Capítulo 53 "Disparo"
Mañana subo el final y el domingo el epilogo <3
Ojala les guste y gracias por leer
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Emilia sale del subterráneo y camina buscando la calle que le había dicho su hijo y la encuentra después de dos cuadras y dobla hacia la izquierda. Se encuentra con un departamento y se encuentra con el portero del edificio.
En ese instante, Benicio entra a la casa y se encuentra con Victoria en el living.
- ¿Dónde está Emilia?
-Mateo le mando un mensaje para pedirle un favor y ella fue a un departamento.
- ¿Mateo?
Los ojos se abren en estado de pánico y es consciente que su mujer está sometida a un grave peligro.
- ¿Qué pasa? -Pregunta Victoria al ver como la cara del moreno se pone pálida.
- ¿A qué departamento fue?
-Pero...
-Por favor Victoria. -Nervioso. -Es de vida o muerte, ¿Dónde está?
-Me dijo que en Chiclana 950.
El abogado no dijo nada que sale despavorido de la casa para rescatar a Emilia y entra enseguida al auto, lo enciende y acelera lo más que puede mientras llama a la policía para dar el paradero de Facundo.
Emilia llega a la puerta del 4C y toca el timbre. Espera a que alguien le abra la puerta pero no hay respuesta, intenta unas dos veces más hasta que lleva su mano al picaporte y la encuentra abierta.
Frunce el ceño y entra despacio al departamento.
- ¿Hola? ¿Hay alguien ahí?
Permanece de pie cerca de la entrada y se atreve a entrar al comedor. Allí se encuentra con fotos de ella en la calle, algunas siendo acompañada por Ben, otras fotos con su estado de embarazo y otro con las niñas recién nacidas.
Los latidos del corazón se le detienen al escuchar unas pisadas acercándose por detrás y tiembla al sentir un escalofrió que recorre todo su cuerpo.
Muy lentamente, se da la vuelta y encuentra a Facundo, quien le está apuntando con un arma.
- ¿Me extrañaste, mi amor?
Se le dificulta hablar por el miedo que siente al ver a su ex marido y más al saber que su vida corre peligro.
-Tienes que estar preso. -Dice con un hilo de voz.
-Ya ves que no. -Sonríe. -Vine por ti, para llevarte a un lugar donde vamos a permanecer juntos para siempre, porque tu lugar es conmigo, no con ese desgraciado.
-Por favor Facundo, ¿Por qué sigues haciendo esto? Solo quiero vivir tranquila.
- ¿Piensas que voy a dejar que vivas con ese tipo? No voy a dejar que te tenga, te voy a llevar conmigo.
El hombre está completamente loco, tiene decidido dispararle a matar a Emilia y luego suicidarse.
-No tienes que hacer esto Facundo... -Asustada. -Me dijiste que estabas arrepentido y ahora puedes demostrarme tu arrepentimiento.
Siente tanto miedo que empieza a llorar delante de el y se apoya sobre la mesa, con cuidado, su mano izquierda toca el cenicero y lo toma enseguida.
Su ex marido no le responde, está por apretar el gatillo cuando la mujer fue más rápida y lo golpea en la cabeza con el cenicero. Facundo chilla del dolor y Emilia empieza a correr para escapar del hombre.
Sin embargo, todavía permanece consciente y la apunta para dispararle, dispuesto a matarla. Le apunta a la cabeza y le erra ya que la bala se aloja en el hombro de la rubia.
Emilia grita por el dolor a ser disparada y llega a la puerta, la abre y ve a Ben con un montón de policías. Facundo se asoma para dispararles a ambos pero el comisario le dispara en el brazo y se apuran para inmovilizarlo.
Los policías arrestan al violento y Benicio se preocupa al verla herida, la cubre con sus brazos con cuidado y la levanta del suelo.
El comisario saca al prisionero del departamento y mira con un inmenso odio a la pareja. El abogado la aparta para que no lo mire y es ayudado por un teniente para asistir la herida de su hombro.
