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MAFE

—PASO POR TI A LA UNA DE LA TARDE.

—BUENO YA ME ALISTO

MIRO LA HORA A UN FALTA UNOS 40 MINUTOS, SIGO MIRANDO MI TELEFONO Y ME PERCATO DE UN MENSAJE DE... MI EX DANIEL

DANIEL

—¿COMO ESTAS?

Decido no responderle y borrar el mensaje, lo ultimo que quiero hacer es hablar con un perro, el me traiciono con una amiga llamada vani.

Me doy una ducha, me gusta sentir el agua caliente recorrer mi cuerpo, limpiando mis poros, creo que tengo un fetiche y es pensar y reflexionar de lo que hago bajo el agua. Duro alrededor de una media hora, salgo del la ducha por mis dedos se estaban poniendo como uvas pasas.

Me coloco unos vaqueros blancos, una blusa roja y converse negras.

-DING DONG- alguien timbraba la puerta, cojo mi móvil y mi bolso, cruzo los dedos de que sea Mafe, a veces tarda en llegar, al abrir la puerta confirmo mis sospechas.

—vamos.

Digo saliendo de casa.

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Llegamos a casa como a las 6 de la noche, mis padres estaban en el comedor trabajando es sus laptops, estaban demasiado concentrados tanto que ni cuenta se dieron cuando subí a mi habitación con Mafe.

Mafe me estaba ayudando de empacar unas prendas de ropa que quedaban.

Mafe estaba a unos pasos de la ventana cuando le dije

—tuve la misma pesadilla anoche.

Ella me mira, note como trataba de contener una pequeña risa.

—es el estrés, vamos a vivir solas en una cuidad que casi ni conocemos y aparte vamos a entrar a la universidad, me sorprende que yo no tenga pesadillas como las tuyas.

—si...debe de ser eso.

No se por que pero no la respuesta del estrés no me convecina del todo.

Mafe se acerca a la ventana para mirar hacia afuera pero en su cara se forma una expresión de temor y de confusión.

—e..emily mira esto.

—¿Qué?

Me le acerco, ella señala en marco de la ventana...........¿pero que? Había aruñazos varios, me sorprende no haberlos visto, no tengo gato ni mascota que puedan hacer eso.

—deben de ser mis padres tratando de asustarme para que no me valla.

Digo algo angustiada

—¿segura?

—si, pero no le digamos nada, si no llegaran a ser ellos y se enteran de esto lo mas seguro es que no me dejen irme.

—okey, pero mira la hora, son las 7 y media a las 8 tengo una cita con David, te veo mañana roomate.

Dice dándome un pico y saliendo a hurtadillas de mi casa.

Me cepillo los dientes y me despido de mis padres que aun siguen en en comedor trabajando, me acosté en mi cama observando los rasguños y haciendo teorías de lo que pudo haber sido, quisiera investigar que pudo haber ocurrido pero el tiempo no me da y además si lo tuviera tengo universidad y mudarme, creo que voy a tratar de olvidarme de esos rasguños, quizás los hice yo y no me di cuenta, con lo ocupada que eh estado últimamente quizás esa sea la teoría o si no ¿que pudo haber sido?, me logro dormir.

Vi por el rabillo del ojo a alguien que me observaba, abrí los ojos pero no había nadie, mire la hora, las 2:26 a.m.

Me doy cuenta que la puerta de mi habitación se encontraba abierta.

—no vallas.

Dijo alguien afuera del cuarto—¿que demonios?—, me levanto cuidadosamente, camine hasta la puerta, mi cuerpo estaba tenso, —¿será que entro a la casa un ladrón?—

Salí de la habitación y hay estaba el... el mismo hombre junto a la escalera, la misma gorra pero tenia algo diferente, abrí mis ojos como platos, de la boca hacia el mentón tenia sangre.

—¿qu..que quiere?.

Dije tartamudeando, hizo una sonrisa esquizofrénica de oreja a oreja, era escalofriante, goteaban de su barbilla gotas de sangre.

Sentía escalofríos recorriendo todo mi cuerpo, mi corazón lo tenia a mi, mis manos sudaban y sentía la sensación de un vacío en mi estomago como ansiedad.

Era el escenario de una película de terror—debe de ser uno de mis sueños— me dije.

El retrocedió perdiéndose en la oscuridad.

—detrás de ti.

Alguien dijo a mis espaldas, entre a mi habitación y coloque seguro, preferí no mirar que era esa cosa, nunca en mis sueños había llegado hasta esta parte, pero ya quiero despertar

—¡Despierta ya Emily¡

Gritaba en mi habitación, me pellizcaba pero no lograba despertar, me senté en la esquina de mi habitación, tapándome los ojos con las manos y gritando

—¡esto no es real, No no les!

Me destapo un ojo y lo veo, con una expresión de burla sentado en mi cama.

Me tapo de nuevo el ojo, mi corazón en cualquier momento va a llegar a estallar.

—¿Qué pasa hija?

Decía mi madre al otro lado de la puerta, se escuchaba el forcejeo de mi padre hacia la puerta para entrar a la habitación.

Estaba temblando, me vuelvo a destapar un ojo y veo que se levanta de mi cama y camina hacia mi.

—¡NO TE ACERQUES¡

—¿Hay alguien hay contigo hija?

Gritaba mi madre, me tapo el ojo y siento como la vida me pasa por delante.

Siento como mi padre sacude, me destapo los ojo y los veos asustados, no sentí en que momento entraron.

—esto es un maldito sueño.

—No lo es hija.

Dice mi madre con sudor en la frente.

Y mas tarde que temprano me di cuenta de que no se trataba de uno de mis sueños.