Persecución Jackson,  el Salvador del Olimpo,  el terror y repudio del Tártaro,  que fue expulsado del mismo por miedo, se encontraba actualmente con una mirada vacía.

El semidiós más fuerte de Poseídon se encontraba mirando al vacío de la playa, no mostraba ninguna emoción,  el motivo de su estado fue, traicion.

Fue traicionado por la persona que más amaba en su vida, su único y primer amor,  Annaberh Chase. La había encontrado siendo infiel con Grover, su fiel amigo.

De todas las personas que les tenia que haberse acostado, tenía que ser con su mejor amigo, para Percy eso fue uno de los peores dolores.

El no buscaría venganza, ama a Annabeth como nunca lo había hecho, por lo que acepto que si ella era feliz con Grover que así sea, pero... aun dolía...

Perseus Jackson había estado cumpliendo misiones,  encargos de Athenea para poder recibir su bendición oara casarse con Annabeth y cuando por fin lo había logrado, ella comete la infidelidad con su mejor amigo.

Percy: ¿Qué habré hecho mal para mercer esa traicion? ¿En que habré fallado?

Todo el mundo de Percy se estaba derrumbando,  el lo sabia, sentía como si vida se escapaba de su aliento. Sin tener a alguien a quien amar, ¿Qué razón había para viví? ¿Qué debía ee hacer si vivías solo por ella?

Acostando en la arena de la playa, Percy soltó un suspiro cansado y lleno de tristeza, su corazón poco a poco empezaba a latir de manera lenta, era como si su vida se fuera en cada suspirar.

Cerrando los ojos, el hijo de Poseídon empezó a abrazar la sensación de frio qué lo invadía, con una sonrisa en la cara, por fin pudo descansar en paz, aquel semidiós qué fue coronado como el Salvador del Olimpo, se encontraba muriendo de triste en la playa.

Las mareas se empezaron  a calmar, ningún tipo de ola aparecía en los mares, con cada latido más lento, el mar perdía su fuerza.

Sonriendo con tristeza, el cuerpo del hijo más fuerte de Poseídon se iba enfriando,  sabia que solo era cuestión de tiempo para partir de este mundo, apunto de soltar su último aliento, una calidez llego a su cuerpo, acompañado con lágrimas y miedo.

Aquel sentimiento provoco que Percy abriera sus ojos, solo para mirar a su prima Thalia abrazandolo entre lágrimas, nunca se había dado cuenta, pero Thalia era muy cálida, ese abrazo se sentía cálido o tal vez, Percy estaba muy frio.

Thalia le empezó a gritar a Percy entre lágrimas, el hijo de Poseídon no enetendia lo que decia Thalía, no podia escuchar los gritos que daba,sin saber que hacer, solo la abrazo.

En ese siempre abrazo,  Percy le dio a Thalia amor, no un amor de pareja, si no, un amor paternal y cálido, no sabia cuando paso ni porque,  pero al mirar a Thalia nuevamente pareció ver por unos momentos a una niña de 6 años llorando desconsoladamente, eso le partió el corazón a Percy, ver a su prima así por su culpa.

Percy: ¿Porque lloras Thals?

Tomando la cara de su prima gentilmente, la obligo con sus manos cansadas y pálidas a mirarlo a los ojos.

Nuevamente miro por unos momentos Como su prima se convertía en una niña de 6 años y así como vino, así mismo de rápido se fue.

Thalia: ¡Eres un grandisimo idiota, eres un gran cesos de alga!

Llorando desconsoladamente, la teniente de la caza abrazo a Percy, hundiendo su cara en el pecho de su primo.

Thalia había observado como Percy se acostaba en la playa, lo considero normal dado a su condición de ser hijo de Poseídon, pero se preocupo al ver como el de su piel se ponía cada vez más pálida.

Al llegar ante Percy, noto que estaba muriendo, no tenia ninguna herida, no mostraba signo de envenenamiento, simplemente estaba muriendo,  sin saber que hacer solo abrazo a su primo, escuchando como su corazón latía cada vez más lento y eso... La asusto.

