Capítulo final

Lia camina tomada de las manos por JungKook y conmigo, viste su uniforme de la guardería, luce adorable con sus dos coletas en la cabeza. No mentiré, me sentía de buen humor al saber que la moto no sería usada hoy, algunos niños acompañados de sus padres se dirigían a la guardería de la otra esquina.

— Tía So—bajo la cabeza mirándola—¿Appa y omma vendrán por mí?

— Claro que sí, no te preocupes.

La niña asiente mirando la calle, JungKook balancea su pequeña mano tomada haciéndola sonreír un poco, cruzamos la calle cuando los autos se detienen, la cuidadora de Lia nos recibe con amabilidad, Lia nos abraza antes de irse con sus compañeros, JungKook y yo salimos de allí tomados de la mano caminando por la acera.

— Siento que Jennie y Tae ocultan algo.

— ¿Cómo qué? —lo miro.

— No lo sé, ¿Jennie te dio detalles del porque Lia se quedaría con nosotros?

— Te dije que me gustaba cuidarla.

— Ya, pero recuerda que cuando Jennie y TaeHyung tomaron un tiempo para ellos aparecieron con la noticia del embarazo—dice. Levanto mis cejas entendiendo a que se refiere.

— ¿Crees que Jennie está embarazada?

— Tal vez, Lia quiere un hermano, le alegraría esa noticia.

— No creo que los padres de ella estén muy contentos—indico—TaeHyung dijo una vez que no se sintió tan cómodo con los padres de ella, trataron bien a Lia, pero...ya sabes—doy un suave apretón a su mano—¿Nunca quisiste tener un hermano o hermana?

— A veces lo pienso y otras veces no—se encoge de hombros—Prefiero no hablar de mi familia.

— Pensé que querías saber sobre ella.

— Quiero saber la historia de mi madre, nada más.

Miro a JungKook quien mantiene la vista al frente con el ceño un poco fruncido, acaricio su mano depositando un beso en su mejilla.

— ¿Sigues sin saber sobre eso?

— No—suelta mi mano y rodea mis hombros. Abrazo su torso caminando al mismo paso que él—¿Debería olvidarme de eso?

— Quizás en el momento menos esperado saldrá algo—intento animarlo—Tal vez seas heredero de una gran fortuna...

— Que fantasiosa, incluso si fuera así no me interesaría para nada ese dinero—besa mi cabeza—Te tengo a ti.

●●●

La clase todavía no empezaba, algunos alumnos llegaban dirigiéndose a sus puestos, mientras reviso mis anotaciones mi celular vibra en mi mesa. El nombre de mi hermano aparece, contesto llevándolo a mi oreja.

— ¿Hola?

— ¿Estás en clase ahora?

— Todavía no ha iniciado, ¿Pasó algo?

— No realmente—lo escucho dudoso—¿Recuerdas a YeJi?

Sonrío un poco.

— ¿Ya son pareja?

— No, pero...creo que saldremos este fin de semana—suspira—¿Estoy haciendo bien? No te rías, pero por un momento no pude decirle que no.

— ¿Te sientes bien con eso?

— ¿Con qué?

— Con salir con ella.

— Creo que sí.

— ¿Crees?

— Le dije que me diera tiempo, quiero ir despacio.

— ¿Pero quieres salir con ella?

Jimin parece pensarlo, no me responde al instante, miro la pantalla de mi celular creyendo que quizás colgó, pero no, sigue ahí.

— YeJi es una buena chica.

— Jimin, no hagas nada si te sientes obligado, ¿De acuerdo? Puede que te atraiga o sientas curiosidad, pero si no estás cómodo no lo hagas—obtengo silencio—¿Me escuchas?

— Lo hago, pero al mismo tiempo quiero salir con ella.

Eso era lo que necesitaba escuchar.

— Entonces, hazlo.

— Lo haré, ¿Mamá no te ha llamado?

— No.

— Pensé que estaría molestándote como cuando te fuiste de casa—dice—¿Todo bien con el idiota? ¿Han tenido muchas noches largas?

— Jimin.

— Si te rompe el corazón debes decirme.

— No va a romperme el corazón.

— Eso dijiste la última vez.

— Si serás el idiota de hace dos años voy a colgarte—advierto.

— Que humor, pensé que te relajarías.

Ruedo los ojos negando con la cabeza. Jimin nunca cambiará.

●●●

La pizzería se encuentra un poco llena, este lugar suele ser más visitados por familias, no suelo ver a JungKook en horas de trabajo, sólo cuando acaba la jornada. No tengo mucha confianza con los compañeros de trabajo, hablo lo necesario y listo, mientras limpio una mesa recién desocupada mi celular vibra en el bolsillo de mi delantal.

JungKook:
Necesitamos ir a un lugar esta noche luego del trabajo.

SoHee:

¿Quieres ser romántico esta noche?

JungKook:
No realmente.

SoHee:¿A dónde iremos?

JungKook:
Te lo digo al salir.

Aquel mensaje me deja pensativa, ¿Había ocurrido algo? Tuvo que haber pasado algo para que me escribiera en horas de trabajo, al principio me sentí rara trabajando en este lugar por estar acostumbrada al salón de belleza, también me sentí un poco rara al trabajar en el mismo lugar que mi novio. Que viviéramos juntos no significaba que todo iba a la perfección.

Es obvio que debemos seguir trabajando en muchas cosas, superamos en parte nuestro trauma de la intimidad y podemos jugar picaronamente, pero seguimos siendo algo tímidos en ciertas cosas, no he visto a JungKook desnudo luego de esa noche y él tampoco me ha visto desnuda, nos bañamos por turnos teniendo un tonto pudor incluso ahora.

Incluso pensar en estar juntos de nuevo de la manera que descubrimos me pone nerviosa.

Cuando la jornada termina y los trabajadores se han quitado su uniforme, JungKook me espera afuera con un semblante serio, tiene sus manos metidas en los bolsillos de su pantalón.

— ¿Qué sucede?

— Tomemos un taxi—toma mi mano. Ambos nos acercamos a orillas de la acera donde pasan varios autos.

— ¿A dónde vamos?

— Ya verás.

Tanto misterio comienza a molestarme, un taxi se detiene, ambos subimos atrás, JungKook da una dirección desconocida para mí. Coloco mi bolso sobre mis piernas, intento mantener la calma y esperar con paciencia, miro por la ventana manteniéndome en silencio todo el camino.

Cuando el taxi se detiene es que la imagen llega a mi cabeza.

La señora Jeon una vez hizo un dibujo de una casa de aspecto colonial, ella no sabía porque lo dibujó, pero recuerdo haberla escuchado decir que soñó con eso. JungKook baja del auto dirigiéndose a mi puerta para dejarme bajar.

— ¿Esta es...?

— Es esa misma—asiente tomando una bocanada de aire—Es la misma casa del dibujo.

El próximo es el epílogo.