Capitulo 16
Hemos iniciado nuestro viaje espiritual hacia una vida mejor que la que hemos conocido.
Mi madre ya no asiste a reuniones donde haya en la mesa una sola copa de licor. Ella ya no fuma, tampoco baila, y eso me agrada. Desde que Cristian la invitó a acercarse a Dios para ser realmente feliz, las cosas en casa han cambiado tal como siempre he querido que fuesen. Claro, no somos cristianas como mi hermano, pero por lo menos vamos a la iglesia católica de nuestro barrio La Virgen Inmaculada.
Asistimos todos los domingos a la misa del medio día. Hay muchísimas imágenes y estatuas de la Virgen con el Niño Jesús. Cada vez que paso al lado de ellas, siente una gran veneración hacia ellos. Gracias a ellos, aunque físicamente no están aquí conmigo, mi vida no es la misma de antes. La iglesia no es la más lujosa que haya visto, es muy corriente, pero acuden muchísimas personas. En cada reunión, encontramos en nuestras sillas un folleto muy simple con las oraciones y versículos del día. Casi no me gusta la parte en la que tenemos que arrodillarnos, porque me duelen un poco. Tampoco me agrada cuando el coro empieza a cantar esas aburridas canciones. Nunca cierro completamente los ojos cuando el sacerdote nos pide hacerlo para rezar. La verdad es que siento demasiada vergüenza al cerrarlos, siento que hay alguien por ahí no tan obediente, mirándome y riéndose de mí. Creo que los peores momentos son cuando debemos levantarnos de nuestras sillas, es muy agotador. Qué bueno que en mi escuela ya no tenemos que hacerle ese saludo al profesor que llegue a dar su clase.
Me da muchísima curiosidad ese "alimento" con forma circular que les dan a los adultos. El sacerdote dice que es el cuerpo de Cristo, aunque obviamente no lo es, es una especie de representación. De igual manera con el vino, dicen que es la sangre de Cristo, pero todos sabemos que no es así. Sería muy extraño beber la sangre de otro ser humano, todavía más si esa persona murió hace dos milenios. Lo interesante es que el vino sólo lo bebe el sacerdote. Nadie más recibe una gota de ese líquido. Creía que el asunto con el licor ya había llegado a su fin, pero resulta que el sacerdote bebe en frente de nosotros. Que extraño.
A pesar de eso, fue muy gentil un día que nuestro computador no tenía internet, y me dejó entrar en su casa - dentro de la iglesia, en el segundo piso - y hacer una tarea en su portátil. Parece ser un buen hombre, sin tener en cuenta el tema del vino. Por lo menos al finalizar la misa nos regala a todos los niños y niñas un Bon Bon Bum. Amo el azúcar concentrada en todas sus formas y colores.
A los menores no nos dejan hacer parte de la Santa Cena, ciertamente desconozco la razón. Dicen que aún no estamos preparados para hacerlo. Algunos dicen que en realidad no es pan, como a veces nos dicen, sino que es una oblea en miniatura, sin arequipe como a mí me gusta. ¿Cuál será su sabor? ¿Eso se tiene que morder, o dejar dentro de la boca hasta que se deshaga? ¿Me hará sentir diferente? Que preguntas tan tontas las mías.
De vez en cuando mis amigas y yo hablamos de eso. En la escuela, las monjas aun no nos permiten hacerlo cuando vamos a la capilla a cumplir con el sagrado sacramento de la eucaristía. Ellas comentan que somos niñas, y que por lo tanto, si llegásemos a morir sin celebrar nuestra primera comunión - por cierto, nos han dicho que este año haremos la ceremonia para todas nosotras -, iremos directo al cielo, ya que en la Biblia está escrito que el reino de los cielos es de los niños. Eso significa de algún modo que somos, en general, puros e inocentes, los preferidos de Dios. Sin embargo, pienso que eso no se cumple conmigo.
No creo que este bien que pase horas meditando sobre temas que no son para gente pura. A pesar de que vaya a la iglesia, y que sea católica, he tenido ciertos pensamientos oscuros e incorrectos. No soy del todo tan pura como se me pide.
Sigo vistiendo de negro, pintando mis uñas de negro o sangre toro, incluso cuando me han dicho que no debería, porque es el color que representa la maldad, las tinieblas y la muerte. Pero me encanta, aun más cuando combina con mi blanca piel. Todas las demás chicas usan ese delicado color francés en las uñas con la rayita blanca y esas angustiosas flores, o usan colores demasiado llamativos. Pobres manos.
Soy diferente, aunque me haya convertido en chica de iglesia. Me gustan las películas o series que normalmente son para niños. Me gusta ver Pokémon, Harry Potter, Yu-gi-oh! y otras cosas. Pero también soy muy chica Disney. Me encantan las series de Hannah Montana, Zack y Cody, Kim Posible, Art Attack y demás. Creo que he visto todos los capítulos de las series. No es común entre mis compañeras. Ellas hablan de los cuentos de los hermanos Grimm, el chavo del 8 y de un programa que dan en RCN que se llama Bichos, algo así. Para mí, es una total bobada. Incluso cuando puedo, me veo algo de Friends.
