El gremio Fangxiangshi fue creado hace cinco o seis años aproximadamente por chicos que años atrás sufrieron la perdida de sus familias o conocidos a causa de los demonios de Tártaros con el fin de acabar con ellos, pero conforme se integraban más y más miembros el objetivo fue profanado y convertido en una salvaje orgía sinsentido de exterminio a todo lo que parezca ligeramente demoníaco. Aunque los miembros fundadores son menos de una veintena actualmente superan el medio centenar, la mitad de los originales solo se tenían a si mismos antes de conocerse lo cuál de cierto modo ayudó a que crearán un vínculo tan fuerte entre sí.

Dichos miembros se llaman Fang, Li, Yan y Xiuying como indican sus nombres son hermosas como las flores siendo la primera la más virtuosa; por su parte Min es una de los cerebros del grupo siendo los otros Ming, Li Jie y Da; todos ellos son liderados por Qiang, el cuál fundo el grupo con su "hermana" Mei la cuál en ese momento era una bebé. El resto del grupo se fue uniendo al grupo poco a poco a lo largo de los últimos cinco años; aunque si los diez fueran honestos consigo mismos a ellos solo les importaban ellos, los demás podían morir si dependiera de ellos; a ninguno de ellos le gusta el extremismo del resto de miembros, por ello; para detenerlos planearon entregarlos al consejo a cambio de dejar libre a los diez jóvenes; con lo que no contaron fue que el consejo enviaría a tan aterrador monstruo a enfrentarlos. Los miembros fanáticos están demasiado adoctrinados y tienen el cerebro lavado, por lo que no tienen idea de como sentir el poder mágico de sus oponentes; y aunque pudieran hacerlo su fanatismo los ciega y los hace creerse invencibles.

El plan del grupo de diez empezó a fraguarse hace seis meses gracias a Qiang por súplicas de Mei, por ello el consejo sabia la fecha aproximada del ataque al pueblo Sakura; pese a esto ellos eran los únicos nerviosos entre todo el grupo cuando divisaron a la figura solitaria en la entrada del pueblo. Lo que está persona dijo extraño y perturbó a varios miembros, pero lo siguiente que dijo hizo que la mayoría quiera darle una lección al tipo
—¡Acabaré con todos ustedes, monstruos! Mientras habla su cuerpo emite una especie de vapor o niebla de color púrpura, solo el color hizo que todo el grupo invasor por reflejo dirija sus manos a una mascarilla que siempre cargan para evitar ser envenenados aunque también les sirve para cubrir sus rostros. Los invasores respiraron la niebla de forma irremediable, y esta hizo efecto más rápido en aquellos arrogantes que quisieron enfrentar al hombre misterioso pues corrieron en su dirección acelerando su respiración. El efecto se sintió en horribles alucinaciones en las cuáles veían impotentes las víctimas como sus seres queridos son asesinados o torturados de la manera más sádica y retorcida posible, o los menos ven horrorizados sus peores miedos vueltos realidad.

A lo que hizo Natsu no se le podría llamar combate o pelea pues los pocos que intentaron enfrentarlo fueron noqueados sin que los pobres pudieran lanzar dos golpes, sumado a eso las alucinaciones causadas por la niebla que invocó hicieron todo el trabajo
—Esta niebla será un buen arma contra grupos grandes. Pensó para si el pelirrosa contento por acabar rápido la tarea, en el momento en el que pensaba si las chicas notarían su ausencia noto por el rabillo del ojo izquierdo que un grupo de enemigos se levantó, pero se relajo cuando noto que están con las manos en alto y asustados por él, este los ato como medida de seguridad. Por fortuna los soldados del consejo no tardaron mucho en aparecer aunque su aparición género dudas en el pelirrosa, decidió buscar algunas respuestas hablando con quién comande a la unidad que enviaron; ese alguien resultó ser Arcadios, capitán de los guardias reales; este al verlo se dirigió directo hacia el con la mano extendida
—Natsu Dragneel, es bueno verte.
—Lo mismo digo Arcadios. En ese momento ambos se estrechan las manos y vuelven a platicar
—Asumo que los tipos tirados en el suelo son los invasores de los que fue advertido el consejo ¿Verdad? Natsu solo asintió afirmando lo dicho por el guardia.
—¿Y ese grupo atado? Pregunta Arcadios viendo al grupo que se rindió ante Natsu que, además de estar atados tiemblan de miedo; supuso que el pelirrosa es el culpable.
—En cuánto vieron a sus compañeros en el suelo se rindieron sin más. La suposición de Arcadios al parecer fue la correcta.
—Aún recuerdo cuándo dejabas destruído todo el lugar en cada misión. Dijo el capitán riendo a lo que Natsu se unió aunque la suya era una risa mas discreta.
—Lo dejo en sus manos capitán, tengo otra misión en el pueblo vecino y no quiero que mis compañeras se preocupen. Arcadios solo asintió y se despidieron con otro apretón de manos, Natsu dejo el pueblo internandose en el bosque y tras caminar unos cientos de metros saco sus alas oscuras y emprendió el vuelo; Lissana y Juvia no notaron su ausencia. El mago nunca escucho que los detenidos susurraron medio inconscientes:
—Aléjenlo de mi, no dejen que se me acerque ese demonio. Susurraron aterrados.

Poco después de que Natsu aceptará la misión que Laxus "le sugirió" este aviso por lacrima al consejo que la prueba comenzó, tanto Laxus como los magos del consejo recuerdan que esa misión los tuvo preocupados desde que fueron informados hace un mes, la reaparición del mago de fuego fue una gran suerte pues ese grupo tenía fama de, pese a no ser magos, ser bastante letales con sus habilidades con las armas; Laxus incluso llegó a considerar enviar a Freed y Bickslow por sus habilidades. Ahora solo queda esperar a ver los resultados de su nuevo candidato a mago santo. Si se le preguntara a cada mago santo o al rey su opinión respecto al pelirrosa todos coincidirán en que, juzgando solo sus cicatrices ese hombre vivió una tortura larga y terrible; pero gracias a ella se fortaleció y esa fuerza le permitió sobrevivir. Algo que solo el rey y los magos del consejo saben es que al revisar el aura mágica del pelirrosa también pudieron medir sus niveles mágicos y pueden asegurar sin duda que es tan poderoso como cuatro Acnologias a su máximo poder.

Al mediodía del mismo día que Natsu, Lissana y Juvia partieron a una misión Guildartz Clive llegó a Magnolia; como es costumbre la ciudad se preparó para su llegada una hora antes de que este cruce las puertas de la ciudad. Cómo solía hacer desde hace años el as del gremio volvía de otra infructuosa búsqueda del mago de fuego, grande fue su sorpresa al ver al gremio inusualmente animado -casi como si él estuviera vivo-. El mismo Laxus y Jenny le dieron la noticia en la privacidad de su oficina protegidos por hechizos silenciadores y solo después de que Gajeel y una recién llegada Wendy buscarán con minuciosidad espías o indiscretos oídos.
—Viejo Natsu volvió. Soltó el mago rubio.
—¿Están seguros que es él y no un impostor? Preguntó el pelirrojo algo escéptico, el rubio no podía culparlo pues habían aparecido un par de tontos oportunistas que, hace unos años intentaron hacer dinero fácil usurpando el nombre del matadragones. De sobra está decir que el gremio cazó a esos pobres y los habrían asesinado de no ser por la intervención del consejo mágico quienes en un juicio mediático sentenciaron a ambos a cadena perpetúa, e ignorado por los medios Hisui autorizó que ambos prisioneros sean torturados cada cierto tiempo por quienes deseen hacerlo, cada mes Erza, Guildartz y Laxus acuden puntuales a la prisión de Crocus seguidos por Wendy quien se asegura que los condenados no gocen del alivio de la muerte.
—Señor Clive, mi esposo estuvo presente cuando Natsu apareció en el consejo y vió las pruebas que le hicieron; no hay ninguna duda de que Natsu Dragneel volvió. Esas palabras dieron una infinita felicidad al experimentado mago, muy pocas veces la muerte de alguien le había afectado; su esposa Cornelia, el maestro Makarov Dreyar y Natsu Dragneel eran todos los casos.
—Son maravillosas noticias, pero ¿Dónde está?
—Partió está mañana en una "misión". Contesto el rubio y le explicó al pelirrojo los planes del consejo para probar a su nuevo mago santo
—¡Espera Laxus! Se que el chico hizo lo único que yo no pude, vencer al dragón negro pero ¿Nombrarlo mago santo? Algo no me has dicho.
Laxus se resigno y se rindió ante la perspicacia del mago mayor
—Tienes razón, cuando él regreso estaba muy demacrado; lo revisó un doctor y determinó que sufría de insomnio crónico, desnutrición y al parecer tenía un terrible caso de estrés post traumático además de paranoia- Guildartz solo palideció ¿Qué rayos dejo a Natsu en ese estado? - Pero lo peor es la inmensa cantidad de cicatrices en su piel, según el doctor tenía marcas de poderosas mordidas, profundos arañazos, marcas de armas. Terminó de contar Laxus y Guildartz sin decirlo tuvo el mismo temor de Laxus, si lo que hirió así a Natsu escapa de dónde sea que este encerrado a su mundo; las consecuencias serían terribles. Y el maestro rubio le contó al pelirrojo mayor todo el relato del pelirrosa, el padre de Cana lo habría tomado como un cuento para asustar niños de no ser por el hecho de que su maestro, todo el consejo mágico y el rey de Fiore atestiguaron el estado del pelirrosado.

