xvii. PELEA.
INNOCENCE.
( LIBRO UNO. )
—¡Pero miren quien volvió! ¡Eres tú, Zayn! —Liam, con alegría trató de acercarse a él, pero el moreno retrocedió bruscamente.
—Que haya vuelto no significa que los haya disculpado, eso te incluye a ti —dice enojado. Jade vio los puños de Harry con miedo que estaban apretados haciendo que sus nudillos se pusieran blancos—. Ahora, retráctate de como la llamaste —mandó con voz dura.
—¿Tan bajo caíste sin nosotros, Zayn? ¿Con la rara? —Dijo Ryan para luego soltar una carcajada.
—No me provoquen —les advirtió el chico cruzándose de brazos, con tranquilidad.
—Uh, ¡qué miedo! —fingió Liam.
—Te la estas buscando —Zayn se encogió de hombros, Jade comenzó a temblar al ver que Harry apretaba su quijada con fuerza.
—Pero ella es una puta, todos los saben —habló obvio el castaño.
El puño del rizado impactó con la mejilla de su "amigo". Kendall soltó un grito a lo que Jade se abrazo más a sus libros viendo aterrorizada la escena.
Todo el mundo comenzó a ver la pelea, sin hacer nada, Zayn solo se quedaba cruzado de brazos viendo serio a sus ex mejores amigos.
—¿¡Qué pasa aquí!? —Harry paró de golpear a Liam, los dos miraron a la persona de quien provenían los gritos—. ¿¡Por qué se están golpeando!? —grita Perrie con indignación dirigiéndose a ellos, colocó las manos en su cintura—. ¡Levántense, levántense! —ella seguía gritando haciendo que algunos rieran.
Los dos obedecieron de inmediato, como si fuera su madre quién les mandó.
—¡Váyanse los dos a la enfermería, mírense la cara! —chilló poniéndose frente a ellos, señaló a Zayn—. Tú, me vas a escuchar luego —señaló a Liam—. Tú vienes conmigo, escuché lo que dijiste —el chico la miró como si estuviera loca.
—Yo no iré a ningún...
La rubia tomo la oreja del castaño y comenzó a arrastrarlo por el pasillo mientras él se quejaba siguiéndola hasta la enfermería.
La multitud que los rodeaba, se fue desvaneciendo poco a poco, solo quedaron Zayn, Harry y Jade.
El rizado la miró—. Jade... —comenzó.
—Golpeaste a tu amigo —dijo la chica con decepción.
Él la miro sorprendido pero con algo de ternura—. Si los amigos se golpean entre si —los miró a ambos—. No quiero ser amiga de nadie —dijo para luego salir corriendo de la escuela, por suerte ya las clases habían terminado.
Zayn y Harry se miraron preocupados.
Ninguno de los dos quería perderla como amiga.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro