POV: YANA.

Ha pasado un mes desde que mi padre murió, solo sé que lo han cremado, ya que mi madre me realizó la última llamada después de salir de la funeraria. De ese día al de hoy, ya no me volvió a realizar ninguna llamada y de Abbey al igual no se nada, tal vez mi madre necesite tiempo para sanar y se lo daré, perder al amor de tu vida no ha de ser nada fácil, a diario extraño a mi padre, espero algún día poder ir y visitar su tumba.

Ha pasado un mes desde la estupidez que cometí con Ancel, de entregarle mi virginidad. De él no he tenido noticias, ya que no me buscó más ni yo tampoco me he preocupado por preguntar creo que todo quedó más que claro.

Creo que solo me quería para quitarse la calentura, pero yo de estúpida me estoy permitiendo sentir algo más que simple atracción por él a pesar de lo que hizo, me deje llevar por la atracción que sucedió entre ambos. El día siguiente de mi idiotez cometida con él, desganada fui a una farmacia y compré la pastilla del día siguiente que me recomendó Google, no pienso meter la pata hasta el fondo y solo por mis estupideces. Ese mismo día me presenté normalmente en la universidad, y Ancel no se apareció como lo hacía a diario, está vez no había camionetas negras ni el maldito Adonis esperando por mí. Acción que agradecí y a la misma vez he maldecido, no quiero ni mirarle el rostro siento tanta furia contenida en mi ser, tengo tantas cosas que decirle en la cara respecto a lo que siento al cabrón!.

Me pase recuperando los trabajos perdidos y gracias a Maya logré ponerme al corriente, este mes a pasado demasiado rápido, como dije Abbey no ha vuelto y necesito conseguir un trabajo ya que necesito pagar el alquiler el mes que viene.

Voy directo a la cafetería ya que me pasé a dejar unos libros al locker. Maya se ha adelantado, entro y en la mesa del fondo está mi amiga haciendo señas como una loca poseída, tomo un sándwich y un zumo de naranja, le pago a la señora de la cafetería. Me dirijo hasta Maya y tomo asiento junto a ella, depositando la bandeja con mi almuerzo en la mesa.

—¡Tardaste un mundo Yana, muero de hambre mujer!.— grita la loca de mi amiga logrando llamar la atención de todos.

—Tranquila solo fueron diez minutos Maya no es para tanto. —me defiendo a lo que en silencio comenzamos almorzar.

—¿Qué crees Yana. — me dice a lo que poso toda mi atención en ella.

—Mañana darán una fiesta los Müller, por aniversario de la empresa y mi madre ha dicho que te invite, así que como no acepto un no por respuesta, tendremos que ir de compras!! Solo será para complacerla después iremos a la fiesta que se dará en casa de Derek Koslov, el capitán del equipo de fútbol americano. — sentencia a lo que de inmediato niego, poso la mirada en un punto en especial de la cafetería.

—¿Te pasa algo chica?.—me pregunta escrutándome con la mirada.

—No, estoy bien Maya, nada de que preocuparte. —ella me mira extrañada

—Ya te dije que algún día iremos a visitar el lugar donde a quedado tu padre, no estés triste Yana, por favor sonríe si?. —me dice a lo que niego.

—He tenido sexo con Ancel.— suelto por lo bajito a lo que maya abre los ojos como plato, sorprendida por mi confesión.

—¡Fucking shit Yana!. —Grita por lo alto a lo que tapo su boca con mis manos.

—Cállate, por favor. —Le digo paranoica, a lo que Maya trata de recomponerse y espera a que los estudiantes se olviden de su drama y sigan en lo suyo.

—Tienes que contarme , quiero detalles. ¿Cómo fue?. —hace miles de preguntas en un segundo.

—Es por eso que no quiero ir a la fiesta de los Müller. —Sentencio.

—¿Qué ha pasado chica, tan mal te lo ha hecho?. —dice elevando las cejas

—Podemos hablar en un lugar más privado.  —le sugiero a lo que ambas nos ponemos de pie y tomamos el almuerzo, dejamos las charolas en su lugar y hemos decidido terminar de comer en otro lugar.
Cuando llegamos al patio trasero tomamos asiento en el césped, hace un poco de frío al exterior pero en estos momentos no importa.

—¿Y bien?. —pregunta Maya ansiosa.

—Tiene novia. —suelto y mis ojos brillan por las lágrimas que no tardan en salir, no lloro por él, su acción es la que me lastimó, por lo menos merecías una explicación o tal vez una disculpa de su parte.

—¡Es un hijo de puta! Yana, ¿Cómo lo supiste?.—

—Cuando tuvimos sexo, por qué eso es lo que fue, ya que tal vez aún no hay sentimientos de por medio, apenas y nos conocemos. Pero no te niego Maya la atracción que hay entre ambos es muy fuerte o lo era según yo hasta que su móvil sonó, Ancel se fue al baño a responder, para ese tiempo yo ya había mirado en la pantalla un nombre de mujer.

—¡¡Es un cabrón!!. —dice exasperada.

—Después salió del baño muy indiferente Maya. Se portó muy borde conmigo así que decidida a marcharme bajé las escaleras, y ahí estaba esa rubia despampanante. Bien pareciera modelo de revista con sus piernas kilométricas y esa delgadez extrema con pechos grandes.

—¡O wow! Vaya, vaya aunque tu también eres demasiado bonita..- dice poniéndole más sazón a la plática.

—Total que preguntó quién era yo, a lo que Ancel llegó a tiempo evitando mi respuesta.
La rubia Argumentó que es novia de Ancel y, Ancel que yo era su amiga así que yo salí de la mansión sin voltear atrás.

—Muero de rabia Yana, una simple "amiga" ¡¡es un puto bastardo!! ¿Cómo se atreve? Acaban de coger y él dice que eres su amiga? Te dejaste llevar muy pronto Yana, por la situación, fue muy pronto para que entregarás tu cuerpo a ese descerebrado. ¿Sabes? más por eso debes de ir a ese evento. Demuéstrale que tú vales mucho más que para una cogida Yana, y enséñale quién manda nena.—Dice mordiendo su trozo de pizza.

—¿Tu crees?.—

—Claro te pondrás el mejor vestido lucirás tu hermoso cuerpo y le demostrará que no te afecta en lo absoluto, puedo apostar que él te piensa a diario y se va a morir de la rabia. —

—Pero no tengo ningún vestido. —argumento.

—Ese no es problema saliendo de clases iremos al centro comercial, ¡¡Día de compras!! Y yo invito. — grita eufórica ella quiere que lo provoque y sinceramente no se si sea una buena idea.

—No, sería capaz de mirarlo nuevamente al rostro Maya, siento vergüenza de lo que pasó. lo único que quiero es matarlo, y a la misma vez besarlo. Confieso que creo que estoy sintiendo algo por él Maya y me siento muy estúpida, tal vez solo sea obsesión — Le digo cabizbaja, Maya se pone sería y me abraza.

—Es posible que sientas eso, aunque se conozcan apenas de un mes y semanas. ¿Antes habías salido con alguien?. —me pregunta Maya y niego.

 —No Maya jamás he tenido novio, él fue mi primera vez en todo. —Le confieso cabizbaja.

—¿Eras virgen chica, acaso has perdido la cabeza ? Por eso odio a los hombres con dinero son unos putos bastardos. —

***

—¡¡Maya ya es tarde hija ya bajen!!. — grita la señora Klein, es día sábado y me encuentro en la casa de Maya, la mañana la pasamos divertidas su madre ha preparado pancakes con miel y zumo de naranja natural. Al probar su comida no he podido evitar que una lágrima escape de mi ojo, recordar a mamá y su ausencia, la extraño mucho pero ella no responde mis llamadas, ya he intentado llamarle varias veces a lo último manda a buzón después de varios intentos apaga el móvil en realidad no sé que esté pasando con ellas me han excluido y eso me hace sentir muy mal..
Ya casi acabo de vestirme, Maya sale del cuarto de baño luciendo un hermoso vestido en color rojo escotado en forma de v en sus pechos, se ha colocado unos tacones en color dorado al igual que accesorios del mismo color. Se ha echo ondas en el cabello.

—Nena luces de infarto. —le digo soltando un chiflido a lo que ella ríe.

