Capítulo 3
Alphys llevó a Sans a donde le había indicado Gaster, era un laboratorio que solo ocupaban los científicos más cercanos a él.
Una vez llegaron al lugar, Sans recorrió con la mirada toda la habitación.
-Alphys, que bueno que llegaste.- habló Gaster con un contenedor de alma en las manos.
-Traje a su ayudante, Doctor Gaster.- Alphys señaló a Sans con la mirada.
-Gracias.- dejó el contenedor en una mesa.- Si tienes cosas por hacer, Alphys, puedes retirarte.-
-O-oh.. Si-i.- Alphys se despidió de ambos y salió directo a seguir con sus asuntos.
-Bueno... Aquí esta el alma humana.- señaló el contenedor.
Dentro de éste el alma era de un color anaranjado. Sans se acercó para poder observar con detenimiento aquel "ente" que se mantenía completamente estable en el contenedor.
-Woah...- pensó en voz alta.
-¿Sorprendido?.- preguntó el mayor mirando a su aprendiz.
-Si... Es solo que... Nunca había visto una antes.- mencionó.
Gaster contempló como Sans miraba con detenimiento cada parte del alma, aún no podía creer que de todos los monstruos que se presentaron para adquirir el lugar, sólo Sans haya logrado obtenerlo, era muy joven... Tan....impresionable...
-Bueno..... ¿Cómo sugieres empezar?.- cuestionó para el menor.
-Mmh...- pensó Sans.- Quizás podríamos hacer un prueba y error sobre el extractor, para los planos.-
-Muy bien, iré a buscar unos gráficos.-
Gaster salió a buscar esos gráficos dejando a Sans con el alma, cuando Sans se vio sólo, y queriendo sujetar el alma, poso sus manos en el contenedor... Era la primera vez que él tenía un alma humana en frente, estaba más que maravillado, nunca pensó poder llegar hasta aquí.
Una vez Gaster volvió, ambos comenzaron a trabajar en los planos para poder crear el extractor.
Ahorrándonos todo el trabajo que hicieron, podemos posicionarnos hasta el punto donde, a muy tardes horas de la noche, por fin habían terminado, bueno, no del todo, como era ya muy noche, llego un momento en el que Sans ya no podía seguir el paso de Gaster para trabajar, el mayor, al notar esto, decidió parar para que su aprendiz pudiera ir a descansar.
-Dejémoslo hasta aquí por hoy.- hablo Gaster.- Iré a marcar nuestras salidas, enseguida vuelvo.-
Sans asintió dejando lo que estaba haciendo a un lado, estaba tan cansado, nunca había trabajado por tanto tiempo, realmente necesitaba parar. Se sentó en una silla cercana a un escritorio y en este apoyó su cráneo y brazos, sin darse cuenta, y en relativamente muy poco tiempo, se había quedado dormido; Cuando llegó Gaster y vio a su subordinado durmiendo en el escritorio, este no pudo evitar sonreír, enserio nunca había trabajado con alguien tan joven, y a pesar de su corta edad, él era muy inteligente, pero no le quitaba lo joven, Gaster tenía muy en cuenta que Sans nunca había trabajado, él no soportaría mucho tiempo desvelándose.
Gaster seguía perdido en sus pensamientos, solo mirando a su, ahora dormido, acompañante, no quería despertarlo, se veía tan tranquilo, tan indefenso...
No podía dejarlo dormir en el laboratorio, podría lastimarse la columna o algo así, no teniendo más opciones, suspiró y se acercó para poder cargarlo, lo tomó en sus brazos de la manera más delicada que pudo, no quería, en lo más mínimo, despertarlo, por lo que una vez ya habiéndolo acomodado en su agarre, empezó a caminar para salir del lugar.
Como era obvio que no lo dejó en el laboratorio, y no teniendo ni la más remota idea de en dónde vive, optó por llevarlo a su casa, ahí el podría pasar la noche, además de que temprano en la mañana podrían salir a trabajar.
Gaster no entendía por qué era tan bueno con él, apenas lo conocía, no tenía sentido, era simplemente ilógico, solo no podía explicarse.... por qué tenía un sentimiento que nunca antes había experimentado hacia ese joven.
Una vez llegó a su hogar, trató de abrir la puerta sin hacer movimientos bruscos para no despertar a Sans, una vez entraron, Gaster cerró la puerta y subió con Sans en brazos, cuando llegó a su cuarto, colocó al menor en su cama, lo arropó y lo dejó descansar en paz.
Era extraño, en todo este tiempo, en el que fue el día entero hasta este momento, pudo percatarse del hecho de no poder separar la mirada de este chico, Gaster, tomó una silla que se encontraba cerca de, lo que vendría siendo, una pequeña mesa de trabajo, la jaló hasta un costado de la cama y ahí se sentó, sin nada más que solo contemplar a su subordinado dormir.
Lentamente, en la boca de Gaster, una pequeña sonrisa comenzaba a formarse, se sentía diferente... como fuera de si... era... raro, pero le llenaba de una inmensa felicidad y tranquilidad, tal vez le había tomado aprecio a este chico muy pronto, pero solo eso ¿verdad? solo era un aprecio como a cualquier otro compañero....
La expresión del rostro de Sans era tranquila, parecía incluso que tenía un lindo sueño, se veía muy reconfortante, completamente ignorante a lo que pasaba a su alrededor.
Gaster siguió mirando a Sans por un buen tiempo, hasta que llegó un momento en el que sintió la necesidad de acariciarlo...
No pudiendo controlarse, se fue acercando lentamente al individuo en la cama, trató de posicionar su mano en el rostro del menor, no sabía que es lo que trataba de hacer, era incapaz de controlar su cuerpo a voluntad, era... como un instinto que lo impulsaba a acariciarlo.
Sin darse cuenta, Gaster ya tenía su mano sobre el cráneo de Sans, lo acarició de forma tierna, con cuidado; su sonrisa se expandió aún más cuando notó que el menor también sonrió ante la acción.
Esa sonrisa, ese gesto... solo le incitó a querer ir más allá, sentía la necesidad de experimentar aún más....
Pero....
-No...- susurró para si mismo después de darse cuenta de lo que estaba apunto de hacer.
Retiró su mano del cráneo del menor, se levantó de su asiento, regresó la silla a su lugar y salió de la habitación dejando a Sans solo, optó mejor irse a dormir al sillón, mañana tendrían que trabajar.
¿En qué estaba pensando? ¿cómo es que si quiera le pasó la idea por la cabeza de tocarlo de otra manera? no era correcto, no podía...
-Es sólo aprecio...- volvió a decir una vez ya recostado en el sillón dispuesto a dormir.- Sólo aprecio.....-
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