Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 10*

JANETH.

Buenas vibras.

Janeth, eres una chica que irradiaba buenas vibras.

Pero ahora mismo soy la peor para llevarme ese título.

No porque yo este enojada, sino porque estoy a punto de tener una conversación muy intensa de hermano-hermana.

Noah no me ha hablado en todo el fin de semana, solo me dice lo necesario, no entiendo su comportamiento tan insoportable ahora mismo, sé que su molestia viene por lo que hice en la fiesta, es como si lo que hice hubiera sido un pecado que me llevara directo al infierno, cuando no es para tanto.

Sí, lo acepto, había besado a Isaí Müller.

Había besado a Isaí.

Y me había gustado.

Pero no era momento para volver a recordar cuando sentí las manos de Isaí agarrar mi rostro y estampar su boca contra la mía.

Choque la motocicleta del chico más temido del instituto y como castigo me besa.

Vaya.

La velocidad el auto había disminuido, así que mire a Noah de reojo y disimulada, está molesto, era muy obvio, aun no entiendo porque hay tanta ira en el aire cuando no fue nada malo.

En este momento, en un lugar en el fondo de mi mente me doy cuenta del extraño comportamiento que estoy teniendo, pero por muy extraño que parezca quiero muchas respuestas, así que decidí empezar esta conversación.

—¿Por qué estas molesto conmigo?

—No lo estoy. —dice, rotundamente.

—Si lo estas ¿por qué exactamente?

—¿Es en serio tu pregunta?

—Sí.

—No me hagas perder la paciencia. —me mira lentamente, como si de alguna manera yo tengo la respuesta escrita en un cartel.

—No he hecho nada malo. —me defendí.

—Janeth, ese tipo no. —su interés despertó.

—No hay nada ahí, Noah. Solo fue un beso. —me defendí —No volverá a pasar.

—¿Si recuerdas porque tuvo que irse de la ciudad?

—Por Dios, Noah. El chico se ve que esta mejor.

—¿Y solo porque se ve mejor ya puedes ser su amiga?

—Se llama empatía. —dije —Y estas revolviendo una cosa con la otra. Entiendo que Isaí te caiga muy mal, lo sé, pero esa no es justificación para que yo no le hable, el chico me agrada.

—Has estado castigada dos veces, con él.

—¿Y?

—Isaí es mala influencia. —dijo —¿Te das cuenta de los problemas en los que te vas a meter si te sigues juntando con él?

Ahora era mi turno de quedarme callada.

—Los he visto, no sé qué traman porque siempre los veo juntos en el receso y de repente él se acerca a ti te dice algo, asientes y se va ¿qué te dice? Janeth, soy tu hermano, me preocupo por ti, y últimamente estas muy rebelde con respecto a tus clases. Ya llevas dos castigos, si se te hacen tres te harán una ficha y llamarán a mamá.

Ya llamaron a papá...

Y seguramente mamá ya lo sabe.

—Entre al club de música, mejorare mis notas. Es mi propósito. Entrare a la universidad y seré mejor alumna, hija, hermana, seré mejor en todo.

—No te agobies. —trato de relajarme.

—Dijiste que ibas a ayudarme a inscribirme a la universidad, ya está, mañana me ayudas. Ya tengo mis opciones.

—¿Tan rápido?

—Sí, quisiera algo practico, yo qué sé, Biología, Turismo, no sé ¿Letras?

—Janeth, entrar a la universidad no es algo fácil, las clases allá no son las mismas que en el colegio, estás formándote como una persona exitosa, no elijas carreras solo porque si, solo porque no estás pensando bien las cosas. Tienes que estudiar algo que te guste.

—Me gusta Psicología —susurre. Noah asintió —, pero ya sabes, siento que no sería buena en eso, mírame, soy un completo desastre, ni siquiera estoy poniendo atención a clases, paso castigada y estoy teniendo bajas calificaciones.

—Janeth, no te estés hiriendo así, eso te mata. Juzgarse a sí mismo no es correcto, solo somos humanos, cometemos errores, pero lo bueno de los errores es que sirven para darte una lección.

—Me quiero enfocar en mis estudios, pero también soy una chica que quiere divertirse, experimentar cosas, tal vez por eso estoy comportándome tan rebelde y me da miedo fracasar.

