—¿Si estás prestando atención?

Jimin rodó sus avellanos ojos, esa chica le daba un gran dolor de cabeza y no se podía quejar, igual se casarían en un par de meses y la tendría todo el tiempo con él a su lado, hipócritamente por qué el sabía muy bien el convenio de sus padres, llevaría una vida infeliz al lado de ella pero cagado de dinero y eso estaba bien para él.

—Pero mira la hora, necesito ir a la sala de juntas, saluda a tus padres de mi parte "Rosita"

—Ven acá Park JiMin, esto no es un juego, estamos con los preparativos de nuestra boda y tienes que estar presente

—Estas equivocada, esto que tenemos no vale mucho para mí, haz lo que quieras con eso

—No esperaba más de un maldito mocoso inmaduro como tú —Dijo la fémina Omega, tomando su bolso y apuntó de salir de la oficina donde se encontraba

—Espera Rose, no te alteres, no puedes salir así de mi oficina —Detuvo a la chica, la rubia solo lo miro con algo de rudeza y tristeza mezclada — como tú los haz dicho, soy un mocoso, no se nada sobre los romances de la gente y por eso mismo te lo dejó todo en tus manos, serás mi esposa y eso está bien ¿No lo crees mi vida? —las manos del alfa rápidamente capturaron las de la rubia, besando ambas y con esa seductora mirada hizo a la rubia caer en sus encantos

—Tal vez tengas razón Mimi, pero también necesito que estés presente conmigo ¿Te recuerdo los recientes escándalos que haz estado protagonizando?

—No se de cuales hablas cielo —Jimin rápidamente tomó la pequeña cintura, dejando un par de succiones en el cuello de la omega, tratando de cambiar el tema rápidamente— Pero ahora necesito irme

—¿Es enserio? —Las manos de Jimin ya se encontraban completamente fuera del pequeño cuerpo

—Si —Dijo dejando un pequeño besó en los labios rosados y tomando su sacó para salir de ahí casi corriendo.

Ese era Park Jimin, un chiquillo de dieciocho años pero con la vida de un tipo de casi cuarenta, joven empresario e hijo de unos fuertes magnates, su linaje era irrompible, era completamente el "orgullo Park".

—Siento mucho la demora, mi compañero se sintió un poco mal y tuvimos que hacer todo de nuevo

Que si estaban nerviosos, era poco, a última hora el jefe les había hecho rehacer un papeleo, por desgracia a Jungkook le había tocado programar también los bocadillos y la presentación de la sala de juntas, así que con compañía de Yoongi, los dos hicieron lo que pudieron y les dieron el pasé a varios de los empresarios e inversionistas de la empresa.

—Si es todo, nosotros nos retiramos —Ambos dieron una leve inclinación y cuando estuvieron apuntó de salir, un joven se interpuso en su camino

—Oh, siento la interrupción, pasen —Hizo un pequeño gestó con su mano para darles la salida, Jungkook fue quien salió primero y detrás de él Yoongi, conectando miradas con el joven desconocido que lo miraba con completo asombró— Eres tú —Soltó con una sonrisa, mostrando sus blancos y perfectos dientes— Un gusto de volver a verte Min Yoongi

El Omega solo lo miro completamente curioso y le hizo un pequeño gestó de saludó, saliendo de ahí detrás del fuerte beta pelinegro

—¡Nos vemos después! — Insistió aquel completo desconocido para él pálido que solo se limitaba a ignorarlo completamente.

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