Chris POV

-Hija de perra, yo nunca fui malo contigo Chantell-dije mirándola con odio.

-Pero no voy a negar que tú fuiste un gran hijo de puta y no solo conmigo si no con todas las chicas que azotaste a tu maldito placer, incluyendo a ______ y no me lo vas a negar Christopher.

Yo me quedé callado ante eso, por un lado ella tenía razón...

-Vamos Chris, te tengo un pequeño regalo-dijo Chantell tomándome de los brazos amarrados llevándome fuera del auto, yo solo intentaba negarme un poco pero aun así ella jalaba mis manos con más fuerza para que pudiera avanzar hasta detrás de la cabaña, había un pequeño sótano en el suelo, uno de los asistentes de ella nos seguía hasta allí, el con unas llaves abrió la compuerta del sótano y Chantell me llevó hasta dentro del sótano oscuro, de repente un gran estruendo detrás de mí hizo que saltará, fue el gran azote del cerrar de la puerta, todo estaba oscuro hasta que Chantell jalo un pequeño cordón que hizo encender la luz del pequeño y polvoriento sótano, había algunas repisas y muebles viejos, pero lo que me llamó la atención del lugar fue que dentro había una gran maleta negra y frente una silla y 2 esposas sobre de ella...

-Christopher Michael Pratt, ¿Se ha portado mal verdad?-dijo mirándome seductiva bajando el cierre de su vestido lentamente.

Ella se acercó a mí, tomó las esposas de la silla mientras que colocó cada una en cada mano, aún quedaba el espacio para agregar otra mano en las esposas pero al parecer no era exactamente eso, ya que pude notar que al fondo del sótano había dos largos tubos, ella sin permiso tomo mi camiseta y me la arrancó de una vez por todas, yo solo miraba a otro lado, o buscando una salida pero al parecer era imposible, rápidamente me empujó hasta los tubos que se encontraban allí y tomó el lado libre de las esposas para poder abrirme de brazos y exhibirme completamente, estaba abierto de brazos sin camiseta, sabía que la perra de Chantell estaba por hacerme algo, se acercó hasta a mí mientras que cada paso que daba su vestido iba bajando hasta el piso dejando ver solo su lencería.

Ella se acercó hasta a mí, tomó mi cuello y miro profundamente, me acercó su rostro y posó sus labios en mi cuello y dio un gran chupeton en el, comenzó a hincarse bajando hasta mis pantalones, de un tiro desabrocho mi pantalón y bajándolo de tope dejando ver solo mis bóxers gris que llevaba, ella despojo mis pantalones aventándolos hasta la esquina, luego se levantó y abrió esa gran maleta negra que estaba allí, saco un látigo negro demasiado largo, así que ella se acercó hasta a mí de nuevo, tomó mi barbilla y me dijo "Eso te pasa por infiel querido", de inmediato dio un latigazo en mi muslo derecho, haciendo que soltara un pequeño brinco de dolor, comenzó a rodearme mirándome de pies a cabeza ella por un momento se quedo detrás de mí y me dio una nalgada, volvió hasta a mí y pude mirar cómo se mordía el labio, yo no lo estaba disfrutando estaba solo paralizado esperando a que terminará, ella de nuevo fue a la maleta y de allí saco una pistola, se acercó a mí a lo que comencé a espantarme...

-Esto que estás mirando querido... Es una calibre 29, si no haces lo que yo te pida al soltarte solo te diré que jalaré el gatillo en tu cabeza, ¿Tú decides? ¿O prefieres que lo haga de una vez?-dijo cargando el arma y apuntándome

Yo tragué saliva y le dije...

-Bien-dije difícilmente.

Ella aún seguía apuntándome, me saco de las esposas y me dejo libre...

-¡De rodillas!-dijo ella.

Yo obedecí la orden y lo hice, no me quedaba de otra...

-Bien amor, vamos a jugar-dijo ella divertida saltando de un lado a otro.

-Hija de puta-dije entre dientes.

-Ahora cambiaremos papeles, tú serás mi sumiso-dijo mordiéndose el labio

_____ POV

Mis sentidos comenzaban a despertar de esa cama fría en la que me encontraba, mi pierna estaba tiesa y sentía como moretones y golpes en ella, me levante un poco aún con los ojos cerrados y comencé a abrirlos lento, al lado mío sentí una mano tomando mi brazo, creí que era Chris y estaba por darle un beso, pero al aclarar mi mente recordé que era Edward, estaba dormido con la cabeza en la silla y un guardia estaba frente a mí con la cara tapada por lentes y un paliacate tapando su boca, con un arma enorme en las manos, él me pidió que me levantará ya que Raymond me llamaba, me levante difícil que por poco caigo al piso de no poder apoyar bien mi pierna, el guardia abrió la puerta y allí estaba Raymond y Johana hablando entre ellos en un sofá viejo...

-¡Valla _____! ¿Te sientes mejor?-preguntó Raymond

-No lo sé-dije cortante

-Querida te tengo una sorpresa, te llevaré al sótano, hay algo que quiero mostrarte-dijo Raymond riendo.

Continuará...