Llorando desconsoladamente le empezó a gritarle qué no se podía morir, no la podía dejarla sola, no queria perderlo. Hasta que lo sintió, su corazón dejo de latir de manera más lento, solo latía, pero aun era lento, los brazos de Percy eran fríos pero brindaban un calor reconfortante.

Percy: No llores pequeña Thals, aquí estoy para ti

La fría mano de Percy empezó acariciar la cabeza de su prima, transmitiendo ese calor cálido qué su cuerpo ya no era capaz de producir.

Thalia: ¡Te lo prohibido,  no puedes morir sin mi permiso!

Empezando a generar electricidad en sus manos, las uso en el pecho del hijo de Poseídon con el a fan de hacer que su corazón lata con normalidad,  pero no funcionaba,  ya no seguía en picada de later más lento, pero, tampoco aumentaba su ritmo, fue como ver que aun luchaba para no escapar lo último de su vida.

Percy: Perdoname Thals, pero parece que hasta aquí he llegado.

Dedicándole una sonrisa con piel pálida, el hijo de Poseídon le dio a su prima cariño.

Thalía: ¿Que hay de Annaberh? piensa en ella, no te puedes ir.

Abrazando más fuerte a Percy, las lagrimas y el dolor invadieron a la teniente de Thalia, viendo como su primo esta perdiendo la vida enfrente de él sin poder hacer nada... y aun así... él le sonreía de manera cálida.

Percy: Ella es la razón por la cual estoy así, yo la amo Thals, pero ella... no me amo tanto como yo creí, no la puedo culpar, siempre estaba en misiones y sería normal que se alejara de mí

Sonriendo con tristeza,  tomo la cabeza de su prima y la siguió acaricia suavemente.

Thalia: No te puedes morir, eres unas de las personas más importantes que tengo en esta vida.

La hija de zeus empezó a llenarse de miedo en su corazón, miedo que fue remplazado por ira al saber que Annaberh había traicionado a Percy

Percy: Ya no hay que hacer Thals, Annaberh era mi razón principal para vivir, mi corazón solo la amo a ella.

Sonriendo calidamente envolvió a Thalia en un cálido abrazo.

Thalia: Sí... te dieran un propósito para vivir... lo tomarías?

Percy: Probablemente lo haría Thals, Probablemente lo tomario *sacando una caja qué contenía un anillo* al final nunca se lo puede dar

Thalia se separo del abrazo de Percy y lo primero que sintió... fue frio, el alejarse del abrazo de su primo le hizo sentir frio, pero eso no importaba ahora.

Tomando su Arco de la caza, apunto al cielo y disparo una fecha a la nada, a los pocos segundos de que la flecha se perdió de vista, apareció Artemisa con la caza, todas armadas y con sus arcos tenso para disparar.

Lo primero que vieron fue a Thalia encima de Percy y con lágrimas cayendo en su rostro, las nuevas no dudaron en apuntar a Percy,  listo para matarlo, pero no esperaron qué su diosa,  Artemisa fuera abrazar al chico con preocupación.

Artemisa: Percy, ¿Qué te pasó?

La diosa de la caza, castidad, partos y fan número 1 en odiar a los hombres,  se había arrodillado ante un hombre, preocupara por el bienestar de este.

Percy: No es nada grave laidy Artemisa

Sonriendo con pesades, guardo discretamente la caja del anillo.

Thalia: Mi señora, luego le explico, hay que llevarlo al ma... no

La mirada de Thalia se horrorizo ante lo que vio, el mar qué normalmente tenia olas a la costa de la playa, estaba quieto, ninguna ola se mostraba en el mar, todo estaba quieto.

Thalia: Hay que llevarlo al Olimpi rápido,  Percy esta muriendo.

Artemisa se congeló, un nudo en su garganta se formó, el único hombre que respeto y en secreto desear qué fuera suyo, se encontraba muriendo enfrente de sus ojos piadosos... y aun así... mantenía esa sonrisa tranquila qué tanto le gustaba.

Sin pensarlo mucho cargo a Percy en sus brazos y se teletransporto al Olimpo a convocar una reunión ante los demás, ella no permitiría qué el único hombre que aprecia muriera de tal manera.