Benicio está preocupado por su mujer que ya quiere que la asistan y salen a la calle, la lleva a la ambulancia y un paramédico inspecciona la herida.
En todo ese tiempo, la rubia no ha dicho ni una palabra, el miedo la paralizo y sus lagrimas caen sin control, lo que destroza el corazón de Ben al verla de esa manera y hace que lo mire.
-Ya termino, mi amor. -Toma su mano y besa su dorso. -Ya no volverá a molestarnos.
La mujer asiente y jadea de dolor al ser suturada.
-La bala traspaso el cuerpo y no toco nada importante. Solo va a tomar unas semanas de reposo y en tres semanas tiene que ir a un sanatorio para que le quiten los puntos.
La pareja asiente y el hombre abraza con delicadeza a su amada. Ella se refugia en sus brazos y cierra los ojos, sintiéndose más tranquila al saber que esta a salvo.
Victoria le abre la puerta a Adrián y le cuenta todo lo que ha pasado.
-No me dijo nada... -Preocupada. -Solo me pregunto la calle del departamento y se fue.
No entiende porque pero está tan sobrepasada por la situación que se puso a llorar. El guardaespaldas la consuela y acaricia su espalda.
Minutos después, el abogado le abre la puerta a su prometida y el alma de Vicky vuelve a su cuerpo.
-Ay... -Mira las vendas en el hombro de la mujer. - ¿Estás bien?
-Si... -Susurra. -El que me mando mensajes fue Facundo, me quiso tender una trampa y pensé que me iba a matar. -Temblando.
-Es un hijo de puta. -Furiosa.
-Gracias a Dios ya está preso y lo van a trasladar a una cárcel segura donde se va a quedar allí hasta que tenga su condena. -Dice Benicio.
El moreno envuelve la cintura de la mujer que ama y besa su mejilla. Ella mueve la cabeza para mirarlo y se miran con amor.
No obstante, Emilia recuerda un detalle importante para su mejor amiga.
-Adri... ¿podrías ser tan amable de comprarle unos test de embarazo a tu novia?
- ¿Qué? -Pregunta los hombres.
-Emilia.... -Victoria la mira molesta. -Casi te matan, no es un buen momento que digas eso.
-Es que se que tengo razón. Ademas, a pesar de ese bastardo soy feliz con mi familia y nada me pondría contenta como confirmar tu embarazo.
- ¿Estás segura, amor?
-Claro... -Sonríe y luego mira al guardaespaldas. -Hazme caso y ve a la farmacia.
Adrián todavía permanece en shock y basto unos minutos para reaccionar. Sale de la casa y Victoria niega.
-Ya estoy grande Emi... no me quiero ilusionar.
-Tranquila. -Toma su mano. -Veras que todo va a salir bien.
-Escúchala Vicky... a veces mi amor es una bruja.
-Tampoco te pases. -Lo fulmina con la mirada.
-No te pongas así. -Besa su cuello. -Solo fue una bromita.
-Mmm... -Ofendida.
Pasaron otros minutos más para que el guardaespaldas regrese con los test de embarazo. Victoria deja escapar un suspiro largo y se encierra en el baño.
El tiempo paso demasiado lento y su mejor amiga está impaciente por saber que será tía por primera vez. Al no poder aguantar más, golpea la puerta y entra enseguida.
- ¿Vicky?
La rubia encuentra a su amiga llorando pero no son de tristeza, sino de felicidad. Al final tuvo razón, su mejor amiga está embarazada y se funden en un gran abrazo.
-Yo sabia. -Emocionada. -Voy a ser tía.
Los hombres escuchan lo que dice Emilia y Adrián corre al baño, la morena le muestra los test y el joven no dice nada, solo la levanta del suelo y la abraza con fuerza.
Los gritos de felicidad de la pareja provocan que las niñas empezaran a llorar y los comprometidos se apuran para consolarlas.
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