Infame| Cinco
🍓🚬,strawberry,cigarettes
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Mi cuerpo temblaba ante su presencia por la falta de poca información que obtenía de la situación. Y mis manos sudaban por desconocer los motivos de lo que me rodeaba, un motivo que se necesitaba desvelar antes de que me descubrieran. Con mis ojos repasaba una y otra vez a la pequeña niña que había tenido la dicha de ver, mis pulmones se llenaban de aire amargo al recordar su diminuto cuerpo con golpes, la incógnita me consumía, pues durante todo mi viaje a hasta llegar a mi casa, no había parado de pensar, jugueteando con la poca cordura que me quedaba, jugueteando con los miles teorías que mi mente podría recrear.
Cuando abrí la puerta de mi hogar, lo primero que vi fue a mi madre, se veía más nerviosa que yo, no era de extrañar pues siempre tenía esa estúpida adicción por mi bien estar y es que solía resultar sofocante, sabía que la ansiedad la consumía, pero ahora no era el momento, porque lo que creí conocer el nombre de Ian no era en realidad su verdadero nombre.
Mi madre estaba ahí, mirándome con esos ojos asustados, paranoicos y lleno de lágrimas, singularmente inquieta, mordía su labio inferior peligrosamente, quizá para callar sus duras penas o las palabras malditas que posteriormente saldrían. Lucia preocupada, como si temiera que un secreto se revelara, como si tuviera miedo de que un secreto de por vida sea revelado, como si dudara en hablarme, temiendo por algo.
Sus ojos tenían una mirada lúgubre, como nunca antes.
—¿A-a- akemi?— dijo más para ella misma que para dirigirme la palabra, cuestionándose si yo realmente estaba ahí, intentado convencerse de que lo que visualizaba era a su hija, intentado convencerse de que mi presencia era un alivio de lo que sea que la estaba atormentando, como una droga para tranquilizar al adicto, así estaba ella. La note sucia, como si recién hubiera salido de algún lugar lodoso, pues había varias hojas del bosque impregnadas en su ropa.
Lo que note después de eso fue un suspiro de alivio, y antes de que pudiera hablar me tomo por mi cuerpo y me dio un fuerte abrazo.
—Hija— su voz tambaleo— ¿dónde estuviste? — sonó de manera desesperada— ¿viste algo? ¿alguien? — ¿porque mierda me estaba preguntando por eso?, lo único que hice al escuchar sus cuestiones fue negar con la cabeza, estaba anonada por lo que acababa de descubrir y las palabras si quiera me salían, luego escuche como su voz se volvía más dura y cruel— ¿sabes qué hora es?
Hablaba demasiado rápido, tal cual como si alguien que quiere decir toda una verdad en un solo segundo, así estaba ella. Mi mirada estaba perdida (por no decir apagada) no podía respirar ante el gran secreto que había descubierto, Ian no se llamaba Ian, vivía en un bosque alejado de la comunidad, en un bosque al que me había confesado nunca visitar.
¿Porque ocultaba su verdadero nombre?
¿Tenía familia?
¿Quién era esa niña?
¿Porque mis padres habían venido con urgencia a este pueblo lleno de enfermos religiosos?
Necesitaba con urgencia resolver todas mis preguntas, pero mi madre no me dejaba pensar. Teniéndola ahí con ese vestido rojo, lleno de polvo y con lodo fue lo primero que limite a hablar:
—¿Porque estas sucia? tu nunca vistes así— la mire, y podría jurar que cuando mis ojos apenas tuvieron la agonía de mirarla, la note extraña.
—¿De-de que hablas hija? —a diferencia suya, no culte mi hipocresía, con mis comisuras elevadas en son de burla por sus estúpidas palabras desalineadas, me reí, tenía colera, sí. No solo por el hecho de haber sido engañada por el chico que me atraía, sino porque ahora, un mal presentimiento venía a atraparme con fuerza, ahora sospechaba de todos.
—¿De qué hablo? — repetí mis palabras, indignada—. Dime, madre ¿porque venimos aquí? sé que mi padre trabaja aquí. ¿Pero porque venir a un lugar que odias? ¿porque venir a un lugar que desprecias? desde que vinimos te la pases de fiesta en fiesta, te la pasas yendo a la iglesia, yendo a fiestas religiosas, haciendo amigas. Todos los miseros días te vas a la iglesia ¡solo se va una vez en la semana!
—No sé dé que hablas, Akemi— negó.