Yo me he colocado un vestido negro con velo que se ajusta perfectamente en las parte adecuadas, me he realizado una cola de caballo perfectamente alisado mi cabello rubio y he aplicado maquillaje sencillo, pintalabios en color vino, mis tacones negros con pulsera y accesorios dorados.

Bien sabemos que no es el atuendo adecuado para una fiesta de gala, pero queremos destacar aunque después de ahí iremos a una fiesta de la universidad, me siento sexy y atrevida.

—¡¡Vaya, nena que buena te miras!!. —me halaga.

—Gracias Maya, tu también luces muy guapa.

Ambas salimos de la habitación de Maya y vamos hasta la sala ya la señora Klein ya espera por nosotras en la sala, luce un vestido largo en color coral con un recogido de cabello, su maquillaje es espectacular luce muy joven.

—Que preciosas mis niñas, de seguro llamarán la atención de todos en la gala. —sentencia sonriendo. Salimos de la casa y nos montamos en un taxi que la señora Klein a pedido.

***

Hemos llegado a las afueras del hotel, la señora Klein paga al chofer y bajamos del taxi, hay varios paparazzi fotografiando a las personas que van entrando para tener la mejor nota que saldrá en los diarios matutinos.

—Me siento gente importante mamá. —dice maya y la señora Klein ríe al igual que yo, el hotel es bellísimo la enorme entrada al lobby está adornada con grandes cristales, sofás en color crema, cuadros de pinturas tal vez de Diego rivera o Pablo Picasso, y la leyenda de NH DORTMUND por dónde sea, ya que es el nombre del hotel. Nos dirigimos al gran salón, al entrar hay muchas mesas decoradas con manteles en color guinda y las sillas del mismo color con toques en dorado, en el centro de las mesas está descansando una lámpara que brinda una luz tenue. La señora Klein nos lleva hasta donde está parada una pareja, las personas han vuelto la mirada para observarnos, creo que no encajamos en este lugar, ya que no usamos vestidos de gala. Siento una mirada penetrarme en mí, al voltear Ancel me observa con esos ojos azules tan penetrantes, mi estómago da un giro violento no se si sea de rabia o por volver a mirarlo. Está con otros dos chicos y Adler, platicando ignoro su presencia volteando mi rostro hacia otro lado y seguimos caminando.

—Sean educadas y amables son los dueños de la empresa Müller —A lo que Maya y yo asentimos.

—Buenas noches señores Müller, ha quedado espectacular el lugar. —dice la madre de Maya a lo que los señores agradecen, la señora lleva un vestido en color negro largo hasta los tobillos, con unos tacones de aguja en color plata su cabello negro y unos ojos azules muy llamativos. El señor es muy guapo de un metro noventa como mínimo, tiene el cabello negro y unos ojos verdes muy hermosos, lleva barba y eso lo hace lucir muy guapo. Tiene cierto parecido al innombrable y a su hermano, ya que he asumido que son los padres de Ancel.

—¿Y quienes son las señoritas? Jenell. ¿No las vas a presentar? —dice la señora Müller, a lo que le sonrío.

—Está es mi hija Maya, y ella su amiga Yana Sallow. —le responde la señora Klein a lo que le tiendo la mano con educación a ambos y ellos la reciben gustosos.

—Un placer conocerlos señor y señora Müller. —digo a lo que Maya repite mis palabras. Llega Adler y se posa a un lado de Maya y le sonríe coqueto.

—Hola Yana me alegra que vinieran. — Expresa con entusiasmo. —,¿Ya conoces a mis padres Maya?. —le pregunta a lo que todos los observan curiosos, el señor y la señora Müller nos observan sorprendidos, Maya se pone de los mil colores y yo sonrío, se que estos dos se atraen y son muy obvios.

—Sí, hace un momento mi madre nos presento con tus padres. —responde Maya con cortesía.

—¿Ustedes de dónde se conocen?. —pregunta la señora Müller, la madre de Adler.

—De la universidad mamá —Le responde Adler.

—O vaya, me parece perfecto que al fin tengas amigas Adler, y muy bellas por cierto, se nota la educación que tienen, y para ser sincera me agradan ambas disfruten la fiesta. —Dice la señora guiñando un ojo a su hijo y se van a otro  lugar.
Ambas quedamos con la boca abierta y la madre de Maya, parece no salir de su impresión.

