𝐸𝑝𝑖́𝑙𝑜𝑔𝑜
La casa está en un barrio de aspecto tranquilo, queda justo en una colina, luce casi igual al dibujo de la señora Jeon, hay una reja de color negro rodeando la parte delantera de la casa, sus paredes son blancas, hay arbustos en la entrada y otros tienen algunas flores de diferentes colores, luce muy bien cuidada la casa al menos por afuera. JungKook sigue de pie mirando el lugar.
— ¿Vas a decirme ahora lo que pasa?
— Esta es la casa que mi madre dibujó, en el dibujo tenía esa misma dirección—señala a lo lejos en la pared. Se aprecia una placa muy pequeña, no había notado que eso aparecía en el dibujo—Creí que eran garabatos, pero el señor Choi descubrió que no es así, tuvo ayuda profesional para localizar con exactitud esta casa.
— ¿Entonces aquí debe vivir la familia de tu madre?
— Debe, tú lo dijiste.
— Oye—tomo su mano—Tienes dos opciones, puedes darle la espalda y seguir con tu vida como has hecho hasta ahora—hago una pausa—O puedes entrar allí y saber de dónde vienes.
— Quiero saberlo, tengo la sensación de haber estado antes en este lugar—respira profundo para luego mirarme—¿Y si algo te asusta?
— No creo que nada me asuste después de lo que hemos pasado—doy un suave apretón a su mano—Te acompañaré hagas lo que hagas, ¿De acuerdo?
JungKook asiente sin soltarme, empuja con suavidad la reja dando el primer paso. Ambos nos acercamos hacia la puerta, puedo distinguir dos columpios un poco viejos, nos detenemos frente a la puerta de madera oscura, hay un botón para el timbre al costado de la puerta, JungKook no es capaz de tocarlo, pero yo sí.
Pasan unos cortos minutos de espera, una mujer de cabello castaño aparece, su melena es larga hasta la mitad de su espalda cayendo de manera lisa, tiene labios un poco carnosos, ojos cafés y piel pálida, es delgada y esbelta. Nos mira a ambos frunciendo el ceño un poco.
— ¿Puedo ayudarlos? —se cruza de brazos.
JungKook no dice nada, parece estar en shock o quizás los nervios le han ganado. La chica espera por nuestra respuesta, aclaro mi garganta interviniendo.
— Disculpe, mi nombre es Park SoHee, este es mi novio Jeon JungKook...
— ¿Jeon JungKook? —una segunda voz aparece, pero es masculina. Su cabello es oscuro pero un poco más claro que el de JungKook, tiene una sonrisa bonita, es alto, delgado, pero con buen físico, sus ojos son oscuros como los del chico a mi lado.
— ¿Conoces a estos chicos, SonWoo?
El tal SonWoo me mira de pies a cabeza.
— No, pero he escuchado tu nombre—voltea hacia JungKook—¿Dónde estuviste?
JungKook sigue sin decir nada.
— ¿Conoces a JungKook?
— No realmente, pero sabía que existía—sonríe un poco—Me presento, soy Jeon SonWoo, soy tu medio hermano—estira su mano hacia JungKook quien retrocede, luce muy serio.
— Nunca tuve hermanos.
— Nunca me dijiste que tenías hermanos—la chica lo mira.
— Cierto, debo presentarles a mi esposa—sonríe rodeando los hombros de la mujer—Ella es Han SoHee—ahora soy yo quien me sorprendo por el nombre—La mujer que más amo en este mundo y tu cuñada.
— ¿Dijiste que somos medios hermanos?
— Compartimos el mismo padre, pero no la misma madre—ladea su cabeza—Debería odiarte por haber sido el favorito de papá, pero...no creo que tenga sentido odiarte.
JungKook aprieta mi mano, su rostro es serio, pero quisiera saber que pasa por su mente porque tampoco sé que pensar o decir. JungKook no es heredero de una fortuna, al menos no es lo que veo.
— Será mejor que entren—invita la chica cuyo nombre es SoHee.
— Sí, me gustaría conocerte finalmente, hermano.
El chico de la foto de multimedia es SonWoo.
La historia tiene tercera parte ya que quiero desarrollar unas cosas. No se preocupen.
La tercera parte viene en camino, debo acabar el capítulo antes de subirlo.
♡
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro