Camus se despertó agitado, instintivamente se llevó la mano a la nuca para sentir la cicatriz, diez años habían pasado desde que se había unido a Milo y no podía estar más feliz de haber tomado aquella decisión.

Miró a su lado, Milo roncaba suavemente, se veía tan sensual al dormir, el acuariano no lo pensó y se deslizó hacia abajo colocándose entre sus piernas, a pesar de estar dormido el pene de Milo estaba semi erecto y lo introdujo a su boca sin dudar, succionándolo suavemente.

Milo frunció el ceño, aquella sensación era familiar, deliciosamente familiar, entreabrió los ojos y vio la cabellera roja de Camus subir y bajar entre sus piernas, las abrió un poco más llevándose las manos al rostro sin poder evitar que una enorme sonrisa partiera su rostro, el celo de Camus era sin dudar lo mejor de su vida.

-Parece que ambos ya están bien despiertos –ronroneo Camus con una sonrisa mirándolo a los ojos masturbándolo contra su rostro

-Eso parece- Milo se incorporó jalo a Camus hacia el quedando los dos recostados, lo beso profundamente en la boca mientras sus manos no paraban de recorrer su cuerpo, adoraba sus formas perfectas, espalda ancha brazos fornidos, abdomen definido, rematado con una preciosas y redondas nalgas que adoraba, introdujo con facilidad uno de sus dedos entre ellas.

-Alguien por aquí ya estaba preparado- dijo disfrutando de aquello, el cuerpo de Camus era tan receptivo, eran sus últimas horas de celo y aun así parecía que su cuerpo seguía pidiendo a gritos ser profanado

-Amanecí de buen humor, por eso no podía esperar a que despertaras- el francés tenía una sonrisa ladina en el rostro, como no desear pertenecerle en cuerpo y alma a aquel hombre que estaba poniéndose sobre él, se relamió disfrutando de la vista, pectorales amplios, abdomen marcado, colocó sus piernas sobre aquellos musculosos hombros y recibió la primera embestida fascinado. Como bien Milo había señalado su cuerpo estaba húmedo, y el vulgar sonido que provocaba el miembro de Milo al entrar y salir solo lo provocaba más

-Joder se siente tan mojado-el griego gruñía incontrolablemente, no importa cuántos encuentros sexuales tuvieran su deseo por el otro resultaba insaciable, sus cuerpos hechos el uno para el otro se acoplaban a la perfección en aquella danza salvaje

Camus abrió más las piernas las atrajo hacia él jalando sus tobillos, sentía que el final estaba cerca y solo quería que Milo no cambiará el ritmo

-Con un demonio Camus vas a volverme loco- y así era, porque aunque Milo estaba a punto de acabar, ver al acuariano ofreciéndose de esa manera hizo que se contuviera , quería seguir tomándolo, seguir provocando que su compañero se entregará de esa manera tan descarada, que se abriera el culo y las piernas solo para el...

-Entonces me llamas, según mis cuentas el próximo será a mediados de Abril entonces procuraré no programar ninguna salida para esa fechas-

-Si no te preocupes, lo sentirás-

-Cierto, entonces me voy-el vínculo que con los años habían logrado era tan profundo que Milo podía percibir aun estando a kilómetros de distancia cuando Camus comenzaba a segregar las primeras feromonas. Se despidió dándole un casto beso en la mejilla y Camus lo despidió en la puerta agradecido.

En cuanto el escorpión se retiró, Camus se apresuró a volver a la habitación para cambiar las sábanas, su celo había terminado y aunque seguían siendo intensos afortunadamente no duraban más de tres días, pero esos tres días habían terminado ya y era momento de volver "a la normalidad".

Su relación no era como las de los alfas y omegas comunes, a pesar del vínculo no vivían juntos Camus se había dejado morder pero había sido precisamente para no tener que sucumbir de manera vergonzosa a sus instintos, ahora que estaba marcado podía darse el lujo de tener una buena vida sin el yugo de sumisión que ser un omega representaba. Tenía un excelente empleo, y cierto estatus derivado de que la mayoría de sus conocidos ni siquiera sabían que era un omega, libre de las feromonas que ahora sólo eran perceptibles para Milo podía conducirse en sociedad comportándose como un beta, y en cuanto a carácter y fuerza bien podía pasar por un alfa. Y no es que renegara de su vínculo con Milo pero al menos en su círculo social cercano pocos sabían que tenía una pareja aun menos que estaba marcado...

Milo llegó a su apartamento agotado, cumplir con las exigencias sexuales de Camus era tan satisfactorio como agotador, solo pensaba en darse un largo baño de burbujas y dormir lo que restaba del día para poder recuperarse, para su desgracia parecía que eso no sería posible.

