No estuve dispuesta a hablar con esos bobos, exijí hablar con mi tía, no podía creer que la persona que fue mi confidente en la niñez quisiera hacerle tanto daño a mi madre, me llevaron a una sala de su nave y de entre las sombras pude observar como mi tía se acercaba:

    -Mary que bueno que estes aquí

    -¡Tía, oí que quieres hacerle algo terrible a mamá, dime que no es verdad!

    -Mary, todo lo que dijo tu madre era cierto.

    -¡¿Qué, qué harás?!

    -Ahora que estas aquí me haces las cosas más fáciles, llamaremos a Koriad'r y haré un trato con ella, si acepta te dejaré libre.

    -Y ¿si no?

    -No debería decírtelo pero...- me toma del cuello -¡lo siento sobrinita!-

    Me desmayó y me llevan a una selda.

    A la mañana siguiente mamá despertó y al tratar de levantarme observó mi habitación vacía, busco a papá y tampoco estaba con él, buscaron por toda la mansión sin respuesta alguna, pero de repente una luz los iluminó, los gordonianos estaban atacando Blüdhaven otra vez, ya se les agotaba el tiempo y lo único que podían hacer era traer a su propio ejercicio.

    Al saber la noticia, Bruce, arriba a su cueva para realizar todo tipo de artilugios y planes, para lograr derrotarlos, en unas cuántas horas toda la familia estaba preparada para la guerra, pero antes de partir papá decide dialogar con mamá:

    -Kory ¿cómo sabes que Mary esta con Blackfire?

    -Soy su madre, sé todo sobre ella y también sé que se siente culpable de esta guerra, quiere arreglar las cosas pero con mi hermana no será sencillo

    -¿Cómo sabes todo eso?

    -Bueno... durante todo este tiempo en Tamaran, ella lo fue todo para mí...- se entristece su voz -no imagino mi vida si la perdiera.

    -Kory, yo... yo quiero saber tanto de Mary como tú, quiero terminar de verla crecer, ser su héroe cuando me necesite y al igual que tú tengo miedo de perderla... Perder a la prueba de nuestro amor- se le iluminan los ojos a ella.

    -Richard, yo te daré todas esas oportunidades, pero sobre la prueba de nuestro amor- suspira -no sé si pueda hacerlo- baja la cara con vergüenza y ambos se disponen a realizar su viaje.

    -Ahora está es mi parte-

    Tomamos vuelo en el batiavión hacia Büdhaven, al llegar me puse frente a su nave y esperé unos segundos para tener a mi hermana frente a frente y confrontarla:

    -Hermana, estoy aquí y vine por mi hija.

    -Y ¿por qué piensas que está aquí?

    -Porque eres una maldita salimaña que ama manipular y destruir a las personas que deberías querer.

    -¡Uhhh! Ese vocabulario es muy rudo para ti ¿no lo crees hermanita?

    -¡Cállate klimblorka! No me sorprendería que hayas raptado y torturado a tu propia sobrina.

    -¡Sí, sí lo hice estúpida! Pero la diferencia es que yo no la rapte, ella vino sola y para recuperarla tienes que ganar esta batalla.

    -Eso ya lo sé y ya que esto es una guerra necesito mi propio ejército- al decir esto eleva sus manos y del cielo bajan cientos de Tanaraneanos.

    -¿Por qué los tragiste?

    -Creías que iba a pelear sola, contra la tramposa de mi hermana.

    Blackfire intenta huir de mí como una cobarde y al tratar de atraparla me atacan cuatro soldados gordonianos por la espalda, a ella no le queda más que defenderse mientras los tamaranianos comienzan la batalla con la raza que una vez los apricionó.

    Mientras todos luchaban, su padre se me acerca y dice:

    -Así que ¿esto es una guerra interestelar?

    -¿Qué haces aquí?- digo con preocupación hacia él.

    -Mary también es mi hija, ¿recuerdas?, no la dejaré sola, además también te vine a cuaidar a ti.

-Yo no...

    -Kory, lo siento, sé que a veces soy un idiota y que debí cuidarte más, pero si raelmente quieres que ya no me sienta culpable debes comprender que fue lo que pasó esa noche.

    -Entonces habla ¡ya!