En mi casa, tenemos una gran colección de películas y videos de conciertos de muchos artistas. Tengo absolutamente todas las películas de cada Barbie existente, al igual que las muñecas, aunque esas se las dí a Sara para que ella jugara con todas esas muñecas, junto con las mascotas y el carro de Barbie. Hasta tiene la lancha de Barbie, solo falta la casa, pero esa la tiene Melissa en su cuarto. Así que cuando queramos y nos den permiso para ir a su casa, mi hermana lleva sus muñecas. Antes éramos Melissa, otra chica y yo, quienes nos reuníamos a jugar de muchas maneras. Créanme cuando les digo que de muchas maneras. Definitivamente la más dañada y pervertida era - y soy - yo. Siempre ponía a las barbies a tener relaciones sexuales con el Ken que tuviera a mano. Hacía con los muñecos temblar la no tan resistente casa de Barbie de Melissa. Por Dios. Pero hemos crecido, por lo tanto ya no nos reunimos para jugar como infantes. Es raro, a veces no me doy cuenta de que mis gustos y pensamientos van cambiando, hasta que me detengo a mirar quien era antes.
Siguiendo con el tema, tengo incluso una película de Hello Kitty por ahí escondida detrás de todas las demás que tenemos. Tengo conciertos en DVD de Shakira, Evanescence y el mejor de todos, que vino con gafas 3D - que son muy graciosas, color azul para un ojo y color rojo para el otro -, el concierto de Hannah Montana y Miley Cyrus: The Best of Both Worlds ¡con The Jonas Brothers! Creo que hasta hora, ese DVD y mi iPod Touch son mi mejor adquisición. El resto de DVD's son de mis padres que escuchan salsa y merengue.
Desde películas de terror de Freddy Krueger, acción con Vin Diesel, de magia como Harry Potter; incluyo en nuestro listado de películas sin fin al El Señor de Los Anillos y muchísimas más, originales. Si dijera que tenemos en nuestra casa 100 películas, no sería verdad, porque hay muchísimas para ser contadas.
Hablando de colecciones, mi padre suele mandarnos ropa de Estados Unidos. Hay casos en los que la ropa de marca sale, obviamente, mucho mejor comprarlas por fuera que dentro de Colombia. Así que, nos manda ropa de un diseñador llamado Christian Audigier que trabajaba para la marca Ed Hardy*. Sus diseños son de otra dimensión. Usa animales, calaveras, flores , indígenas y otras cosas. Mi padre me manda la ropa de colores, como si en realidad me gustaran. Me agradan por el diseño y porque es mi padre quien trabajó para dármelas.
Lastimosamente, todas estas cosas que tengo me quitan a la persona que quiero tener conmigo. Mi padre. No sabemos cuando pueda volver. Cada vez que viaja para estar con nosotras, se gasta muchísimo dinero en paseos, restaurantes, alquilando fincas, haciendo algún mantenimiento a la camioneta que tenemos. Es tanto el dinero que derrochamos, que tiene que devolverse a Estados Unidos a trabajar para pagar las deudas dejadas en Colombia. Incluso cuando antes de viajar para Colombia, ya ha mandado dinero; cuando llega, con más dinero todavía.
Este año cumplo 13. Sólo me faltan 2 años para cumplir mis anhelados 15. No tengo ni idea de qué quiero. Mi prima María celebró sus 15 años de la forma más esperada. Todos parecen iguales, creo que son ciegos a la realidad. El evento fue en el salón social de mi unidad, y asistieron muchas personas y jóvenes. Me habían dicho que solo era un almuerzo y otro aperitivo y ¡listo! Pero no. Al llegar la noche, encendieron los equipos de sonido y empezó a sonar ese regaetton. Para mi fue realmente molesto. La fiesta se puso muy candente. Lo bueno es que nosotras ya estábamos asistiendo a la iglesia del barrio, entonces nos fuimos al apartamento, mientras que todos ellos quedaron ahí. Me contaron al día siguiente que la fiesta siguió en la casa de mi tía Lucía, mejor dicho, el perreo. María quería ir a una discoteca con sus amigos, pero no la dejaron. Hasta le pegaron en la cara. Que horror. Las fiestas siempre terminan mal.
Es por eso, y por todo lo que he vivido, que mis 15 años no serán celebrados de esa manera. Desearía un viaje, pero yo sola. Lo sé, eso jamás sucederá. Tengo dos años para meditar sobre el tema.
En dos años. Quizá, con muchísimo esfuerzo, me enamore por primera vez. Con mucho empeño, pueda dar mi primer beso... que estupidez, ni siquiera tengo un solo amigo hombre para andar soñando con esas cosas. Por ahora sólo tengo centenares de amores platónicos. Zac Efron, Hugh Jackman, Joe Jonas, Tom Wellington, Daniel Radcliffe, Brad Pitt aunque este casado, y ese cantante de la banda de Maroon 5. Ni le conozco el nombre, pero es divino.
¿Qué se sentirá amar y ser amado? ¿Quién me puede explicar eso? ¿Cómo será realmente un noviazgo? ¿Acaso todo es lindo, y no habrá lugar para conflictos? He escuchado que hay relaciones que terminan dos meses después de haberse formalizado. Me parece muy triste. Yo no deseo vivir eso. Deseo enamorarme de un solo hombre y con él, poder hacer todo lo que he soñado.
No quiero ser de esas chicas que se besan y se tocan con cualquier tipo que parezca en el camino, por diversión. Eso no es amor. Eso es ser perra.
No pienso ser la mujer con la que todos han estado. Quiero dar lo más preciado de mi a un hombre que valga cualquier contra tiempo, y que ninguna diferencia sea tan grande para separarnos, a no ser que realmente no sea el indicado.
Sólo faltan dos años. Ya casi.
Amelia Novoa
2009
*Ed Hardy: sugiero que revisen sus diseños. Será necesario para los próximos capítulos.
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