- Cambia la cara anda que se te nota demasiado colega - bromea Ander colocándose a mi lado y yo sigo con mi mirada fija en Aleix, el cual, hablaba animadamente con Unai a unos metros de nosotros - y bajale ya que estás un par de tonos a tus celos anda, que como sigas así de un momento a otro te va a empezar a salir humo de la cabeza.

- No estoy para bromas Astralaga - respondo serio antes de suspira sin poder apartar mi mirada de ellos - ¿qué se supone que debo hacer ya para que podamos hablar?, ¿no me he arrastrado ya lo suficiente para que podamos hablar?

- Veamos - comenta el guardameta preparandosé para contar con sus manos - Aleix estuvo meses mandándote cartas para que te sintieras apoyado aunque estuvieras pasando por un mal momento, tú solo le has estado mandando cartas en pollitos de cartulina por una semana, así que uno a cero gana Aleix, ¿quieres que siga?

- Pero por lo menos le estoy poniendo intención, él me dijo que podriamos hablar cuando empezara a demostrarle que no estaba jugando, que esto me importaba a mi lo mismo que a él, podríamos hablarlo - reprocho y el portero me mira a los ojos antes de levantar otro de sus dedos - Ander no empieces otra vez.

- Si empiezo, porque a lo que tú llamas ponerle intención, yo lo llamo copiarte de la primera idea que tuvo Aleix para acercarte a ti, que es que ni imaginación has tenido para eso hijo - se queja y yo bajo mi mirada - de verdad Marc, pon en una balanza todos los detalles que tuvo Aleix contigo toda la temporada, y lo que tú has tenido con él en los últimos días haber si así te das cuenta de una vez de todo lo que te queda por remar.

- Pero.... - intento hablar pero yo mismo me quedo en silencio al darme cuenta de que él tiene toda la razón - nunca voy a ser suficiente para merecer un perdón.

- Yo no hablaría de un nunca, solo intento que entiendas que no puedes ponerte así solo porque a Aleix alguien ageno a ti le haya devuelto la sonrisa, y tampoco quiero que pienses que porque eso haya pasado tú ya lo tienes todo perdido porque eso no es así - explica y yo asiento con mi cabeza - debes de entender que ambos necesitais tiempo, tiempo para sanar, porque aunque te niegues a verlo y creas que solo has sido el villano de la historia, parte de ti tambien se rompió ese día y estoy seguro de que todavía no has sabido curarlo por mucho que intentes demostrar lo contrario.

- ¿Sino he sido el villano desde el principio que he sido? - pregunto antes de suspirar - yo destoce la sonrisa de Garrido aquel día, por mi culpa no pudo disfrutar del europeo, por mi culpa me ha estado huyendo.