- Que solo voy a coger el móvil no seas pesado - protesto mientras abro la puerta de la habitación - sabes que cuanto más te quejes, más voy a tardar.

- Si, porque otra cosa no, pero por culo sabes dar como vamos - escucho el reproche del andaluz mientras entro a la habitación y busco con mi mirada el teléfono, justo antes de olvidarme de él cuando mis ojos chocan de frente con un pollito echo de cartulina justo encima de mi cama - Aleix venga, no puedes tardar dos vias y media buscando tu móvil.

- Ve yendo tú ahora te alcanzo - aviso mientras me siento en la cama y cojo el pollito todavía sin comprender como había llegado ahí - dile a Eric que has llegado tarde por mi culpa, de todas formas ya me tiene por un despistado no creo que se extrañe tampoco.

- ¿Pero cuanto más piensas tardar buscando tu teléfono para que no pueda esperarte? - pregunta entrando a la habitación antes de quedarse unos segundos en silencio viendome - ¿crees que es suyo?

- ¿Alguien más me llama pollito en este equipo? - cuestiono en respuesta y Pablo suspira antes de sentarse a mi lado - te juro que de verdad creía que no iba a hacer nada, que nos iba a dejar como estabamos, que no le importaba perderme.

- Solo es un pollito de cartulina, esto tampoco lo veo como una señal clara de que quiere que todo vaya a mejor - contesta y yo me encojo de hombros sin dejar de mirar al animalito de papel que se encontraba entre mis manos - creía que la última vez me dijiste que tenía que ser él quien se arrastrara esta vez, que no te ibas a dejar caer tan fácil en un simple perdón.

- Esto no es un simple perdón - aclaro antes de suspirar cerrando mis ojos por unos segundos - ni siquiera me está pidiendo disculpas por todo lo que ha pasado, solo me está demostrando que sabe que algo de culpa tiene en que ambos estemos mal y que de alguna manera quiere ponerle solución.

- ¿Y tú te crees preparado para encontrarla? - interroga y yo me encojo de hombros antes de ver varias letras debajo de una parte del pollito por lo que decido levantarlo con cuidado y ver como esas letras, terminaban convirtiendose en palabras y estas en una frase - pues mira si, te estaba pidiendo perdon con el pollo, no estaba tan equivocado.

- ¿Cómo hago para hacerme el duro la próxima vez que lo vea?, porque después de esto me va a costar no ser yo de nuevo el que se vaya arrastrar para que todo vaya bien de nuevo - susurro antes de sentir los brazos de mi amigo rodearme - no sirvo para hacerme el desentendido, el papel de malo nunca ha sido lo mio.

- Lo sé Aleix, lo sé muy bien - asegura y yo cierro mis ojos dejando caer mi cabeza hasta caer sobre su hombro.