-Kanon qué haces aquí- cuestionó sorprendido al ver a su hermano cómodamente recostado en su sillón viendo la televisión

-Pareciera que no te da gusto verme-

-Sabes que no es eso, pero si has venido sin avisar no creo que sea para darme buenas noticias-

Se abrazaron, pero Kanon rompió rápidamente el contacto

-Apestas hermano, deberías decirle al desconsiderado de tu omega que te permita al menos tomar una ducha antes de echarte a patadas de su departamento en cuanto su celo termina-

Milo suspiró y rodó los ojos llenándose de paciencia, su familia nunca había visto a bien su vínculo con Camus y mucho menos el cómo llevaban su relación

-No es mi omega Kanon, tiene un nombre y sabes perfectamente cual es. A últimas no viniste hasta acá solo para decirme eso ¿O sí?-

-No, en realidad no, papá está furioso contigo para variar-

-¿Ahora que le hice al viejo?-

-Lo de siempre hermanito lo de siempre, quiere saber si ya renunciaste al capricho de haberte vinculado con un bastardo-

Milo sintió la bilis subir por su garganta, odiaba el término que su familia usaba para referirse despectivamente a Camus, pero lamentablemente era algo a lo que ya estaba acostumbrado-Fui claro en ese sentido Kanon, mi vínculo con Camus no es solo un capricho, no sé por qué sigue buscando candidatos, la agencia de omegas no deja de llamarme-

-Por favor no es para tanto, tienes idea de lo vergonzoso que es para nosotros tener que mentir respecto a la relación que llevas con ese sujeto-

Milo resoplo dirigiéndose a la cocina, amaba a su familia, pero ellos nunca habían aceptado que no se hubiese vinculado con un omega de primera clase, las circunstancias en las que Camus había nacido era algo que no le concernía a nadie, algo que a su parecer no cambiaba el valor de Camus como persona, pero sabía que su familia pensaba muy diferente. Tomo dos cervezas y regreso a la sala.

-Gracias- Kanon tomo la cerveza destapándola de inmediato dándole un largo trago-Sabes que papá no se dará por vencido, Camus jamás será parte de la familia-

Milo se dejó caer en el sillón junto a su hermano con fastidio

-Deberías recapacitar en lo que más te conviene, mereces algo mejor que un omega rebelde, a papá no le parece adecuado que alguien como él este a cargo de sus descendientes-

-Si lo que les preocupa es que ensucie el linaje Camus y yo ni siquiera estamos planeando tener cachorros-

-¿Y se supone que eso son buenas noticias?-insistió Kanon harto de la actitud de su hermano –Eres un alfa Milo, un alfa de una de las mejores castas y deberías haberte vinculado con un omega de tu estatus, pero elegiste a un bastardo hijo de...-

-Quieres dejar de llamarlo bastardo por favor, lo que Camus y yo hagamos no es asunto tuyo ni de nadie, no le pedimos nada a nadie como para que pretendan meterse en nuestra relación solo porque no pertenecemos "a la misma clase"-

Kanon torció el gesto, al menos aquello era cierto, desde el momento en que Milo se dio cuenta que no tendría el apoyo de su familia con su relación hizo negocios propios y no recibía un solo peso de su padre para mantenerse.

-No quiero deslindarme de la familia Kanon, no más de lo que ya lo he hecho pero me están presionando-

-Hermano no sé cómo puedes hablar de esa manera, tenemos a nuestra disposición todo un catálogo de omegas de buena familia, elegibles para dar continuidad a nuestro linaje, ¿por qué no estás de acuerdo con eso? es lo único en lo que un alfa debería pensar, buscar a alguien para reproducirse, alguien que esté dispuesto a complacerlo en todos los sentidos, pero Camus ni siquiera cumple con su propósito ¿Cual es la finalidad de su vínculo entonces? somos una raza dominante y pertenecemos a una de las mejores familias, ¿por qué parece que todo eso te avergüenza?-

-No me avergüenzo, estoy orgulloso de ser un alfa porque eso me permite proteger a Camus pero eso no significa que iré por ahí sintiéndome superior a los demás, abusando de mi status como otros lo hacen- dijo sabiendo perfectamente que su hermano se daría por aludido

-Que tiene de malo Milo, hacer aquello para lo que estás hecho, nadie va a juzgarte porque es lo que todos esperan que hagas, demonios no es tan fácil de entender-

-Tampoco es difícil de entender que quiero algo diferente, la sociedad ha cambiado, ya no es tan importante el status, ni es obligatorio que un omega tenga hijos si no lo desea. Nuestro padre y todo su gremio no entienden que las cosas ya no son como ellos creen-

Kanon negó con el cabeza fastidiado-En serio que no tienes remedio hermano-

-Ustedes son los que no tienen remedio-

-Como sea, ya me harte de tu palabrería sobre igualdad y bla bla bla, ya te pase el mensaje, mi misión aquí está terminada-se puso de pie fastidiado y salió del departamento dando un portazo

Milo bufo terminándose con prisa lo que quedaba de su cerveza.

Preparo la tina y se sumergió en ella, su cuerpo se sentía laxo, hecho la cabeza hacia atrás dejándose mecer por el agua

-¿Cuál es la finalidad de nuestro vínculo?- las palabras de Kanon daban vueltas en su cabeza, no es como que alguna vez se hubiera arrepentido de estar unido a Camus pero hasta la fecha tampoco se había cuestionado cuál era el propósito de su unión. Había marcado a Camus con el afán de protegerlo pero nunca pensó que él tuviese que obtener alguna ganancia por ello.

Suspiro cerrando los ojos dejando que los recuerdos se agolparan en su cabeza...