Desde que el pelirrosa fue separado de la princesa, está se ha comportado de forma un tanto extraña pues le gusta pasar horas encerrada a piedra y lodo en sus aposentos privados; de lograrse colar alguien a espiarla vería que la mujer pasa esas horas admirando su cuerpo desnudo, más específicamente su piel; pues no era nada discreto el enorme dragón de escamas jade, escarlata y rosa que adorna el lado izquierdo de su cuerpo desde el cuello hasta las nalgas de la mujer. En opinión de la mujer el contraste entre el dibujo mágico y su tersa piel de porcelana solo aumenta la belleza del mismo dibujo. Dicho dibujo apareció pocos días después de la primera vez que la peliverde y el asesino de dragones tuvieron sexo, su compañera de harén Lissana también tiene uno, la diferencia está en el color de las escamas siendo en este caso blancas con líneas color escarlata y escamas rosas alrededor del cuello, las patas y su clítoris.

Natsu volvió a la cabaña donde dos de sus futuras esposas duermen plácidamente y con una adorable inocencia en sus lindos rostros, él trato de volver a acostarse sin despertarlas, cosa que solo logro a medias pues Lissana sintió al hombre tratando de volver a la cama
—¿Natsu que pasá? ¿Fuiste a algún lado? Pregunto la peliblanca somnolienta
—No hay problema Liss, solo fui al baño. Respondió él con calma, la albina se refugio en los musculosos brazos de su amado y volvieron a acostarse. A la mañana siguiente el trío partió del pueblo pero el pelirrosa lleva algo en sus manos, se trata de uno de los libros que Lucy Heartfilia escribió desde hace poco menos de cinco años, Natsu lo vio de casualidad exhibido en la única tienda del pueblo y sin dudar lo compró, a su respecto los tres han hablado todo el trayecto de regreso a Magnolia
—Debo decir que me sorprende que Luce al fin terminó su novela. Exclama el pelirrosa
—Para el gremio también lo fue, ni siquiera Levy pudo leer el borrador; se encerró un día en su departamento y no salió en días, Erza y todas las chicas estuvimos a punto de derribar su puerta -con el permiso de su casera-, pero en ese momento ella abrió la puerta y sin hablar con ninguna se fue a la estación de trenes y abordó uno a Crocus, volvió dos días después con cuatro copias autografiadas, las cuales le regaló a Asuka, Wendy, Levy y Jenny; excepto ellas nadie más del gremio ha comprado una copia. Explicó Lissana con algo de curiosidad
—Y ahora tú también amado Natsu. Añadió Juvia también curiosa por el libro, Natsu abrió el ejemplar y empezaron a leer

Y mientras el viento mece suavemente las flores de sakura, Layla y Draco se besan a la sombra del cerezo mientras la luna llena atestigua su unión. Cuando el beso termina Layla abre sus hermosos ojos verdes y Draco la imita, ambos contemplan como el viento mece el cabello del otro y al unísono dicen —Te amo. El fin.

Asi termina la novela "un hermoso romance" escrita por Lucy Heartfilia, tanto Natsu como sus acompañantes Liss y Juvia están bastante conmocionados
—Esto...es muy... intenso. Balbuseo Natsu
—Lucy que ha... Juvia se quedó a media oración pues no sabía que decir.
—Es cierto que Lucy, Ever, Cana, Mira y yo fuimos las más afectadas por tu muerte Natsu, incluso todas confesamos en una pijamada amarte pero esto es... Liss pudo decir más pues era la que en ese momento tiene la mente más despejada y clara pero aún así, saber que la novela de Lucy era una larguísima carta de amor a su amado asesino de dragones fue un golpe demasiado fuerte.
—Cuándo lleguemos a Magnolia, tendré una larga charla con Luce. Sentenció el mago de fuego determinado.