—¿Por eso te besaste con el primero que se te acerco?

—¿Que? No... No me bese con el primero. Noah, estas demente. ¡Era un maldito juego!

—Yo no te pregunte eso. —Noah se quejó.

—Yo solo, no sé qué me pasa... —confesé —¿Y si yo soy la mala influencia?

—¿Mala influencia? Ni siquiera sales de la casa.

—Las personas cambian.

—Yo solo te digo que, si quieres enfocarte en tus estudios está bien, empieza con alejarte de personas que no te traen nada bueno.

—¿Lo dices porque ahora me hablo con Isaí?

—Janeth, ese chico tiene un historial muy malo. ¿Si recuerdas que estuvo metido en esas cosas de drogas?

Asentí.

—No sé qué historias te estas creando, pero entre él y yo no hay nada y tampoco lo habrá. —finalice.

—Como sea. —dijo, abrió la puerta del auto y salió.

Me quedé viendo como Noah miraba algo en su celular y decidí salir.

Lunes.

Clases.

Prisión para estudiantes.

Mire como todos entraban al instituto con unas ganas tan apáticas de querer entrar a clases. Noté a Noah caminar delante de mí y me hice la idea de que si lo había hecho enojar.

Teníamos la costumbre de entrar juntos, y hoy solo camino a mi lado, ignorándome, pero sin importarme su molestia me acerque para caminar con él ¿Qué le pasa? ¿Quién se cree para dejarme atrás?

Enderece mi espalda mientras caminaba, y es ahí cuando me doy cuenta de que Noah noto mi movimiento, se detiene y me mira, sabiendo todo lo que está pasando.

Pero no sé cómo tengo que actuar ahora que lo estoy viendo. Que estoy viendo a Isaí después del viernes por la noche.

¿Qué es esta pesadilla?

Necesito pellizcarme.

Él está ahí, quitándose su casco. Noto sus pantalones oscuros. Chaqueta andrajosa que grita misterio. Ojos celestialmente azules, que han sido conectados con los míos. Y su rostro, su rostro es tan odiosamente atractivo que me molesta verlo de esa manera.

Y odio que su mirada este flechada en mí, porque siento tanto a mi alrededor, siento que todos me ven, que todos me estudian, que soy el centro de atención de todos.

Noah hace un sonido que me hace volver, entendiendo sus gestos como molestia. Entiendo a Noah, es mi hermano, se preocupa por mí, pero yo también creo que estoy lo suficientemente grande para saber que es lo bueno y lo malo.

Cuando miro a Noah puedo notar su cara de advertencia.

Y solo para dejar en claro de que esto no es lo que parece, miro a Isaí que ya me estaba viendo. Sus labios tienen dibujada una sonrisa burlona.

Esto es una tortura muy fea, así que finjo que Isaí no existe y empiezo a caminar.

Solo somos yo y mi nuevo perfume.

Al entrar al salón me siento en mi silla y me mentalizo en como haré para soportar este día, será tan largo, teniendo en cuenta que Isaí ahora es mi compañero.

Solo no lo mires.

Ignóralo.

¿Pero cómo ignorar a alguien como Isaí?

Es tan misterioso que me causa intriga en saber todo de él. 

Simplemente él es tan llamativo.

Más cuando hace su presencia en el salón.

Y solo tener su mera presencia me desequilibra.

—Rubia. —dijeron a mi lado.

Me enfoque en Franco, el único chico que me dice así, le sonreí y mire como estaba sentado a mi lado. Era un chico muy amable, de hecho, es uno a los pocos que llamo amigo.

—¿Como estas? —pregunto —¿Todo bien tu fin de semana?

—No me quejo, me vi la última temporada de Bridgerton.

—Carla me recomendó esa serie —Franco suspiro —, ahora entiendo porque las chicas tienen estándares tan altos, ¿cómo van a comparar a un chico ficticio con uno real? Eso es imposible, nosotros somos nada a un chico ficticio.

—Es lo más sabio que te he escuchado decir.

—Es la verdad.

—Por cierto, entre al club de música. —le conté.

—¿En serio? —Franco se miró confundido, pero sonrió —Yo también estoy en música.

—¿De verdad? —pregunte, sorprendida. Franco asintió —No sabía ¿qué instrumento tocas?