—Oh, claro que lo sé. ¿Estamos hablando de la nueva película de Barbie, ¿verdad? —continue con un sarcasmo más juguetón— ¿te gusto? ¿o fingió gustarte como siempre lo haces? — se mantuvo seria, y una vez termine, me observo con ojos filosos un par de segundos, seguro, odiando mi pesado humor.
Luego, camino a paso ligero hacia su habitación, ignorándome, como si le revolviera el estómago el simple hecho de mirarme a los ojos, parecía culparse de algo. ¿Pero de qué? Enarque las cejas, desconcertada, pues era un hecho que me dolía no saber lo que sucedía, la intercepte tomándola del brazo:
—No te vas a ir hasta que me respondas. ¿Por qué vinimos aquí?
Lo siguiente que me contestó fue más que otra mentira, era algo que esperaba, pero era algo que no anhelaba escuchar, sabía bien que era muy ambiciosa y en otras ocasiones, avariciosa:
—Porque tu padre gana mucho dinero aquí, en las minas se gana millones de dinero, suficiente para que tengas una vida acomodada y llena de lujos, deberías agradecernos en vez de estar preguntando estupideces, porque toda la herencia será tuya.
No se quedó ahí, me resolvió una de las dudas que tenía, y algo que no desee haber escuchado jamás:
—Estuve buscándote, intentado protegerte, como siempre lo he hecho— Escúchame bien Akemi— podía sentir lo que pretendía, se llegaba hasta aquí su sed de poder, de maldad, quizás. La gestión de sus palabras me había hecho saber que, efectivamente, no solo era mi madre, si no que era una persona muy propia de lo suyo: — Pero no siempre te voy a proteger. ¿Sabías que tienes un hermano adoptivo? es el hijo de tu padre, no lo conozco, pero sé que tiene tu edad. El vendrá, supongo que vendrá para tener una parte de la herencia que le corresponde, pero tu padre lo puede negar si él así lo desea, sin embargo, es demasiado bueno para hacerlo, entonces creo que deberías idear un plan para que todo sea tuyo
Así como me entere de la existencia de un ese sujeto, también me entere que tenía algo de ella, por alguna extraña razón, me sentía igual que mi madre, la necesidad del sentido de pertenecía de algo era lo que me rodeaba, no me volvía mala por desear lo que era mío, o hacer que algo sea mío.
—¿Que estas tratando de decir? — cuestione en voz baja.
—¿Qué es lo que pasa cuando un heredero muere? sin hijos, joven y solo.
—¿Estás diciendo que...?
—Exacto—dijo como si fuera natural, como si la pequeña sonrisa que salió de sus labios me hubiera comunicado una señal asertiva. Acabar con la vida de alguien solo para tener lo que era mío, era singular, e incluso me causaba pánico. ¿Pero acaso, sería capaz...?
Tal vez fue solo curiosidad lo que me incito a preguntar, o quizá fue solo un instinto familiar lo que me llevo a preguntar el nombre de tal supuesto hermano:
—¿Y cómo se llama?
—Valir
༒︎
Holiiiiii aqui kami de nuevo
¿qué tal, como están?
Mi semana la pase bien, un poco cansada por la cantidad de trabajos que me dejan, pero siempre intentado o darme un espacio para escribir. por cierto
¿Qué tal les pareció este capítulo?
sé que quizá fue confuso, explosivo diría yo AJAJAJ sorry, pero es que dije que este libro iba a tener mucho misterio y escenas subidas de tono, muy fuertes, obviamente falta el + 18 pero aún no es hora, no sé si está bien agregarle mucho misterio y cositas reveladoras. ¿pero qué tal? ¿les gusta?
comenten por fi para que me lo hagan saber, es que soy muy insegura de lo que escribo y necesitó opiniones arhe.
posta, cositas de mi vida:
-Me dejaron una exposición de química, pero no es una exposición cualquiera, ya que normalmente cada uno sale a exponer su parte, en esta ocasión el profesor va a elegir a lazar quien va hacer la explosión durante quince minutos, eso significa una cosa: todos tienen que aprenderse el tema de la exposición. MATENMEEE
en fin, ¿ya les dije que tengo Instagram? ahí comparto cositas de mis historias y libros de Wattpad, es otra manera para que me conozcan, yo acepto a todos, comparto cositas de mi vida, es una manera de conocerme con más profundidad, estoy como:
_Kamildid
En fin, muchas gracias por leer y por sus votos, los amooo, con love.
kami<3
pd: capítulo dedicado a PremiosGemasPerdidas
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