    -Esa noche un monstruo me mordió y ya que Bruce no quería que nada me pasará me hizo un antídoto y Bárbara se ofreció a llevarmelo y después de ahí tú confundiste todo.

    -¿Eso es cierto?

    -Sí, Star, jamás te mentiría- al oír que él dijo mi antiguo apodo se iluminan de una manera especial mis ojos.

    Me interrumpe diciendo:

    -Oye Batman tiene un dispositivo que nos puede ayudar.

    -¡Bueno que lo use!.

    Nightwing le dio una señal a Batman y él no dudo en activarlo y de unas granadas puestas por toda la calle empezaron a emitir vibraciones mientras Batman neutralizaba a tantos gordonianos como podía, estas ondas podían hacer sufrir a todo lo que no fuera humano, claro que esto me incluía. Al oír esas vibraciones mis oídos ardían y la cabeza me mataba, me arrodilló y empiezo a retorcer en el suelo, su padre se preocupó mucho por mí, se pone a mi lado y tapa mis oídos con sus manos, tocando las mías que estaban en la misma posición, me mira directo a los ojos y en los suyos se refleja seguridad, valentia y honestidad, me doy cuenta que todo lo que alguna vez dijo y repitió era cierto.

    -¡Para este maldito dolor!- grita Kom matando mi momento de esperanza.

    -¡Tienes que sufrir, traidora!- grito con desprecio.

    -¡Si me quisieras hacer sufrir te enfrentarías a mí cuerpo a cuerpo!- dice retadora.

    -Lo haré, con la condición de que si ganó me devolverás a mi hija, retiralas todas tus tropas y te irás lejos de aquí.

    -Me parece la idea.

    -Kory no lo hagas...- Dick trata de detenerme.

    -¡No! Dile a Batman que pare, lo tengo que hacer o si no nunca se irán y esto se combertira en la mayor desgracia del mundo, ¡jamás nos darán a nuestra hija!

    Lo besó como si fuera una despedida:

-Déjame hacerlo, la venceré.

    Dick detiene las granadas de frecuencia mientras me levantó del piso, Kom da la orden de que no ataquen pero el general no está deacuerdo se acerca a ella para decirle que no es la líder y Kom le da un puñetazo tan fuerte que lo duerme en un segundo.

    Nuestra pelea estaba a punto de comenzar y los guardias la tragieron encadenada con una mugrienta esclava, se me rompió el corazón cuando trató de correr hacia nosotros y los cadenas se lo impidieron mantandola al suelo. Kom saca dos espadas para la pelea y me brinda una, todos se apartan dándonos un lugar para pelear, nos ponemos frente a frente y por primera vez nuestras espadas chocan haciendo un peculiar sonido:

    -Hermanita, recuerdas la primera vez que jugamos con las espadas y ¡jajaja! quedaste llena de lodo ¡jajaja!

    -¡Eso fue fue hace mucho tiempo!- las espadas se tocan más mientras hacemos unas cuántas volteretas y maniobras de evasión.

    -Pero la familia no cambia con el tiempo ¿verdad hermanita?

    -No, tú sigues siendo una tramposa sin corazón y yo sigo siendo la favorita.

    -¡Ahhhh!- grita con enojó -Cuando pierdas voy a matar con tanto gusto a las pesonas que quieres- mira con recelo a Mary.

    -No dejaré que le hagas nada- le doy una gran patada y cuando esta desequilibrada arrojó su espada al suelo, cayendo de rodillas y pongo el filo de mi cuchilla en su garganta:

    -¡Gane Kom, dame a mi hija!

    -¡No! ¡No, tú sabes muy bien qué tipo de batalla es esta y si quieres a tu hija de vuelta tienes que clavar esa espada en mí!- sé lo que pretende, ella sabe que yo dejé de matar al llegar a la Tierra, lo hice por Dick.

    -No lo haré, no soy como tú, yo no daño a mi familia.

    De pronto escuchó el grito de Richard "¡Kory!" advertiendome, me hago a un lado y veo como una lanza degolla a Kom y el infierno se volvió a desatar, a Bruce no le queda más que activar su dispocitivo otra vez, Dick me abraza y recoge a Mary en sus brazos para escapar del horrible sonido y mientras salíamos en su motocicleta observó que algunos miembros de la JL entran a escena para acabar con mi peor guerra...