—La tuba. —Franco parecía irritado por su instrumento.

—Uy, no. La tuba es muy pesada.

—Lo sabre yo. —se quejó —¿Cual instrumento te toca?

—La flauta. —rodé mis ojos.

—¿La flauta? —Franco se burló —Somos los peores, tenemos los instrumentos más aburridos. —se burló.

—Sin duda alguna.

—Deberíamos de irnos juntos a la clase.

—Claro, me esperas, soy la nueva del club y la vergüenza va de mi lado.

━ ♡ ━━━━━━━━ ♡ ━━━━━━━━ ♡ ━

La mañana había salido demasiado bien, pensé que sería muy incómoda, pero, al contrario, estuve sentada con Franco en todas las clases y me hizo sentir en confianza.

Era un gran chico, amable y divertido. Me hablaba de Carla y me confeso que se siente atraído por ella, pero que algo entre ellos no puede pasar por el simple hecho de que a ella le gusta alguien más.

Y me sorprendí, pensé que ella también tenía esa chispa de atracción por Franco, pasan juntos todo el tiempo, de hecho, yo pensé que ya tenían algo, pero cuando Franco me dijo que Carla se sentía atraída por Darién yo me sorprendí tanto que tuve que preguntarle si era verdad más de diez veces eso y él asintió.

Pero Darién ¿en serio?

Darién tiene un peor historial amoroso que Isaí.

Negué con mi cabeza pensando en el historial amoroso de Isaí ¿Desde cuándo pienso en eso? ¿Desde cuándo me interesa a mí las relaciones de los demás? Ni siquiera me fijo en la mía.

Cierro mi casillero, rendida de este día, pero entonces mi cuerpo no se mueve, estoy sintiendo la vibra de alguien detrás de mí, estoy viendo una sombra detrás de mí.

Lentamente me giro encontrándome con él... claro que con él ¿quién es más si no?

De hecho, ahora que lo veo de cerca ladeo mi cabeza analizando como se mira, físicamente destrozado, como que, si no ha dormido en días, su cabello esta despeinado, disperso hacia diferentes direcciones, como si ha pasado sus manos por él todo el día.

Nos miramos por unos segundos muy largos.

—¿Hola? —salude.

—¿Es otro perfumen el que estas usando hoy? —las palabras se deslizan suavemente por su garganta, muy directo, relajado y sutil. Muy él.

Me detalle de pies a cabeza, y siento esa tensión desde la planta de mis pies. Su mirada sobre mí, me está poniendo nerviosa.

—Sí —dice, aburrido —, hoy traes otro perfume.

Mi corazón late frenéticamente que me sorprende que Isaí note que esto me está pasando, otra vez...

Reacciona, Janeth.

Nos es posible que te pongas nerviosa porque el chico que te ha traído loca por unos meses se dio cuenta que cambiaste tu perfumen.

—Gracias por notarlo ¿supongo? —murmure.

—Tal vez solo buscaba una excusa para venir a hablarte. —confeso.

—Pero lo notaste ¿no?

—Siempre te noto.

—Discúlpame. —dije, de repente.

Isaí frunció el ceño, confundido.

—¿Por?

—Por ignorarte.

—¿Me has estado ignorando?

Asentí.

—Pensé que actuabas como siempre, nunca me ves, es normal en ti. No pidas disculpa —me di cuenta de sus palabras y me sentí extraña, me dolió —. De igual manera, quien debería pedir disculpa soy yo.

—¿Por qué?

—Por besarte.

—Solo fue por un juego, no es la gran cosa. Cosa de olvidar si besas a otra persona.

—Claro.

—No es nada, no volverá a pasar.

—Espero...

—¿Esperas?

—Que no esté a solas contigo y te pongas a hablar como una cotorra, no encontraba la manera de que te callaras.

Sus palabras me ofendieron, pero sonreí.

—Ah, claro, gran método, señor listillo. —sonreí, rodando mis ojos. —Tengo que irme —informe —, hoy es mi primer día en música.

—Suerte.

—Gracias.

—Bellabel —me dijo. Lo mire —. Entra a clases.

Rodé mis ojos y asentí rendida.

Note la pequeña sombra de una sonrisa en él.

Y mis advertencias volvieron a aparecer.

Aléjate de Isaí Müller. 


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro