Sana tenía un grave problema y era consciente de ello, más de lo que quería serlo, no paraba de necesitar tener sexo con su novia, al principio creía que solo era el momento que como siempre se dice es el comienzo de las relaciones porque así son la mayoría pero no estaba en lo cierto, ha pasado un año desde que está con Tzuyu de manera presencial y no hay un maldito segundo del día en el que no quiera estar con la menor entre sus piernas.

Tal vez es porque probó la fruta prohibida y desde ese entonces se ha vuelto adicta o porque Tzuyu es tan jodidamente buena en lo que hace que en lo único que piensa es en eso, en tener sexo con la mujer que más ama en el universo.

También puede que sea una muestra de amor y que la única manera que tiene para hacerlo es demostrarlo de esa manera tan carnal.

O que simplemente es una chica insaciable.

Una capaz de hacer todo lo posible para que su novia se la folle como a ella le gusta.