzando indirectas.

—¿Ahora entiendes como me siento cuando discutimos?

¿Sigues molesta conmigo por lo que dije en el bar?

Miro el otro lado de la calle donde pasan algunas personas.

—Somos muy adultos para seguir discutiendo por cosas tontas—cruzo mis piernas sentada en el banco—No estoy de acuerdo con tu relación, pero intento respetarla, Jimin, ¿Puedes confiar en mí y hacer lo mismo?

No quiero que salgas herida de nuevo.

—Y JungKook tampoco lo quiere, créeme.

Bien. Te veo esta noche en casa.

—Allí estaré.

PD. SuA si era consciente de la relación que YoonGi y SoHee tenían hace años, incluso así ella continuó su amorío con YoonGi.

Por eso SoHee no confía en ella y duda, por eso también siente algo de inferioridad a su lado.

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