—Señora Klein ¿si me permite a su hija unos minutos?. —pregunta a lo que Jenell acepta,  Adler se lleva a Maya a otro lugar y yo me quedo en la mesa, sentada con la señora Klein, para evitar cualquier interrogatorio de su parte me pongo de pie y camino hasta la barra improvisada.

—Agua por favor. —le pido al joven que está del otro lado de la barra, a los minutos me tiende un vaso de cristal con el líquido vital. Le agradezco y lentamente lo llevo a mis labios, bebo un sorbo y dejo el vaso nuevamente en la barra. Me pongo de pie y me dirijo al baño de damas, entro y hay dos mujeres jóvenes cotilleando de quién sabe quién.

Se marchan al mirarme y yo solo me quedo revisando que todo esté en su lugar, de la cartera pequeña que traigo saco el pintalabios en color vino. Me coloco un poco y lo guardo nuevamente en la cartera y me dispongo a salir..

Regreso nuevamente a la mesa con la señora Klein, de suerte que ya esta Maya sentada, la escruto con mi mirada, tomo asiento al lado de ella.

—¿Dónde te habías metido Maya?, no sabes en el dilema de que tu madre me preguntara cosas de Adler y tuyas. —

—Por ahí. —dice con una sonrisa socarrona.
A lo que niego con la cabeza, de pronto alguien habla por el micrófono llamando la atención de todos los presentes, al volver la mirada hasta la tarima está Ancel, Adler, la señora Müller y su marido siento un vuelco en mi vientre luce tan jodidamente atractivo el traidor.

—¡Buenas noches! A todos los presentes. —dice el señor Müller qué se a apoderado del micrófono.
—A Nombre de Müller & Corporation. Queremos agradecer por asistir a esta humilde velada, llevada a cabo con el fin del cincuenta aniversario de nuestra empresa. Que se ha mantenido por generaciones en la familia.
Démosle un fuerte aplauso a toda esta gente trabajadora, el honor y festejo es para todos ustedes, ya que sin su esfuerzo esto no sería lo que es hoy.
Gracia por asistir disfruten la velada —
Agradecen y bajan de la tarima la familia Müller.

—Mira Yana, quien está parado observando para acá.—giro disimulada hasta donde me indica Maya y efectivamente el traidor me está mirando. Ancel me mira con los ojos entrecerrados y aprieta la mandíbula, se le nota que está muy molesto, observo a su alrededor y para mí sorpresa está solo.

—Hola belleza ¿me harías el honor de concederme esta pieza?. —Pregunta un chico alto, tiene el cabello castaño y sus ojos son grises, piel canela, es endemoniadamente muy atractivo. Lleva puesto un traje a la medida en color gris, con camisola negra. La pienso por unos segundo Ancel aún me observa y a distancia lo noto furioso.

—Acepto, te concedo este baile. —El chico sonríe y me toma de la mano, nos dirigimos hasta la pista donde hay varias parejas bailando. Acaba la canción y comienza otra de Royksoop- Here She comes Again. es lenta y muy sensual.

—Mi nombre es Mikail, un placer conocerte bella dama, ¿Cuál es tu nombre?. —me pregunta tomándome por la cintura, me pega a él al son de la música.

—Yana un placer conocerte. —le respondo tenerlo tan cercas de mi, hace que aspiré su perfume es exquisito, coloca sus manos en mis caderas a lo que me siento incómoda, pero también se que el baile lo amerita. Giramos al son de la canción nos movemos lentamente, me toma de la mano y me hace girar para volver a pegarme a su cuerpo, toma mi pierna y la sube a la altura de su cadera, quedando nuestros rostros muy juntos, de reojo observo a Ancel y está más cercas de dónde estaba antes, aprieta la mandíbula y es cuando decidida tomo ambas manos de Mikail y las paso de mi cintura por mis costados llegando hasta el borde de mi vestido. Mikail sonríe y me gira colocándose en mi espalda, vuelve a bajar las manos y ya somos el centro de atención de los invitados.

