Palabra: Duna
Tipo: Drabble
Título: Not so perfect
Autora: bom0903

Bueno, en ningún momento imagino que pasará lo que todos le preveían y él ignoraba.

¡No veía nada!

Y era enteramente su culpa, porque, vamos ¡todos se lo dijeron!. "Namjoon si te interesa practicar ese deporte debes de informarte primero y tener todas las medidas de seguridad, no es tan fácil como crees". Algo así era lo que todos los días le decían sus queridos familiares y amigos. Y en este momento, en el que el viento golpea con fuerza abrumadora, imposibilitándole la vista y cualquier movimiento que intentaba -con bastante esfuerzo- hacer, sí, es en ese preciso momento, en donde se arrepiente de estar arriesgando su vida por haber ignorado las palabras de sus seres queridos porque sinceramente no cree que salga con vida de esto.

Puede parecer dramático y no quiere perder la esperanza pero ¿Qué más puede hacer? El realmente no pensó que cuando viajara al desierto para practicar sandboarding, y por fin descender por una alta e imponente duna, el tiempo climático no le iba a favorecer. Y debió, joder, si debió imaginar que talvez, solo talvez, en estas épocas la gente no venia a disfrutar de las actividades que se pueden hacer en aquellos montos de arena porque, bueno, en cuanto llego noto lo abandonado que se encontraba el desierto, sin una sola alma.

Namjoon debe admitir que, la falta de acción en los diferentes tamaños de dunas con las que contaba el desierto, no le importo, porque, vamos, él realmente estaba emocionado de poder descender y hacer todo tipo de piruetas en aquellos estéticos y perfectos montos de arena. Por que para Namjoon las dunas son hermosas, y si tuviera que elegir entre las montañas cubiertas de nieve y las dunas, él, sin dudarlo elegiría las dunas.

Son perfectas.

Oh bueno, eso pensaba, porque mientras el viento crea grandes capas de arena, formando, así nuevas dunas y de mayor tamaño, no considera que sean tan perfectas como creyó, Namjoon las categorizaría como aterradoras e imponentes. Porque por lo poco que puede ver si esos montos, que antes eran de un tamaño promedio apenas para poder deslizarse por ellos, siguen creciendo de esa manera, seguramente lo enterraran vivo. Y realmente como su madre le decía todos los días, las palabras tienen poder, porque después de ese pensamiento la arena se fue volviendo más densa, entrando a sus pulmones como si de aire puro se tratara, lo cual, obviamente, lo desespero.

Tenía medio.

Demasiado, a decir verdad, y este empeoro cuando la arena bajo sus pies empezaba a cubrirlo tan cálidamente como su hermano hacía con las cobijas cuando eran pequeños. Con cada incremento de la arena en sus pulmones, sus ojos se aguaban cada vez más y en el momento que cayó sobre la arena por falta de aire realmente lamento haber venido.

Perdón, mamá. 

Perdón, papá.

Perdón, hermanito.

Perdón a todos.

Los amaré siempre.

Adiós.