***

El resteo de la caza miro a Thalia, ellas querían una explicación ahora, pero una simple mirada de Thalia las hizo callar com una simple mirada.

***

La diosa de la caza había mandado a llamar a una reunión a los dioses.

Los doce olímpicos aparecieron en la sala de reuniones de cada solsticio, no se veían nada contento de que los interrumpieron en lo que estaban haciendo.

Zeus, el hermano menor y gobernante del Olimpo hablo un con fastidio, ese fastidio se volvió en preocupación al ver a su hija llorar, tal vez había sido un mal padre y esposo pero después de haber ido a terapia había cambiando... Solo un poquito... pero había cambiado

Zeus: ¿Porque convocaste a esta reunión?

Artemisa: Necesito su ayuda... Perseo Jackson esta muriendo.

La diosa de la caza mostro a los dioses a Percy el cual su corazón latía de manera lenta. El dios Poseídon fue el primero en derrumbarse, cambiando de estatura para cargar a Percy.

Poseídon: Mi hijo, ¿Quien te hizo eso?

Percy: No fue nadie padre.

Artemisa: Thalia sabe lo que paso

Poseídon: Hazla pasar aquí ahora

El dios de los mares,  tormentas y terremoto estaba enojado, su furia se comenzó a mostrar en la guerra mientas elevaba su poder divino. La diosa de la caza asintió ante la petición y trajo a Thalia ante su tío.

Poseídon: ¡Habla ahora, ¿Quien le hizo esto a mi hijo?

Thalia murmuro suavemente el nombre de Annabeth, tam bajo qué Poseídon no lo escucho.

Poseídon: ¡ HABLA MAS FUERTE!

Thalia: ¡FUE ANNABETH!

Ante la noticia todos voltearon a ver a Athena la cual negó con su cabeza en señal de que no tuvo nada que ver en ese caso. La segundo a quien miraron fue a Afrodita pero estaba había soltado su maquillaje al enterarse de que fue Annabeth, dejando en claro que ella no tuvo nada que ver.

Percy: Yo no le guardo rencor,  yo la amo, no puedo odiarla, es Imposibles para mi, Thals, por favor cuenta lo que te dije.

Thalia asintió y empezó a narrar todo lo que había  escuchado de Percy, los dioses se quedaron pensando en lo dicho por Thalia, estuvieron discutiendo,  Percy les había ayudado, ahora les tocaba ayudarlo a él y la primera en hablar fue Artemisa

Artemisa: Tengo una sugerencia, Perseo Jackson,  dijiste que si te dieran un propósito para vivir... La tomarías... verdad?

Percy: Sí,  lo tomaría.

Artemisa: Te propongo ser el Niñero de la caza.

Percy: No querrás decir guardia?

Artemisa: No, Niñero fue lo que dije, últimamente ha sido complicado lidiar con las nuevas. A favor de esta idea

Los dioses se miraron por unos momentos antes de asentir y alzar la mano, fue un voto unánime.

Artemisa: Esta decidido, seras el Niñero de la caza, guiaras y cuidaras de mi caza cuando yo no esté

Percy: Yo...

Thalia: Por favor acepta —murmurando—

Al mirar el deseó de Thalia solo suspiro, sabiendo ya la elección qué debía de hacer, colocandose de pie con dificultad se arrodillo ante Artemisa.

Percy: Yo Perseo Jackson acepto el cargo de ser el Niñero de la caza.

Artemisa: Yo Artemisa la diosa de la caza, niños,  partos y la luna te nombró como el Niñero de mi caza.

Percy: Así será mi laidy

La piel de Percy seguía pálida, su corazón aun latía de manera lenta. Artemisa se encargaría de que aquel hombre lleno de alegría y luz volviera.

Artemisa: Vámonos

Tomando uno de los brazos de Percy lo ayudo a caminar, aun estaba muy débil y cansado pero... había encontrado un propósito para vivir

FIN

¿Qué les pareció este capitulo prototipo?

¿El siguiente quiere que sea de una de las propuesta pendientes o un segundo cap prototipo