—Mikail, ¿me permites bailar con la señorita?. —pregunta esa voz ya no varonil, a lo que el chico mira al hombre detrás de mi y asiente sonriendo, puedo notar la burla en su rostro.

—Claro que si Ancel, toda tuya. —Expresa el chico a lo que giro y Ancel me toma por la cintura pegándome a él. Mete su cabeza entre mi cuello y deposita un beso en ese lugar, no sin antes aspirar mi aroma. Me alejo rápidamente ya que estoy hirviendo de furia, me doy media vuelta y lo dejo parado en la pista de baile, acción que se gana el murmullo de varias personas, voy hasta la mesa donde está maya.

—Me disculpa señora Klein no me siento bien, iré a casa. —le digo a lo que la señora asiente.

—Cariño si quieres llamo a un taxi. —sugiere a lo que niego, necesito salir lo más pronto posible de este lugar.

—Lo haré yo no sé preocupe. —le respondo y tomo mi cartera, salgo del lugar y camino sin rumbo, necesito calmar mi rabia, si la idiota aquí fui yo por tener sexo con él, sin antes haberme asegurado que tenía novia.

—Yana espera por favor, déjame llevarte a casa. —Dice Ancel a lo que volteo y lo miro detrás de mi, le volteo el rostro con una bofetada es poco a comparación de lo que se merece él me mira sorprendido y soba el lugar donde lo he golpeado.

—No gracias —Le respondo y sigo caminando  a lo que me toma de la cintura y me pega a él.

—Perdóname Yana, necesito explicar lo que pasó el otro día, necesito que me escuches —  habla desesperado.

—Eres un imbécil Ancel, ¿Qué es lo que quieres? ¿Estar nuevamente conmigo y después echarme como lo has echo?, a pero claro, no tengo derecho a reclamar en fin solo somos "amigos" — hago énfasis en esa palabra él me observa con furia, me sostiene de la cintura sin hacerme daño y me recarga en el árbol que está detrás de mí.

—Escúchame Yana, no me conoces no sabes de lo que puedo ser capaz de hacer, te estoy pidiendo de la mejor manera hablemos como un par de adultos civilizados, pero no quieres darme la oportunidad y me desesperas me desestabilizas emocionalmente me has jodido. — Dice muy cercas de mi boca, permitiendo respirar su aliento a menta revuelto con algún tipo de licor, su perfume se cuela por mis fosas nasales.

—No hay nada que hablar lo que pasó entre tu y yo solo fue cuestión de "Amigos" para mi no vales nada Ancel solo fuiste un pasatiempo para mi. —él me mira descolocado y sinceramente esa era la reacción que esperaba por parte de él. Ancel truena los dedos vienen hasta mi dos hombre del tamaño de Ancel, me toman a la fuerza y me suben a las camionetas que han llegado, Ancel sube conmigo y la camioneta se pone en marcha.

—Déjame ir Ancel o te juro que te demandaré, ¡¡te acusaré de secuestro!!. —

—Anda Yana ve a donde quieras todos los policías de Alemania están en mi nómina. —dice con tanta naturalidad que me aterra.

—Debí suponerlo no se en que trabajes pero quiero que sepas que no me intimidas —lo reto quiero que se enfurezca así como yo lo estoy

—Se lo que pretendes hacer conmigo Yana pero si tu algún día quisieras demandarme entérate que todos los policías de Alemania trabajan para mí y mi familia, así que no te molestes en demandarme o tratar de que me arresten, solo hablemos y ya después te puedes ir no hay que usar la fuerza mayor. —dice a lo que me quedo sorprendida, trato de bajar más mi vestido ya que Ancel me mira las piernas.

—Estás preciosa está noche Yana, me has puesto muy caliente con ese baile que hiciste con mi hombre de confianza.—mierda ¿acaso todo lo controla él?.

—Tienes un hombre de confianza muy pero muy atractivo hasta podría decir que más que tú. —Ancel ensancha una perversa sonrisa.

Hola mis amores aquí otro capítulo espero y les guste, gracias por sus comentarios en el capítulo anterior, no olviden votar y comentar me encanta leerlos!!
Solo una cosa más, no hacen faltan meses, años, o décadas para enamorarte de una persona. El amor a primera vista si existe, comprobado.

Los ama..

Lili.